viernes, 22 de octubre de 2010

¿KARMA VS SUERTE?

 Antes de continuar adelante con el tarot de crecimiento personal y evolutivo considero oportuno dar aquí unos apuntes sobre la mala suerte asociada al karma negativo o lo que nuestra propia actitud ante la vida mayormente intolerante ante las frustraciones o los fracasos considera como tal.

¿Karma negativo o...

-falta de atención
-intolerancia
-intransigencia
-deseo de acaparar
-insatisfacción personal
-imprudencia temeraria
-comodonería
-egolatría
-demasiadas ilusiones
-pretensiones
-exceso de selectividad
-rechazo categórico o sistemático
-rebeldía
-impaciencia
-nerviosismo
-fácil desánimo
-una montaña de un grano de arena

...y un sinfín de problemas personales como estos que nos colocan un parche en el ojo bueno y nos impide filtrar la situación a través de un prisma constructivo?
 El mensaje lanzado a Adán y Eva según las escrituras es "ganarás el pan con el sudor de tu frente". ¿Quiere decir esto que se castiga el acto de comer el fruto del Árbol Prohibido con trabajos forzados? Al margen de que sea esto un hecho real o un mito, en el supuesto de que hubieran despertado a tiempo antes de comer la fruta prohibida igualmente habrían tenido que trabajar en el campo que habitaban cuidando esos árboles frutales para no quedarse sin su sustento.
 Por supuesto, no estamos intentando cuestionar aquí la veracidad de dicho mensaje si no dar a entender que muchos de quienes creen firmemente en este hecho han interpretado que por culpa de un error de nuestros primeros padres estamos condenados a trabajar. Pero cabe examinar también la actitud de quien asume este hecho como rigurosamente cierto; si dicha persona no está acostumbrada a realizar grandes esfuerzos o está malacostumbrada a encontrárselo todo hecho cualquier situación que le suponga un esfuerzo, una dedicación, un sacrificio por pequeño que sea, etc. la va a vivir como un castigo. Es análogo al hecho de pretender castigar a un niño mandándolo a la cama: instintiva e inconscientemente asociará el dormir con algo malo y tendrá de esta manera más dificultades para conciliar el sueño.

Sobre la buena o mala suerte


 ¿Mala suerte o dejadez por parte nuestra?¿Buena suerte o capacidad de aprovechar todas las oportunidades?¿Hay gente con suerte o hay gente que se mueve?
Son las preguntas que debiéramos hacernos cuando nos encontremos en una situación aparentemente gafada(señalemos de paso que no hay gafes si no personas en cuya proximidad nos sentimos inseguros y a quien pretendemos culpar, a veces injustamente, de todo lo aparentemente negativo que hallamos a nuestro paso). A menudo se habla de infortunios, desgracias, calamidades, etc. provocados por una persona externa cuando algo no ha salido como esperábamos o calculábamos. Y dado que siempre se prueba con todo lo que se encuentra, las personas afectadas por problemas como estos recurren fácilmente a las prácticas ocultistas o esotéricas. Como señaló en una ocasión cierto estudioso del tema, la magia hace brillar en las almas pusilánimes un poco de esperanza. Nos referimos a los trabajos de unión amorosa, limpiezas y abrecaminos.
 Aunque yo personalmente como tarotista y consultor esotérico he aconsejado a mis clientes rituales y limpiezas que pudieran hacerse ellos mismos-puesto que son ellos los interesados, lógicamente-lo cierto es que el ritual o el trabajo rara vez es necesario. Sin embargo, las personas que no logran salir adelante confiando en sus propias fuerzas necesitan "hacer algo" como se suele decir. Han de tener conciencia de haber sintonizado con fuerzas sobrehumanas gracias al psicodrama realizado-ya sea por ellos mismos, ya sea visto hacer al profesional al que se han dirigido en busca de ayuda-para que su subconsciente-donde mayormente radica nuestra clave del éxito o del fracaso-les impulse en pos de sus metas, es decir, los fines por los que solicitan o realizan el trabajo o el ritual. En efecto, los rituales suelen llevarse a cabo para casos realmente complicados como vencer y atajar una obra mágica destructiva y perjudicial-catalogado comúnmente como "magia negra"-y si el operador que ha recurrido a esta ha trabajado con entidades. Lo que está probado es que la visión o la realización del ritual actúa a modo de terapia de choque y la función del mago sería similar a la realizada por un psicoterapeuta, aunque no queda excluído que la petición formulada en el ritual cobre consistencia en el plano espiritual y la entidad correspondiente pueda guiarnos o inspirarnos para que busquemos la correspondiente solución al problema planteado.
 Este sería el verdadero proceder de lo que damos en llamar "magia blanca".
 Todo tiene o requiere un proceso. En contra de lo que nos hace creer cierta propaganda engañosa, nada es instantáneo ni se puede obtener todo cuanto se quiere.


El mal de ojo

 Un miedo muy antiguo de la mentalidad popular es el famoso y temido mal de ojo.
 Este concepto según lo define el diccionario es la influencia que una persona ejerce sobre otra mirándola de cierto modo y especialmente sobre los niños.
 Un hecho muy contado por no decir demasiado recurrente cuando de proyectar nuestros propios descuidos o defectos en aquella persona a la que tenemos fobia es el mal de ojo echado por una vecina. La mirada siempre ha ejercido un tremendo poder sobre los demás independientemente de que crean o no en el mal de ojo, independientemente de que esa sea o no la intención de quien nos mira. Por absurdo que nos parezca, entre reconocer nuestra dejadez o nuestra falta de iniciativa y achacar nuestros fracasos a que nos han mirado así o nos han mirado asá elegimos esto último.
 Si, como decíamos, fuéramos capaces de enfocar las circunstancias desde un prisma más constructivo y edificante, nuestra actitud ante los fracasos sería muy distinta de la que habitualmente tomamos. En efecto, si en lugar de "todo me sale mal" afirmáramos "lo intenté, hice lo que quería; si las cosas se torcieron, mala suerte, algo habremos hecho que no ha cuadrado" sacaríamos mayor partido a este tipo de situaciones. Haríamos un pequeño balance para ver en qué nos hemos equivocado y cómo podemos mejorarlo para que la próxima vez que nos decidamos a intentarlo. Hemos de darnos un batacazo para saber cómo pisar; pero si nos quedamos tirados en el suelo llorando el tropezón mientras alguien acude en nuesta ayuda si es que alguien nos oye, en el suelo seguiremos como no utilicemos los brazos y las rodillas para levantarnos. Se dice que la victoria no la obtiene aquel que nunca tropieza si no aquel otro que tropieza y es capaz de levantarse y seguir. Y que el premio no lo obtiene quien llega primero si no quien LLEGA.
 Con eso y con todo...¿Por qué estar al margen de posibles influencias exteriores? Si los laboratorios han realizado interesantes experimentos e investigaciones con la telepatía y la percepción extrasensorial ¿Por qué habría que negar otros fenómenos en la misma categoría?
 Es creencia muy antigua que los ojos proyectan energía y que esta puede obrar un bien o un mal dependiendo del estado emocional de quien la emite. Los odios y las envidias eran muy temidos en los pueblos ya que se creía que estas podían arruinar una huerta o un ganado y en el peor de los casos hacer enfermar a criaturas. Por esto las madres solían colocar sobre su cuna bolsitas perfumadas conteniendo una herradura, un diente de ajo o un amuleto entre otros ingredientes con la finalidad de protegerles.
 Hoy día como sustitutivo de los rituales de limpieza o limpias encontramos los llamados baños de descarga. Podría darse la circunstancia en el caso de que la persona acuse síntomas que pueden ser identificados fácilmente como de un mal de ojo o de odio y envidia que estos no sean debidos a tales influencias si no simplemente que se encuentre sobrecargada por exceso de trabajo, de responsabilidades, de tiranteces con otras personas y lo que necesite realmente es descargarse y deshacer nudos de estrés o de depresión.

 BAÑOS DE DESCARGA

  Un buen baño de descarga para estos menesteres puede conseguirse añadiendo al agua de la bañera una taza de vinagre de sidra de manzana y una cucharada de sal marina, ambos fáciles de encontrar en cualquier herbolario. Se toma tras el baño habitual y conviene secarse al aire a fin de dejárselo actuar, nunca frotándose con la toalla. Permaneceremos en la bañera por espacio de cinco minutos realizando un total de tres inmersiones espaciadamente durante ese tiempo. Afirmaremos después de cada inmersión:
-Yo soy parte de una fuerza vital divina mucho más grande y extensa.
 Este baño y otros que ofreceremos puede ser aplicado y tomado por cualquier persona siempre que no tenga alergia a ningún producto natural. Aunque sean en sí inocuos por estar compuestos de productos naturales nunca deben ingerirse. Deben ser solamente utilizados para bañarse y no para tomar internamente.
 Otros baños para fines diversos a base de frutos secos se obtienen sencillamente hirviendo determinadas cantidades de estos sin abrirlos ni pelarlos en un litro de agua durante tres horas, aunque posiblemente sea necesario añadir más durante el proceso de cocción. Al final obtendremos un líquido oscuro y caliente que deberemos dejar enfriar para agregarlo a media bañera de agua.

 De un clásico manual de protección espiritual y autodefensa psíquica hemos extractado la siguiente lista de frutos secos usados en forma de baño de descarga con las propiedades inherentes a cada uno de ellos:

NUECES (Baño de). Para poner fin a una relación que no nos beneficia. Es útil cuando una persona muy dependiente de nosotros nos absorbe la energía dejándonos a nosotros sin.
Cantidad: 6 nueces.
Tiempo que debe durar el baño: 8 minutos.
Inmersiones a realizar: 7.

ALMENDRAS. Para dar y recibir cariño potenciando así las energías positivas.
Cantidad: 6.
Tiempo: 6 minutos.
Inmersiones: 6 a razón de una por minuto.

AVELLANAS. Sabiduría y estimulación mental, además de mantener tu cuerpo mental limpio durante varios días. Puede servirte en estas circunstancias: depresión mental, confusión, pensamientos confusos, falta de claridad mental y dificultades poco corrientes en el habla y en la comunicación.
Cantidad: 9
Tiempo: 9 minutos
Inmersiones: 9

PECANAS. Te pueden ayudar ocasionalmente en tus finanzas personales, excepto que suelas comerlas a menudo. Si es tu caso no las uses en el baño, puesto que tiene la peculiaridad de que mientras es bueno para algunas personas puede ser nocivo para otras. Si nunca las comes y quieres probar este baño, la preparación es la misma, excepto que se utiliza un cazo de cobre, metal asociado a Venus que rige la belleza y el confort.
Cantidad: 6 después de haberlas cocinado durante varias horas.
Tiempo: 9 minutos.
Inmersiones: 4.
No olvides rezar después de cada baño para obtener aquello por lo que lo realizas.




LA MAGIA Y TÚ

 Entramos en un apartado tan cuestionado como cuestionable más que nada porque ciertas definiciones dadas por sentadas e inamovibles se prestan a confusiones o a malas interpretaciones.
 Todo aquel que ha estudiado la magia conoce tanto si ha profundizado en sus diversas ramificaciones como si no cuantos tipos de magia existen y cual es la finalidad de todos y cada uno de ellos.
 Las primeras definiciones que habrán acudido a tu mente habrán sido sin sombra de duda "magia blanca y magia negra. La primera se usa para hacer el bien y la segunda para hacer el mal". Instintivamente pensamos de inmediato en estas dos cuando en un discurso o una conversación sobre el tema alguien plantea una distinción entre una y otra forma de hacer magia.
 Y estas son las básicas y verdaderas interpretaciones: la magia es un poder energético o una energía que se aprovecha para fines diversos. La magia blanca como la negra es una forma más de hacer magia. Los resultados obtenidos con una u otra depende de la intención del operador y del interés de la persona que le solicita dicho servicio más que de los "colores" de la magia.

MAGIA NEGRA:

Magia del hombre, magia de la tierra.

 Un tipo de publicidad que a menudo suele causar desorientación entre los lectores aficionados que se aproximan por vez primera al mundo de la magia es más o menos la siguiente: "PRÓXIMOS CURSOS ESCUELA OCULTISTA: MAGIA BLANCA, VERDE, ROJA Y NEGRA". Mentalizados por su ética de que la magia negra engloba obras de muerte y destrucción por lo que no es lícito enseñarla ni darla a conocer ya que podría influir negativamente en los estudiantes de ocultismo y magia-otra distinción que haremos más adelante ya que a menudo se mezcla una con otra cosa-que se abocarían al Mal más profundo calificarán a dicho centro de estudios como sectario y nocivo para las psiquis. En efecto al haber leído en el anuncio "curso de magia negra" ya se imaginan inevitablemente un adiestramiento en rituales satánicos, operaciones de nigromancia y hechizos perjudiciales. Pero tengamos en cuenta que quien publicita sus servicios o sus enseñanzas da por sabidos demasiados términos o nociones sin tener en cuenta lo que puede llegar a deformar la información. Sin embargo en caso de anunciar magia general-que lo engloba todo y lo mismo pueden impartir temas nocivos que temas constructivos-no parece dar a dicho centro tanta mala fama.
 Para comprender el significado profundo del concepto "magia negra" analizaremos los elementos que intervienen en ella o que de algún modo guardan relación:

-el color negro
-la oscuridad
-la luna
-el dinero
-los sacrificios
-la invocación de entes no evolucionados

El color negro

 Cabe señalar que el negro no es un color si no la ausencia de luz, así como el blanco es la presencia de luz, por eso se consideran opuestos entre sí. El negro absorbe los colores del arco iris al revés que el blanco que los despide. El negro es utilizado en este tipo de rituales: para los ropajes del o de los magos cuando opera más de uno en el contexto de la misma ceremonia, para las velas y para el paño que recubre el altar o el plano elevado que hace sus veces.
La tela negra absorbe las energías negativas de la persona a la que mediante este acto solemne se desea ayudar, sin embargo los operadores han tenido buen cuidado de llevar bajo la túnica negra ritual otra túnica blanca de lino puro o por lo menos ropa interior blanca a fin de que dado que el blanco despide de que las energías negativas no penetren en el propio campo energético. El negro de las ropas exteriores cumple una función de absorción y extracción y el blanco de las ropas interiores de expulsión y de destierro. El negro actúa como un imán atrayendo las energías negativas del paciente para que se estrellen contra el blanco que actúa como un muro protector. Es un a modo de pequeña trampa que se les tiende a las energías negativas, las cuales se estrellan disolviéndose y disipándose.
Las velas o velones negros no tienen otro objetivo que limpiar los ambientes enrarecidos por la negatividad ya sea producida por entidades poco evolucionadas, ya sea emitidas por nosotros mismos en un estado de tensión o de malestar. Los velones negros utilizados en la ceremonia van limpiando y absorbiendo la negatividad extraída a la persona a ayudar, por lo que se recomienda quemarlos enteros el mismo día sin interrupción.

La oscuridad

 La oscuridad no es otra cosa que la ausencia de luz y no tiene porque ser necesariamente perniciosa ni ocultar peligros. Entendámonos, no es peligrosa si ya conocemos en lugar en el que reina y nos sentimos seguros; de no tropezar con nada, de que nadie se ha camuflado con la intención de perjudicarnos y de que todo está en orden. Y si estamos provistos del sentido del tacto, ni siquiera es peligroso desconocer la estancia a oscuras, todo ello si nos encontramos dentro de los límites del campo que conocemos, claro está. La oscuridad en la propia casa nunca será peligrosa si sabemos andar con tiento y con prudencia. Para dormir necesitamos la oscuridad, pues en este caso la luz es un estímulo molesto que nos impediría conciliar el sueño reparador necesario para amanecer con fuerza al día siguiente.
Tampoco es totalmente cierto que este tipo de rituales sean "oscuros"; lo más próximo a esa pretendida oscuridad es una fuente de iluminación muy tenue, es decir, la luz de las velas. Y de oscuro a siniestro media un abismo.

La luna

 La luna, dicen, está catalogada en magia como falsa y peligrosa porque brilla con luz no propia reflejando la luz del sol. ¿Por qué? Se afirma que al revés que el sol nos da las energías vitales, la luna las extrae de los seres vivos por lo cual puede resultar peligroso dormir a la luz de este satélite.
Podríamos aclarar que el sol representa el principio generador masculino y activo y la luna el principio receptor femenino y pasivo. El sol nos da las energías vitales, la luna las absorbe, pero también lo que puede estar absorbiendo son las energías negativas depositadas en nuestro ser. Puede darse la circunstancia de que el sol nos transmita energía positiva y la luna nos limpie de energía negativa. Sol, principio de repulsión, luna, principio de absorción, blanco principio de repulsión, negro principio de absorción.
Para cada operación mágica se escoge una concreta fase lunar. Los rituales destinados a generar-principio de creación-prosperidad, bienestar, salud, unión amorosa, apertura de caminos, etc. se llevan a cabo durante la fase de luna creciente mientras que los rituales destinados a destruir-principio de destrucción-malas obras, limpiar negatividades, erradicar vicios y malas costumbres, etc. se llevan a cabo durante la fase de luna menguante.

El dinero

 El dinero suele ir asociado con la magia negra sobre todo cuando la mentalidad popular etiqueta a esta como la "magia del mal". Ya hemos señalado anteriormente que la magia negra o goecia es básicamente la magia humana o terrestre y puede ser utilizada para ayudar o para perjudicar.
Pero antes de seguir aclaremos ciertos conceptos que quien lea este párrafo se formará seguramente de forma precipitada antes de leerlo todo: ¿intentamos con esto hacer apología descarada de la magia malvada y de los espíritus maliciosos? Para nada. Lo que estamos intentando a través de estas líneas es separar el copo de la avena. Operar con magia negra puede ser peligroso, claro que sí. La magia negra puede ser utilizada para dañar o perjudicar, indudablemente. Pero es porque las entidades con las que trabaja esta línea son poco evolucionadas y paradójicamente muy potentes, por lo cual quien desee trabajar con ellas deberá servirse de las protecciones adecuadas.
Sin embargo, es posible trabajar con estas energías terrestres de forma positiva y diversas corrientes que incluyen la magia en sus prácticas han apostado por realizar rituales destinados a fines materiales con estas energías que parecen ser más aptas para ello que las entidades que habitan esferas superiores del plano espiritual.
¿Es lícito pedir dinero a través de estos rituales o cobrar por estos servicios? Dime lo que piensas hacer con ese dinero y te contestaré según lo que me expliques. Si necesitamos dinero-y quién no-pedir podemos pedir eso y todo lo que queramos; que las entidades a las que nos dirigimos nos quieran o no ayudar es harina de otro costal. Y si el trabajo o ritual efectuado ha costado un dinero y ha costado un tiempo lícito será amortizarlos.
El dinero puede servir para mantenernos o para lucrarnos. Si hemos realizado el ritual con la mente puesta en la ganancia que esperamos obtener por ello más que en el interés de nuestro cliente o nuestro beneficiado, ello quiere decir que pretendemos lucrarnos a costa de un problema ajeno. Si hemos querido ayudar a una persona a resolver sus problemas y después hemos cobrado el servicio de acuerdo con una tarifas o cuotas ya establecidas de antemano-negociables según la situación social del beneficiado-no es el lucro personal si no el interés del solicitante lo que nos ha impulsado a actuar.

Los sacrificios

 Otro tema bastante controvertido es la palabra "sacrificio" que hace pensar rápida y necesariamente en un sacrificio sangriento. Sacrificio es una unión de dos vocablos: sacro y facto que significan respectivamente "sagrado" y "hacer", es decir, "hacer sagrado" o "hacer santo". El sacrificio incluye dos fases de la ceremonia: la ofrenda(que consiste en las velas, los perfumes, el carbón y todo lo que se quema: el carbón quemado es denominado dentro de ese contexto "madera del sacrificio") y la consagración del área de trabajo, del altar y de los objetos utilizados en la ceremonia. La misma consagración de la oblea en la misa católica es un sacrificio, y cuando esta es ofrecida junto con el caliz de vino-ofrenda-no deja de serlo sin duda alguna.
Cuando en una reunión pseudoceremonial se hace correr sangre y se atenta contra una vida lo que ha habido no ha sido un sacrificio sino un crimen con ribetes ritualísticos. Ni ha existido como tal el verdadero sacrificio ni se ha tratado de una auténtica ceremonia mágica que habría respetado a los seres vivos.

La invocación de entes no evolucionados.

 Aquelarres, misas negras, goecia, nigromancia, pactos diabólicos, magia negra, brujería, satanismo, vampirismo...conceptos que nos recuerdan la proximidad del Infierno y de los demonios capitaneados por el Diablo, llámese este Satán, Lucifer, Belcebú...pero todo es, como acabamos de decir, nombres y conceptos a la ligera.
 Ya hemos señalado anteriormente que muchas corrientes y muchas partes operativas de la magia acostumbran a trabajar con estos entes no evolucionados. La goecia-invocación de las fuerzas terrestres e infernales-opera con estas entidades, pero a diferencia del Satanismo que les rinde culto, se sirve de dichas fuerzas sin dejarse dominar por estas. La kimbanda-culto sincrético afrobrasileño-es definido de forma popular como magia roja y magia negra; y los exús y las pomba giras-entidades en las que está basado este culto-como una especie de "demonios".
 Muchas corrientes sudamericanas que originariamente habían sido importadas de África al norte y el sur de América no concibieron la existencia de dos principios opuestos como el cristianismo concibió a Dios y al Diablo o a los ángeles y a los demonios. El culto umbanda-sincretismo entre el espiritismo codificado por Allán Kardeck, la cultura indígena de Brasil, los rituales africanistas y la doctrina católica-concibió a los orixás-sus divinidades-como unas fuerzas muy evolucionadas-identificadas con los santos del calendario católico-y a los exús-entidades principales del culto kimbanda-como entidades habitantes de un plano evolutivo inferior, aunque no necesariamente dañinos o perversos.
 En efecto, muchos cultos importados desde África a América han ganado el apelativo de "magia roja y magia negra" o de "magia tanto blanca como negra" de parte de quienes menosprecian otras culturas y acusan un cerval miedo a lo desconocido. Este ha sido el caso de los cultos macumba, kimbanda y palo mayombe.
 La macumba es el aspecto primigenio y natural de lo que hoy conocemos como umbanda y kimbanda. Es la madre de la umbanda, es decir, lo mismo solo que estaba más fundada en el animismo, las prácticas mágicas y el espiritismo ocultista que en las ceremonias religiosas, las ayudas espirituales y el moderno espiritismo kardecista.
 La umbanda podríamos decir que fue la madre de la kimbanda, de lo cual deduciríamos, pues, que la macumba fue la "abuela" de la kimbanda. La umbanda rinde culto a Zambi, la máxima divinidad y se dirige a los orixás o divinidades para transmitir energía positiva al prójimo, sanarle y ayudarle espiritualmente. Estas ceremonias son denominadas "sesiones de caridad", de ahí que la umbanda queda bautizada como "magia blanca".
 La kimbanda hereda aspectos de su "abuela", la macumba y de su "madre", la umbanda. Se identifica con ambas para más tarde trabajar con su propia línea: los "demonios" concebidos por la Umbanda a los que hará trabajar con las técnicas basadas en la macumba.
El culto palo mayombe se divide en dos ramas: mayombe cristiano que realiza exclusivamente trabajos benéficos y mayombe judío que realiza igualmente trabajos benéficos y trabajos maléficos.
Como hemos podido comprobar, así como las leyes judiciales no son las mismas en todos los países o en todos los estados, el concepto bien-mal varía mucho de unas a otras culturas o grupos sociales. Los cultos kimbanda y palo mayombe judío tienen en común el trabajo con entidades poco evolucionadas y ambas persiguen un fin común cuando realizan trabajos benéficos: la ayuda al prójimo en la tierra y la ayuda espiritual a las entidades poco evolucionadas que gracias a estas obras mágicas benignas van liquidando el karma que les ancla al plano terrenal y pueden ganar puntos en su evolución espiritual.

MAGIA BLANCA

Magia de la naturaleza, magia del plano espiritual

 En principio pensamos en subtitular a este apartado "magia del cielo o magia de los ángeles", pero teniendo en cuenta que son concepciones del plano espiritual como podrían serlo las hadas o los santos haremos una descripción más global y más general definiéndolo como "magia de la naturaleza y magia del plano espiritual", puesto que la magia blanca o teurgia("creación de dioses")-la verdadera que es muy distinta de como la concebimos habitualmente-opera sobre un plano más trascendente y el fin que persigue es la evolución y el acceso a los planos o estadios superiores.
 La magia de la naturaleza-que entraría en el círculo de lo que daríamos en denominar "magia verde"-se relaciona con la magia del plano trascendente o espiritual ya que los cuatro elementos que nos son imprescindibles para subsistir en el plano material-agua, fuego, aire y tierra a los que se añadiría a veces un quinto elemento que sería el éter-juegan un papel importante. Para obtener lo que desea o lograr su objetivo el/ la mago/ a debe trabajar con estos cuatro elementos y comunicarse con la Energía Vital, Fuerza Vital Divina, Energía Cósmica, Divinidad, Dios o el nombre que se le quiera dar dependiendo de la concepción sostenida. Con estos cuatro elementos concretiza su objetivo puesto en su mente y con la asistencia de la Divinidad y el acatamiento a Sus Leyes regula la consecución de tal objetivo, de ahí la expresión "hágase tu voluntad" contenida en las oraciones.
La verdadera magia blanca se define como el acercamiento al Ángel de la Guarda o la escala en dirección al encuentro con la Divinidad de donde procedemos. Es en ciertos aspectos una hermana de la religión-del vocablo re-ligare que significa reencuentro-cuyo único objetivo es la relación o el encuentro con la Divinidad. Este tipo de magia se basa exclusivamente en la relación o el hilo con la Divinidad. A través de un acto de magia bienintencionada nos hemos aproximado al Ángel de la Guarda y en cada acto de esta naturaleza nos aproximamos cada vez un escalón más. Podríamos decir visto así que la magia blanca no es una cosa que "se hace" si no un estado evolutivo que se obtiene.
 Cuando en un libro o en un documento se hace distinción entre magia blanca y magia negra se suele comenzar por esta última describiendo su aspecto sombrío y negativo y al abordar seguidamente la anterior hablando de su aspecto luminoso y positivo suele comenzar por la frase "por el contrario" o seguir con esta otra frase "al revés que". Ya hemos señalado anteriormente que no existen reveses ni contrarios, pues una ley hermética reza "como es arriba es abajo" y partimos del principio de que ambas partes se complementan porque todo es lo mismo.
"Por el contrario, la magia blanca, al revés que la magia negra que es utilizada exclusivamente con fines lucrativos y egoístas y siempre es perjudicial, siempre procura con su infinita bondad ayudar al prójimo y buscar para este la salud, la prosperidad, el amor y la buena suerte", esta definición aparecida en millares de libros publicados sobre el tema me parece un tanto simplista y encajaría mejor en un manual de hechizos de la buena suerte para niños y jóvenes aficionados a estas temáticas que en el marco de un estudio esotérico u ocultista serio. Deberíamos dejar de pensar en el "negro" o "negativo" como compatible y coherente con lo dañino, perjudicial y malintencionado, lo mismo que en el "blanco" como compatible y coherente con lo puro, casto, sano y bueno. Y más si tenemos en cuenta que el negro y el blanco no son concebidos de igual manera en todos los grupos culturales y sociales. Los músicos y los boxeadores utilizan el negro para su ropa como símbolo de fuerza y el blanco es asociado a veces, sobre todo en algunos relatos de terror, a la palidez espectral de la muerte.
 La magia blanca es esencialmente la obtención de un estado evolutivo avanzado. Las obras realizadas con este fin quedarían catalogadas bajo el epígrafe "magia negra" si se trata de trabajos de prosperidad económica, de negocios o empresarial-sin otro objetivo que producir para el mercado y generar puestos de trabajo-"magia roja" si se trata de trabajos de amor y pasión-no para esclavizar a la persona que nos gusta si no para mejorar una relación sentimental desestructurada a menudo por un trabajo mágico malintencionado o por la incorrecta vibración de los chakras regentes del amor y el sexo-y "magia verde" si aprovechamos las fuerzas o los elementos de la naturaleza para realizar un beneficio, normalmente de salud(la fitoterapia y el naturismo podrían formar parte de este derivado de la magia). Las buenas obras ejecutadas en el plano terrenal-magia negra-, el plano sentimental o amoroso-magia roja-y el reino vegetal-magia verde-conducen al acercamiento al Ángel de la Guarda(lo que en cristianismo se denominaría "estar en gracia de Dios"), o a la obtención de la "magia blanca".
 Del mismo modo las malas obras o los trabajos malintencionados realizados en cualquiera de estos tres planos no es que nos hagan "obtener la magia negra" o "estar en gracia del Diablo". Sencillamente, quien así ha procedido no se ha acercado al Ángel de la Guarda y ha generado un karma negativo que deberá asumir en la presente existencia o en existencias sucesivas. Aquello que se siembra se recoge.

MAGIA ROJA

Magia de amor, pasión y sexo

 A menudo se utiliza el calificativo "roja" para la magia del amor y de la sexualidad ya que el rojo es un color cálido asociado a la pasión(una gama del rojo utilizada para la ropa es el "rojo pasión") y astrológicamente correspondiente a Marte, un planeta al que se atribuye el fuego, la metalurgia y todo lo que requiere el concurso de la fuerza física o la fuerza interior.
 Los elementos inherentes a un ritual de magia roja son prácticamente los mismos que de una decoración o una ambientación para favorecer el apetito sexual de la pareja: la luz de las velas, los perfumes, el incienso...los ritos tántricos(basados en el tantra o yoga del sexo) estarían englobados bajo el epígrafe de "magia roja", así como todo ritual de conquista o de potenciación sexual. La apertura de los chakras del amor y del sexo sería un ritual o trabajo de magia roja.
 Pero también el rojo se asocia por instinto a la sangre y a la guerra, por lo cual no sería de extrañar que alguien me formulara estas preguntas:
 "La magia roja es la magia que derrama sangre y la magia negra es la magia mala, un mal que le hacen a la gente¿No?"
 A lo que le puedo responder:
"No te digo que no. También es cierto. Y digo que también tú tienes tu parte de razón, no que tú la tengas toda. La tienes hasta cierto punto, dado que tú reduces los conceptos magia roja y magia negra al término de los actos crueles y sanguinarios, como el concepto fetichismo significará para ti excitación sexual con un objeto o fetiche si lo reduces al término del sexo. Pero fetichismo en un sentido global es la importancia que se le da a un objeto o fetiche.
 Los trabajos realizados en la línea kimbanda con Exú y Pomba Gira suelen etiquetarse respectivamente como "magia negra" y "magia roja". Como ya señalamos la primera se refiere a trabajos de potenciación de negocios y prosperidad económica-magia negra o de la tierra para la cual es más apto Exú-y la segunda a trabajos de amor y sexo-magia roja o de la pasión para la cual es más apta Pomba Gira-. Las sesiones realizadas en la línea umbanda suelen calificarse de "magia blanca"-misión de los orixás o divinidades de este culto ya que son más aptos para cuestiones espirituales que para asuntos terrenales-ya que se basan en consultas a entidades incorporadas en los médiums participantes en la ceremonia sobre nuestro estado evolutivo y los consejos que de estas podemos obtener para avanzar en nuestra propia evolución espiritual.
 A fin de cuentas los pretendidos "colores de la magia" no son más que unas meras etiquetas que utilizamos por comodidad y para tranquilizar muchas conciencias. "Yo solo hago magia blanca: rituales de prosperidad económica, de abrecaminos, de empleo y de unión amorosa. La magia negra y la magia roja me parecen abominables"-dice la brujita tierna de la radio o de la televisión mientras despliega sus coloridas cartas adivinatorias sobre su mesa ante el objetivo de la cámara.
 Abomina de una cosa que desconoce y sin embargo la está llevando a cabo con lo que ella misma declara estar haciendo. Mal que le pese está haciendo "magia negra y magia roja" inconscientemente. Sin embargo, la magia blanca que dice estar practicando no la tendrá ganada todavía no porque haya hecho mal alguna cosa si no simplemente porque está aún en un nivel evolutivo muy poco avanzado y ha de seguir trabajando para ganársela.
 ¿Por qué nos duele tanto reconocer lo que estamos haciendo? Muy sencillo. Nadie queremos ser "el malo o el tonto de la película", todos queremos ser listos, buenos, altruístas...y todo lo que nos parece aceptable o admirable más que por el beneficio que podamos aportar con estas actitudes a nuestro prójmo por ser admirados por este.
 La magia es una energía que se aprovecha y se utiliza, esta es la definición global y lo demás son meras calificaciones cuyo significado varía bastante de un punto de vista a otro. Como comprobamos continuamente a través de los libros y manuales publicados-"cómo hacer magia blanca", "como hacer magia rosa", "magia roja para conquistar"-ni los mismos magos con experiencia y conocimiento acaban de ponerse de acuerdo con las definiciones que también van cambiando con el paso de las épocas.
 Pero también cabe señalar que la magia roja y la magia negra tienen también su parte malintencionada y perniciosa y cuando es esta parte de ellas la que predomina se origina un absoluto estado involutivo. La magia negra que fluye hacia arriba buscando la luz, poéticamente hablando, halla la luz al final de un túnel oscuro, la magia negra que fluye hacia abajo rehuyendo la luz se hunde cada vez más en el abismo hasta tocar fondo en el que reina la más absoluta oscuridad. Resumiendo: magia negra que fluye hacia arriba es pasar de un plano muy terrenal-simbolizado por el túnel oscuro-a un plano más espiritual-simbolizado por la luz del final de dicho túnel-, magia negra que fluye hacia abajo retrocede y busca más oscuridad, tal es el caso del operador que se sirve de la magia negra-invocación de las fuerzas terrestres e infernales-en su propio beneficio y en perjuicio del prójimo con perfecto conocimiento de causa. La magia negra que fluye hacia abajo es la Maldad sin más. A través de ella se sella un auténtico pacto con los entes malignos poniéndose a su entera disposición.
 De la misma manera la magia roja puede fluir en ambas direcciones dependiendo que se trate de una mejora de relación o de un amarre desconsiderado. El primer caso sería la magia roja que fluye hacia arriba en busca de la luz, el segundo, la magia roja que fluye hacia abajo abocada a la oscuridad.
 Los casos que he recibido en la consulta de trabajos de magia amorosa-que mas bien habría que definir como "magia posesiva o ególatra"- que han minado la resistencia de la persona haciéndole romper la relación con su pareja para caer bajo las garras de otra persona que le busca-son numerosos, de ahí que la mayoría de las personas que apenas han profundizado en estos conocimientos pero recurren a ellos cuando no encuentran otra vía de ayuda, dudan de si la magia roja es del todo positiva y busca realmente la luz y la evolución espiritual. Habría, pues, que aclararles, que esta magia-como cualquiera de las que hoy día se conocen y se practican-no es en sí ni buena ni mala, todo depende de las manos en las que cae y en los resultados obtenidos. Esta energía denominada magia se ha teñido de rojo al ser aprovechada para temas relativos al amor y al sexo pudiendo ser beneficiosa o perjudicial indistintamente. La cocaína, alcaloide extraído de la famosa coca del Perú, puede ser utilizada en los laboratorios para la confección de anestésicos locales utilizados en odontología o meramente para consumo irresponsable con sus nefastas y trágicas consecuencias, la diferencia entre el uso que le da un químico y el uso que le da un drogadicto es que el primero no utiliza más que la cantidad extrictamente necesaria y el segundo consume dosis mucho mayores sin tasa ni medida. Nada es en sí bueno ni malo, todo depende de la finalidad con que va a ser aprovechado.

MAGIA VERDE

Magia de la naturaleza o naturaleza mágica

 Recurrimos a las fuerzas de la naturaleza para hacer magia o la naturaleza tiene magia, esto es, son infinitos los secretos que nos tiene guardados la madre naturaleza y lo que puede llegar a proporcionarnos para nuestras operaciones mágicas desde gemas hasta plantas. De las primeras podemos elaborar los más efectivos amuletos-ya que para elaborar un talismán necesitaremos metal o pergamino virgen ya que esta operación se presenta bastante más compleja-y de las segundas extraer las más variadas esencias que necesitaremos en nuestros rituales para quemar.
 En todo ritual ya sea este de magia negra o de magia roja toma parte la magia verde por cuanto intervienen los aceites de unción-aceite común de oliva o de girasol con alguna esencia añadida-de las velas y velones, las mencionadas velas y los mencionados velones elaborados a base de cera vegetal, el altar de marmol o de madera de roble o de avellano, los amuletos-elaborados a partir de piedras y gemas-, los talismanes-confeccionados a partir de metales-, los bastones y varitas de poder o mando-de madera de avellano-, el carbón sobre el que se queman los inciensos y los perfumes y el fuego obtenido con cerillas de madera y jamás con mecheros de gas por ser este último considerado un elemento químico artificial perjudicial para la naturaleza.
 Digamos que la magia verde es el sostén de las otras dos ya que no pueden prescindir de ella por cuanto precisan de sus elementos para llevar a cabo el ritual o trabajo en cuestión. El aceite abrecaminos(magia verde) servirá para ungir el velón de cera vegetal(magia verde)destinado a potenciar el buen funcionamiento de un negocio(magia negra). El aceite de unión(magia verde)servirá para ungir el velón de cera vegetal(magia verde) destinado a unir a una pareja(magia roja).
 Si todos estos trabajos han sido realizados por un bien sin perjuicio de terceros y con la aprobación de la Divinidad y las Leyes Universales, la magia verde, la magia roja y la magia negra fluirán hacia arriba hasta ser transmutadas en la magia blanca y repercutiendo favorablemente en el operador que a través de estos actos se habrá acercado un escalón más hacia el Ángel de la Guarda.
 Si no están autorizados por la Divinidad y las Leyes Universales-que será un acto de desafío a las mismas-y han de redundar en perjuicio de terceros para obtener aquello que se desea con el agravante en el caso de utilizarlos para perjudicar a sabiendas como en el caso de los trabajos mágicos malintencionados, el verde, el rojo y el negro se disolverán en el vacío oscuro no logrando la obtención del blanco y dejando así al operador en un estado de total involución.

 Si deseáis dedicaros a ayudar a los demás con la magia y publicitáis vuestros servicios, simplemente escribid "magia" en el anuncio entre los servicios que ofrecéis. Ni blanca ni negra ni roja ni amarilla ni de ningún color. No caigáis en el mismo error de la brujita televisiva que con tales etiquetas-porque, insistimos, no son más que etiquetas utilizadas por comodidad-desprestigia a otros operadores para elevarse y ensalzarse ella misma.

KIRIEL.

EL VUDÚ. DE LA FE VODÚN A LA MAGIA VUDÚ.

  Las prácticas mágicas reciben distinto nombre en cada grupo sociocultural, cada pueblo o cada época, es lo que afirma una definición común de las mismas, dado que se oye hablar hasta la saciedad a través de diversos medios de comunicación y difusión de brujería, macumba, vudú y un largo etcétera de nombres a los que se intenta dar un significado, significado que no es común, si no variado según el punto de vista de cada cual.
 Lo que sí es cierto es que en todo grupo social o religioso encontramos una serie de prácticas de carácter cuando no mágico sí con cierto tinte supersticioso o al menos pintoresco. El cristianismo posee, aunque no lo parezca, sus tradiciones mágicas. Muchas amas de casa depositan su fe en Santa Rita como patrona de imposibles a la que ofrecen su vela o en San Pancracio como patrón del trabajo. Por no añadir que hay quien prende una vela en una catedral pidiendo por un premio de lotería o por un ser próximo que se encuentra de viaje para que llegue a su destino ileso, sano y salvo.
 Cabe señalar que a pesar de la reprobación del cristianismo hacia las prácticas de magia negra, devotos de Cristo hay, sobre todo en los pueblos norteños cuyos habitantes son más propensos a creer en la magia y en la hechicería-y donde hay más caldo de cultivo de las mismas de una manera más activa, al revés que en los pueblos del sur de Andalucía que cultivan dichas creencias de manera más pasiva-que recurren al maleficio de la vela torcida, un ritual consistente en prender una vela torcida frente a la imagen de un santo y quemar con la llama una foto de la persona a la que se desea castigar.
 De la misma manera, creyentes y devotos de la fe vodún, así como iniciados en sus ritos y ceremonias, cultivan de forma activa-haciendo magia-y pasiva-beneficiándose de la misma-las prácticas mágicas basadas en la misma. Así encontramos curaciones a base de hierbas cuyas propiedades conocen los sacerdotes y sacerdotisas de esta religión y ritos para favorecer a las personas necesitadas o para castigar a quienes cometen una infracción al código moral o religioso, pues como en toda creencia encontramos tabúes y prohibiciones que ningún lugareño fiel a la misma se atreve a quebrantar por miedo a una venganza de los dioses a los que se tributa culto.
 Junto a la fe vodún nace un tipo de magia conocido como magia vudú, la cual al revés que el sacerdocio vodún o la Alta Magia reservados a los iniciados, es asequible a todo aquel que desee practicarla. Está basada en la magia imitativa o simpática y no es más que una magia con muñecos entre otras, esto ha sido, entre otras cosas, lo que ha mezclado la religión con las prácticas mágicas. Entre la fe vodún y la magia vudú hay tanta diferencia como puede haberla entre ser santero y hacer rituales y hechizos de santería.
 Años atrás se lanzaron al mercado "muñecos vudú" representativos de políticos y militares a los que sus detractores podían hundir aparentemente con suma facilidad bastando para ello insertar unos alfileres en las zonas que se querían dañar. No se sabe si por desdén colectivo a dichas figuras de autoridad o por experimentar las prácticas mágicas que tanto éxito comercial tuvieron por aquella década-una corriente pasajera como otras que ha habido y habrá en tanto los comerciantes y los empresarios hallen estrategias para vender-aquellos muñecos-con los alfileres ya preparados y los puntos de ataque ya especificados, incluyendo un breve pero explícito folleto de instrucciones-se vendieron como rosquillas aportando una creciente y segura fuente de ingresos a los promotores.
 Y por aquel entonces una edición especial de libros de temática esotérica para coleccionistas incluyó entre sus volúmenes uno dedicado al vudú. El libro se refería en principio a la fe vodún-pese a que dedicó más
espacio a su aspecto mágico y comercial-tal y como se practica en Norteamérica, aunque el autor utilizó la palabra "vudú" para referirse a la misma. Y si como da a entender la edición, el texto fue escrito por un alemán-dato del que no siempre podemos hacer caso por cuanto al prestar un servicio escribiendo un libro con carácter comercial se utiliza un pseudónimo para hacerlo más llamativo-al traducir el vocablo alemán con la terminología utilizada aquí en España por comodidad se tituló "el vudú" a dicho libro en cuya portada aparece una muñeca un tanto tosca ensartada con alfileres y en cuya contraportada aparece el dibujo de otra muñeca del estilo infantil en esas mismas circunstancias. Y lo menos comprensible es el hecho de que, aparentemente, las mismas personas que te aclaran que este tema abarca algo más profundo que la simple y socorrida técnica de hundir alfileres en un muñeco se empeñan en dar esta imagen del mismo. La explicación a este hecho es que la compañía que edita y distribuye dicho libro no es una facultad de antropología ni un gabinete de estudios ocultistas sino una empresa editora de temas generales cuyo editor, director comercial o presidente ejecutivo no tienen otro objetivo que vender ni otra preocupación que organizar y mandar, y no todo el material que va a ser entregado a la imprenta ha recibido el correspondiente asesoramiento técnico o la correspondiente revisión de textos por parte de verdaderos especialistas en cada temática específica.

KIRIEL

MACUMBA, KIMBANDA Y PALO MAYOMBE.

 Hemos dedicado un estudio exhaustivo a estas denominaciones de la magia-o definiéndolas más correctamente estas líneas en las que tienen cabida las prácticas mágicas-y hemos visto que cada una de ellas aisladamente experimenta subdivisiones.
 Veamos una clasificación de la primera, es decir, de la macumba : se le llama umbanda cuando abraza la magia blanca y kimbanda cuando abraza la magia negra. Para quien da sus primeros pasos en estas temáticas no hay nada dicho ni nada claro: se queda igual que antes de buscar todas estas palabras en un diccionario ocultista o general. Sigue sin saber qué son macumba, umbanda, kimbanda, magia blanca y magia negra.
 Vamos, pues, a desgranar una por una para evitar confusiones y denominaciones tan prestas a confusiones como innecesarias.
-Macumba: prácticas de origen bantú fundadas en el culto a las fuerzas de la naturaleza y a las almas de los antepasados.
-Umbanda: culto originado en los pueblos africanos del congo y rendido a una serie de divinidades denominadas "orixás" en Brasil a dónde fue importado durante la trata de esclavos y donde debido a ello hoy día se practica.
-Kimbanda: culto originado en los pueblos africanos del congo y rendido a entidades denominadas "exús" y "pomba giras" consideradas también mensajeros entre el hombre y Dios en Brasil a donde también llegó a través de la trata de esclavos.
-Magia blanca: la magia relacionada con las fuerzas de la naturaleza y celestiales considerada común y popularmente como magia benéfica.
-Magia negra: la magia relacionada con las fuerzas terrestres e infernales considerada común y popularmente como magia maléfica.

 Para evitar confusiones deberíamos separar el copo de la avena y no meter todos los garbanzos en la misma olla. Habitualmente se engloba todo y cualquier cosa con la a menudo errónea percepción de que todo es lo mismo. Al margen de que se muevan por un objetivo común-la relación del ser humano con la divinidad-cada línea o cada disciplina es autóctona y autónoma y se sustenta sobre sus propias bases. De ahí que encuentro desprovisto de toda lógica y todo razonamiento oír decir incluso a los propios santeros que "candomblé es santería" cuando saben perfectamente que candomblé son los ritos yorubas de Brasil y santería son los ritos yorubas de Cuba. Aunque se asemejan bajo muchos aspectos observamos una gran diferencia entre sus rituales, sus ceremonias, sus iniciaciones y sus condiciones de acceso. La palabra candomblé hace referencia al ilê, barracón donde antaño tenía lugar una danza popular entre los negros de los cafetales llamada candombe y la fusión de ambos términos. "Barracón de la danza", es decir, "candombe-ilê". Mientras que santería significa adoración de los santos y hace referencia a la transculturación que sufrió la creencia yoruba cuando sus devotos fueron obligados a asimilar la creencia en el santoral católico convencidos por los catequizadores de que se trataba de sus mismos dioses con otra identidad.
 Por lo que respecta a la magia que la umbanda o la kimbanda abrazan diremos que la primera lleva a cabo sesiones denominadas de caridad cuyo objetivo principal es la evolución espiritual lo que recibe el nombre de "magia blanca" o como estudiamos en el apartado correspondiente a los colores de la magia "el contacto con el ángel de la guarda". La segunda incluye en sus prácticas trabajos de prosperidad económica, negocios, pleitos y corte de maleficios, lo que recibe el nombre de "magia negra" o como estudiamos en el apartado correspondiente a los colores de la magia "la magia del hombre y de la tierra", es decir, la magia que trabaja con entidades terrestres y de planos inferiores y que puede utilizarse de forma constructiva o destructiva. Con el auxilio de los "exus" y por mediación de estos, el hombre puede realizar trabajos mágicos perjudiciales o cortes y destrabes de los mismos, según sus miras y su interés. Con el auxilio de las "pomba giras", las compañeras de los "exús", el hombre puede realizar trabajos de amor, sexualidad y pasión, la cual cosa recibe la denominación de "magia roja" o como quedó expuesto en el apartado dedicado a los colores de la magia, "la magia del amor, la pasión y el sexo" y puede ser utilizada para dañar o para beneficiar dependiendo de la intención y del propio punto de vista. Con un trabajo de magia roja podemos estimular el chakra del amor-magia roja constructiva-o podemos subyugar para someter a la pasión irracional de la persona requirente-magia roja destructiva.
 Por lo que respecta a las divisiones del Palo Mayombe-culto de origen bantú tributado a las fuerzas de la naturaleza y a los antepasados cuyos trabajos mágicos se llevan a cabo con auxilio o por mediación de entes desencarnados con los cuales se ha sellado un pacto ritual-en Mayombe cristiano y Mayombe judío aclararemos que la primera aceptó la fusión con las enseñanzas cristianas mientras que la segunda conservó su forma primigenia de culto. En cuanto al caldero de guerra-instrumento a través del cual el iniciado en esta línea ejecuta sus obras mágicas-cristiano y el caldero de guerra judío podemos decir que el primero ha añadido agua bendita a los ingredientes allí depositados mientras que el segundo ha dejado de hacerlo. Llana
y simplemente. No es que el iniciado en palo mayombe judío sea un mago malvado por la línea a la que pertenece; simplemente su línea le permite realizar trabajos destructivos cuando lo considera oportuno. Es tan sencillo como afirmar que hay cosas que no se pueden hacer dentro del espiritismo, pero en el ocultismo y en la magia sí. Pero no por ello cabe asociarlos o abocarlos a la maldad sin más.

KIRIEL.


¿CUÁNDO ES LÍCITO O ÚTIL OPERAR CON LA MAGIA?

 Lícito será si se tiene la seguridad de no estar obrando en perjuicio de terceros o de uno mismo, con lo cual la magia "fluiría hacia abajo" y nos referimos a una pérdida de "puntos" ganados si es que se ganó alguno hasta encontrarse uno de nuevo en el principio como si no hubiese hecho absolutamente nada para progresar en la escala evolutiva, no a un descenso físico como por la ley de la gravedad un objeto que es arrojado o soltado desde una altura desciende verticalmente hacia el suelo donde caerá. El plano espiritual por no ser físico no diferencia entre arriba ni abajo como no diferencia entre izquierda y derecha ni entre horizontal o vertical, conceptos que ni siquiera existen ni son absolutos en el plano físico, pues ello depende de la posición en la que uno está colocado.
 Por lo que respecta a su utilidad lo cierto es que rara vez es necesario, pues disponemos de recursos propios que rara vez ponemos en marcha ya sea porque nadie nos ha enseñado como, ya sea porque no les hemos prestado atención. Poseemos mecanismos de autoayuda que rara vez ponemos en marcha. Tanta es la fe que bajo una presión inesperada depositamos en las obras mágicas que en determinadas ocasiones lejos de ser una fe que mueve montañas-cosa que no discuto-nos ciega impidiéndonos buscar en nuestro propio interior. Una fe que ciega y paraliza no puede originar ningún movimiento.
 ¿Qué haríamos entonces ante un revés imprevisto de nuestra buena suerte? me preguntarás. Más yo te respondo con otra pregunta: ¿A qué llamas suerte y a qué desgracia?¿A una cantidad de dinero que ayer ganaste y que hoy perdiste respectivamente, por citar el ejemplo más frecuente de las agradables y deslumbrantes sorpresas y los imprevistos y desagradables giros que toma la situación dejando al ser ilusionado con una amargura mucho más irritante que si no hubiera sido sorprendido por nada?
 Otro cuestionamiento: ¿Te preguntas alguna vez qué haces para que la vida te sonría o te trate a empellones? Nuestra relación sentimental se ha roto. Es muy triste ello, es cierto. Pero ¿Hemos tratado de evitar que se desmoronara?¿Ha fluído la comunicación y el entendimiento en esa relación?¿Ha habido respeto, confianza y fidelidad dentro de la misma?
 Muchas veces no somos conscientes de cuando las desgracias-o lo que así queremos llamar-las vamos tejiendo nosotros mismos por nuestro propio deslumbramiento y por nuestra propia dejadez. Este es el caso de las relaciones, no ya amorosas si no de las relaciones en general. Veamos a modo de ejemplo una conversación entre dos amigos muy avenidos o al menos eso interpretan ambos de esa relación. Pues bien, resulta que uno de ellos está entusiasmado en explicar una película que cree le puede interesar al otro. Pero este último no está interesado en escuchar la explicación de la película, bien por que ya la haya visto, bien porque no sea un tema que le apasione. O sencillamente ese día no tiene ganas de hablar ni de escuchar a nadie por la razón que sea. Pero el que quiere a toda costa explicar la película termina explicándola de todos modos y dando a su interlocutor una información que no quiere almacenar. La parte que escuchaba ha dicho claramente y en todas las lenguas que no quiere escuchar el argumento y a pesar de todo ha tenido que terminar escuchándolo. La parte que hablaba no ha recibido el mensaje y si lo ha recibido no lo ha desgranado porque centrándose en querer hablar no ha escuchado ni ha comprendido los sentimientos de la parte que se veía obligada a escuchar. Entonces, es que algo falla en esa relación o en esa comunicación lo cual da a entender que no están tan avenidos como ellos interpretan. La existencia de una parte que absorve y otra que carece de la suficiente energía para desprenderse es lo que da una aparente solidez a esa relación.
 Algo paralelo sucede en las relaciones sentimentales o matrimoniales compuestas de un cónyuge que presiona y otro que es intimidado y coaccionado. Los malos tratos, los insultos, los robos económicos al consumo familiar están a la orden del día, la atmósfera se sobrecarga y la convivencia es difícil. Pero es más difícil la huída de la parte sufridora o afectada por el miedo que de por sí esta situación genera. Es la pescadilla que se muerde la cola. Sin ambargo, en otras relaciones aparentemente más tranquilas siempre hay rasgos de desconfianza, miedos, celos infundados, desacuerdos frecuentes, escasa tolerancia, falta de diálogo abierto y razonable...algo frena la comunicación. Ambos cónyuges al conocerse quisieron compartir sus respectivas vidas más por la novedad de haber conocido a alguien interesante que por el verdadero amor que pudieran sentir el uno por el otro. Pero ha llegado un momento en que lo nuevo se ha hecho viejo y entonces han aparecido la desidia, el aburrimiento, la desgana...insistimos, algo ha fallado en esa comunicación y esta vez ha sido la ausencia de verdadero amor.
 Como cabe esperar, estas relaciones acabarán deteriorándose si no de forma inmediata con el transcurrir del tiempo. Y entonces nos preguntaremos qué nos está pasando o qué ha pasado. Algo hemos descuidado que el otro ha ido a buscarlo fuera. Y entonces aparecen las infidelidades y las represalias que tomará la parte ofendida...haciendo lo mismo si en sus manos está y puede hacerlo.
 Las personas afectadas por este tipo de problema-no todas ellas-que recurren con facilidad a los trabajos de unión amorosa es porque necesitan no ya resolver su problema, diríamos más bien tapar un agujero, aprisa y corriendo-y no se conoce ninguna operación mágica que surta tal efecto-sino culpar a otro de sus propios descuidos, en este caso al o a la amante que ha provocado la separación entre los dos esposos o al/ la mago/ a que ha obrado por encargo de ese amante realizando un trabajo mágico de separación.
 Otro tema que no deja de mantener a la humanidad en vilo es la precariedad del mercado laboral en tiempos de crisis como la que nos viene asolando hoy día desde hace muchísimo tiempo. Las personas que tratan de conseguir trabajo a través de un velón ofrecido al santo de su devoción o a través de un ritual de apertura de caminos se desesperan demasiado deprisa por los pocos resultados obtenidos en una búsqueda de empleo por medios corrientes y creen que una entidad intercederá por él colocándole en cualquier trabajo al día siguiente. Una interpretación de una tirada de caracolas-arte adivinatorio empleado en la santería-en una consulta reza así: "Sus proyectos están al borde del abismo y eso le pasa porque no le gusta trabajar si no que otros lo hagan por usted". Es curioso, pero muchos clientes míos afectados por este problema obtienen este mensaje cuando les hago una tirada de caracolas. De alguna manera esta interpretación está muy relacionada con ellos.
 Y no podría ser de otra manera. La mayoría de ellos se encuentran sumidos en una total falta de autoestima y en una baja moral. Desconocen sus recursos y sus habilidades y apenas les sacan partido. Ahí el problema no estaría en los condicionamientos del karma-que eso es otra suposición fatalista y otra malinterpretación de determinados conceptos-, si no en que la persona no se ha encontrado a sí misma. También sería conveniente que realizara una exploración de su propio yo y averiguar si algún fallo de su actitud-exigencias o estar a la defensiva ante lo incierto o desconocido-le frena o le bloquea la consecución de ese trabajo que tanto necesita
 Y otro factor que merece ser tenido en cuenta es la no creación de puestos de trabajo y los perfiles que se exigen. Por muchas agencias de colocación o centros de orientación profesional que haya las empresas y los negocios no contratan más personal del que necesitan, lo mismo sucederá por muchos abrecaminos que se puedan hacer. Estos serían meramente un apoyo o una terapia de choque originada en la visión de un psicodrama para que la mente del peticionario de este servicio activara sus resortes internos y aprendiera a moverse en la dirección adecuada. Y junto a la no consecución de empleo topamos con este otro problema de ese sueldo que nos parece bajo o indigno y de ese trabajo que tenemos que hacer que no nos gusta. Queremos dar un giro a la situación y hagamos lo que hagamos volvemos siempre a lo mismo; algo hay en nuestro interior que nos paraliza; como en el caso anterior, el miedo a lo desconocido, a salirnos del terreno que conocemos y el ponernos a la defensiva ante una situación para nosotros desafiante. Y esto es lo que debemos conocer para potenciar lo positivo que nos puede ayudar a avanzar y erradicar lo negativo que nos entorpece y nos mantiene anclados a aquello de lo que queremos huír, pero que aceptamos porque ya se ha convertido en parte de nuestra existencia. Como reza un mensaje del arcano 16 del tarot, la Torre, una especie de prisión a la que hemos acabado acostumbrándonos y de la que no nos atrevemos a salir aunque se nos haya concedido definitivamente la libertad incondicional y absoluta.

RESUMAMOS: LA MAGIA ESTÁ EN TÍ, LAS ENTIDADES EVOCADAS EN UN DETERMINADO RITUAL SOLO TE DAN SUGERENCIAS Y PASOS. NO TE APARTARÁN LAS PIEDRAS DEL CAMINO, PERO SÍ TE LAS MOSTRARÁN PARA QUE NO LAS PISES NI RESBALES CON ELLAS. NO TE DARÁN OBJETOS MATERIALES, PERO SÍ TE ENSEÑARÁN A GANÁRTELOS, ESTO ES LA VERDADERA MAGIA BLANCA, LA COMUNIÓN PERFECTA CON TUS GUÍAS QUE TE APOYARÁN EN LA MISIÓN QUE HAS VENIDO A DESEMPEÑAR A LA VIDA.

LA MAGIA ERES , TU MEJOR MAGO ERES . NO EN VANO DIVERSOS LIBROS PUBLICADOS SOBRE DICHO TEMA REZAN : SÉ TU PROPIO MAGO, SÉ TU PROPIO BRUJO, POTENCIA EL GRAN DOCTOR QUE LLEVAS DENTRO.

DE LA DISTINCIÓN ENTRE MAGIA BLANCA Y MAGIA NEGRA.

 "Y entonces el hada buena se disgustó mucho cuando la niña le dijo: no hace falta que vengas, hemos vencido a la bruja malvada"
 ¿Se imagina alguien que un cuento infantil de hadas y brujas tuviera tal desenlace?¿Un hada buena protectora de los niños puede realmente disgustarse si estos no precisan más de sus servicios o por el contrario alegrarse porque ello sería un síntoma inequívoco de que están fuera de peligro?
 Dígame, señora hada buena, cómo reacciona usted ante cualquiera de estas circunstancias y le diré qué clase de persona es. O mejor dicho si obra usted por amor verdadero a los niños o si espera obtener con ello algún beneficio personal. Si ha optado por disgustarse y frustrarse una de dos: o percibía algún honorario o pretendía cuidar y proteger a esos niños toda la vida y le escuece ver que maduran y saben cuidar de sí mismos y protegerse con sus propias fuerzas.
 Por lo que respecta a la bruja mala podía haber sido vencida de diferentes maneras: por los recursos con los que contaban aquellos niños o porque en un momento de ella salió pensar "son unos niños, no vale la pena". O tal vez únicamente para motivarlos a crecer un poco interior y exteriormente les hacía pequeños juegos o les daba pequeños sustos que los aguantaba cualquiera, pero después les demostraba que no les quería ningún mal.
 Pero en fín, un cuento es un cuento y la investigación ocultista es la investigación ocultista. Lo que he querido dar a entender es que hay ciertas facetas del mundillo mágico que los cuentos no muestran, mientras que en la investigación ocultista se ponen muy fácilmente de manifiesto. Bueno sería, opino personalmente, crear unos cuentos de hadas y brujas para adultos en los cuales el hada "buena" fuera mostrada como una persona joven, sobreprotectora, inmadura, falta de experiencia y de conocimientos e ingenua que jamás dejara crecer ni avanzar a los niños y la bruja "malvada" como una persona mayor experimentada y una gran maestra de la vida que enseñara a los niños a ser responsables y a mantenerse fuertes y derechos. Nótese que en los cuentos las hadas se muestran jóvenes y risueñas mientras que las brujas aparecen mucho mayores y más serias. ¿Por qué nunca han invertido los papeles los creadores de tales historias?
 Habitualmente se diferencia entre magia blanca y magia negra. Pero dicha distinción es a mi parecer infantil, falsa y flotante. La magia, ya lo dimos a entender anteriormente, es una fuerza, una energía que se aprovecha. Puede ser utilizada en beneficio propio o ajeno o puede ser utilizada de manera perjudicial para los demás o para uno mismo. El verdadero mago advierte la peligrosidad de los rituales de magia negra, pero también reconoce la importancia de trabajar con estas energías terrestres para determinados objetivos. Si es la mente por medio de cuyo poder funciona la que se halla en un estado emocional favorable o pernicioso no será, pues, el color del ritual lo que lo hará "bueno" o "malo".
 Vamos a dar una pequeña interpretación simbólica del cuento de la bruja que convierte en sapo a un prícipe el cual es liberado del encantamiento mediante un beso. La bruja es una persona mayor, símbolo de sabiduría y experiencia, vestida de negro, símbolo asociado a Saturno y a la Tierra, es decir, el planeta lento en su recorrido que simboliza todo aquello que requiere un proceso y un trabajo personal, y la materia a la que el espíritu desciende para purificarse. El príncipe se halla coronado y adornado con los mejores atuendos que simbolizan las riquezas materiales. La bruja le transforma en un anfibio. Al haberle transformado en sapo le ha descubierto su parte animal, es decir, le ha mostrado su parte instintiva. El príncipe baja por unos instantes del trono, es decir, se desnuda de su presunta perfección simbolizada por la corona de oro material y demás atuendos para reconocer sus debilidades. Y no obstante, en su estado de sapo es obsequiado con un beso, símbolo y muestra de amor, un amor incondicional profesado por alguien que le acepta con sus virtudes y defectos. El beso devuelve al príncipe a su estado y se produce entonces un trueque de enseñanzas. La princesa que le ha besado descubre la belleza interior pasando por alto la apariencia física y el príncipe que ha recibido el beso experimenta sobre sí el amor incondicional, virtud que debe esforzarse en desarrollar y en transmitir a los demás. Análoga interpretación podríamos hacer de todos los cuentos cuyo tema central es una metamorfosis. Pinocho se deja seducir de contínuo por dos bandidos que le incitan a obrar mal, hasta que los mismos bandidos valiéndose de sus señuelos y ardides le llevan a un jardín donde se encuentra con otros niños que han faltado a clase y donde empieza a transformarse en un asno junto con todos los demás. Su parte pícara simbolizada por los bandidos-los cuales no eran más que una proyección de sí mismo, es decir, de su parte embustera-le descubre que ha estado moviéndose en la más supina de las ignorancias-simbolizadas por el asno que no ve más allá de lo que se le pone enfrente-al creer que mentir y engañar a los seres queridos era un camino fácil. Y el hada que le libera del encantamiento y le convierte de un muñeco de madera que había sido hasta antes de esa desagradable pero instructiva experiencia en un niño de carne y hueso es su parte positiva, es decir, su maestro interior-en esta ocasión el hada está representada por una mujer madura-que le muestra también su lado sabio, humano y razonable, la razón que le impulsa a buscar el camino recto y justo en lugar del más fácil.
 Siguiendo con el tema de las diferencias entre magia blanca y magia negra, y a estas alturas del texto diríamos mejor entre lo "blanco" y lo "negro" de la magia, cuando cae por primera vez-o después de haber leído unos pocos libros sobre el tema-en nuestras manos un libro sobre magia blanca con técnicas para combatir la magia negra escrito por un mago blanco-por lo menos así se presenta el autor de dicho libro en la contraportada o en las solapas interiores-aceptamos como instructivas ciertas afirmaciones y le secundamos tan solo porque provienen de un mago que lleva tiempo iniciado en el arte-información extraída del mismo libro-y entiende más que nosotros o así queremos creerlo(más que nada porque ya que hemos invertido en el libro unos ahorrillos que nos ha costado sudor y lágrimas reunir al menos que no los hayamos gastado en literatura mala y en información no fiable). Aceptamos como válida la información que nos da sobre los magos negros: "el mago negro es un ser humano perverso, egoísta y lucrativo a quien domina la pasión del odio y el placer del mal por el mal mismo" y sobre los magos blancos(él por ejemplo): "por el contrario el mago blanco es noble, bueno, altruísta y generoso siempre presto a resolver con la gran bondad de su corazón los problemas de las personas que acuden a él en busca de consuelo y ayuda, y que siempre pone sus conocimientos al servicio del bien y de sus vecinos". Nótese que aquí las alabanzas superan a los reproches; ha dicho más sobre su disciplina que sobre la de su antagonista. El mago negro sería visto así un amargado al que no se puede ni toser y el mago blanco un buenazo que te pone la miel en la boca con sólo que se lo insinúes.
 Las normas de comportamiento para establecer unas óptimas vibraciones con nuestro entorno y los ejercicios mentales para combatir influencias indeseadas que el libro en cuestión nos enseña resultan de lo más constructivo, por eso quizás aceptamos de igual forma como edificante la descripción del perfil del mago blanco y como preventiva la descripción del perfil del mago negro. Sin embargo, nuestro aprendizaje cambia totalmente una vez leemos entre líneas o tenemos contacto directo con esta persona e incluso con el mundo mágico. Hasta el momento no hemos hecho más que repetir lo que habíamos leído tan sólo porque nos parecía razonable y de ninguna manera presto a confusiones. Pero la experiencia directa nos puede llevar a estas conclusiones:
-Si te presentas como mago haz tu trabajo como lo tienes que hacer...
-Si escribes uno o más libros sobre cómo hacer magia enseña lo que sabes...
-Pero sobre todo no muerdas la mano que te da de comer.

 Porque tal persona, aunque quiera quitar prestigio a los magos negros necesita de ellos porque gracias a sus trabajos de magia negra puede ejercer y aplicar su magia blanca. ¿Qué sentido tendría entonces para él hacer magia blanca o escribir libros para enseñar a los demás a combatir la magia negra? Los magos negros son las manos que dan de comer al mago blanco; porque aunque este último los trate de personas lucrativas no nos quepa la menor duda de que algo cobrará por detener un maleficio. Y que no nos haga reír con que actúa para el bien y por amor al Padre Eterno-como dice en sus libros de "el buen mago blanco que de tal se precie"-y con que no quiere nuestro dinero para nada(¿Dónde está escrito que el mago "blanco" o "negro" tiene que consultar y trabajar por gilipostra?). Porque si con cualquier excusa nos fuéramos de la consulta sin pagarle seguro que llamaría al mago negro para que nos hiciera un maleficio más fuerte que no se eliminara con un ritual económico y simple.
 La misión del verdadero mago que busca el bien por el bien mismo es sencillamente dejar claro que las personas necesitadas de estos servicios pueden contar con él. Del mismo modo sabe que deberá ser sincero consigo mismo y con los demás hablando claro de sus condiciones de trabajo-admitiendo que sus servicios tienen un precio y que no debe sentirse sucio por esto-y de los servicios que puede prestar.
 El proceder de la persona que quiere ser mago "blanco" o adquirir fama como tal se comporta de un modo algo infantil y caprichoso. Su estrategia de promoción es "¿quién quiere que yo le haga esto"? en lugar de haber ocurrido que alguien declarara necesitar los servicios de un mago y responderle serenamente "yo mismo puedo ayudarle si usted quiere". Este pseudo-mago no está brindando su ayuda a las personas necesitadas, está chillando y vociferando inconscientemente para que alguien le invite a hacer "sus cosas". Como el niño con ganas de dibujar monigotes que grita "yo quiero pintar" para que alguien le dé un lápiz y un papel. De ese mismo modo, tan pesado y tan insistente se pondrá el "mago blanco" hablando de sus actividades y narrando su biografía como mago sin haber sido interpelado al respecto que alguien entre los reunidos-como cabe esperar, los pelotillas de turno-acabará pidiéndole una consulta por cansancio. Y por si fuera poco querrá cobrar por ello.
 Y si el verdadero afan de los magos blancos es, como suelen declarar muchos de estos en sus libros sobre cómo hacer hechizos de protección, amor, buena suerte y fortuna,  luchar contra los magos negros hasta vencerlos es igualmente un contrasentido: si los magos negros cesaran su actividad y por tanto la magia negra dejara de existir, la magia blanca que es su polo opuesto no debería, en correspondencia, existir tampoco. Y no es solamente que un polo desapareciera a falta de otro. Socialmente puede ocurrir también por pura lógica: el mago blanco también cesaría su actividad al no ser ya imprescindibles sus servicios como tal por cuanto no habría trabajo de magia negra que combatir ni interferencias contra las que protegerse a través de amuletos, talismanes o hierbas mágicas confeccionadas y elaboradas. En el fondo el mago "blanco" que se da tanta publicidad es análogo al mecánico cuyo negocio fluye gracias a su hijo gamberro que estropea coches sin ton ni son(el equivalente al mago "negro"). Necesita de las gamberradas de este, aunque tras recibir las quejas le castigue para educarlo...o para que no se suba a la parra por el truco que está utilizando inconscientemente ni reclame a su padre la más mínima parte de los beneficios por su "ayuda".
 Las diferencias son engañosas en cualquier campo. Todo son etiquetas que se utilizan por comodidad sin otro objetivo que tranquilizar la conciencia. El inquisidor abominaba de los conciliábulos de brujos y brujas, pero necesitaba de estos para expresar y exteriorizar las pasiones reprimidas a través de las torturas infligidas a los acusados de brujería. Se dice en ciertos círculos que el Diablo es el mejor amigo de la Iglesia porque la tiene muy ocupada año tras año. Los profanadores de iglesias y de cementerios, y los ejecutores de pesudo-rituales que se dan a conocer como "misas negras" reniegan de una institución religiosa, pero han necesitado comulgar antes con ella para vomitarla y mediante esa pretendida rebelión dar rienda suelta a sus instintos primarios que en otras circunstancias o de otro modo no podrían liberar. Mediante la matanza de un animal experimentan una gran descarga de adrenalina y mientras pisotean el símbolo de la cruz o bañan en la vagina de la mujer que se ofrece desnuda como altar una hostia confeccionada a base de rústico pan negro experimentan una gran sensación de supremacía sobre el mismo Mesías y de desprecio por la supuesta autoridad de este.
 Resumiendo: todo es lo mismo, como arriba es abajo y viceversa. Las diferencias que vemos son transitorias y no tienen  razón de ser. Aquello que odiamos es en realidad nuestra válvula de escape de nuestro resentimiento por nuestro fracaso. Necesitamos expresar odio para liberar tensiones internas, como necesitamos dar amor para alimentar a nuestro espíritu con energías positivas, las que nosotros proyectamos y regresan a su punto de partida por triplicado, y las que recibimos en señal de agradecimiento de las personas a las que hemos demostrado nuestro amor. Al desfogarnos y dar rienda suelta a nuestro malestar nos limpiamos interiormente. Difícilmente las consecuencias son perturbadoras si mantenemos en nuestra mente el propósito de no dañar a nadie y si los estados emocionales constructivos superan a los destructivos. Lo que queremos dejar sentado es que de todo lo que aprendamos y de todo cuanto encontremos hemos de extraer lo que nos resulte provechoso y desterrar lo que no nos convenga.

 KIRIEL.

EL PODER DE LA MENTE SOBRE TU PROPIO CUERPO
O EL PODER DEL CUERPO SOBRE TU PROPIA MENTE.

¿Hasta qué punto tienen influencias uno sobre otro?

 Uno de los requisitos tanto del acceso a la verdadera iniciación como del desarrollo de las facultades extrasensoriales-en palabras de libros sencillos sobre estas temáticas "para adquirir facultades paranormales o para ser mago"-es el autodominio y reforzamiento del ego. Muchas y muy variadas son las técnicas que enseñan a dominar la propia mente y el propio cuerpo y muchas las escuelas-orientales y occidentales-que pueden ayudarnos. Los ejercicios que proponen son tantos cuantas son las personas o los centros especializados que los imparten, sin embargo todos coinciden en que el factor primordial y principal es el dominio de uno mismo.
 Para acceder al ejercicio de lo oculto es preciso, según afirman los textos, erradicar los vicios y adquirir la suprema perfección por la práctica constante de las virtudes; a este fin es preciso arrumbar la pereza volviéndose diligente, la lujuria haciéndose casto y moderado, y la vanidad y el orgullo por la paciencia y la humildad. Debemos ser capaces de vencer nuestros propios miedos, de aceptar las derrotas sin rendirnos ante los fracasos, de perseverar en cuanto emprendamos y de asumir responsabilidades.
 Se ofrecen también una alimentación y unos ejercicios adecuados a la jornada del ocultista que de tal se precie como no dejarse arrebatar por la pereza al levantarse y ser capaz de saltar de la cama con ligereza, de ser paciente y tolerante aunque haya provocación ajena, de mantener limpios y tonificados tanto el cuerpo como la mente y-esta es quizá la propuesta más dura-ser capaces de enfrentarnos a lo que más tememos o intentar desempeñar aquella actividad que menos nos gusta de forma que a base de trabajarla acabemos por familiarizarnos con ella y encontrarle sus facetas agradables.
 Estos ejercicios son ciertamente interesantes siempre que sepamos fijarnos un programa al respecto que estemos seguros de poder seguir y de poder cumplir. Pero ciertas escuelas que han llevado la autodisciplina hasta el extremo queriendo imitar las duras enseñanzas de algunos templos orientales-en los que se insulta o se menosprecia al aspirante o se le somete a un entrenamiento asaz duro para motivarle-han terminado por convertir estos ejercicios del fortalecimiento del ego en una entera renuncia a este. Se basan en la teoría de que si la mente quiere dominar el cuerpo debe empezar por ser capaz de no escuchar los mensajes del mismo e incluso de llevarles la contra. El cuerpo invariablemente nos enviará señales de fatiga, de sed, de frustración ante una situación incómoda, etc. a los cuales la mente no deberá prestar atención pues ello significará que no lo está dominando y por consiguiente tampoco podrá dominar sobre el espacio ni sobre el tiempo. Mucho menos logrará incidir sobre la materia(produciendo esos fenómenos de psicocinesis que tan febrilmente ansían los amantes de lo paranormal que más que estudios e investigaciones serias desean producir fenómenos con la única finalidad de ser admirados, reconocidos y prestigiados).
 Mediante estas técnicas de autodominio, dicen, lograrás no solamente controlar tus sensaciones y tus impulsos si no también convertirte en tu propio tirano. En ese sentido no deberás ceder a los mensajes que te mande tu cuerpo; tu mente debe rectificarlos y dar a aquel de inmediato y sin vacilaciones la orden contraria.
¿Te apetece un bombón? ¡Ahora no te lo comes! ¿Te apetece una copa? ¡Ahora no te la bebes! ¿Vienes cansado y te vas a dejar caer en el sillón? ¡Ahora corres! ¿Vas a gritar y vas a contestar mal? ¡Ahora haces buena cara y eres amable con la persona que te ha provocado aunque ella no lo haya sido contigo! ¿No te apetece ponerte a hacer una pajarita de papel, pues no te gusta la papiroflexia? ¡Ahora te sientas y haces veinte!
 Sinceramente, yo con este entrenamiento y con este tipo de ejercicios acabaría alienado y con una depresión mastodóntica.
 Sano es hacer un trabajo interno y tratar de pulir nuestros propios defectos para sentirnos a gusto con nosotros mismos y sabiendo que ello va a redundar en un mejor servicio al prójimo. Lo mismo sucede si tratamos de vencer ciertas barreras que nos bloquean interiormente(miedos, complejos, etc.), si tratamos de agilizar un poco nuestro ritmo, si prestamos mayor atención a lo que tenemos y a lo que hacemos, si nos hacemos más maduros y responsables, etc.
 Cultivar unas virtudes y pulir unos defectos no es autoanulación. No hay ninguna necesidad de privarse de los placeres que brinda la existencia si no podemos evitar el sufrimiento que también de vez en cuando nos ocasiona esta. Para transmitir felicidad es preciso sentirla y saber lo que es. Si no tenemos energía positiva, salud, bienestar, etc. poco podremos dar a los demás. Un ocultista tranquilo y equilibrado o un sanador pleno en bienestar personal siempre obtendrán mejores resultados y prestarán mejores servicios que aquellos otros colegas suyos que dicen tener todas las claves para hacernos felices cuando ellos reflejan abatimiento y tristeza como si esa misma felicidad les hubiera sido vedada. Autoanularse y autocastigarse para desarrollar facultades más rápidamente-y se afirma que quien las ambiciona demasiado las pierde con mayor facilidad-va a dar el mismo resultado que mortificarse físicamente para alcanzar antes la gracia divina: nuestros padres biológicos no quieren que hagamos barbaridades con nuestro cuerpo y el Padre Universal lo desea menos.
 Mens sana in córpore sano, mente sana en cuerpo sano. Este es el único requisito para desarrollar facultades y para acceder a la verdadera iniciación.

KIRIEL.


CRIMINALIDAD RITUALÍSTICA.

¿Crónicas de sucesos, leyenda urbana o prensa sensacionalista?

 La prensa se ha hecho eco en diversas ocasiones de crímenes y asesinatos con ribetes ritualísticos, impropiamente denominados "criminalidad esotérica", pues esotérico solamente significa reservado o secreto. El esoterismo es el conjunto de enseñanzas de los filósofos de la antigüedad reservado a los iniciados.
 No solamente la prensa expone casos de rituales acompañados de un asesinato sangriento o de sectas que se presentan como adoradores de Satán o de Lucifer. También estos casos-tanto los más antiguos como los más cercanos a la actualidad-son recogidos en libros y enciclopedias que sobre tan controvertido tema se vienen editando.
 No vamos a discutir que estos hechos son reales porque no solo los medios de comunicación los han puesto en nuestro conocimiento si no que también hemos sido testigos presenciales de tales atrocidades que si bien no han desembocado en un crimen a punto ha estado de siniestrar a cualquier transeúnte por la zona donde se ha producido; sin ir más lejos una mujer de mediana edad arrojó a la calle un pesado adoquín desde un ático aduciendo que pretendía así espantar a unos espíritus malignos que se encaramaban por la fachada del edificio para entrar en su vivienda. Por no hablar de amistades que fueron víctimas del famoso timo del "trabajillo" para unir un matrimonio que asediado por infinidad de problemas de relación y de convivencia amenazaba con disolverse.
 Lo que a nivel personal nos ha parecido una tremenda exageración han sido claves y mensajes ocultos que los autores de dichos libros han podido encontrar-desconocemos en qué se basaron para sacar tales conclusiones-y eso mostrándose neutrales y como-palabras textuales-meros cronistas de hechos. Donde mayormente suelen encontrar mensajes ocultos es en las letras de algunas canciones de rock duro, información que suele llegarles de países donde ciertas letras son censuradas y como consecuencia de ello goza de mala fama cierto tipo de música, lo mismo que ciertas novelas de terror y fantasía que son sin más retiradas de las bibliotecas públicas. Para escribir sus libros se entrevistaron con personajes relacionados con el tema, alguno se infiltró en un grupo o comunidad a la que se atribuían relaciones con el mundo del sectarismo o de la criminalidad ritualística y expurgaron una abundante bibliografía sobre temática esotérica, ocultista, ufológica, demonológica, mágica y paranormal, y libros de edición propia de centros y sectas, amén de extraer pasajes de libros sagrados como la Biblia, el Corán, el Baghavad Ghita o el Popol Vhul cuyas claves llevarían al público lector a una conclusión sobre los motivos que impulsaban a dichos grupos a su manera de proceder.
 Tomemos como ejemplo algunos apuntes: "viene a nuestra memoria una pesudo-misa negra que tuvimos ocasión de presenciar en la, ahora abandonada y repetidamente profanada, ermita de Vallgorguina, en Barcelona, organizada por Richard Bru, conocido brujo catalán, y emitida, muy a su pesar por RNE a principios de 1990. Allí pudimos observar una vergonzosa dramatización de lo que pretendía ser una misa negra con espasmos, convulsiones e histerias de unos pobres hombres y mujeres bajo las órdenes hipnóticas de Bru, debidamente ataviado con una túnica negra y tétricos medallones y sus ayudantes".
 Sin embargo escuchemos al mismo maestro ocultista Richard Bru en un artículo escrito por él mismo en el cual habla de dicha ceremonia: "no cabe duda de que más de uno habrá pensado que se trataba de un rito satanista. Nada más lejos de mi intención, el Diablo y el Infierno son temas demasiado desconocidos, el satanismo es una magia barata que raya el ridículo y nada tiene que ver con el conocimiento ocultista. El que juega al satanismo es un ignorante y a la vez un poseído, hace el juego a la Iglesia". Desconocemos el motivo de su reticencia a permitir que su ritual fuera enfocado por unas cámaras por un lado y de su concesión por otra parte de explicar con pelos y señales ese mismo ritual en el artículo, incluyendo las enseñanzas en las que estuvo basado.
 Y el ya mentado Richard Bru añade: "los ocultistas infernales no sirven al Diablo: lo someten. De ahí que el tema del Infierno debe entenderse solamente para iniciados". Es decir, el periodista que describe el ritual define a Bru como brujo, mientras que el propio Bru al redactar este artículo se autodefine como ocultista, en este caso como un operador con mando sobre las fuerzas terrestres con las que trabaja, según su definición, ocultista infernal. Su ritual, según afirmó en dicho artículo, no tuvo otro objetivo que profundizar en el subconsciente de un iniciado a fin de que este reconociera sus demonios interiores y los desterrara.
 Como es, pues, fácil de comprobar, la información facilitada por terceras personas difiere muchísimo de lo que la persona a la que se refieren  nos presenta. Y otro factor que pocas veces los investigadores y los periodistas valoran es que siendo tanto el Luciferismo como la Alta Magia-temas que suelen estudiar cuando hallan un trasfondo nazi o de algún modo elitista tras la filosofía promulgada por ciertos grupos-enseñanzas reservadas a los iniciados, la información que les han facilitado puede estar manipulada o camuflada. De hecho, no suele interesar a los maestros de las órdenes herméticas que los de fuera o profanos sepamos demasiado, por no decir que ni siquiera comentan con los propios iniciados o internos cierta información que por prudencia o bien como normativa interna y por tradición debe permanecer en el secreto.
 Y otro análisis realizado al tarot de Aleister Crowley reza: el tarot de Aleister Crowley muestra símbolos invertidos y juega con símbolos nazis. Es preciso destacar primero: que Aleister Crowley nació en 1875 y que el nazismo pertenece a los años treinta. Si algo tienen que ver entre ellos sería a la inversa, es decir, que fuera el propio Hitler quien copiara algo de Crowley en el supuesto de que le hubiera interesado-Hitler frecuentó algunas sociedades secretas de cuyas enseñanzas tomó prestado cuanto le llamó la atención-, aunque algunas fuentes afirman que Crowley usó su magia y sus poderes mentales en un intento de desmantelar el partido nazi, con lo cual concluiríamos que si bien Crowley, según se conoce a través de su biografía, despreciaba el cristianismo estaría también en contra de la doctrina de Hitler.
 En todo caso, el tarot de Crowley "jugaría" con o más bien incorporaría a su simbología alguna referencia de la svástica que originariamente fue un símbolo solar sagrado hindú muchas eras antes de que el nazismo patentase este símbolo como suyo cambiándole la posición y situándolo en el centro de un círculo blanco sobre un fondo rojo. Por lo que respecta a los símbolos invertidos, estos podrían ser simplemente la representación de la materia o de lo terrenal, es decir, simplemente aquello que tenemos pendiente y a lo cual hemos de dar la vuelta para que retorne a la posición correcta. Lo que popularmente suele asociarse a la magia benéfica o la magia maléfica no son más que representaciones respectivamente de la conciencia humana y del instinto carnal. Nos referimos al pentagrama derecho o invertido; son la cara y la cruz de la misma moneda. Así pues el pentagrama derecho vendría a decir "hoy es miércoles" y el pentagrama invertido "¿es miércoles hoy?". El primero ha alcanzado su evolución y el segundo se halla en el camino de la misma.
 Otras publicaciones acerca de criminalidad ritualística describen detalladamente los rituales típicos de algunas sectas, como las de aquellas que no siendo seguidoras de ningún culto sincrético específico incorporan elementos de los mismos a sus prácticas. Este es el caso, según el testimonio recogido en otra de estas publicaciones, de una secta que rueda imágenes de asesinatos en vivo y en directo. Uno de sus rituales es "la macumba parecida a la misa negra: se celebra a medianoche en las playas y se sacrifican animales de cuatro patas mientras los asistentes beben una gran dosis de ron de caña para transportarse a las regiones de Yuruba y Lukumbi donde se encuentra el reinado del terror." Y otra ceremonia típica de una secta mejicana desmantelada en 1989 se dio a conocer como "Palo Malumba" que según datos de dicha publicación se componía de ritos vudú, asesinatos rituales, cadáveres troceados y canibalismo.
 Estos libros caerán, como es fácil que ocurra, en manos de aquellos y aquellas que empiezan a dar sus primeros pasos en estas temáticas. Aunque les serán recomendables de leer para que no se adentren solos y sin el debido asesoramiento en un terreno tan resbaladizo y tengan los ojos bien abiertos si realmente desean estudios serios, algunos de los conceptos ahí expuestos pueden confundirles y desorientarles. Inevitablemente surgirá la típica pregunta que no lograrán contestarse:
¿Qué es vudú?¿Qué es macumba?¿Qué es una misa negra?¿Tan terrible es ese "Palo Malumba"?¿Qué es Palo Malumba?¿Yuruba y Lukumbi no serán unas míticas ciudades del Infierno de los brasileños? Y esta última pregunta en el supuesto de que ya conozcan qué es la macumba y sepan que se practica en algunas regiones de Brasil.
 Y, como cabe esperar, cuando oigan por primera vez la palabra "Palo Mayombe" lo confundirán con el "Palo Malumba". Y de ahí a creer que el Palo Mayombe encierra prácticas antropófagas y obras mágicas malintencionadas no hay más que un paso. Incluso es habitual escuchar esta frase: "fue apadrinado en la orden de Palo Mayombe que es magia negra", lo cual no hará sino reafirmar la mala fama de ciertas filosofías o sembrar más confusión si todavía no sabemos a ciencia cierta lo que es el Palo Mayombe ni lo que es magia negra realmente.
 Podríamos aclarar que el concepto "Palo Malumba" es un neologismo exclusivo de esta secta en concreto por cuanto se trata de una "cosa" inventada que nada tiene que ver con los antiguos ritos del Congo o de tribus ancestrales como en el caso de las auténticas cofradías de Palomonte y de Palo Mayombe. Puede que dicha secta copiara alguno de estos ritos añadiéndole algún tinte mágico de su estilo y utilizándolo como cobertura de sus más bajos instintos homicidas, sádicos y antropófagos.
 La cuestión es que un libro que quisiera advertir de los peligros del ocultismo, de los peligros de las sectas y temas afines debería hacerlo subrayando la actitud de las propias personas al respecto. Porque no es la religión, la sociedad secreta o la escuela filosófica en sí y de por sí lo que puede resultar perjudicial si no la propia conducta. Más que "cuidado con los musulmanes, cuidado con los mormones, cuidado con la masonería, cuidado con los rosacruces, cuidado con los testigos de Jehová, cuidado con la Cienciología, cuidado con Dianética, cuidado con el espiritismo, cuidado con la brujería, cuidado con la magia blanca o negra, cuidado con el satanismo, cuidado con el luciferismo, cuidado con la santería, cuidado con el vudú, cuidado con la macumba y un sinfín de cuidado, cuidado y cuidado-sin especificar qué es cada cosa de las mil que te nombran-habría que decir: cuidado con el fanatismo, el oportunismo, el afán de negocio, la criminalidad, la estafa, la manipulación y la obsesión. Estos son los verdaderos enemigos tanto de los estudiantes de ocultismo, esoterismo y parapsicología como del ciudadano de a pie que cae fácilmente en las redes de las sectas destructivas.
 La mayoría de estos libros sobre criminalidad y sectarismo son escritos por periodistas y si no todo la gran mayoría de lo que en ellos aparece expuesto es "dije lo que me dijeron" o "transcribo íntegramente de los libros de tal o de los trabajos de cual". Excepto que sea una evidencia mundial de lo peligroso que pueda ser determinado tema(como el SIDA o la drogadicción, por ejemplo) no deberíamos dar por sentada ninguna información que se nos facilite sea por la vía que sea sin antes comprobarlo con los hechos. Como decir que no me ha gustado una cosa que he probado o que me ha decepcionado una persona a la que he tratado. Para detectar la peligrosidad de ciertos lugares o personas he aquí una serie de pautas que nos ayudarán a tomar una determinación:

-Cuando empezamos a sentir incomodidad. Aunque la parte negativa no se halle a la vista, el inconsciente siempre capta algo y nos lo transmite a nivel consciente de alguna manera.

-Cuando en una propuesta se utiliza un lenguaje ambiguo y de múltiple sentido para desorientar a la persona objeto de la misma y hacerle caer en una trampa que se le está tendiendo.

-Cuando insisten mucho para que compremos los productos exclusivos de su empresa o de su grupo y critican sistemáticamente a sus colegas de la profesión. Ciertos magos y adivinos se dedican a criticarse mútuamente en un intento de superarse unos a otros en cuanto a conseguir clientela se refiere. Aunque es normal y habitual que puesto que cada cual tiene su manera de trabajar y cada maestrillo tiene su librillo siempre haya un poco de pique entre ellos, no es nada ético hablar mal de otros operadores a no ser que realmente hayan cometido una falta grave y no pretendan otra cosa que alertarnos. Es fácil de comprobar cuando viéndose impotentes para ayudarnos a resolver nuestro problema nos remiten a otro colega suyo que saben que puede hacerlo. Si trabajan honradamente y tienen verdaderos deseos de ayudar no nos hablarán mal de aquel en el que no confían porque saben que ni viene al caso referirlo ni podrán ayudarnos de esta manera, simplemente nos remitirán a aquel otro en el que confían plenamente y ahí es cuando se conoce bien a las personas.

-Por lo que respecta a escuelas de filosofía, centros de estudios ocultistas, escuelas iniciáticas, etc. cuando se muestran de entrada dispuestas a iniciarnos en su corriente sin apenas conocernos. Y cuando critican sistemáticamente a sus colegas de la profesión o del gremio como queriéndonos dar a entender que ellos están exentos de cometer los mismos errores y que solo ellos son el tipo de compañía que nos conviene. Incluso como les expliquemos que ya hemos iniciado nuestros estudios en otro centro bajo la supervisión y el asesoramiento de otra persona que ya nos da cuanto necesitamos puede que se apresuren a contestarnos que tanto el centro como la persona de la que les hablamos se están aprovechando de nosotros y no nos van a enseñar nada. Una escuela seria siempre nos respetará e incluso nos aconsejará que no nos quedemos solamente con lo que nos haya podido ofrecer hasta el momento si no que si sentimos que debemos profundizar o que necesitamos algo más sigamos buscando fuera de la misma sin censurar a ni exaltarse con nadie.

-Y, en definitiva, todo aquello que únicamente busque vender o reclutar personal con la finalidad exclusiva de hacer su élite más potente. Los fanáticos no han visto la luz-el fanatismo es una densa venda en los ojos que impide vislumbrar nada-ni han encontrado la verdad; lo que realmente quieren es que un inmenso grupo mayoritario les siga sus pasos ya que se sienten solos en esta forma de vida que abrazaron y viéndose acompañados sienten tener toda la razón, símbolo para ellos de supremacía social.

KIRIEL.

VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA

 Examinaremos a continuación una serie de definiciones populares que se dan en el mundo de la magia. Pero antes de abordar este campo he creído oportuno realizar un somero análisis del mito de la caída de Lucifer ya que lo considero una pieza importante del tema.

LUCIFER, UN ENIGMA AÚN NO RESUELTO.

 Un tema tan controvertido como curioso es el mito de la caída de Lucifer.
 Normalmente cuando escuchamos la palabra “Lucifer” lo primero que acude a nuestra mente es esa triste imagen del “ángel Caído”. Un ser odiado, pero desconocido. Un ser que ha inspirado temor-temor a lo desconocido-pero también ha sido una fuente inspiradora para muchos poetas de la categoría de John Milton por citar un ejemplo.
 El cristianismo con sus diversas divisiones y subdivisiones concibió la existencia de dos ángeles que se rebelaron contra Dios por orgullo. Sus nombres-o los que el cristianismo les dio-son Lucifer y Satán.
 El primero de ellos se niega a obedecer un mandato del Supremo Creador de adorar a Adán o al hombre. A la pregunta del Supremo Creador acerca de qué le impide adorar al hombre cuando Él lo ordena, cosa que aparentemente no es cuestionable ni negociable, Lucifer aduce ser superior a Adán puesto que él ha sido creado de fuego y Adán de barro.
 Rechazando categóricamente toda demostración de orgullo-que deberíamos decir hablando con propiedad engreimiento, pues orgullo significa solamente autosatisfacción personal sin que ello lleve necesariamente a pisarle el cuello al de enfrente-Dios expulsa a Lucifer de su lado y acoge al hombre y a la mujer en el Paraíso donde pueden comer cuanto quieran excepto del Árbol Prohibido.
 Pero el cesante Lucifer no duerme y está en todo. Y adoptando la forma de una serpiente aparece ante Eva afirmando que no les había sido prohibido dicho árbol si no para que no fuesen dos ángeles o no fuesen inmortales. Y apenas han comido del árbol se dan cuenta de que están desnudos. Y la fuerte reacción de Supremo Creador no se hace esperar; Adán y Eva son expulsados del Paraíso por un ángel enviado por Dios. Pero antes de su partida tiene dos mensajes que transmitirles:
Para él: GANARÁS EL PAN CON EL SUDOR DE TU FRENTE.
Para ella: CON DOLOR PARIRÁS A TUS HIJOS.
 Y he aquí esta tan interesante como curiosa historia tal y como de toda la vida la conocemos. Sin embargo, aunque creamos conocer bien el origen de la vida y del mundo según hipótesis teológicas siempre nos quedará alguna laguna, siempre tendremos alguna duda, siempre nos formularemos una pregunta detrás de otra.
 Muchos libros han caído en nuestras manos tratando de descifrar ciertas claves. Y aunque la mayoría de estos aportan algo interesante que podría llevarnos a una firme conclusión, lo cierto es que todo cuanto pueda saberse permanece y permanecerá en el misterio. Aunque lo que acto seguido voy a decir pueda parecer irreverente, uno de los defectos de los libros sagrados es hablar con parábolas y metáforas cuando el pueblo necesita que se le hable claro, sin claves y sin frases rebuscadas que no ha de entender. Pese a que pueda alegarse que estas metáforas nos enseñan a masticar la comida y no a dárnosla masticada y que lo que pretenden es que busquemos y estudiemos-en resumen que uno se rompa la cabeza cavilando-yo apostaría por dar unas enseñanzas de modo sencillo, pues si las damos muy complicadas se nos ahogan en un vaso de agua. Una prueba patente de ello es que los textos sagrados en lugar de haber sido estudiados con profundidad cada época y cada pueblo se ha decantado por interpretarlos de manera acomodaticia acorde a las necesidades del momento. Muchas interpretaciones han sido las que se ha dado a los evangelios. Y en contra de lo que promulgan algunos maestros de pega y unos pocos “eminencias de cabeza” deslumbrados por estos e imitadores y repetidores como loritos de haber encontrado la verdad, lo que cada uno ha encontrado es su verdad. Porque ni siquiera el mundo que percibimos con los ojos abiertos es el real si no una proyección de nuestra psiquis.
 Volviendo al análisis del mito de la caída de Lucifer, también la religión yoruba o santería tiene sus leyendas o apattakis como se denominan estos cuentos en lenguaje yoruba. Una de ellas tiene cierto paralelismo con el mito cristiano de Lucifer. En esta ocasión el dios Obí, conocido por su bondad y su pureza es situado por Olofín-el Divino Espíritu Santo-en uno de los mejores puestos. Se encuentra vestido de blanco en lo alto de una palmera. Y Elegguá-conocido como guardián de los caminos, pero también equiparado a una peculiar especie de niño travieso y “correveidile”-sospechando que a raíz de su ascenso Obí está tomando una conducta selecta, discriminadora y engreída decide ponerle a prueba en ocasión de una fiesta organizada por este último. Todos los invitados son pulcros, nobles, ilustres, cultos y amables. Pero Elegguá duda mucho de si Obí es consciente de la existencia de otras personas que se han quedado estancadas en un plano cualquiera y necesitan ayuda, por lo que obrando de motu propio invita a dicha fiesta a todos los maleantes, vagos, menesterosos y borrachines que encuentra. Obí no puede-o no quiere-evitar indignarse a la vista de tanta lacra social en su casa y los despide a todos con cajas destempladas. Convencido del triste cambio de Obí se niega a ir a su casa a un recado por orden de Olofín, el cual decide comprobar por sí mismo el hecho que Elegguá le expone. Acude a casa de Obí disfrazado de limosnero y, efectivamente, comprueba como este le despide cerrándole la puerta en las narices. Olofín no tarda en descubrirse y como castigo a la actitud engreída de Obí le hace caer de lo alto de la palmera condenándole a ser blanco por dentro, pero negro por fuera, rodar por el suelo y predecir el futuro.
 Sorprendente ¿verdad? A estas alturas del texto cabe preguntarse como han podido coincidir en estas leyendas o historias unas creencias tan dispares en su pura esencia como la cultura yoruba y el cristianismo. Teniendo en cuenta que el tráfico de esclavos originó la fusión de la cultura yoruba con las enseñanzas cristianas del país al que eran llevados dando pie a lo que hoy conocemos como santería o adoración de los santos, podríamos concluir que basaron dicha leyenda en la caída de Lucifer que las enseñanzas del cristianismo les intentaron mostrar. Yo estoy cada vez más convencido de que esas leyendas ya habían nacido de ellos o de sus antepasados, pues dadas las calamidades que pasaban siendo esclavos y la inmensa frustración que les dejaba el trato que recibían de los amos y de los capataces dudo mucho de que estuvieran entonces para cuentos.
 La unificación de todas estas leyendas de procedencia diversa nos llevaría a una única conclusión: un ángel o una deidad que se rebela por presunción contra un mandamás que ha creado la vida y que en consecuencia es precipitado al abismo de la condenación eterna.
 Tras la creación de estos entes tan disconformes y tan contestatarios una segunda criatura entra en acción: el hombre.
 Y este es sometido a una prueba por una serpiente que le muestra un árbol que no solo le alimentará si no que le abrirá las puertas del conocimiento. Un primer hijo del Padre Supremo prueba a su hermano menor que es el hombre. Intenta hacerle sucumbir en la misma prueba que él ha padecido. Y el Supremo Creador omnipotente y omnipresente lo ha tolerado. Y, lo más sorprendente del caso, le ha clavado a este segundo hijo inocentón y fácilmente manipulable una bronca de órdago y lo ha echado de su lado.
 Vamos a suponer que yo tuviera dos hijos. El primero es un perla que se junta con una panda de golfos y hace las mil y una barrabasadas. Me tiene frito porque es una parida detrás de otra. Últimamente le ha dado por llamar a las líneas “calientes” en mi ausencia y me deja la cartilla temblando.
 El segundo es un inocente que no tiene maldad, es un bonachón que de bueno parece tonto. Se le puede convencer fácilmente de cualquier cosa. Si alguien le dijera por ejemplo “se te ha caído la faja” o cualquier estupidez por el estilo, el muy bobo miraría el suelo siendo sorprendido con una colleja. Su hermano mayor tiene poder sobre él y si aquel le dijera que saltara, saltaría sin dudar un momento.
 Ahora supongamos que yo le digo a mi hijo el mayor: “dile a tu hermano que me birle cien euros de la caja, dale mi cartilla a ver lo que hace”. Sabiendo como son el uno y el otro-el uno por grande y el otro por chico-lo cierto es que yo también acabo de tener una ocurrencia que es para darme una hostia. Se ha dejado convencer por su hermano y, efectivamente, me ha “soplado” cien euros de la caja cada vez que aquel le ha prometido que vería un burro volando si lo hacía y me ha llenado la cartilla de números rojos.
¿Qué sentido tendría decirles que ganarán el pan con el sudor de su frente y que su mujer parirá con dolor? Hoy día los niños saben el latín y el latón y eso lo tienen ellos clarísimo. O sea que como si les dices “qué verde era mi valle”. A menos que se pongan a pedir en los metros o en la calle, tendrán que pencar para comer y para vestirse. Y si tienen pareja y quieren tener hijos naturales la mujer habrá de sufrir lo suyo para darles a luz, pero es por la presencia de un cuerpo en unos tejidos blandos, no por un castigo.
 Y aparte digo otra cosa: suponiendo que en esa curiosa e interesante leyenda tanto Eva como Adán hubieran sido un poco más listos y no hubieran caído en la trampa de la serpiente, igualmente habrían tenido que trabajar para cultivar y mantener aquellos árboles frutales de los que se alimentaban. Y si hubieran querido tener descendencia, claro que Eva habría sufrido lo suyo para poder dar a luz a sus hijos. Los ejercicios de yoga y las técnicas de relajación para el parto sin dolor no estaban aún descubiertos en una época tan remota.
 Yo no consideraría el trabajo como un castigo divino puesto que tenemos que trabajar para vivir. Si todo el mundo concibiera el trabajo como un castigo...¿de donde saldrían los elementos de primera necesidad? Tengamos en cuenta que una persona que nace con “todo hecho”, que no tiene más que pegar dos puñetazos en la mesa para que la esposa, la madre o el hijo le sirvan lo que quiere en bandeja de plata, en resumen, un “viva la Pepa” y “ahí me las traigan todas” que se rige por la ley del mínimo esfuerzo, cualquier circunstancia que le suponga un esfuerzo o un trabajo la va a vivir como un castigo.
 De ahí todas las incomprensiones con las que tropezamos en esas hipótesis teológicas.
 Sin embargo otras doctrinas ocultistas-basadas más en la concepción de fuerzas y de principios que en leyendas-dan otra definición acerca de este mito.
 En primer lugar se detienen a analizar los vocablos con los que se suele denominar a dichas fuerzas.
 Lucifer(de Lux, luz y Ferre, hacer o hacedor): vocablo griego que significa portador o hacedor de la Luz.
 Satán: vocablo hebreo que significa “enemigo, opositor u oponente”.
 El ocultismo toma a Satán y a Lucifer como dos principios opuestos o como dos polos opuestos de un mismo principio. El solve et coagula de los alquimistas entraría dentro de esta categoría.
 Lucifer sería entonces el principio de disolución y Satán el principio de coagulación, congelación o cristalización.
 Lucifer según este punto de vista no sería un ser expulsado por Dios del Paraíso sino una fuerza o una energía que al no lograr o no tener la suficiente capacidad para proyectarse del todo hacia lo alto retrocedió hacia los planos inferiores y ahí se encuentra desempeñando un papel importante en la evolución de los espíritus.
 ¿Quieres decir como un boomerang que regresó a su punto de partida o una pelota que chocó contra un palo y regresó de rebote?, preguntará alguien.
 No exactamente.
 Hemos dicho que el vocablo Satán significa Opositor u Oponente.
 Para una mejor comprensión vamos a poner un ejemplo práctico. Tomaremos un vaso de agua, una cucharada de azufre y un pellizco de limaduras de hierro.
 Vamos a suponer que Dios es el agua, Lucifer el azufre y las limaduras de hierro las almas en evolución.
 El azufre es un producto no soluble en agua. Al echar en el vaso una cucharada del mismo por grande que sea quedará flotando en la superficie.
 Si las limaduras de hierro son vertidas directamente en el agua se hundirán hasta tocar el fondo. Si son vertidas sobre el azufre quedarán también flotando en la superficie sin siquiera sumergirse en el agua.
 Sin embargo si las limaduras de hierro están candentes y queman parte del azufre, este se fundirá permitiendo a las limaduras de hierro llegar al fondo del vaso. Equiparemos a partir de ahí la candencia del hierro con el karma que estamos quemando. El azufre sólido era el karma aún no cumplido que al fundirse y volverse azufre plástico-karma positivo-nos permitió sumergirnos en el agua hasta el fondo del vaso-o fundirnos con la energía vital o esencia cósmica-.
 Vamos a exponer otro ejemplo con el agua(Dios o la Energía Vital o la Energía Cósmica), el aceite(Lucifer) y una planta(los seres vivos del plano material). Las raíces de esta necesitan del agua para mantenerla viva. El aceite que es otro elemento no soluble en agua quedaría flotando en la superficie de la misma. Si las raíces de la planta están en el agua, aunque el tallo esté en el aceite, la planta vivirá. Si las raíces están sumergidas en el aceite la planta morirá.
 Ahora equiparemos al agua con la Energía Vital y a los distintos recipientes(cántaros, botellas, vasos, copas, escudillas, etc.)con las diferentes creencias que le tributan culto, cada una con sus dogmas y a su manera. Equiparemos, por ejemplo, a la copa con el hinduismo. Bebemos una copa de agua para aplacar nuestra sed y es el agua, no la copa, lo que nos mantiene en vida.

EL CIELO Y EL INFIERNO

 Otra cuestión bastante debatida, más que debatida discutida, es el tema del Infierno. ¿Qué es el Infierno?
 La definición que se da es “lugar de sufrimiento”.
 Sin embargo, hemos de tener en cuenta que no es un lugar físico ni material por cuanto los mismos teólogos afirman que no es el cuerpo si no el alma quien sufre. Visto así sería entonces un estado de conciencia. No obstante, si se estudian y se interpretan los pasajes y las escrituras adecuadamente ninguna de ellas habla de estancia eterna en ese plano.
 Veamos el origen de la palabra “infierno”.
 Dicha palabra deriva del vocablo “In Fernus” que significa interior o los estados interiores e inferiores de nuestro propio ser. En otras palabras los rincones ocultos del subconsciente o lo que la sociedad demasiado influida por la moral católica considera que es nuestra parte oscura y negativa. El verso “descendió a los infiernos como Orfeo” podría significar simplemente que realizó un trabajo interno viajando mentalmente a lo más profundo de sí mismo. Dicho descenso a los estados inferiores del ser o “katabasis” no tendría otro objetivo que autoexplorarnos a fin de separar el copo de la avena o realizar una alquimia interior o transmutación de la energía. Un aleccionador ejemplo de ello fue la experiencia llevada a cabo en Vallgorgina por el maestro ocultista Ricard Bru con dos iniciados que viajaron a lo más profundo de sí mismos en estado de hipnosis. Al viajar a nuestros propios estados inferiores-tal como estos sujetos narraron al despertar-descubrimos un verdadero ejército de monstruos poblando nuestra psique. Se trata de nuestros vicios, de nuestros impulsos...son a modo de espinas clavadas que conviene extraer. Es una forma de desnudarnos de nuestra supuesta perfección y liberarnos de un pesado fardo que nos impide avanzar en el camino de la evolución.
¿Pero qué papel juegan en esto Lucifer y Satán?
 Satán que es el arquetipo de la coagulación y la cristalización sería la materia a la que descendemos para purificarnos viviendo las experiencias terrenales que nos permitirán aprender. Sería entonces, el suelo que pisamos, las paredes entre las que residimos, el techo que nos cubre, el hielo que conserva los alimentos que tomamos para que no se pudran ni se pierdan antes de servirnos. En resumen, la misma tierra que nos proporciona los elementos básicos para nuestra existencia. Satán es el elemento tierra.
 Lucifer en oposición a la congelación y cristalización de Satán-palabras textuales de Manuel Seral Coca en su libro “Lucifer, símbolo oculto de la iniciación”, ediciones Fausí, 1987, ver bibliografía estudiada y recomendada-sería el impulso ígneo, sería la disolución de los elementos coagulantes y coagulados, sería el sol que deshace el hielo que conserva los alimentos, pero también el fuego utilizado para la cocción de los mismos. Sería el motor que impulsa nuestra evolución y que nos empuja hacia lo alto. Sería el elemento líquido opuesto a sólido(Satán). Ambos son enemigos, pero cada cual desempeña su papel en el plan cósmico. Lucifer sería el resto de los cuatro elementos de la naturaleza: fuego, aire y agua.
 Profundicemos ahora en el verdadero significado de la palabra “enemigo”.
 Esta palabra no tiene demasiado por no decir nada que ver con el ideal de las conductas sociales. Enemigo no es aquel con el que te llevas mal ni aquel otro que se recrea haciéndote la púa por algún motivo específico o simplemente porque le pasa por las narices. Enemigo quiere decir simplemente incompatible. En el taoísmo encontramos la amistad y la enemistad de ciertos elementos. Por ejemplo tendríamos el fuego que es enemigo de la madera porque la destruye(para transformarla en carbón), y la madera que es amiga del fuego porque lo aviva ayudándole a transmitir su calor. Sin embargo el fuego y el agua son enemigos porque el fuego seca el agua(transformándola en vapor) y el agua sofoca el fuego. Ello dependerá de cual de los dos elementos sea más patente en un momento puntual.
¿Entonces qué ocurre con el resto de demonios denominados Belcebú, Mefistófeles, Asmodeo y un largo etcétera de todos ellos?
 Volviendo a las enseñanzas de Ricard Bru todos estos nombres son arcanos o simbólicos. Mefisto que significa “el que rehuye la luz”-según una pieza teatral de Goethe, el diablo que firmó el pacto con el doctor Fausto-podría ser otra fuerza no compatible con la Energía Vital. El resto, y esto el iniciado y el maestro lo saben muy bien, no son entidades reales sino nombres que el pueblo y la tradición han asignado a fuerzas poco evolucionadas. Si prestamos atención a una lista que algunos demonólogos suelen dar- Abaddón, Adramelech, Ahpuch, Asmodeus, Astaroth, Baalberith, Balaam, Baphomet, Bast, Beelzebub, Behemoth, Dagón, Demogorgón, Fenriz, Gorgo, Ishtar, etc- la mayoría de estos nombres derivan de antiguos cultos paganos, pues a menudo sucede que los dioses representantes de cultos olvidados en el tiempo y en la historia ganan el apelativo de demonios, tal es el caso del ídolo templario Baphomet.
 El papel de estas fuerzas no es otro que el de ayudar al ser humano en su camino de la evolución hasta lograr fusionarse o encontrarse con el ser divino. Es el microcosmos que evoluciona hasta fusionarse con el Macrocosmos.
 Por lo que respecta al hecho de la tentación de Eva en el Paraíso podría tratarse de una mera alusión a cuando el hombre descubrió que era hombre simbolizado por el descubrimiento que la serpiente protagonista sugiere a esta pareja. Cuando el hombre toma consciencia de sí mismo y comienza a desplegar todas las facultades que hasta ese momento ha tenido adormecidas comienza a fabricar utensilios para cazar, descubre la utilidad del fuego para iniciar la cocción de los alimentos o aquellas piezas que se proporciona para poder subsistir. Pero al mismo tiempo se da cuenta de que puede hacer tanto el bien como el mal, o lo que es lo mismo descubre que puede crear y puede destruir y que lo que la mano del hombre ha hecho puede de igual forma destruirlo. Habiendo avanzado en su conocimiento de sí mismo, pero manteniendo aún su mente primitiva y en estado semisalvaje el instinto de supervivencia le llevará, lo mismo que caza y mata para alimentarse, a la aniquilación de su hermano si siente que su territorio está a punto de ser invadido por este y en consecuencia sus derechos están a punto de ser vulnerados. La parte invasora y atacante descubrirá asimismo que puede ganar un terreno que no le corresponde. Y que puede elegir entre la negociación, el convenio y el pacto en su parte positiva y el fraude, la estafa, el soborno, la amenaza y el chantaje en la parte negativa. Todo esto quedará para el futuro y para cuando el hombre entre en su fase civilizada. Mientras tanto los instintos primarios llevados hasta el paroxismo llevarán a esta criatura, como dijimos, a agredir a su hermano, sea para obtener algo de este, sea para impedir que este le quite lo que tiene.

 LUCIFER EN OTRAS CULTURAS.

 Una fusión entre la cultura bantú, el espiritismo, la magia india y algunos elementos rituales cristianos dio origen a la macumba. Más adelante el espiritismo ocultista contenido en esta evolucionó al encontrarse con la filosofía promulgada por una gran figura del espiritismo, Allán Kardec, que dio origen al llamado “espiritismo kardecista”. De esta forma la macumba evolucionó hacia lo que hoy conocemos como “Umbanda”-de “AUM” que significa “Dios” o “dioses” y “Bandha” que significa “congregación “, “grupo” o “asamblea”-y de igual forma a esta otra vertiente suya conocida como “Kimbanda” –de “Ki” y “nganga”-y hace referencia al que “es al mismo tiempo médico, profeta y hechicero”. El umbanda es el culto a los orixás, a los caboclos y a los pretos-velhos y el kimbanda es el culto a los exús y a las pomba giras. Los de la primera línea son respectivamente las divinidades del panteón africano sincretizadas con los santos católicos, los espíritus de los indígenas y los espíritus de antiguos esclavos africanos y los de la segunda línea son entes en estado de evolución cuya tarea consiste en ayudar al ser humano en su camino hacia el ser divino.
 El que parece ser el capitán o jefe de todos ellos-los exús y las pomba giras-recibe el nombre de Exú Rey, Mayoral o Lucifer y coincidiendo con el luciferismo ocultista, se le atribuye el papel de ayudar a los seres humanos en su evolución. Por lo que respecta a las Pomba Giras o su alter ego femenino estas en principio serían almas de mujeres que han vivido realmente en la tierra y han dejado una huella imborrable e impactante en la historia por acciones cometidas o por su peculiar forma de enfrentarse al mundo. Estas son invocadas a menudo en trabajos mágicos derivados de la kimbanda, a menudo aquellos relacionados con cuestiones de amor y sexualidad.


KIMBANDA: MAGIA ROJA Y LUCIFERISMO

 Dentro de este culto denominado Kimbanda se recurre junto a sus ritos ceremoniales destinados a ayudar a los participantes en su evolución espiritual a través de consultas, preguntas y respuestas del mismo modo que se obtienen conocimientos relativos al progreso espiritual en una instructiva reunión espiritista, a los trabajos mágicos destinados a resolver problemas amorosos o sexuales. Con la expresión “magia roja” se definen los trabajos y los rituales que son a menudo de fondo sexual(dado que el color rojo se relaciona con la pasión y la fogosidad, mientras que el rosa se relaciona con la parte romántica y sentimental, de ahí la expresión “magia rosa” para los trabajos mágicos de amor cuyo único objetivo es una unión de carácter sentimental o romántico). A través de estos trabajos se puede decir que se obtiene un beneficio triple, pues la entidad( exú o pomba gira) a la que pedimos ayuda en este sentido evoluciona por el bien que hace a la persona necesitada de esta ayuda y a la vez que damos un empuje a dicha entidad en el plano espiritual recibimos nosotros un empuje similar que nos hace quemar etapas y ganar puntos y de otra banda el beneficio realizado a la persona regresa a nosotros como un efecto boomerang positivo. Cuando por el contrario se solicita a través de estos trabajos un perjuicio para un ser odiado, aparte de que el efecto boomerang regresa a su punto de partida con unas desastrosas consecuencias, retrasamos la evolución de estos entes y a la vez tampoco evolucionamos nosotros.
 Estos rituales es lo que podríamos dar en llamar “luciferismo” o “magia luciferina” ya que mediante estos ritos y las peticiones que realizamos nos relacionamos con el elemento o la fuerza denominada Lucifer-representado por estos entes-para hacer magia en sus diversas variantes. Pomba Gira que es compañera sentimental o alter ego femenino de Exú o de “Lucifer” nos asistirá en nuestros trabajos de magia roja o magia de la pasión y la sexualidad cuyo objetivo es despertar y activar los chakras del amor y del sexo. El tantrismo o yoga del sexo podría ser una versión de lo que hemos dado en llamar “magia roja”.
 Sin embargo, otro vivo ejemplo de lo que estamos llamando “magia luciferina” se traduciría simplemente como “habilidad de negociación”. Podríamos decir que la magia “satánica” sería meramente el instinto de supervivencia y la magia luciferina la búsqueda inteligente del propio beneficio utilizando nuestros propios recursos internos.
 Hagamos asímismo un pequeño estudio del significado de la palabra “Diablo”. Uno de los vocablos de los que tenemos conocimiento es “duplo” que quiere decir “doble” y del que derivó la palabra “Diablo”. Sería pues, el doble, el reflejo, la sombra o la proyección de la Divinidad. Otro vocablo de origen griego es “diabolus” o “diábolo” que significa “fluyendo hacia abajo” como en el caso de la fuerza denominada Lucifer que no logra del todo proyectarse hacia lo alto y en consecuencia fluye en sentido inverso.



SATANISTAS, LUCIFERINOS, ADORADORES DE BELCEBÚ...¿QUÉ PASA CON ELLOS?

 A estas alturas del texto alguien se preguntará a qué tipo de entes adoran entonces estos círculos o grupos organizadores de rituales sangrientos, blasfemantes y profanadores.
 No tienen otro objetivo que dar rienda suelta a sus más bajos instintos o manifestar violentamente un desacuerdo con determinadas instituciones(como la iglesia católica en el caso de los grupos satanistas). Muchos de ellos desarrollan un concepto nazi de la propia humanidad escudándose en supuestas búsquedas de conocimientos esotéricos y ocultistas, a menudo sin diferenciar claramente esoterismo de ocultismo.
 Quién invoca se adentra en lo más profundo de sí mismo de donde pueden surgir los sueños más hermosos o las realidades más espantosas. El supuesto “emperador Lucifer” o “Rey Satán” al que pretenden evocar durante estos ritos no son más que el reflejo de nosotros mismos, una excusa para desinhibirnos o para exaltar instintos sexuales que quizás de otra manera deberíamos tener reprimidos. No existe en realidad lo que comúnmente denominamos “misa negra”(un sacerdote renegado como oficiante, una mujer desnuda como altar, oraciones y símbolos cristianos invertidos y un sacrificio sangriento a menudo de un animal o de un recién nacido) ni lo que más recientemente hemos denominado “misa roja”(rito de sangre destinado a alimentar a entes parásitos o vampíricos para que no pierdan su poder energético). Lo primero es característico de los grupos satanistas y lo segundo lo es de los grupos luciferinos (o así quieren llamarse unos y otros). Solamente existen asesinatos con ribetes ritualísticos que saltan de tanto en tanto a la prensa promoviendo un gran escándalo y poniendo en tela de juicio el verdadero conocimiento ocultista y esotérico. Por más que los grupos autodenominados “luciferinos” aduzcan que adoran a “Lucifer que es el portador de la luz” lo cierto es que de luz sus prácticas les aportan bien poco. Como tampoco tienen reparo en catalogar un rito sangriento típico de ellos con el apelativo de “magia roja”, lo cual se da con tanta frecuencia que los mismos magos conocedores profundos del ocultismo, el esoterismo, el hermetismo y la magia definen la magia roja como magia de sangre, lo mismo que definen luciferismo como adoración a Lucifer. Resumiendo: no existen sectas satánicas ni sectas luciferinas, si no más bien, grupos de mentes manipuladoras y manipulables que imitan rituales nigrománticos y vampíricos vistos en películas de terror pretendiendo mostrarlos como ritos de culto a Satán, Lucifer y tantos nombres como puedan encontrar en viejos tratados de magia evocatoria o como su mente atrofiada por la gran cantidad de droga que a menudo se consume durante sus reuniones sea capaz de concebir. En el mundo de la imaginación todo es válido y todo es posible.
 Y añado que no he pretendido en ningún momento y bajo ninguna circunstancia estar en posesión de la verdad absoluta, si no mostrar otros conceptos existentes sobre esta tan controvertida figura que es Lucifer.



Kiriel.





VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA

“Errare humanum est”


 ¿Quiere ser usted mismo su propio mago o su propio brujo?
 ¿Le gustaría cambiar algunas cosas en usted mismo o en los demás?
 Lo resolvemos absolutamente todo.

 Eslóganes como estos óyense a menudo o argumentan la contraportada de algunos libros sobre tan controvertido tema. Una palabra oída por muchos...pero tan solo escuchada, estudiada y entendida por unos pocos, esta es la magia.
¿Pero dónde podemos encontrar la magia, la verdadera magia digna de tal nombre?
 Libros que tratan dicho tema se venden como rosquillas en el mercado. Pero los diversos aspectos de la magia-o lo que nosotros en nuestro escaso conocimiento de la verdadera religión hemos englobado bajo tal etiqueta-no han pasado de ser al menos para el gran público una serie de corrientes pasajeras. 1987 fue el año de moda para el vudú-o vodún que es como debe decirse, en otro apartado haremos una distinción entre fe vodún y magia vudú-, 1988 fue el año de moda para el satanismo y el período 1989-90 el año de moda de los trabajillos de hechicería y la adivinación o futurología. Puede decirse que 1988 fue el año asolado por una oleada de crímenes rituales y 1989-90 el período del fraude en la adivinación, el ocultismo y la magia blanca. Los crímenes rituales continúan y el fraude en las consultas ocultistas y adivinatorias se da como en ninguna otra profesión. Hacia 1991 salen al mercado diversos libros sobre sectarismo y criminalidad esotérica escritos por periodistas y personas importantes que no siempre las han tenido todas consigo en la realización de sus obras al declarar muchas de estas que habían sido amenazadas mientras investigaban como podían y recopilaban la información que necesitaban. En el año 1992 coincidiendo con la celebración de las olimpiadas llegó la corriente de los cultos sincréticos, los más vistos y oídos entonces, la santería, el candomblé, la macumba, la umbanda, la quimbanda, el batuque y el palo mayombe-y otros tantos nombres que se me escapan, hay tantos cultos que no tenemos tiempo de investigarlos todos-paralelamente con los trabajos de magia típicos de Cuba, Brasil y Venezuela. Ceremonias de candomblé y umbanda-o pequeños muestrarios de las mismas ya que las verdaderas ceremonias suelen quedar para la intimidad y no todo el que lo desea puede acceder a ellas ya sea como participante ya sea como espectador-son el broche de oro y el punto focal de atracción comercial en las ferias esotéricas que tienen lugar durante ese año en diversos puntos del mapa.
 Tropezamos aquí con el aspecto comercial y lucrativo de estos cultos. Libros de santería, candomblé, umbanda y un largo etcétera que en principio se exponen como material adicional importante para estudiantes de psicología, sociología y antropología parecen atraer más la atención de los aficionados al ocultismo y la magia blanca interesados en aprender a hacer trabajos en esa línea que la del sociólogo o el antropólogo. Lo que dichos libros ofrecen como muestrario es interpretado como manual práctico. La razón más patente de ello es que a menudo confundimos “así son las cosas y así se las hemos contado” con “móntatelo así y haz lo que dice el libro”. Quien así procede autodeclarándose “mago o brujo de quimbanda”-esto es un supremo disparate- se encuentra en un callejón sin salida a la hora de enfrentarse a un caso de difícil resolución. Una cosa es hacer trabajos en esta línea y otra muy distinta ser hijo de religión. Yo mismo suelo trabajar en esta línea-quimbanda o para evitar confusiones con ayuda de los exús o las pomba giras a cambio de una pequeñísima ofrenda de mi inspiración-, pero no tengo más remedio que consultar a mi maestro-el Maestro Santiago-cuando la cosa se complica para indicarme él como debo proceder al respecto. Del mismo modo que no voy a promulgar a los cuatro vientos ser un superdotado cuando no lo soy no me voy a autotitular santero sin haber sido iniciado en la santería, aunque guste de recurrir a menudo a esta línea como recurro a otras tantas según lo que creo conveniente y oportuno(alguien me acusará de ser demasiado saltarín y de hacer un cóctel con todo, pero yo manifiesto que la intención con la que haces una cosa es lo elemental, qué se le va a hacer...).
 Pero volvamos a la definición de magia. Según los diccionarios es el arte de producir cambios en el curso natural de los hechos y puede ser positivo o negativo según la intención con que se lleva a cabo. Esta es la definición más general que se puede encontrar. Sin embargo a la hora de etiquetar y clasificar nos encontramos con verdaderas disparidades de criterios. Veámoslo.
 Una antigua clasificación divide a la magia en magia blanca o teurgia y magia negra o goecia. Son prácticamente lo mismo. El aspecto del rito goético no se diferencia demasiado del rito teúrgico salvo en el objetivo que se persigue y en las fuerzas con las que se opera en cada caso. La Teurgia es la parte de la magia que trata de las influencias de las fuerzas benéficas, del modo de evocarlas y de todas las obras presididas por ideas de amor y de bondad mientras que la Goecia es la otra parte experimental de la magia en lo referente a los poderes y facultades que el ser humano desarrolla por determinados métodos y el dominio que llega a ejercer sobre las entidades del mundo astral. La palabra Teurgia deriva del vocablo “creación de dioses” y la palabra Goecia del vocablo “goe” que significa aullido. La primera se relaciona con las fuerzas naturales y celestes y la segunda con las fuerzas terrestres e infernales(o como muchos ocultistas que operan con esta disciplina prefieren llamarlas “fuerzas poco evolucionadas o en estado evolutivo”).
 La diferencia entre Teurgia y Goecia es la misma que se suele hacer en el sincretismo afrobrasileño entre Umbanda y Quimbanda. Podríamos decir que la magia negra o magia provocadora del mal es práctica prohibida en la religión Umbanda mientras que es práctica permitida en la religión Quimbanda, aunque en este caso es un recurso en legítima defensa y no la base de esta creencia como erróneamente se suele interpretar. Aunque se suele afirmar que para ser teúrgico hay que ser casto, sabio y sobrio y para ser goético hay que ser libertino, pedante y destemplado, la realidad no es exactamente así, pues incluso el ocultista más espiritualmente elevado puede verse obligado a realizar rituales de magia negra o goecia para destruir los efectos de una operación negativa producida del mismo modo, igual que la moderna homeopatía provoca los síntomas de la enfermedad a tratar para poder combatirla con el tratamiento correspondiente. Sin embargo, operar con la magia goecia de forma positiva y gobernando sobre las entidades no evolucionadas en lugar de dejarse dominar por estas requiere una fuerte entereza de carácter y una larga experiencia por lo que es mejor abstenerse de este tipo de prácticas. El ocultista que se decide por esta opción deberá cuidar su equipo y su material de estudio y trabajo y no abandonar nada a su suerte dado que se dirige a entidades negativas muy potentes de las que debe saber protegerse y defenderse. Los consejos que al respecto dieron Cipriano el Mago , Jonás Sulfurino, Cornelius Agrippa y otros en sus tratados de magia evocatoria nunca serán demasiados ni descabellados. Ellos vivieron sus experiencias en sus labores investigadoras y sabían muy bien lo que decían. De hecho estamos rodeados de fuerzas tanto  positivas como negativas y a la hora de trabajar con estas o frente a estas toda precaución es poca.
 Pero la magia blanca, aunque resulta aparentemente mucho menos peligrosa tiene, lo mismo que la magia negra, el defecto de comercializarse. Y como todo aquello que se comercializa, se chulea y se prostituye. Reza un dicho que el Diablo es el mejor amigo de la Iglesia pues durante siglos no ha dejado de sostener su negocio. Otro tanto ocurre en este mundillo: tanto monta, monta tanto. En lo que a negocios se refiere, la magia blanca es enemiga acérrima de la magia negra, pero necesita de esta para poder seguir ejerciendo si cuenta con la obtención de sustanciosas ganancias. Algunas personas dedicadas a deshacer trabajos de magia negra cobran por ello cantidades astronómicas. Y lo mismo que otro dicho afirmó que si Dios no existiera sería necesario inventarlo, si la persona a la que van a ayudar-que puede simplemente estar atravesando una mala época debido a un exceso de trabajo, de responsabilidades y de preocupaciones-no estuviera realmente afectada por ningún trabajo mágico y ni tan siquiera por una mala influencia, el operador buscaría unas u otras cosas por donde fuera posible para justificar su cobro masivo.
 Si se recomienda, no obstante, recurrir a la magia blanca para resolver determinados problemas, es porque las cargas kármicas si las hubiera serían mucho menores que en el caso de utilizar la magia negra, pero conviene saber que no debemos ir hacia ninguna de ellas con los ojos vendados, pues a veces tampoco sabemos si la ayuda que pretendemos dar a una persona concreta es realmente deseada por esta ni si al beneficiar su salud o abrirle sus caminos solo le estamos perjudicando gravemente o únicamente le estamos ayudando para luego hundirle todavía más.
 Es bastante común oír a muchos autores de libros sobre cómo hacer rituales y trabajos de magia definir a la Quimbanda como “la magia negra brasileña”. No obstante otros autores tienen buen cuidado de señalar que los exús y las pomba giras(las entidades de este culto)pueden producir el bien y el mal, ello depende de lo que se les pida.
 Otras definiciones tan interesantes como selectivas que he podido encontrar es que podríamos englobar a la Umbanda en la “línea blanca” y a la Quimbanda en las líneas “blanca, roja y negra”. La Umbanda participa de la concepción abstracta del Universo y la Quimbanda opera en un plano más concreto, esta es la verdadera diferencia entre ambas. El Umbanda se centra en las ceremonias de culto y en las obras de caridad y la Quimbanda recurre junto con sus ceremonias de devoción a los trabajos mágicos para fines diversos. En otras palabras Umbanda sería la religión y Quimbanda sería la religión mas la magia. La religión contempla una postura más humilde, pues se trata de recibir no de exigir. La magia es más activa y su clave es querer y obligar. O sea religión, espiritualidad y teología pura para la Umbanda y religión, magia blanca, magia roja y magia negra para la Quimbanda. Estudiamos el significado de estas más adelante.
 Junto al culto conocido como Santería se desarrolló otro similar de distinta procedencia denominado Palomonte del cual nace otra rama denominada Palo Mayombe. Es ciertamente asombroso encontrar en muchos libros sobre santería un capítulo dedicado al Palo Mayombe el cual describe con colores sombríos y siniestros. Sin embargo hemos de tener en cuenta que muchos de estos libros han sido escritos por antropólogos que a su vez habían bebido de otras fuentes como libros más antiguos sobre este mismo tema. Sin embargo libros antiguos y modernos tienen este punto en común: todos o casi todos fueron escritos por antropólogos, sociólogos y periodistas y todo es “dije lo que me dijeron”, pues ciertas enseñanzas permanecen en el secreto, son transmitidas de generación en generación o de maestro a discípulo bajo un juramento de silencio y no son recogidas por ningún libro ni por ningún reportaje.
 Sin embargo, aunque algunos iniciados a quienes nunca les gustó enseñar lo que saben hayan podido decir a los investigadores únicamente lo que les conviniera, algo nos han aportado y algo de luz nos han arrojado(el público no se podía mantener tampoco en la ignorancia). Del Palomonte conocemos dos vertientes o versiones: la cristiana y la judía de las que derivó el nombre que se le da al famoso caldero utilizado en sus ceremonias rituales. El Mayombe cristiano-llamémosle así-es la fusión de este culto con las enseñanzas cristianas, mientras que el Mayombe judío no admitió la transculturización y se mantuvo en su vertiente antigua. Con respecto al caldero cristiano y al caldero judío la diferencia entre ambos es que mientras que el primero es bautizado tras su preparación por estar destinado exclusivamente a fines benéficos el segundo no se bautiza dado que está destinado a trabajos tanto positivos como negativos. Igual que la diferencia entre el caldo salado y el caldo soso; no es que sea soso es que le hemos dejado de echar la sal. Con respecto a la magia de la Atlántida se dijo que no cabe asociarla con la magia negra porque solo un necio puede hacerlo, pero también sería una necedad dar por sentado que los atlantes no la practicaran. De la misma manera no se puede etiquetar bajo el apelativo de magia negra los rituales de vudú, macumba, umbanda, pagelanza, catimbó, etc. lo cual no quiere decir que-salvo alguna excepción-esta práctica no tuviera lugar en lugares y momentos puntuales.
 “Dentro de la magia negra o brujería están encuadrados los aquelarres, las misas negras, el vudú, el candomblé, la macumba, los maleficios o malfetrías y las maldiciones”, afirmaciones a nuestro parecer tan precipitadas como descalificadoras. Y se supone que el autor de dicho libro-un libro sobre magia y brujería-en el que aparecen tales afirmaciones es un estudioso de la historia y de la antropología cultural, pues firma su obra con el nombre “Profesor Fulano de Tal”. Y como los lectores somos ignorantes mientras no se nos ocurre profundizar en todas y cada una de las materias ahí mencionadas si se nos antojara escribir un artículo o hacer un trabajo de fin de curso sobre todo ello no haríamos si no repetir como loritos lo que hemos leído en el libro de un supuesto experto. Así es como se distorsionan los mensajes.
 Vayamos ahora al aspecto ético de la magia. Por más nombres y colores que encontremos en varios libros sobre el tema no es el color ni el nombre del trabajo realizado lo que lo convierte en bueno o malo. Una definición popular-que ha permitido poner muchas etiquetas y que los que encuentran en la “magia blanca” una forma de ganarse la vida tuvieran “trabajos” que hacer y cobrar una sustanciosa cantidad por ello-es que la magia negra en contraposición a la magia blanca que procura toda clase de bienes a uno mismo o a su prójimo desinteresadamente, es siempre perjudicial y suele  obrar con afán lucrativo y comercial. También se suelen hacer subdivisiones de la magia blanca en magia verde y en magia roja como partes de la misma. La magia roja es la magia del amor y la magia verde es la magia encontrada en el reino vegetal y en la madre naturaleza, es decir, es el arte de aprovechar las fuerzas halladas en la naturaleza para hacer magia blanca.
 Los detractores de la Quimbanda, por citar un ejemplo, acusan a esta de utilizar seres demoníacos en sus trabajos que pueden estar encaminados hacia un bien y no obstante hay quien prende una vela torcida ante la imagen de un santo para pedir un castigo o una venganza, práctica bastante común en algunos pueblos norteños.
 Como decíamos al principio, un ritual en sí no es bueno ni malo. Solo las personas que lo organizan o participan en él abrigan buenas o malas intenciones. Por más que se afirme que antes de proceder debemos escuchar a nuestro corazón y a nuestra conciencia, uno y otra nos pueden inducir fácilmente a error si la información que han recibido y los conocimientos que tienen asimilados son erróneos. De modo que saber cuando estamos haciendo realmente magia blanca-positiva-o magia negra-negativa-es realmente más difícil de lo que parece a simple vista. Y si por el aspecto o el “color” del ritual nos guiáramos cabe decir que cuando estamos haciendo magia blanca estamos haciendo al mismo tiempo magia negra dado que el ritual de la buena suerte para una persona puede significar una catástrofe para otra. Y si de los efectos del ritual depende tenemos tres cuartos de lo mismo, pues lo que puede ser beneficioso para una persona puede hacer mucho daño a otra.
 En resumen ¿dónde está la verdadera magia negra y dónde está la verdadera magia blanca? Una pregunta difícil de responder. La magia es la magia y solo la mente de la persona por medio de cuyo poder actúa la puede convertir en negra o en blanca.
 ¿Cómo podemos evitar cometer un error? En primer lugar olvídate de decir “yo quiero no tener ningún fallo” porque nadie es perfecto en esta vida. Somos humanos y siempre hay condicionantes y situaciones que nos sobrepasan. Nos equivocaremos cincuenta veces, nos corregiremos cincuenta y una y otras cincuenta y dos tropezaremos con la misma piedra. Nacemos burros y tontos pero el mundo y la vida son las escuelas en las que aprendemos todos los días algo. Si tras haber realizado un trabajo mágico de cualquier índole llega a nuestros oídos que hemos causado un perjuicio involuntario extraeremos de ello una lección y procuraremos no volver a errar en un futuro. Una fórmula que parece ser una garantía de no contrariar la voluntad del Todopoderoso es el famoso “hágase tu voluntad” y seguramente de ahí la importancia de rezar tres padrenuestros tras prender un velón de petición, pues además de pedir un bien para una persona tenemos en cuenta las leyes o mandatos divinos y dirigimos la oración hacia las Tres Personas al realizarla por tres veces. Estamos llamando a “Las Tres Personas” para que sean testigos del trabajo que estamos haciendo y al mismo tiempo estamos dejando terreno abierto a la voluntad de las leyes divinas y kármicas. Todo esto se puede resumir en una sola sugerencia: magia blanca es “hágase tu voluntad” y magia negra es “hágase mi voluntad”, pues en este segundo caso por noble que pueda ser el propósito el peticionario está manifestando pretender configurar un destino a su antojo, es decir, como si quisiera hacer el bien sin contar con el Padre. Un alumno disciplinado no levantaría por su cuenta y riesgo un castigo a otro alumno, pues sabe que no puede atribuirse facultades que nadie le ha conferido y que si se atreviera a contradecir la consigna del profesor de mantener el castigo hasta una determinada hora, saldría él perdiendo por cómplice. Si el motivo del castigo ha sido una falta grave, el “bueno” de su compañero no haría si no ayudarle a ser más faltón todavía.
 Por esa misma razón yo no solo pido permiso al Universo a través de los oráculos si no que lo pienso detenidamente cuando un cliente me pide, por ejemplo, un trabajo para obtener una pensión vitalicia. ¿La necesita realmente o solo quiere cobrar del Estado y tumbarse a la bartola? Otro tanto sucede cuando me piden una unión amorosa. ¿Se trata de un padre o un marido que ha abandonado a su familia por culpa de una amante o de un amante que la señora en cuestión quiere procurarse para darle a su marido en los morros?¿Esta pareja se ha roto por un mal trabajo o tratándose de adolescentes solo ha sido una pelea o una falta de madurez y seguridad de uno de ellos o de ambos? Este otro chico que está pendiente de unos exámenes me pide un trabajo para aprobarlos. ¿Le transmitiremos fuerza para que rinda mejor en sus estudios o lo que quiere es que un suspenso se le transforme en un sobresaliente por arte de birlibirloque? Esta otra señora se queja de un mal de ojo echado por una vecina. ¿Existe realmente ese mal de ojo y verdaderamente es esa vecina la responsable o es esta misma persona la que gusta de escucharse demasiado, de asumir conciencia de víctima y de culpar a alguien de su propia falta de diligencia para mejorar aquello que no le responde?
 Muchas son las preguntas y las reflexiones que nos acompañan y muy pocas las respuestas que podemos obtener. De ahí la importancia de preguntar al Universo consultando los oráculos. Y no basta decir de boca “he pedido permiso” si no que este se nos ha de haber concedido realmente. Cuando los oráculos no responden o dan un no como respuesta no es porque el Universo quiera fastidiarnos la vida; posiblemente esta persona a la que deseamos ayudar esté cumpliendo un período kármico. O probablemente estemos en peligro nosotros mismos si nos aventuramos a realizar ese trabajo. Tratemos entonces de tranquilizar a nuestro cliente y ayudarle a que sea fuerte y en lugar de querer cambiar la situación de la noche a la mañana aguante un poco, pues dentro de un tiempo volveremos a consultar los oráculos y posiblemente la respuesta sea otra.
 Esto es lo que podríamos considerar como LA VERDADERA MAGIA BLANCA.
 Sin embargo, el operador que recurre con facilidad a los trabajos de magia negra o el que hace de esta su profesión no es tan reflexivo ni tan dubitativo, cosa que él interpreta como que no se anda con contemplaciones. Es una persona de acción y no necesita que nadie-ni que se trate de un dios o ser superior-apruebe o descalifique sus decisiones y su moral puesto que es responsable de sus propios actos. Otro de sus planteamientos es que representa a la persona que le emplea o le encarga este trabajo y que si su cliente quiere que le haga un poco de magia en tanto que este último se “retrate” se lava las manos. Y no hablamos ya del antes mencionado ocultista que ha de operar con este tipo de rituales-insistimos en que no es el aspecto o el nombre del ritual lo que lo hace bueno o malo-cuando está implicada una fuerza mayor, si no al que promulga estar tocando el mundo espiritual y se recrea en el aspecto promocional y lucrativo del mundo mágico y ocultista. A este nivel ni hay tanto ocultismo ni se cultiva el verdadero ocultismo interior.
 A la persona que realiza estos trabajos poco le importa realmente el resultado de los mismos. Hará un servicio a alguien y cobrará por ello. Un pretexto para cobrar sustanciosas cantidades por sus servicios es que la magia blanca es barata y lenta-para ellos el cliente que ha recurrido a la magia blanca y lo que este quiere está a la boca de Dios y de una absurda e incomprensible ley universal que encadena a las personas, cosa que los enemigos de la magia blanca rechazan a toda costa-y la magia negra es cara pero rápida y efectiva. Y si algo tiene el cliente que le conecta con este vividor sin escrúpulos es que el primero pagaría un delito al precio que fuera y el segundo aceptaría de buen grado cualquier clase de trabajo sucio. Eso tienen en común, se hallan ambos en la misma situación. Para ellos no existe la recompensa ni el castigo más allá de la muerte si no aquí y ahora, pues es en la tierra y en lo presente donde conocemos nuestros placeres y nuestros tormentos.
 Una de las prácticas más socorridas en este tipo de trabajos es el famoso y con frecuencia mal interpretado “muñeco vudú”. Ya hemos establecido antes una diferencia entre la fe y el ocultismo y vamos a separar “fe vodún” de “magia vudú” que es la práctica real de estos operadores.
 La fe vodún no es otra cosa que un culto originario de las Antillas y trasladado a Haití y Estados Unidos durante la época de la trata de esclavos. Sus sacerdotes y sacerdotisas llamados respectivamente “Houngan” y “Mambo” o según la zona en la que se practican estas ceremonias “Papalois” y “Mamalois” se conectan con unas divinidades residentes en la naturaleza y en los elementos de la misma a través de un ritual consistente en una frenética danza con música de percusión y sacrificios de aves de corral a través de la cual se llega a una especie de trance que da a entender que se ha establecido el contacto con el plano espiritual. El vodún haitiano está dividido en dos corrientes : rada(procedente de la ciudad de Arada de Dahomey) y petro(del nombre de quien lo fundó llamado Don Pedro o Dom Pedre). Los oficiantes o sacerdotes de este culto son expertos en medicina natural y conocen fórmulas y remedios curativos para enfermedades diversas que aplican paralelamente con sus poderes de sanación. Su clarividencia y su comunicación con el Universo a través de los oráculos que ellos saben bien interpretar les permite actuar como buenos consejeros humanos y espirituales.
 A continuación os hablaré de la magia vudú. No es más que una forma más de hacer magia. Un hechizo-un procedimiento sencillo que a veces puede pasar inadvertido-de santería, vudú, candomblé, macumba y quimbanda puede ser realizado por cualquiera esté o no iniciado en estas líneas. Un velón ofrecido a la entidad apta para la petición que se desee formular puede ser más que suficiente para resolver un problema de poco calibre. Un rito o una ceremonia que es un conjunto de pasos es mucho más elaborado y no cualquiera puede actuar como oficiante ya que se requiere una sólida preparación y un largo y costoso aprendizaje y no todo el mundo está preparado de igual manera. Sin embargo, las circunstancias varían mucho dentro de lo que es la magia vudú pese a que el operador no ha de descuidarse. De hecho, la realización de una ceremonia a pequeña escala de magia vudú no precisa de tantos requerimientos dado que es una sabiduría popular al alcance de todos. Los enseres del ritual no son difíciles ni imposibles de conseguir y lo que habilitaremos como templo-por denominarlo de alguna manera-puede ser una habitación vacía o nuestro taller casero de carpintería ya no utilizado como tal. Lo importante es disponer de un espacio en el que moverse libremente y poder trabajar con tranquilidad. Los elementos más utilizados en este tipo de magia son los muñecos que pueden destinarse a la consecución de un fin benévolo(sanear la economía, unión de parejas, sanación de enfermedades o eliminación de malos vicios). Y no siempre hundir alfileres en un muñeco parecido a la persona que nos interesa puede provocarle una enfermedad o una desgracia. Hundiendo el alfiler en la parte del cuerpo afectada podemos sanar a la persona con lo cual convertiríamos la magia con muñecos en una especie de acupuntura a distancia. Esto simplemente es un ninot. La intención con que dicha operación se lleva a cabo es lo que puede convertir al “muñeco vudú” en el enemigo público número uno o en el simpático amigo que nos puede ayudar.
 Vayamos ahora a los colores de la magia o mejor dicho a como la pintamos según las circunstancias. Dijimos que partes de la magia blanca son la magia verde y la magia roja. La primera aprovecha las fuerzas halladas en la naturaleza para hacer magia blanca y la segunda es la magia del amor y de la pasión. Los trabajos de magia amorosa en la línea quimbanda entrarían dentro de esta categoría. Si solicitamos a la Pomba Gira un enlace matrimonial y dichos miembros de la pareja estaban destinados el uno al otro por ley divina lo que hemos hecho es una “magia roja de magia blanca”.
 Si por el contrario solicitamos una unión motivada solamente por el afán de posesividad y actuamos con total desconsideración hacia los verdaderos deseos de la persona que deseamos atraer convirtiéndola en nuestra esclava de por vida-o por lo menos hasta que nos cansemos y nos seduzca otra-y aniquilando su personalidad lo que hemos hecho es una “magia roja de magia negra”.
 En resumen: la magia roja forma parte de la magia blanca cuando no hay coacción en la unión amorosa y siempre que hayan sido los mismos miembros de la pareja quienes hayan estado interesados en que así se proceda. Pero pasa a ser parte de la magia negra cuando lo que se ha hecho ha sido un “amarre” para, como la misma palabra lo define, tener amarrada y cautiva a la persona que nos gusta sin pararnos a pensar si le gustamos nosotros a ella.
 Para otros autores clásicos como Alberto el Grande la magia roja no sería más que la alquimia o la búsqueda de la piedra filosofal.
 Para otros, entre ellos, muchos magos blancos y ocultistas de hoy, la magia roja no es más que la magia negra o goecia acompañada de derramamientos de sangre, es decir, que durante sus rituales se acostumbra a verter sangre para obtener aquello que se desea. En dicha denominación están englobadas la goecia(evocación de las fuerzas terrestres)la necromancia o nigromancia(adivinación mediante la evocación de los difuntos) y los ritos vampíricos destinados a satisfacer a unas fuerzas involucionadas negativas y absorbentes llamadas “sombras muertas”. Sin embargo quienes así la definen suelen reducirla al término del satanismo, mejor llamado, sectarismo satánico que es el ámbito en el que se realizan rituales de sangre, desenfreno sexual, envenenamiento, muerte y violencia en nombre de un supuesto ente infernal o príncipe de las tinieblas.
 Otra definición bastante profunda de la magia blanca es “el arte de obrar prodigios con la intención de ser de ayuda a nuestro prójimo y así aproximarnos a nuestro ángel de la guarda” mientras que simplemente “el arte de obrar prodigios con la intención de ayudar a nuestro prójimo” sin agregar lo del contacto con el ángel de la guarda podría calificarse como “magia gris”. Si la intención es servir al prójimo la podríamos definir como “magia gris positiva”. Si gracias a esta ayudamos realmente a nuestro prójimo y en consecuencia evolucionamos espiritualmente nos acercaremos igualmente a nuestro ángel de la guarda con lo cual la magia gris positiva se transforma en magia blanca.
Pero ¿a quién ayudamos?¿Cómo le ayudamos?
Son los principios básicos a tener en cuenta antes de argumentar que estamos haciendo magia blanca. Antes de empezar nos quedaremos con el calificativo de magia gris para comprobar en qué sentido evoluciona. No podremos catalogarlo como magia blanca hasta tener la seguridad de que todos hemos salido ganando con ello. Digamos mejor que nadie ha salido perdiendo.
 Me explicaré. Cuando deseamos algo por absurdo que nos parezca alguien tiene que tenerlo y apreciarlo, no surge de la nada porque la nada no puede originar ninguna cosa. Llevamos a cabo un ritual para obtener dinero. Estamos aún en lo que es magia gris. El ritual da resultado y nos llega el dinero. Sigue siendo magia gris. Una vez obtenido el deseo pueden suceder muchas cosas:
1)      Cuando el dinero por poner un ejemplo nos llega es por medios naturales. Puede que hayamos encontrado un empleo bien remunerado y a nuestro jefe le haya gustado nuestra manera de trabajar, nuestro comportamiento y nuestra disciplina, de forma que querrá contar con nuestros servicios el mayor tiempo posible. Nadie estaba en ese puesto antes que nosotros, al contrario, este señor necesitaba gente para trabajar y nos ha encontrado a nosotros. Estamos produciendo para la sociedad y para el mercado, lo cual equivale a ser constructivo. Ahora sí, esto que hemos hecho es magia blanca. Es un paso más en la evolución.
2)      Durante el ritual hemos pedido una cantidad de dinero de diez mil euros. Un familiar nuestro fallece en un accidente de carretera y nos deja a nosotros en su testamento precisamente diez mil euros. Hemos logrado lo que deseábamos pero ¿a costa de qué? A costa de provocar la muerte de una persona que no debía aún abandonar ese mundo. La magia gris ha involucionado y ha oscurecido hasta transformarse en magia negra.

 Alguien dirá “bueno ¿y qué? Lo tengo que es lo que importa”. Cierto, pero también es cierto que toda acción compromete al karma. Y todo mal ejecutado aunque sea de forma no intencionada tiene sus repercusiones y quien ha recurrido a este deberá pagar un precio muy alto en la presente vida o en la siguiente. No culpemos a nadie de nuestras desgracias porque ha sido elección nuestra. Nadie dispara a sus propios pies a menos que tenga problemas mentales.
 Y no es posible alegar que puesto que no existen la magia blanca ni la magia negra y ni tan siquiera el bien y el mal absolutos uno puede jugar a su antojo, acaparar desmesuradamente beneficios para sí y congratularse en pisotear a su vecino que no le merece consideración ninguna. No es eso. El bien y el mal existen, aunque son muy distintos de cómo los vemos y no os hablo ya de determinados códigos sociales establecidos en determinadas culturas. Existen el principio de creación y el principio de destrucción, el principio de emisión y el principio de absorción. Podemos crear un karma y podemos quemar un karma ya existente. Por consiguiente toda acción que tienda a limitar la propia evolución y/ o la de los demás es negativa porque conduce a un retroceso.
 Este es el verdadero significado de la palabra Mal con M mayúscula. No confundir este con el Mal necesario. Cuando unas barracas abandonadas, afectadas y ya no habitables son destruidas se está haciendo un Mal(principio de destrucción), pero en este caso es un Mal necesario, pues se abrirá un espacio sobre el que edificar otras viviendas(principio de creación) con mayor salubridad, más seguras y más habitables. Ha sido un Mal que ha dado paso a un Bien que no es otra cosa que el principio de creación. Sin embargo, cuando estas mismas barracas-estén o no en condiciones de ser habitadas-son destruidas para crear sobre este espacio un campo de exterminio se trata de un Mal que trae más Mal y cada vez más Mal, pues se destruye para poder seguir destruyendo, se han destruido unas barracas con el fin de destruir vidas. Y se destruirán las vidas de quienes podían haber evitado la construcción de ese campo de exterminio para que nada se interponga en la continuidad de la destrucción de vidas.
 Conviene señalar que muchas personas que aceptan la teoría del karma sin llegar a comprenderla del todo bien se vuelven duras de corazón y recurren a ella como excusa para no hacer nada por los demás. Este hecho también es común en el mundo de la magia blanca o negra, unos se pasan y otros no llegan. Podemos encontrarnos con el caso del mago al que le llega un cliente angustiado por una tremenda racha de mala suerte, lleno de enfermedades, con pocos y limitados recursos económicos, abandonado por su familia, su pareja, sus amigos, dando tumbos de un lugar a otro sin trabajo y sin dinero, que no encuentra la paz en ninguna parte...y lo primero que se le ocurre pensar a este mago es: “si esta persona está hoy por hoy sufriendo debe ser por algo que hizo en otra vida y hoy está recogiendo lo que ha sembrado, o sea que se lo ha merecido. Entonces ¿por qué he de socorrerlo?”
 Es cierto, alguien aducirá que yo mismo dije al principio-que no es porque lo diga yo ni porque sean palabras mías-que la verdadera magia blanca aconsejaba respetar los períodos kármicos y las experiencias que debía vivir cada persona durante su paso por la vida para no demorar ni limitar su evolución, pero esto no significa en absoluto que no debas hacer nada por los demás. Lo que no podemos hacer es el “trabajo” a no ser que el Universo nos de permiso y nos exprese su conformidad absoluta a través de los oráculos o los medios a nuestro alcance. Podemos ser un soporte para esta persona a fin de que logre superar la prueba que está pasando o podemos ayudarla de otra manera. A través de unas cartas de ángeles por ejemplo podemos orientarle sobre una misión evolutiva que podría desempeñar para canjear su karma y poder una vez que este ha sido vencido y la Ley Divina le ha perdonado hacerle un ritual de abrecaminos para mejorar su suerte y otros que necesite para resolver los problemas que le han estado aquejando. Si dicha persona merece que se le ayude es porque se lo merece ya y al ayudarla también nos ayudamos a nosotros mismos. Por muchos motivos el destino puso a esta persona en nuestro camino: para que nosotros le ayudáramos, porque teníamos con ella una deuda en relación a un mal que voluntaria o involuntariamente le hicimos en otra vida y debíamos reparar de alguna manera en la presente o bien porque le habíamos negado nuestra ayuda en otra vida y otra vez el Universo nos ofrecía la oportunidad-obligatoria-de venir juntos a este mundo para que, esta vez sí, le ayudásemos.
 Es decir, la ley del karma no nos dispensa en modo alguno de ayudar a nuestros semejantes de la misma manera que no nos impide ayudarnos a nosotros mismos.
 Las oraciones o peticiones rituales al Universo que mi Maestro me enseña para ayudar a mis clientes y amigos a sanar y a resolver sus problemas incluyen entre otras palabras que se han de pronunciar: “lo justiciero lo ajusticiador lo justicia...”. Comido por la curiosidad y deseoso de profundizar en esos términos decidí telefonearle y preguntarle:
-¿Qué son el justiciero y el ajusticiador?
-El justiciero es el que valora nuestras acciones y dicta la sentencia-respondió Santiago, mi Maestro.-Y el ajusticiador es el brazo ejecutor de la sentencia. Pero su actuación no es inmediata si no que tiene lugar justo en el momento que solo el Universo sabe. Y no existe ningún ejecutor en el Universo. SE EJECUTA UNO MISMO...

Kiriel.







TABLA DE EQUIVALENCIAS ENTRE DEIDADES DE CULTOS SINCRÉTICOS



Vodún                         
Candomblé                  
Santería                      
Umbanda                    
LEGBA                       
EXÚ                            
 ELEGGUÁ                  
EXÚ                            
LA SIRENE                
IEMOJÁ                      
YEMAYA                    
IEMANJA                   
DAMBALLAH            
OXALÁ                       
ORULA                        
OXALÁ                      
OGOUN                      
OGÛM                         
OGUN                          
OGUM                        
SHANGO                      
XANGÔ                       
CHANGÓ                    
XANGÓ                      
LOCO                          
OXÔCE                       
OSAÍN                         
OXOSSI                      
ERZULIE                      
OXUM                        
OCHUN                       
OXUM                         





TABLA DE COMPARACIONES 1



CANDOMBLÉ            
SANTERÍA                
MAGIA                     
VODÚN                      
UMBANDA                  
MAYOMBE CRISTIANO               
TEURGIA                   
ARADA                       
QUIMBANDA               
MAYOMBE JUDÍO   
GOECIA                    
PETRO                         



TABLA DE COMPARACIONES 2



MAGIA BLANCA    
MAGIA ROJA            
MAGIA VERDE        
MAGIA AMOR MAGIA NATURAL  
TEURGIA                  
MAGIA NEGRA        
MAGIA ROJA MAGIA VERDE        
MAGIA SANGRE BEBEDIZOS              
GOECIA                   


TABLA DE COMPARACIONES 3



MACUMBA                           
ESPIRITISMO                        
ANIMISMO                           
UMBANDA                            
KARDECISMO                      
RELIGIÓN                             
QUIMBANDA                       
LUCIFERISMO                      
MAGIA                                    
CANDOMBLÉ                       
TRADICIÓN                          
RELIGIÓN                              
SANTERÍA                             
TRADICIÓN                           
RELIGIÓN                              
VODÚN                                  
TRADICIÓN                           
RELIGIÓN                              
PALO MAYOMBE                
TRADICIÓN                           
ANIMISMO                            





TABLA DE COMPARACIONES 4


MACUMBA                                                   
HECHICERÍA Y ESPIRITISMO                   
UMBANDA                                                    
CEREMONIAS DE DEVOCIÓN, OBRAS DE CARIDAD, SANACIÓN Y MEDIUMNISMO                                           
QUIMBANDA                                                
MAGIA BLANCA, ROJA   Y NEGRA, TRABAJOS PARA TODO FIN                     
SANTERÍA                                                      
MAGIA BLANCA, VERDE, ROJA Y NEGRA, TRABAJOS PARA TODO FIN     
MAYOMBE CRISTIANO                            
MAGIA BLANCA, MAGIA ROJA Y MAGIA VERDE                                             
MAYOMBE  JUDÍO                                      
MAGIA BLANCA, MAGIA ROJA, MAGIA VERDE Y MAGIA NEGRA
VODÚN ARADA                                           
SANACIÓN, CLARIVIDENCIA, TRATAMIENTOS NATURALES Y CEREMONIAS DE DEVOCIÓN Y AGRADECIMIENTO                                     
VODÚN PETRO                                            
CEREMONIAS CON TRANCES MUY VIOLENTOS, HECHICERÍA                        
       




TABLA DE DIVISIONES



UMBANDA                                                   
UMBANDA DE CÁRITAS Y UMBANDA CRUZADA CON  RITUAL BATUQUE        
QUIMBANDA                                               
QUIMBANDA EVOLUTIVA Y QUIMBANDA INVOLUTIVA                      
MAGIA ROJA                                                
MAGIA SANGRIENTA, MAGIA DE LA PASIÓN Y ALQUIMIA                                 
MAGIA BLANCA                                        
TEURGIA O ALTA MAGIA, MAGIA NATURAL O BAJA MAGIA                                                          
MAGIA NEGRA                                            
SUMISIÓN A LAS FUERZAS INVOLUTIVAS, CONTROL Y PODER SOBRE ESTAS                                              
MAGIA VERDE                                             
MAGIA DE LA NATURALEZA, FILTROS DE AMOR                                                      
MAGIA VUDÚ POSITIVA                              
RITUALES DE PETICIÓN, MAGIA CON MUÑECOS                                                    
MAGIA VUDÚ NEGATIVA
RITUALES DE PETICIÓN, MAGIA CON MUÑECOS                                                    
GOECIA                                                         
DOMINIO DE LOS PODERES TERRESTRES, ENTREGA A LOS MISMOS                                                        


 

 

TABLA DE EQUIVALENCIAS



ESPIRITISMO OCULTISTA                         
MACUMBA                                                    
ESPIRITISMO KARDECISTA                      
UMBANDA                                                    
ROSACRUCISMO Y MASONERÍA            
CANDOMBLÉ                                                
ROSACRUCISMO Y MASONERÍA            
SANTERÍA                                                      
ROCACRUCISMO Y MASONERÍA            
VODÚN                                                           
BRUJERÍA(WICCA)                                      
PALO MAYOMBE Y QUIMBANDA           



TABLA DE COMPARACIÓN DE ASPECTOS DESVIRTUADOS DEL OCULTISMO Y DE LA MAGIA

SECTARISMO SATÁNICO                          
Rituales sacrílegos, profanación de iglesias y cementerios, consumo desmedido de drogas y alcohol, sexo libre y desenfreno.                       
TERRORISMO REVOLUCIONARIO. ABIERTO A TODO EL QUE DESEE INCORPORARSE. MIEMBROS CON ALGUNA TARA FÍSICA Y/ O PSÍQUICA  
SECTARISMO LUCIFERINO                      
Ceremonias de Alta Magia, meditación colectiva, transmisión de conocimientos secretos, prácticas de yoga y tantrismo, consumo dosificado de drogas.                        
NAZISMO, DISCRIMINACIÓN SOCIAL Y DOCTRINA DE EXTREMA DERECHA. RESERVADO Y SELECTIVO. MIEMBROS DE ALTO NIVEL SOCIAL E INTELECTUAL                                               



















VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 2

 Magia, brujería, hechicería...palabras muy pronunciadas pero en cuyo sentido han profundizado única y realmente unos pocos. Un punto en común de todas ellas es que están encaminadas a producir algún cambio o si se quiere transformación o transmutación. Sin embargo no todas ellas operan de la misma manera.
 ¿Qué es la magia? Como ya expliqué en la primera parte de este trabajo es el arte de producir una variación en el curso natural de los hechos pudiendo ser esta positiva o negativa dependiendo de la voluntad y la intención del operador. La brujería es el culto precristiano a la madre naturaleza llamada a veces Diana, a veces Mari, etc. Sus rituales pueden también estar encaminados a producir algún cambio en el curso natural de los hechos, siendo de desear que este siempre sea positivo ya que el máximo bien es una de las reglas de oro de esta creencia. “Haz lo que quieras mientras no perjudiques”, es un mandamiento característico de la misma. Y, por último, la hechicería es la interferencia en el destino de una persona pudiendo ser esta positiva o negativa.
 Resulta demasiado fácil confundir la hechicería negativa y la magia negra con la brujería la mayor parte de las veces por el mero hecho de haber utilizado a menudo el apelativo “brujo” como insulto y sin que esto tenga nada que ver con que la persona a la que va dirigido se dedique o no a las artes esotéricas, si no que cobra el mismo sentido que llamar “catalán” o “judío” al tacaño, “andaluz” al vago y “chino” al engañado(todavía hoy se utiliza el término “judío” como insulto en ciertos círculos). La persona que profiere dicho insulto no está pensando en la brujería ni en la magia si no en las tácticas solapadas que ha utilizado la persona para arruinarle si ha sido el caso o en el mal carácter de esta(dado que los brujos cobraron en la Edad Media fama de taimados y perversos).
 Sin embargo diversos libros que hablan sobre maleficios y como disolverlos llaman a estos “trabajos de brujería” reservando para este ancestral culto el nombre de Wicca o magia céltica. Se han llegado a meter todas las canicas en un mismo saco sin diferenciar unas disciplinas de otras. Otro tanto ha ocurrido con la mal utilizada palabra “vudú” que tanta polémica suele generar. Una palabra muchas veces oída y pocas entendida como esta ha dado lugar a múltiples confusiones.
 ¿En qué pensamos primero al oír las palabras “brujería” y “vudú”? Para la primera palabra en las figurillas de cera ensartadas con alfileres, en laboratorios cargados de brebajes, mejunjes y pócimas, en fiestas macabras en parajes siniestros y, como no, en la clásica mujer de edad de rostro crispado y arrugado, pelo canoso y nariz ganchuda. Y para la segunda palabra en el famoso muñeco tosco y grotesco ensartado de alfileres, en el mal de ojo, en las maldiciones, en la gallina sacrificada durante los ritos y en los famosos zombis. Tan poco se ha profundizado en un tema digno de estudios sociológicos y antropológicos como lo son estos cultos que perdiéndonos por los cerros de Úbeda hemos llegado a imaginar un rito celebrado por personas de color con sacrificios sangrientos capaces de hacer salir de la tierra un amasijo de carne putrefacta capaz de cometer los más execrables crímenes, tal es la mala interpretación del fenómeno zombi. Pero la realidad dista mucho de lo que el cine de terror ofrece al público amante del morbo.
 En mi anterior trabajo sobre este tema señalé la diferencia entre “magia vudú” y “fe vodún”. La primera se centra en los rituales mágicos a pequeña escala para fines diversos y está abierta y al alcance de todos mientras que la segunda está reservada-como toda enseñanza esotérica, hermética o religiosa-a un determinado tipo de gente. Los sacerdotes de este culto han accedido a él tras una dura iniciación y un largo período de pruebas y de aprendizaje y no cualquiera puede oficiar una ceremonia de culto-distinta de un ritual o de un sortilegio-dado que no todas las personas están preparadas de igual manera. Un ritual-dado que los hay de diversas clases-es relativamente sencillo mientras que una ceremonia es un conjunto de rituales o pasos por lo que se presenta bastante complicada de llevar a cabo. El ritual forma parte de la ceremonia cuando la hay y la ceremonia ha de contener y englobar rituales. Los saludos y las reverencias con los que se da principio a la ceremonia son los rituales que forman parte de esta.
 De todo este conjunto de pasos lo equivocados que están quienes afirman gratuitamente que “les han hecho un vudú”. De hecho, la mayoría ignoran en qué consiste el vudú. El famoso muñeco es a la fe vodún lo que la figurilla de cera llamada “voult”(del francés “envouter” que quiere decir “hechizar”)cuando representa al hombre o “dágida” cuando representa a la mujer al culto de la brujería(nos refiramos al culto a la madre naturaleza o a la parte desvirtuada del mismo conocido como “culto a Satán” con sus aquelarres y sus “misas negras”, también les daremos un pequeño repaso aclaratorio). Se oyen estas expresiones con demasiada frecuencia: “alguien me está nombrando”, “me tienen echado un mal de ojo”, “me hacen brujería” y un largo etcétera. ¡Cuanta confusión se crea y cómo se malinterpretan determinados conceptos!
 Ahora, te digo una cosa: si algo no te va bien o no entiendes lo que te está pasando cúlpate a ti mismo por tu falta de atención o por no escuchar recomendaciones y no al vudú, ni a la brujería ni a la macumba. Ni siquiera des la culpa a un supuesto karma negativo si te has encontrado en la mesa un plato de lentejas y hubieras preferido caviar y langosta, por citar un ejemplo. Cuando es el hambre lo que aprieta el paladar agradece cualquier alimento. Cuando este mismo paladar es tan selecto es porque ha confundido con el hambre las ganas de comer.
 Con estos planteamientos queremos llegar a que no es tan fácil hacer un rito vudú, una misa negra o un trabajo de hechicería dado que no todo el mundo está cualificado para ello ni está preparado de la misma manera como expusimos al hablar de la fe vodún y otras sabidurías similares. El miedo y nuestra propia falta de empuje para luchar es lo que provoca que seamos nosotros mismos quienes generemos nuestra propia energía negativa. Recuerdo el caso de una clienta mía que decía estar afectada por un mal trabajo de santería(no me refiero a que “le hicieron una santería” que sería lo mismo que decir que “le hicieron un vudú” si no a que se trataba de una operación mágica negativa basada en los aspectos negativos de la santería) debido a que todo le marchaba bastante mal y que deseaba a todas luces conquistar a un señor del que había sido amante y el cual había decidido regresar junto a su mujer y sus hijos. En lugar de aceptar la situación y resignarse pretendía atraer el amor de esa persona mediante un artificio.
 Veamos el perfil de esta persona, lo cual nos proporcionará una pista de como los efectos de un trabajo mágico se hacen patentes en nuestra vida para lo cual precisan de un terreno fértil y abonado. Se trataba de una mujer que reunía estas condiciones: ególatra porque gustaba de escucharse demasiado a sí misma, dejada porque por no guisar comía cualquier cosa, no se arreglaba, no salía de su casa, iba del sillón a la cama y de la cama al sillón y así pasaba la vida, y comodona porque me encargaba trabajillos de magia blanca-que luego no me pagaba escudándose en números rojos en la libreta y amenazas de embargo-para fines diversos: vender un piso, atraer el amor de ese hombre, amansar a su hija que era un puro nervio y ya no recuerdo cuántas peticiones o cuantos caprichos más porque lo quería todo y ella misma se perdía en un “potaje” total que ya no sabía ni lo que quería. Y de la misma manera que generamos nuestra propia energía negativa ante la posibilidad de un trabajo negativo, la clave de la sanación interna está en generar nuestra propia energía positiva con la realización de un trabajo mágico semejante, pero de signo contrario. Muchos de mis clientes que han sanado su interior sin más o han logrado resolver un sinnúmero de problemas que les habían estado aquejando habían sido ellos mismos capaces de realizar su propia limpieza del hogar, su propio destrabe contra maleficios y malas influencias, sus propios abrecaminos o sus propias uniones amorosas. Yo me limité a consultar los oráculos para determinar qué hacer en cada caso y ellos fueron los que ejecutaron por recomendación mía todo lo que era preciso hacer.
 Por el contrario, todos los esfuerzos que por salir de su incómoda situación realizó esta buena señora a la que nos acabamos de referir fueron tumbarse, cruzarse de brazos, chillar y llorar hasta que alguien acudiera en su ayuda. Yo fui quien trabajó y dedicó un poco de tiempo a meditar y a invocar a la diosa Iemanjá-apta para peticiones de amor, maternidad y unión familiar-para que le ayudara a encontrar una persona que supiera darle el amor que necesitaba, mientras ella se limitó a desesperarse y a quejarse de todo y de todos sin hacer nada práctico. La gota que colmó el vaso es que mi amiga y compañera espiritual Carmen-que es el punto de encuentro entre mis clientes y yo-vio a la susodicha mujer por el barrio y esta le giró la cara o corrió a esconderse. No supimos a partir de entonces nada más de ella. No la volvimos a ver ni por casualidad ni ella nos llamó para nada. La experiencia nos demuestra que este tipo de personas suelen olvidarse de quien en su día les proporcionó la ayuda que necesitaban.
 Así pues, estas son las condiciones para que nuestro propio campo se convierta en un terreno fértil para este tipo de influencias: egolatría, comodonería, falta de iniciativa, encaprichamiento, dependencia e inseguridad. Así como lo semejante atrae a lo semejante, lo negativo atrae a lo negativo. Si en magia blanca y en abrecaminos se efectúa un ritual con una moneda o un billete porque “dinero llama dinero”, en magia negra y trabajos potencialmente peligrosos se sacrifica un animal, aparte de que porque la sangre al ser el elemento donde palpita la vida misma resulta un importante aporte de energías en el contexto de un ritual-la magia del poder de la sangre-, porque “una muerte atrae sin duda alguna otra muerte”. Si durante un ritual de magia blanca es recomendable un estado anímico positivo capaz de generar energías de ese mismo calibre, durante un ritual de magia negra se aconseja una ira y un desdén calculados e intensos de forma que la energía negativa creada por estados emocionales y sentimientos negativos como la agresividad, la violencia y el odio, cristalice y se concrete teniendo repercusiones desastrosas en el campo de la víctima. Y los estados emocionales de esta última por su parte han de encontrarse igualmente en estado negativo aunque de forma más pasiva: la comodidad que le impida encontrarle sentido al esfuerzo y a la lucha, el miedo que le bloquee y le impida actuar, la sensiblería que le acobarde y el complejo de inferioridad que le haga sufrir una desvalorización como persona.
 Todo lo expuesto hasta ahora no son más que la simiente o el abono para que los efectos de la magia negra florezcan y estos estados emocionales son principalmente los causantes de lo que nos empeñamos en considerar como “mala suerte” o “mala racha”. Y no siempre cabe atribuir todo lo malo que nos pasa-pues como afirmó un maestro “la vida no es lo que nos pasa si no la forma en que asimilamos lo que nos pasa”-a un ritual o un trabajo efectuado en nuestra contra. Si alguna vez encuentras en la puerta de tu casa o en sus alrededores objetos de estas características:

-muñecos atravesados por alfileres
-restos de velas negras consumidas
-pequeños féretros negros de madera
-coronas y flores de cementerio
-cadáveres de pájaros adornados con cintas de colores
-pequeños jarroncillos o cantarillos de color marrón o negro conteniendo sangre(o agua con pintura roja)
-signos invertidos pintados en el dintel de tu puerta
 ...o cualquier elemento tan grotesco y tan estrambótico como los hasta ahora citados...

 Es que alguien te los deja ahí aposta o te los envía para que tengas miedo.
 Normalmente suele tratarse de alguien que te conoce.¿Cómo si no iba a saber dónde,  cuando y por dónde atacarte?
 Porque todo ello que se podría atribuir a un trabajo mágico no es tal trabajo. No pasa de ser una decoración macabra para impresionarte. Y es lo único tangible que pueden conseguir. Son obras de simples aficionados que controlan bastante bien el tema del género macabro en lo que a cine y literatura de terror se refiere, aunque lo único que controlan es eso que no las fuerzas del Universo y de la naturaleza. Están aburridos y asqueados de la vida y se divierten a costa de los miedosos y de los timoratos de mala fe. ¡El mejor exorcismo contra este tipo de “magos negros” es darles un buen susto y verás como no marean más!
 Los verdaderos trabajos o rituales precisan de muchos pasos aparte de los ya mentados.

Organización y dirección


 El operador deberá planificar la ejecución de su ritual o de su trabajo previa petición de su cliente si trabaja por cuenta ajena o previo interés propio si ha sido su decisión. Deberá reunir a todo el equipo si dispone de personal o de asistentes, cada uno de los cuales desempeñará dentro del contexto del ritual la función que le corresponda o el papel que tenga asignado acorde a su categoría o rango de antigüedad en la orden o en el grupo de trabajo.

Administración


 Es necesario obtener y reunir los enseres del ritual los cuales estarán purificados con el rito correspondiente y activados para que desempeñen un papel relevante. Mientras no se estén utilizando deberán permanecer en un lugar seguro lejos de las miradas y el contacto físico de las personas no iniciadas en el arte. Los objetos habrán de haber sido consagrados mediante un complicado ceremonial y conservados en perfectas condiciones hasta el momento de ser utilizados

Gestión del tiempo


 Se deberá elegir el momento astrológico adecuado para operar. Las operaciones relacionadas con el dinero y las finanzas se realizarán bajo los auspicios de Saturno y en las horas de este, los rituales de pasión bajo las influencias de Marte, los rituales destinados a la meditación y a la apertura de canales bajo las influencias de la Luna, etc. Será además conveniente tener en cuenta las fases de la Luna dado que potencia o no potencia dependiendo de en cual de estas se encuentre. Los rituales destinados a aumentar o a mejorar tendrán lugar durante el cuarto creciente mientras que aquellos otros rituales destinados a desterrar o a erradicar(un mal vicio, un maleficio o una enfermedad)tendrán lugar durante el cuarto menguante. Días antes deberán quedar a una cierta hora el operador y los demás asistentes si los tiene para la realización del ritual si debe durar unas horas para poder prepararlo y tenerlo todo dispuesto con el tiempo necesario y más a ser posible.

Vestuario


 Nada depende del azar ni es puro capricho. El operador y el resto del grupo deberán vestir ropajes especiales y tener muy en cuenta los colores de los mismos. Si utiliza el color negro para la túnica deberá tener en cuenta que el negro es absorbente y es adecuado en operaciones de limpiezas energéticas. Será conveniente que bajo la túnica negra tanto el operador como sus ayudantes vistan túnicas blancas de lino ya que el blanco es un color que despide y puede contrarrestar los efectos de las posibles energías negativas absorbidas tras el ritual de extracción y destierro de las mismas.

Protecciones


 He aquí otro elemento imprescindible en toda liturgia. El grupo de trabajo deberá hallarse protegido de las energías circulantes para lo cual dispondrá de sus talismanes preparados y consagrados con el ritual correspondiente, y activados de manera adecuada. El área de trabajo deberá disponer de un círculo trazado en el suelo además de sus signos cabalísticos con un diámetro bastante amplio para contener al operador y a sus ayudantes, los cuales deberán penetrar dentro del círculo antes del inicio de la ceremonia y no salir nadie de él hasta el final de la misma so pena de exposición a posibles peligros astrales.

 Preliminares del ritual

  La estancia o lugar de trabajo deberá purificarse mediante abluciones y fumigaciones antes de empezar cualquier trabajo para disipar posibles influencias externas de manera que la cámara quede lista para recibir la visita de las fuerzas o entes evocados a los cuales se les va a solicitar su ayuda para lo cual es indispensable que no haya interferencias de ninguna clase.

Invocación, evocación y conjuro


 He aquí la ejecución del verdadero ceremonial. Primeramente el operador se dirigirá a las potencias a las cuales solicita su ayuda para ejecutar su trabajo y para la obtención del correspondiente resultado. Seguidamente las evocará, es decir, solicitará su presencia tangible para tomar contacto con ellas y manifestarle su deseo o el fin con que las ha llamado. Y una vez se haya establecido la comunicación entre las fuerzas ocultas y el operador este les dará su mandato, es decir, las conjurará a trabajar para él.

Cierre del ritual


 Este factor es importante. No se debe dar por acabado un trabajo mientras no esté totalmente acabado. Anunciar que se quiere cerrar un ritual o un trabajo no quiere decir que ya esté cerrado por lo que tanto el operador como sus asistentes no deberán precipitarse a abandonar el círculo sino permanecer en él hasta tener la total seguridad de que las potencias evocadas han regresado a su punto de procedencia. No hay que olvidar dar las gracias a la entidad suprema, mostrarle respeto y entonces desactivar los instrumentos utilizados y devolverlos a sus respectivos lugares.

 Antón Szandor LaVey muestra en su “Biblia Satánica” estos pasos que abren la primera página de su “Ritual Satánico”:
1)      Durante todo el rito excepto cuando otras posiciones son específicamente indicadas, la persona   que realiza el rito permanece de cara al altar y al símbolo de Bafomet.
2)      De ser posible, el altar estará contra la pared del lado Oeste.
3)      Si los ritos son realizados por una sola persona, no se requiere la presencia del sacerdote. Cuando hay más de una persona implicada en la ceremonia, una de ellas debe actuar como sacerdote. En un rito privado, la persona que lo practica debe seguir las instrucciones del sacerdote.
4)      Cada vez que las palabras “¡Shemhamphorash!” y “¡Viva Satán!” sean pronunciadas por la persona que actúa como sacerdote, los otros participantes las repetirán con él. El gong sonará después de que todos los participantes hayan respondido a “¡Viva Satán!”.
5)      Está prohibido conversar(excepto dentro del contexto de la ceremonia)y fumar una vez que la campanilla haya sonado al principio. Solo podrá hacerse después de que vuelva a sonar al final del rito.
6)      El libro de Belial contiene los principios de la magia y el rito satánicos. Antes de intentar realizar los ritos que figuran en el libro de Leviatán es absolutamente imprescindible que leas y comprendas todo el libro de Belial. Hasta que no lo hayas hecho así no podrás esperar obtener el menor éxito de los trece pasos que voy a exponer acto seguido.

 Trece pasos, como acaba de decir, componen todo el contexto del ritual satánico. Y la realización de todos y cada uno de estos no es tan fácil y realizable como puede parecer a simple vista de pájaro. Muchos requerimientos son los que se precisa, amén de una total concentración en la ceremonia, los pasos a dar bastante importantes y  el objetivo de la misma.
 Oficiar un ritual satánico o una misa negra es paralelo a la ejecución de cualquier otro tipo de liturgia con la diferencia del objetivo buscado, por supuesto. Durante un ritual tanto blanco como negro varias mentes se congregan al objeto de unificar sus fuerzas. Es lo que se suele denominar “magia del pensamiento” dado que el pensamiento es creativo. Los objetos rituales preparados y consagrados bajo ciertas reglas indispensables, la decoración y la ambientación de la estancia contribuyen a potenciar el poder de la mente que trabaja en pos de una meta. La acción mental del operador mas la congregación será lo que materializará su deseo siendo todo lo demás, tal y como acabamos de decir, un soporte o un medio físico o visual para su potenciación.

Conexión entre el operador y el sujeto

 Para que el trabajo o el ritual surta su efecto es imprescindible que se establezca un puente de conexión o un arco energético entre el operador y el sujeto. Cuando se recomienda hundir alfileres o clavos en una figurilla que represente al sujeto es porque la figurilla es una referencia visual de este. El operador dispone de una referencia o soporte sobre el que actuar. Pero precisa también de una referencia física como mechones de cabello de la víctima y en caso de ser difícil conseguirlos de una prenda íntima o de un objeto personal(puede servir por ejemplo un cronómetro o una estilográfica)que se incorpora a la figurilla. Si el poder mental del operador es muy potente no precisará de más simulacros de la víctima que su nombre y sus datos personales. El verdadero mago no necesita rituales ni referencias y el solo poder de su mente puede crear o destruir.

El poder de la palabra


 He aquí otro factor primordial de todo ritual: el poder del verbo. La palabra y la voz producen vibraciones en el astral las cuales se manifestarán de acuerdo con el pensamiento que las ha acompañado. La petición, la oración y la afirmación o “mantram” que acompañan a toda operación mágica positiva o negativa actuarán como la clave o llave para que la energía se ponga en movimiento y actúe de acuerdo con el objetivo a conseguir.

Colocación del trabajo mágico


 Como fase final del ritual el objeto que actuará de réplica del trabajo mágico realizado se depositará en el lugar más oculto de la vivienda de la víctima de manera que pueda germinar activando totalmente su acción negativa. De ahí lo erróneo que resulta dejar objetos atemorizadores a la vista de la víctima. Si esta llega a fallecer con la sola visión del macabro ritual, los médicos podrán atribuirlo fácilmente a un fallo cardíaco causado por una fuerte emoción. Pero ni habrá habido tal magia ni se habrá tratado de ningún trabajo.

 Con estos pasos aquí descritos hemos querido mostrar el sinsentido de temer a los trabajos mágicos. Una buena defensa contra estos es precisamente el valor, es decir, el no temerlos y el no darles tanta importancia. Amenazar sabemos amenazar todos y las amenazas son como las ofensas: no ofende quien quiere si no quien puede; no puede dañar la ofensa en sí misma si no la persona dependiendo del valor que la víctima le dé como persona.

El mal de ojo


 Y hablando del poder vibracional de la palabra y de los malos efectos de las ofensas-siempre que, insistimos, tomemos algo que nos dicen en un momento puntual como una ofensa-llegamos al famoso y temido mal de ojo ya que suele tener cierto paralelismo con todo ello.
 El mal de ojo, según lo definen los diccionarios, no es otra cosa que una influencia que una persona ejerce sobre otra mirándola de cierto modo y especialmente sobre los niños. Los niños son más vulnerables a este tipo de influencias debido a que su cerebro actúa como una esponja que lo absorbe todo y puede generar energías positivas o negativas dependiendo de la información que recoge en su frecuencia y el material que su psiquis almacena. Los síntomas del mal de ojo en los niños de corta edad se caracterizan por fiebres, vómitos y llantos sin motivo aparente. En un adulto se manifiestan en dificultades para rendir en su profesión, torpezas inexplicables, insomnio, debilidad, pesadillas frecuentes-a menudo relativas a la persona que le está causando el mal-y fracasos en todo lo que se propone. La misma vivienda puede ser carnaza para este tipo de ataques. Un mal de ojo o un ataque psíquico pueden provocar que se descalcifique la pared, que haya goteras en el techo o que falle alguna estructura.
 Pero ¿qué es realmente lo que hace patente y concreto este ataque? Por feroz o profunda que pueda ser una mirada esta jamás tiene más poder destructivo que el que generamos nosotros mismos desde nuestro propio interior exteriorizándolo con sus repercusiones en el plano físico y mental.
 Bastante común es escuchar a muchos dependientes cuyo negocio no les acaba de rendir que un mal de ojo echado por la competencia les está quitando clientela. No se les puede dar totalmente la razón a menos que estén seguros de haber dado los pasos a dar antes de embarcarse en el montaje de su tienda. Muchas de estas supuestas víctimas de un mal de ojo han creado su negocio con las expectativas de hacerse ricos en tres meses y son las típicas personas que en cuanto no se hicieran ricos en tres meses o menos no perderían un segundo en dar el cerrojazo. Lo más probable es que aquel otro negocio del que sospechan un ataque no les esté atacando realmente y ni tan siquiera esté pensando en ellos para nada. Será más positivo recapacitar sobre qué tácticas han utilizado ellos para vender, cuando y donde se han instalado, si contaban o no con un buen patrimonio inicial...si otro comercio consigue más clientela que el nuestro ello nos debería servir como ejemplo y aprendizaje para mejorar nuestras propias habilidades, no como una fuente de rivalidades, envidias y revanchas.
 ¿Qué queremos dar a entender con ello? Nada tan sencillo como la importancia del amor y del respeto al prójimo. ¿Qué es más constructivo de decir?¿”Explícame cómo lo haces para aprender de ti” sin enfados ni reproches o “eres un tramposo” descargando toda nuestra frustración por los fracasos sobre esa persona? En primer lugar muchas personas que se sienten víctimas de un mal de ojo es porque tienen una chispa que les conecta de alguna manera con las malas frecuencias vibratorias. En segundo lugar son casos muy raros en el sentido de que no se dan con demasiada frecuencia, pues la mayoría de estos son malestares y pequeños desarreglos internos debido a agitación, estrés, inseguridad y sobrecarga de responsabilidades.

¿QUIÉN DA MÁS?

 El hecho de que muchos amantes desesperados soliciten un “vudú” para obtener un amor y de que muchos estadios deportivos, especialmente en Brasil, soliciten una “macumba” para repeler los hechizos del equipo contrario han dado a estas creencias un carácter mágico relacionándolo única y exclusivamente con las prácticas ocultistas. El vodún y la macumba-evolucionada y dividida en lo que hoy conocemos como Umbanda y Kimbanda-han perdido a los ojos de los curiosos su carácter teológico, cultural y antropológico y han acabado reducidos a un simple festín ocultista. Se danza frenéticamente con fondo de música de percusión y se invoca a las deidades que acabarán poseyendo a los participantes al ritual. O eso es lo que el grupo querrá mostrar al público sobre todo si se trata únicamente de demostraciones ofrecidas como atracción turística. El público atraído por las novedades pintorescas y las curiosidades exóticas nada más en el aspecto comercial de estas creencias que no en la esencia espiritual y teológica de las mismas. Si florecen las tiendas dedicadas a la venta de polvos, inciensos, velas, tierra de cementerio-eso dicen-y muñecas para las prácticas de magia vudú blanca o negra es debido al gran negocio que llegan a hacer los oportunistas conocedores de estas culturas sin profundizar gran cosa en la verdadera esencia de las mismas. Y quien se molesta en investigar de todos ellos con el único fin de sacar provecho decide hacerse pasar por un iniciado o sacerdote de estos cultos. Por más que impresionen a su cliente con sus vestimentas, la decoración pintoresca de su gabinete y un sinfín de artimañas con las que dejarnos anonadados no son verdaderos practicantes del vodún y de la macumba. Una y otra cosa no pasan de ser para ellos una especie de juguete que se han encontrado y por medio del cual obtendrán-o así lo esperan- sustanciosas ganancias. Esta es la vasta diferencia existente entre un verdadero iniciado y un “quiero y no puedo”. El primero sabe que la iniciación es secreta y no puede comentar con nadie nada sobre la energía que recibe. El segundo necesita propagar una iniciación inventada a los cuatro vientos para hacerse valer como mago o brujo.
 Se dice que la persona que practica con éxito la magia es un brujo o una bruja lo cual no es cierto porque el brujo es el iniciado en la religión precristiana llamada Wicca-el culto pagano a la Madre Naturaleza-mientras que la magia es un arte que puede ser aprendido y dominado fácilmente por cualquiera-de ahí que las tiendas ocultistas vendan equipos de ritual con los enseres ya reunidos para que el cliente pueda realizar por sí mismo sus propios trabajos mágicos-. La definición más exacta de tal persona sería mago. Pero como dijimos al principio se han metido todas las canicas en un mismo saco. Nos hemos empeñado en clasificar, dividir, subdividir, nombrar y renombrar para luego plegar todo junto como si fuera todo lo mismo o todas las líneas fueran compatibles entre sí. Ciertos artículos sobre dichos temas habían englobado, por ejemplo, el candomblé dentro del umbanda al decir que “al igual que en el cristianismo encontramos varias denominaciones dentro de la misma fe-claretianos, mercedarios, opusdeístas, católicos, jesuitas, dominicos, salesianos-dentro de la Umbanda existen otras tendencias-candomblé, por ejemplo-dos de las cuales-la quimbanda y el batuque-difieren ostensiblemente de la primera. Pese a que muchos quimbandeiros y batuqueiros argumentan que están practicando la umbanda, personalmente considero que son una modalidad del satanismo. Baste decir que la quimbanda es de línea cruzada y el batuque de línea pesada. En otras palabras y para que nos entendamos: magia blanca-negra para la primera y magia negra-negra para la segunda”(Antonio Lloreda,  art. Sincretismo religioso en Brasil, revista Karma 7, nº 221, abril 1991). Una visión particular o una opinión personal no equivale a una definición exacta, pues el prisma del antropólogo difiere mucho de lo que los iniciados viven y conocen. Y no todo lo que el iniciado en estos saberes llegue a conocer podrá compartirlo con cualquiera. Ciertos trabajos y ciertas iniciaciones permanecen y permanecerán en el secreto de manera indefinida.
 Sin embargo, algo importante a tener en cuenta y para evitar confusiones es que el candomblé son los ritos yorubas de Brasil o lo que es lo mismo está basado en la teogonía yoruba de Nigeria mientras que la macumba procede de los pueblos africanos del congo. La fusión de esta última con la creencia indígena tupí-guaraní, el espiritismo kardecista, el hinduismo y las influencias cristiano-católicas de los catequizadores y los misioneros dio lugar a este culto evolucionado conocido como Umbanda.
 En cuanto a la definición de todas las demás disciplinas conviene señalar que la magia, blanca o negra, es una cosa, la hechicería otra, el satanismo otra, la demonología otra, la brujería otra, el espiritismo otra, la alquimia otra...disciplinas que cada una de ellas aisladamente llenaría por sí sola un grueso tomo dedicado al tema.
 Nombres, colores, figuras...creemos conocerlo todo, pero cuantas más cosas llegamos a conocer, más nos damos cuenta de lo poco que profundizamos en los detalles. Y cuántas veces el miedo vence a la razón y nos es más fácil culpar a un supuesto mal de ojo o a un supuesta mala influencia-ya le llamemos “un vudú”, “una magia negra”,”una brujería”, “una macumba”, “una enviación de santo” o “un bilongo”-de nuestros fracasos que a nuestra propia falta de medida y planificación. Todo por no querer reconocer nuestras propias imperfecciones inherentes al ser humano.
 Kiriel.


VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 3

 Es sorprendente lo extenso que a veces sin proponérnoslo puede llegar a hacerse un determinado tema.
 Uno quiere escribir un documento tipo redacción, unas pocas palabras de nada y al final acaba incluso sacando capítulos de un mismo tema. Sin saber cómo llegamos ya al capítulo 3 de “VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA” estudiando en esta ocasión, un tema específico en un lugar concreto que parece ser el máximo exponente de las prácticas mágicas y del espiritismo en los cuales la mayoría de la población, especialmente la población autóctona, cree firmemente como iremos viendo. La fe en los poderes sanadores y curativos de figuras de relieve como el médium Chico Xavier y José o Zé Arigó más conocido como “el cirujano del chuchillo herrumbroso” y las prácticas terapéuticas de estos han sido moneda de curso corriente en Brasil por lo menos en la época durante la que Pedro Mc Gregor escribió su obra “The Moon and the two mountains” título que traducido al español es “La Luna y las dos montañas” aunque la editorial Roca de México publicó dicha obra bajo el título “el espiritismo brasileño” en 1975, obra en la que nos hemos inspirado para escribir parte de esta redacción y que recomendamos a las personas interesadas en temas de candomblé, umbanda y similares por el especial estudio que dedica a estos cultos en capítulos aparte. Empezaremos con un pequeño estudio acerca del Brasil mágico para más adelante describir algunos fenómenos relacionados con el mismo. También daremos un somero repaso a las diferencias entre candomblé, macumba, umbanda y quimbanda.
 Brasil se define como el máximo exponente de las prácticas mágicas y brujeriles, así como de los contactos espiritualistas y espiritistas. Pese a la extensión del cristianismo, abundan ciertos ritos y creencias heredados de sus antepasados y ciertos cultos fundados mucho tiempo atrás que, al igual que el catolicismo que se halla dividido en diversas ramas-salesianos, claretianos, mercedarios, franciscanos, etc.-, las cuales también se hallan a su vez subdivididas, se han dividido en diversas líneas, como la umbanda con sus variantes de kimbanda y batuque. De la difusión de estas creencias ha nacido el interés por los trabajos para diversos propósitos, de ahí que en algunas tiendas y mercados puedan hallarse elementos de ritual-collares, vestidos litúrgicos, inciensos, jabones de los santos orixás , velas y velones de propósito, licores de ritual, e incluso el famoso aceite dendé utilizado en las ceremonias-y esté al alcance de todo el mundo el poder realizar este tipo de operaciones mágicas.
 La magia es utilizada en la mayoría del mundo empresarial, artístico y deportivo. Un ejemplo de ello son los campos de fútbol donde se desea garantizar el triunfo de un equipo con la realización de una macumba antes del partido.
 El Pai de santo-sacerdote que dirige la macumba-es convocado por los aficionados para ayudar a un equipo. Con los ojos semicerrados y cubierto por una casulla muy limpia, se dirige a sus guías tendido en el suelo de su terreiro o espacio espiritual. Centenas de velas rodean al operador, ya que son las encargadas de repeler a las fuerzas del mal o los hechizos del equipo rival.
 Existe dentro de estas creencias el lado oscuro y negativo, es decir, la magia negra utilizada con fines vengativos y egoístas, donde se da el caldo de cultivo para la estafa como en ninguna otra parte. Junto al mago blanco que realiza una macumba para exorcizar una vivienda, un local o un negocio, encontramos al mago negro(o al menos, eso hace creer a todos)que realiza un trabajo semejante, pero con intenciones totalmente opuestas y a cambio de una retribución muy fuerte. Se duda de si son verdaderos iniciados que buscan el camino de la evolución espiritual, pues su perfil más bien corresponde al de un ser materialista y sin escrúpulos que aceptaría de buen grado cualquier clase de trabajo sucio. Si su actividad lucrativa no le diera el fruto apetecido, no se lo pensaría dos veces antes de abandonarla para probar suerte con otro tipo de negocio.
 El hecho de que los artículos de ritual estén a la venta de cara al público ha facilitado que quien desee ejecutar la magia en esta línea, pero no pueda o no desee unirse a un grupo ceremonial ni pasar por la costosa y dura fase de la iniciación, pueda instalar su pequeño templo en su casa. De hecho, cualquier persona puede obtener la protección de los exús y orixás sin necesidad de estar iniciado. No se precisa ninguna consagración especial, ni tan siquiera un pacto con ellos, sino tan solo un servicio a cambio de una ofrenda en prueba de agradecimiento. Lo único que habrá que tener en cuenta será limpiar la estancia de vibraciones indeseadas y llevar las ropas y las protecciones adecuadas para poder operar con seguridad.
 Llegados a este punto, vemos que lo que por un lado es una ventaja cuando se desea ayudar a los demás con la adivinación y la magia blanca, es por otro una imprudencia cuando los móviles de una operación mágica no son otros que el interés, el odio o la envidia. Es ciertamente lamentable que estas armas de doble filo estén tan al alcance de seres sin escrúpulos que buscan la propia satisfacción a costa del derrumbamiento ajeno.
 Frases oídas a menudo en Brasil, son más  o menos de este estilo: “mi mujer no come ni camina, va siempre desaliñada, tiene la casa en desorden, se ríe sola...¡parece un despacho!” “ha acudido a una macumba para atraerse a un amante” “la competencia me está haciendo una macumba y , por eso, todo me sale mal: no vendemos, perdemos clientes, perdemos dinero, los empleados me duran muy poco porque siempre les dejo a deber algo, a duras penas logro pagar los impuestos que se me hacen una montaña...” “mi padre cada día está más torpe, se despierta llorando y gritando, lo vomita todo, le han empezado a brotar eccemas muy molestos en la piel, ve unas sombras negras que acuden a secuestrarle...¡Yo creo que dejaron un ebó o un despacho en el umbral de la entrada de nuestra casa unos vecinos que nos tienen mucha manía!”
 Definiendo el termino macumba como sinónimo de hechizo o embrujamiento, los despachos, ebós o macumbas son cestos o recipientes conteniendo cigarros puros, restos de velas consumidas y de animales sacrificados, depositados en los cruces de caminos sin que nadie se atreva a acercarse a ellos ni, mucho menos, a tocarlos. Si por una fatal casualidad alguien los tocara, se contaminaría de toda la negatividad allí depositada. Ciertamente, un hallazgo de este estilo  puede resultar desastroso, pero ¿realmente tiene eso tanto poder? Y si así fuera¿ Por qué razón iban los magos o los brujos-con tanto quehacer como les da tanto su actividad como su forma de vida- a elegir una víctima al azar para provocarle la desgracia, sin otro objetivo que pasar el tiempo divirtiéndose a su costa?
 Quisiéramos destacar que no siempre los casos expuestos tienen su origen en una mala influencia ajena. En efecto, al llegar a una determinada edad, se suelen empezar a perder facultades, algunas personas en menor grado, otras en un grado mucho mayor-como la demencia senil o la enfermedad de Alzheimer, por ejemplo-; el sistema digestivo puede dejar de responder como lo había hecho mucho tiempo atrás y rechazar según que tipo de alimentos; y los eccemas de la piel tampoco tienen ningún misterio: si el cuerpo ya no nos acepta cierta comida, la reacción de los productos fuertes o en mal estado no suele hacerse esperar. En cuanto a la señora que se descuidaba o mostraba una conducta un tanto extraña, volvemos a lo mismo; no solo se producen casos de demencia en personas mayores; puede ocurrir a cualquier edad, aunque no es tan frecuente, pero esta última afirmación está  tan solo basada en estudios estadísticos.
 Por lo que respecta al negocio-empresa, lo más probable es que aquel señor hubiera querido correr demasiado, por ejemplo, contratando empleados cuando el negocio estaba aún en una fase primaria y apenas sacaba para financiarse él mismo sus propios gastos-la compra de la patente, la licencia fiscal , la electricidad, el agua y los impuestos de actividades económicas, entre otras muchísimas cosas-. Es el típico caso de cualquier persona que concibe un proyecto aparentemente fructífero y , en lugar de empezar a construir la casa por los cimientos, la empieza por el tejado. Pero, dado que el ser humano es por naturaleza una criatura egoísta y orgullosa, siempre tiende a culpar a otro de sus propios fallos, como este empresario al pretender culpar a la competencia que, según su visión del problema, le tenía montado un mal trabajo.¿Tuvo cuidado de situarse en un buen lugar y en un buen momento?¿Calculó bien el patrimonio del que disponía? Probablemente, no.
 Y, por supuesto, los problemas matrimoniales o de pareja no siempre tienen su origen en un trabajo montado. No es necesario dar tantos pasos ni ser tan rebuscado, recurriendo a procedimientos ritualísticos complicados y caros, cuando, bien mirado, nos bastamos con cualquier artimaña asequible y corriente para seducir, sobre todo si el sujeto en cuestión muestra una imagen insegura o se encuentra atravesando una mala temporada con su pareja.
 En resumen: ni todos los problemas-todos pasamos alguna vez una mala temporada o somos decepcionados por alguna persona-tienen su origen en la magia negra ni todas las soluciones están en la magia blanca. La magia debería ser un último recurso tras haber agotado realmente todas las posibilidades y si, ciertamente, hubiera un mal trabajo montado.
 A menudo, las envidias, los rencores, la competitividad y el afán de lucro impulsan a recurrir con facilidad a estas prácticas. En efecto, una persona locamente enamorada de otra ya casada puede, llevada por los celos derivados de su cegador capricho, contratar los servicios de un mago negro para que realice un trabajo de separación de esta pareja. Con la proyección negativa se suele conseguir que ambos integrantes de la pareja discutan por motivos que normalmente no suelen dar pie a ello, que se vean mutuamente todos los defectos y que las relaciones sexuales sean cada vez más distantes y menos apasionadas, todo ello hasta que uno de ellos decide marcharse y tramitar el divorcio, con lo cual, el desconsiderado pretendiente ve todos los obstáculos allanados.
 Ya hemos dicho que con este tipo de trabajos negativos se puede hacer enfermar e incluso provocar reveses en los negocios. Hay una explicación a este hecho y es que, cuando se es víctima de un maleficio, se debe a que el cuerpo astral está, de algún modo, abierto a cualquier tipo de influencia, igual que lo puede estar el cuerpo físico a cualquier virus infeccioso capaz de provocar una gripe o un sarampión. Cuando el cuerpo astral de la víctima se encuentra contaminado, la corriente negativa que de él emana se insinúa en los lugares donde transita provocando cualquier catástrofe(como una persona que le rehuye sin que aparentemente halla motivos claros, una pared que se descalcifica, un animal que enferma repentinamente, una estructura que falla, una junta que se dispersa en cuanto le ve, una planta que se marchita, etc.). Los santeros espiritistas han hablado bastante de este fenómeno atribuyéndolo a un cuadro espiritual sucio. La persona que lo presenta va dando tumbos, se encuentra constantemente rechazada , fracasa en todo lo que emprende y todo se le vuelve del revés. El remedio del que disponen para estos casos consiste en realizar una limpia espiritual alrededor del paciente, dirigiéndose a sus santos y guías con cantos, ofrendas y oraciones.
 En Brasil encontramos otros conceptos mágicos que se oyen normalmente por todo el país, como Encosto, Cosa Feita, Caminhos Fechados y Caminhos Abertos, Corpo Fechado y Corpo Aberto y mal de ojo, todo ello derivado de las prácticas de macumba y espiritismo. Pasemos de la mano de Pedro Mc Gregor en su libro “el espiritismo brasileño” (ediciones Roca, 1975)a describir cada una de ellas:

ENCOSTO

 Con este nombre se describe una situación en la que un ente inferior reposa sobre una persona, desequilibrándola como consecuencia de su influencia negativa. Suele tratarse de seres desencarnados disgustados, por ejemplo, por el incumplimiento de su testamento que se dedica a causar perturbaciones a sus herederos en señal de protesta o bien fallecidos instantánea o violentamente que, a causa de ello, no reconocen su estado y creen aún estar habitando el mundo terrenal y poder ocuparse de los asuntos que ha dejado pendientes.

COSA FEITA

 Como es fácil de traducir al español(de hecho la lengua portuguesa no es muy difícil de traducir a nuestro  idioma, en realidad, ni siquiera es difícil de entender, dependiendo de la riqueza de vocabulario que cada uno tenga; la lengua portuguesa es, relativamente, bastante similar al dialecto gallego), Cosa Feita significa “cosa hecha”. En la práctica se utiliza para definir algo negativo realizado deliberadamente, a través de la magia negra.

DESMANCHAR

 Este verbo significa deshacer y representa el remedio contra la “cosa feita”. Se utiliza en el sentido de deshacer, a través de la magia blanca, el mal producido por la magia negra.

CAMINHOS ABERTOS O FECHADOS

 Estos vocablos significan “caminos abiertos o cerrados”. Cuando todo va mal, suele asociarse a que se han cerrado todos los caminos o, lo que es lo mismo, se nos han cerrado todas las puertas o el camino del éxito. Para abrirlo, es preciso acudir a un centro espiritista o un templo macumba, y el ritual a emplear dependerá del lugar al que se acuda y de la línea que allí se practique. Tras atender la consulta, la divinidad o entidad, por boca del médium, aconsejará los pasos a realizar para solucionar el problema.

CORPO FECHADO

 El cuerpo está cerrado a toda influencia, es decir, protegido contra todo mal. Este término suele aplicarse al estado de gracia del que gozan los iniciados y los fieles de estos cultos.

CORPO ABERTO

 O cuerpo abierto. Todo lo contrario al anterior. El cuerpo está abierto a toda influencia, y es una presa fácil para cualquier tipo de trabajo. Es preciso crear una protección a su alrededor para cerrarlo contra las influencias de la magia negra. Esta operación también es conocida como “cerrazón del cuerpo contra brujerías”.

AMARRAR

 Amarrar(en la misma palabra está la definición) constituye una variante de la “cosa feita”. Se trata de los encantamientos destinados a atrapar y seducir.

MAL DE OJO
 
 Hablemos ahora   acerca  del popular “mal de ojo”. Se ha afirmado a menudo que las personas emiten vibraciones a través de la mirada. De ahí que una mirada dulce, cálida y serena, proporcione alegría, bienestar y serenidad, y que, por el contrario, una mirada fija, encendida, fría y colérica transmita incomodidad, tensión, miedo, angustia y malestar. Si tras esta mirada hay un fondo odioso y despectivo, puede transmitir un mal mucho mayor, llegando, en algunos casos a hacernos enfermar. Sin embargo, no solamente es el poder de la mirada lo que nos afecta. Al igual que en el caso de ser afectados por un trabajo negativo, de alguna manera estamos en conexión con esta influencia.
 De ahí se puede deducir que no acarrea un “mal de ojo” quien quiere sino quien puede. El poder destructivo de la mirada no depende únicamente del emisor, sino también del receptor. Si sabemos mantenernos fuertes y enteros y no nos dejamos llevar por las circunstancias, la mirada no nos podrá hacer mella por profunda y penetrante que nos pueda parecer. La hipnosis, por ejemplo,  no solo requiere un agente fuerte y seguro, sino también un paciente menos resistente y más abierto a lo externo. Si se trata de un sujeto recalcitrante, el poder fascinador de la mirada encontrará en esta personalidad un obstáculo o una especie de oposición y será difícil obtener algún resultado.
 Pocas veces tomamos conciencia del mal que le causamos a una persona cuando le dirigimos una mirada llena de desprecio con pensamientos del estilo: “por ahí te pudras” “no mereces vivir” “espero que tu pareja sea tan rancia como tú”...hasta el momento en que, por casualidad, nos enteramos de que está padeciendo una enfermedad pesada y los médicos no dan con la clave o de que sus relaciones con su pareja están atravesando una crisis. Pero, a diferencia de un trabajo mágico, se realiza a nivel inconsciente. Por eso cuando los antiguos tratados de magia exponen una fórmula “para causar el mal de ojo”, esto no es mal de ojo, esto es un trabajo de magia negra, puesto que se efectúa voluntaria y conscientemente en el momento de estar realizando los preparativos prescritos. El operador en la última fase del trabajo se valdrá del poder de la mirada para transmitir a su víctima toda la negatividad elaborada y producida en cuanto tenga ocasión de encontrarse con ella.
 Los trabajos de magia, por el contrario, son siempre voluntarios y conscientes y están encaminados a un objetivo concreto. Por eso, un trabajo no es tan sencillo de neutralizar como un mal de ojo. Para poner fin a esto último, a menudo, es suficiente con ofrecer una vela al santo o guía más apto para ello o limpiar el cuerpo y el aura vital de la persona afectada con los baños adecuados.

 

 Por más que nos pueda sorprender, estos hechos y estos fenómenos no son patrimonio exclusivo de un sector de bajo nivel cultural con recursos limitados y demasiado arraigados a las prácticas supersticiosas, sino que también suelen tener lugar en los estratos más socialmente elevados y de nivel intelectual alto, como es el caso de la gente de negocios que solicita un rito macumba o kimbanderino para eliminar a la competencia, o el de los funcionarios que encargan un ebó de candomblé para derribar a un alto cargo de la administración y ocupar ellos su puesto.
 Es demasiado frecuente recurrir a estas prácticas buscando el propio bienestar, aunque ello suponga pisarle el cuello a tu hermano o a tu vecino. Son demasiadas las personas que optan por este camino y demasiadas aquellas otras que habiéndolo comprendido se aprovechan de las circunstancias. Desgraciadamente, estas trapacerías son moneda de curso corriente, pues son numerosos los pillos que viven de la macumba, hecho bastante mal visto por los umbandistas cuyo punto de vista es dar de gracia lo que de gracia se ha recibido. Estos basan sus creencias y sus prácticas en la caridad.
 Esto último que acabamos de apuntar es lo que diferencia a los Pais y Maes de Santo de los santeros de cartón-piedra, como se les suele decir. Aprovechando sus conocimientos-teóricos-sobre santería, macumba, vudú, etc. y sobre cómo realizar trabajos de magia blanca o negra, improvisan un pequeño altar adornado con imágenes de santos y diablos adquiridos en el mercado-al revés que en las auténticas iniciaciones donde estas son entregadas al aspirante por los iniciadores-, lo mismo que los collares y los vestidos(sin importar si se hallan o no en consonancia con la entidad o las entidades con las que se va a trabajar;”si ni siquiera lo comprendo yo ¿cómo lo van a comprender los pardillos que me entreguen alegremente su cartera?”podrán pensar)e instalan su pequeño templo en su casa, buscando una decoración lo más impresionante posible. Un total desconocimiento de las bases cosmogónicas y teológicas lleva a estos embaucadores a pintar a los exús y orixás más terribles de lo que realmente son. Ahí encuentran una razón de peso para sonsacar a los infelices que han acudido a ellos en busca de ayuda, todo el capital del que disponen(se han dado casos en los que se han visto obligados a entregar no solo dinero en metálico, sino objetos de valor, joyas o ropa al supuesto mago para que este realizara su trabajo).
 El miedo a lo desconocido y la ignorancia es lo que mantiene a estos embaucadores. Ante un problema de gran envergadura recurren a la malinterpretación de los atributos de Exú, asegurándoles, por ejemplo, que para resolver el problema planteado, será preciso entregarle una gran ofrenda(pasteles, bebidas de gran calidad y difíciles de conseguir, manjares muy bien preparados, bombones de buena calidad, además de una importante suma de dinero)y que de no ser así el problema podrá agravarse(empeorando su estado de salud si se trata de un problema de esta índole, acabando el resto de su vida en prisión si se halla con un problema de trámites, documentos o juicios, hundiéndose en la miseria y en la carestía si no encuentra trabajo, etc.).
 La diferencia entre ellos y un auténtico santero o Pai de Santo es que estos últimos consideran sus ejercicios como una misión a cumplir y rehúsan cobrar dinero por sus ayudas. Parten del principio de que todo el mundo tiene derecho a ser feliz y a vivir tranquilo y desahogado, y jamás se perdonarían el dejar de atender a una persona porque no tuviera recursos económicos. Pueden verse, eso sí,  obligados a cobrar una pequeña cantidad de dinero para abonar el coste de los productos y artículos adquiridos para la limpieza o el abrecaminos, la cual cosa no suele ascender mucho, pues los precios en las librerías y bazares especializados es realmente muy asequible, según el poder adquisitivo de cada cual.
 A diferencia de los avispados negociantes de estos cultos que encuentran en ellos un modo de enriquecerse rápidamente, los auténticos iniciados apuntan hacia lo espiritual, por eso comprenden que un Dios que es verdaderamente un padre para sus hijos o unos ángeles que son realmente nuestros hermanos,  no pueden abandonar en un momento crucial a una criatura sufriente y necesitada. Yo, personalmente, a muy pocos y en muy pocas ocasiones les he oído decir: “los santos ya se alimentan con las oraciones, y no necesitan ofrendas de frutas o dulces; si ahora se te ocurriera traerles una, puede que el oráculo te indicara que te las comieras tú. En realidad, ellos son los que cuidan de ti”. Por el contrario, han sido la mayoría los que me han dicho: “Xangô también come” ,“los santos también comen”, “puede no gustarte matar a un animal, pero la sangre es una especie de moneda espiritual”...
 Los poderes energéticos atribuidos a la sangre y los tabúes que pesan sobre ella son observados en esta clase de ritos donde la sangre animal es ofrecida(bastante más frecuentemente en los ritos del candomblé, la macumba, la kimbanda y el batuque, que en el umbanda que los rechaza a toda costa promulgando el respeto y cuidado de todo ser vivo)y donde no se permite el acceso a la mujer en período menstrual pues, al igual que en otras muchas culturas, se considera la sangre menstrual como una sustancia de deshecho  portadora de vibraciones inadecuadas.
 Dadas estas circunstancias, es bastante difícil determinar donde acaba el rito sacrificial(donde los animales pueden ser sacrificados para ser comida su carne) y empieza el señuelo para intimidar y cobrar una suma astronómica por el trabajo a realizar. Pero estos hechos no solo se entremezclan en la realización de trabajos para diversos fines. También los supuestos rituales de iniciación tienen su trampa.
 Si bien nadie que no haya cumplido los correspondientes ritos de iniciación puede catalogarse como Pai o Mae de Santo, tampoco lo son aquellos que se muestran dispuestos a iniciarnos, ya que podría perfectamente haber en esta “iniciación” algo de interés, naturalmente monetario, pues ya vimos que se pide, de entrada, un precio muy alto para iniciarse.
 El objetivo de estas falsas iniciaciones es que el aspirante acepte ser un miembro más del grupo realizando adivinaciones y trabajos, y estafando cuanto pueda y más. Al igual que en las auténticas iniciaciones, el falso santero realiza una consulta con los buzios o caracoles(también disponibles en el mercado ocultista con su correspondiente folleto de instrucciones), pues él , sobre los textos de interpretación que figuran en la mayoría de libros sobre santería, ya conoce los significados de cada posición y sabe lo que hacer  o decir en cada circunstancia. El caso es que, diga el oráculo lo que diga, la respuesta será que el consultante debe iniciarse o “hacer santo” pues, según le dicen, el santo le está reclamando y podría fastidiarle la vida de no ponerse al servicio de este al precio que sea.
 Los verdaderos Pais de Santo no nos ofrecerán jamás una iniciación o un apadrinamiento ni, mucho menos, nos apremiarán a realizarlo cuanto antes so pena de sufrir una catástrofe. Sencillamente estarán a disposición de quien acuda a ellos sincera y desinteresadamente pidiendo rendir su devoción a las divinidades a través de estas ceremonias y satisfacer su sed de conocimientos tanto para poder ayudar con ellos como para evolucionar en el plano espiritual. Naturalmente, esta auténtica iniciación tiene un precio, el cual según los casos, podrá negociarse entre el santero y el aspirante, de acuerdo con lo que pueda dar de sí la situación económica de este último. Después le irá dando más conocimientos y más grados iniciáticos según observe su nivel de preparación.








VODÚN, CANDOMBLÉ, BATUQUE, UMBANDA, MACUMBA, QUIMBANDA, SANTERÍA Y PALO MAYOMBE: TODOS LOS GARBANZOS EN LA MISMA OLLA

 He ahí unas ceremonias realizadas con fondo de música de percusión, cánticos en lenguas ancestrales, danzas frenéticas, sacrificios de aves y cuadrúpedos, ofrendas de frutas, bebidas y velas, y trances tan sorprendentes como espectaculares. Esto es lo que ven el periodista meramente difusor de estos saberes y el no iniciado que pese a estar interesado en todas y cada una de estas filosofías no las diferencia aún entre sí y puede fácilmente confundir unas con otras aún cuando bajo muchos aspectos sean entre ellas diametralmente opuestas.
 Y si efectivamente metemos todos los garbanzos en una misma olla o todas las canicas en un mismo saco es sencillamente porque nos da igual ocho que ochenta. Una conocida revista de prensa rosa publicó una noticia-creo recordar que se titulaba “los crímenes del Rey de San Fulgencio” o algo así-sobre los crímenes de un muchacho aficionado a las “prácticas de espiritismo en las que llevaba a cabo sesiones de invocación al Diablo durante las que ofrecía sangre de animales sacrificados en su nombre”. Estas definiciones me parecen tan precipitadas como prestas a confusiones. Igual ocurre al publicar entrevistas a personajes relacionados con este mundo. “Vidente, médium, parapsicóloga y bruja iniciada en los secretos del vudú y del candomblé, realiza servicios de tarot, cartas astrales, magia, macumba y espiritismo”. Otra interesante historieta de terror publicada en la desaparecida revista “Dossier Negro” se cierra con esta frase que el autor pone en boca de uno de sus personajes: “Durante el tiempo que estuve en las Antillas me convertí en un maestro del vudú, Trogg. Y como no puedo permitir que haya otro ser alimentándose con los humanos que necesito para mí te mataré para convertirte en mi siervo, para transformarte en un inerme, obediente y descerebrado zombi”.  Dicho personaje aparece en la última viñeta sosteniendo una estatuilla de barro parecida a la persona a la que pretende transformar en un zombi con una aguja insertada en la cabeza. No pretendemos con esta exposición descalificar ningún tipo de prensa, simplemente me vengo a referir a que si quieres arroz con patatas, arroz con patatas quieres y no te han de servir otra cosa. Si deseas estudios más  serios sobre magia, ocultismo, esoterismo y religión descarta automáticamente cuanto leas en comics de terror y revistas del corazón. No son los lugares más adecuados para buscar cierto tipo de información, pues confunden y mimetizan la realidad sobre la misma. En el mercado hay buenas y competentes revistas de divulgación científica,  paracientífica y ocultista así que...zapatero, a tus zapatos. Que cada cual en su campo haga su trabajo lo mejor que sepa.
 En cuanto a las diferencias entre estos cultos conviene señalar que aunque se pueden parecer externamente entre ellas lo cierto es que cada una dispone de su base teológica, de sus rituales y de sus sistemas de trabajo y de iniciación. Algunas filosofías como el Catimbó no requieren ninguna iniciación en especial y otras como el Palo Mayombe no permiten que se divulguen los secretos de los trabajos y de las iniciaciones.
 Aunque comúnmente solamos definirlas como “religiones” al referirnos a ellas lo cierto es que no están sujetos a una figura central como sucede con los católicos, el Papa y la Iglesia o los musulmanes, el Imán y la Sinagoga, por ejemplo. El cristianismo-con sus ramificaciones y sus subdivisiones-, el islamismo, el judaísmo y el budismo están consideradas las religiones de mayor envergadura, mientras que otro tipo de culturas desempeñan en la sociedad un papel más bien secundario. Los “Tatas” o figuras grandes del Umbanda, los “Papaloas” o figuras grandes del Vodún y los “Babalaos” o figuras grandes de la Santería serían a sus templos lo que el Papa a su Iglesia, mientras que de cara a la sociedad o frente a un gobierno central serían solamente equiparables a un sacerdote dirigente de una parroquia. Y más teniendo en cuenta que cada “ilê” o casa de candomblé, cada “honfourt” o templo vodún o cada “tenda” o centro de umbanda es autónomo y existen entre ellos ciertas diferencias que a la hora de unificar unos con otros serían insalvables.
 Los cultos de origen yoruba como el candomblé y la santería tributan culto a las divinidades mientras que los cultos de origen congolés como la umbanda, la quimbanda y el palo mayombe se ocupan de las relaciones con los espíritus de los muertos o si se prefiere una acepción más poética, del culto a los antepasados. Esta es la base para diferenciar unos de otros. Candomblé deriva del vocablo “candombe”, una danza antiguamente popular entre los negros de los cafetales unida con “ilê”, nombre dado al barracón donde tienen lugar estas danzas. De la unión de los vocablos “candombe-“ilê”, derivaría el término fon “candomblé”. En cuanto a la definición de umbanda, se aplica a aquellas prácticas de origen africano que actualmente se ejecutan en mayor o menor grado bajo la influencia del kardecismo. Su objetivo es servir a la humanidad de forma totalmente desinteresada y caritativa. Kimbanda es bajo muchos aspectos su polo opuesto y las entidades a las que tributa culto suelen estar definidas como poco o nada evolucionadas y totalmente abocadas al mal(siempre insistiremos en que los exús o las entidades de la Kimbanda no son en sí buenas ni malas, lo son las peticiones que les dirigimos). El Umbanda participa de la concepción abstracta del Universo-la religión-y la Kimbanda opera en un plano más concreto-la religión mas la magia-. La macumba no es un culto definido ni concreto. La macumba es todo, es decir,  todas estas prácticas hoy día divididas en umbanda y kimbanda. Muchos diccionarios ocultistas y esotéricos-es triste comprobar a través de ellos la confusión de los mismos esoteristas que se quedan con una definición dada sin molestarse en profundizar en la verdadera esencia-definen a Exú como “especie de demonio” y a la umbanda como “culto  brasileño de origen africano resultado de la fusión entre el espiritismo y la macumba cuyos ritos se celebran a menudo para romper los maleficios de la quimbanda o magia negra originada en el fetichismo afrobrasileño”.
 Si nos acogemos a las expresiones “hagamos una umbanda contra una quimbanda”, “hagamos una santería contra un palo mayombe”, “hagamos un candomblé contra una macumba”, etc. acabaremos como los nazis por identificar con el bien a la raza aria y con el mal al pueblo judío, por citar un ejemplo. Todo esto no es más que por poner nombre tanto a lo que nos favorece como a lo que nos perjudica.
 En realidad solo existen en magia dos tipos de trabajos: trabajos blancos y trabajos negros, aunque yo preferiría decir más bien trabajos constructivos y trabajos destructivos, ya que, insisto, no es el color del ritual lo que hace a este bueno o malo si no la intención con la que lo llevamos a cabo. Por no decir más simplemente que podemos crear o podemos destruir. Los entes y el poder de la mente son meros auxiliares.

SOBRE LA INICIACIÓN

 A propósito de la iniciación-ya te metas en santería, ya te metas en brujería o en metafísica-hemos hecho una separación entre los verdaderos y buenos maestros y entre los vividores sin escrúpulos, aunque no hemos hablado todavía de cual debe ser nuestra propia actitud al respecto.
 Como en todas las profesiones o como en todas las actividades en general, los comienzos siempre son duros. Y como si de una autoescuela se tratara, muchas veces nos tumbarán antes de sacarnos nuestro carnet o diploma de iniciado. No nos bastará con haber leído a autores clásicos del género. Por mucho Eliphas Levi o por mucho Papus que haya en nuestra biblioteca personal todo cuanto lleguemos a saber nunca llegará precisamente a empacharnos. Al contrario, siempre nos encontraremos con que no hemos recogido más que unas migajas de ese saber. Y no es decir “yo me sé el dogma y ritual de la Alta Magia de Eliphas Levi” o “de los quinientos libros que el tiparraco ese tiene escritos, ¡me loh he leío toos!”. Estos libros hay que trabajarlos. Y cultivar y desarrollar uno sólo de ellos puede requerir semanas, meses e incluso años. Yo adquirí este interesante libro y terminé de leerlo hace la friolera de dieciocho años, he leído también “La clavícula de Salomón” y “El libro de San Cipriano” docenas y veintenas de veces, hace siete años y medio inicié mi aprendizaje con el Maestro Santiago y más recientemente he empezado a asistir a las clases teóricas impartidas por el Maestro Juan y la sacerdotisa Lu. Y sólo sé que no sé nada...
 ¿Cabe suponer que estoy poniendo en duda la calidad de la enseñanza de todos ellos con estas palabras? ¡Por supuesto que no, Dios me libre! Simplemente no tengo ningún reparo en reconocer que no lo sé todo y me acojo a menudo a este dicho popular extraído de los famosos cuentecillos con moraleja del Conde Lucanor: “el que sabe sabe que no sabe y el que no sabe se empeña en que sabe”.
 Si solicitas una iniciación y esperas encontrarte el día que vayas con un señor que después de hacerte cuatro “tonterías” te va a dar un recito con el que ya podrás hacer de todo, o descarta esa idea o no te pares ahí. Es posible que así sea en algún que otro caso, pero entonces se tratará de un preliminar a la verdadera iniciación. Esta última va a requerir una especie de “cursillos” en los que recibirás información, ni mucha ni poca, la que necesites según determinen los maestros. Y luego vendrá la parte práctica que incluirá determinados rituales. La investidura, el nombramiento, la consagración, más y más clases teóricas...ser mago o maestro es en este sentido equiparable a una carrera. No se hace la transformación en un cursillo acelerado de fin de semana, pese a que nos parezca que estos cursos de magia blanca o de alta magia que duran tres o cuatro meses anunciados en las mismas revistas esotéricas-o exotéricas dado que se venden en los kioscos y están al alcance de todos-pueden hacer milagros en nuestro ser.
 Otro aspecto a tener muy en cuenta es que posiblemente la iniciación a los Grandes Misterios no sea exactamente lo que tú imaginas o supones, de modo que descarta toda idea preconcebida para empezar. Una escuela de Misterios no se parece en nada a la guardería a la que te llevaban de pequeño y en la que sabías que nada más llegar te pondrías a dibujar o a jugar con la plastilina. No es de lógica ni justo imaginar que en cuanto llegues te darán un “muñequito vudú” para que te entrenes con él o una vela para que “hagas milagros”. Lo primordial es estar seguro de que serás admitido en ella, pues a veces ocurre, por ejemplo, que una persona interesada en practicar la santería acude a un registro o consulta y lo primero que le recomienda el oráculo es que no tome ninguna iniciación en santería o que no la solicite. No todo el mundo que quiere puede acceder a estos campos de aprendizaje.
 Y en el caso de que logres superar las pruebas que te propongan y consigas entrar deberás mentalizarte de situaciones con las que te puedes encontrar. Los pequeños aspirantes a lamas en los templos tibetanos sufrían unas pruebas de resistencia física y moral bastante duras: alimentación escasa a veces, ejercicio físico duro y continuo a nivel corporal y humillaciones y ofensas verbales a nivel psicológico(no porque el instructor o guía tuviera en el fondo nada contra ellos sino para motivarles o para encontrar una reacción en ello). En una escuela iniciática puedes encontrarte con que metas la gamba reiteradas veces sin comerlo ni beberlo y con que como consecuencia de ello te corrijan a menudo. Esto nos puede hacer sentir a veces como un niño tonto y torpe que acaba de salir del cascarón, lo cual no nos resulta precisamente alentador ni tonificante. Insistimos y no nos cansaremos de repetirlo, todos los comienzos siempre son duros. Pero la clave del éxito en la verdadera iniciación está en aprender de las experiencias vividas, en la capacidad de mejoramiento y en el espíritu de superación.
 Y ante todo no te “rayes” con paranoias raras de que “no te sientes querido”, “te riñen por chorradas” o “pasan de ti”. Aún en el caso de que así fuera, como dice una vieja canción “no te apures que eso les ha pasado a todos”. Todos los que ahora se encuentran en un nivel superior en tanto que tú acabas de empezar, entraron y empezaron igual que tú y tuvieron que pasar necesariamente por lo mismo que pasas tú ahora. Si lo único que percibes mientras ves a los ya iniciados y a los maestros es que quizás sean más inteligentes o más fuertes que tú-percepción a menudo tan precipitada como errónea-difícilmente consideraras que unos y otros han escalado montañas para estar donde están. Pero deberás tener en cuenta que no podrás ser invitado a todas las actividades mientras estés en un primer nivel y que no siempre vas a hacer lo que a ti te gusta. Estar dispuesto a iniciarse es “estar a las duras y a las maduras”. Y si en ocasiones tienes sensaciones de soledad con respecto al grupo con el que estás aprendiendo o de que tratan de alejarte considéralo como una prueba de valor más a la que desean someterte y trata de ser fuerte, pues si ellos te perciben dispuesto a claudicar demasiado pronto o notan de alguna manera que esa actitud te desanima y te desmoraliza demasiado fácilmente entenderán que no estás preparado y que no te ven por lo tanto apto para acceder a la iniciación. De entrada deberás estar dispuesto a pagar un precio muy alto. Y seguidamente estar dispuesto a intentar superar todos los obstáculos y todos los impedimentos que te puedan salir al paso. Piensa que no por hacerlo todo mal vas a correr más...
 Y si en oposición a todo lo aquí expuesto hasta ahora, un mago, una bruja o alguien que pretende pasar por tal está dispuesto o dispuesta a iniciarte y pretende asegurarte que con pocas cosas que te va a pedir y otras muchas que te va a dar a cambio ya podrás hacer de todo, de todo...esta persona te va a dar unas clases o una pequeña orientación para que puedas hacer tus trabajos de magia, pero no te va a iniciar...porque ni siquiera ella está iniciada. Y porque además está demostrando ignorar en qué consiste la verdadera iniciación.
 Si estás dispuesto a asumir que no lo sabes todo, considérate un sabio. Saber y tomar conciencia del camino que aún nos queda por recorrer ya es sabiduría, pues la clave de esta reside en la humildad y en la prudencia. Las enseñanzas se catan y los conocimientos se saborean, este es el verdadero aprendizaje que conduce a la sabiduría. Cuando entres en una escuela iniciática no tengas como objetivo “salir sabiendo más que ellos”. Limítate a recibir y a paladear cada nueva enseñanza, cada nueva experiencia, cada nuevo descubrimiento considerando todo esto como una forma de vida. Esto te hará sin duda interiormente más fuerte y estarás en mejores condiciones de comprender y ayudar a los demás.

Kiriel.





VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 4

 En este documento vamos a explicar cómo la magia nos puede ayudar realmente.
¿Sirve un velón de las siete potencias, es decir, de siete colores para abrir caminos y para obtener un rendimiento óptimo de nuestro negocio?
¿Podemos con un velón ofrecido a la Pomba Gira lograr una unión amorosa o con un velón ofrecido a Exú hacer más favorable una sentencia judicial, trancar un mal trabajo o triunfar sobre un enemigo declarado?
¿Podemos sanar a una persona enferma con un velón de San José Gregorio Hernández, ayudar a un estudiante bloqueado a triunfar en su carrera con un velón del arcángel Jofiel, curar problemas de la vista con un velón de Santa Lucía?¿Nos aportan realmente suerte los amuletos y talismanes?¿Sirven para algo la oración, la invocación, las afirmaciones o los mantrams?
 En realidad cabe dar a todo eso una respuesta afirmativa. Siempre y cuando, claro está, asumamos nuestra parte de responsabilidad esmerándonos mucho en la tarea a desempeñar y no limitándonos a hacer el ritual por el mero hecho de hacerlo dado que todo eso a veces no ayuda, quiero decir, por sí solo. De la misma manera que una muñeca para maleficiar por muy bien confeccionada que esté no hace nada por sí misma. El poder de la propia mente es siempre quien hace y deshace.
 Estoy de acuerdo con el Maestro Juan cuando afirma que lo realmente importante es la acción mental del operador siendo todo lo demás unos meros soportes para potenciarla, lo mismo que las líneas de la mano, las cartas del tarot, o la borra del café por mencionar los métodos de adivinación más socorridos lo son para estimular la clarividencia y la intuición del intérprete. En la mayoría de los casos es más lo que el o la vidente ven o intuyen que los meros simbolismos reflejados en unas láminas.

 ¿Cuál es la mejor magia, pues?
 
 La mejor magia está dentro de nosotros mismos, sería interesante no olvidarlo nunca. Los ángeles, Exú, Pomba Gira, María Padilla, María Mulambo, Iemanjá, Obaluaié, Santiago, San Cipriano, los Maestros Ascendidos, Uriel, Kiriel, Morya, Maitreya, Adramelech, Lucifer, Santa Bárbara, Rafael, Bael, San Alejo, las Hadas, los Silfos, Ogum, Oxum, Damballah, Elegguá, Elegbara y un largo etcétera de entidades con nombre y sin nombre no son más que los guías a los que según nuestra fe y la línea que hemos escogido para trabajar, hemos invocado o evocado para plantearles el problema que nos aqueja y nos inspiran para que seamos capaces de hallar la solución correspondiente. Lo esencial de la magia es el contacto con las energías queramos darles el nombre que les queramos dar.

 ¿Para qué sirve entonces un velón o una vela, un incienso, un baño y una serie de frases o palabras repetidas sistemáticamente?

 En primer lugar no es nada sistemático, pues todo tiene su porqué y nada se hace al azar ni por capricho. En una vela o velón están representados los cuatro elementos: el fuego representado por la llama, la tierra representada por la cera, el aire representado por el humo y el agua representada por la cera fundida y líquida. Con la misma queremos dar luz a una entidad que será la que nos va a guiar en el objetivo por el que efectuamos ese ritual. Con el aroma y el humo del incienso dilataremos nuestra mente a fin de que pueda entrar en sintonía con las energías. La presencia de la copa de agua, la vasija con tierra, el candelabro y la espada sobre el altar o el plano elevado utilizado como tal no tiene otro objetivo que dignificar los elementos. El libro ritual o los documentos o manuscritos que a tal efecto se utilicen no son más que el conjunto de enseñanzas impartidas en la orden o grupo que concurre a la ceremonia.

 ¿Cómo aprovechamos esta maravillosa energía que hemos dado en llamar magia?

 Esta es una buena pregunta. No nos preguntemos como nos va a funcionar este o aquel ritual si no de qué manera vamos a aprovechar el ejercicio que hemos llevado a cabo. Si no nos cuestionamos si el trabajo o el hechizo será efectivo o no y sí nos cuestionamos lo realmente cuestionable, es decir, cómo vamos a obrar nosotros mismos al respecto, encontraremos si no todas, sí la mayoría de las respuestas que necesitamos.
Primer caso: hagamos un abrecaminos con las siete potencias para atraer clientela.
Ningún problema, prende el velón de siete colores un lunes a mediodía y déjalo quemar a razón de un color por día de forma que termine el domingo a la misma hora. El ritual ha de durar una semana y cada vez que lo enciendas debes orar a las siete potencias para que te amparen y te abran los caminos.
 Este será, según estos planteamientos, el cometido de las entidades a las que pedimos. Pero ¿qué nos toca hacer a nosotros?
 Bien, si el problema es que nuestro negocio no “pita”, los verdaderos hombres de negocios-al margen de que realicen o no rituales de abrecaminos-tienen muy claras dos claves para hacerlo funcionar: una buena estrategia o plan de mercado y procurar vender más que la competencia si la tienen.
 ¿De qué manera montan ellos un negocio rentable y duradero? Calculando bien el patrimonio del que disponen y tras un concienzudo estudio del mismo tener la seguridad de que cubre los gastos que el montaje conlleva, eso de entrada. Y sobre todo disponer de un fondo en la recámara en caso de que el proyecto fracasara estrepitosamente. Lo tienen todo bien calculado: en principio confían en ellos mismos y su programa no tiene por que venirse abajo y, además, aunque eso sucediera, siempre disponen de una buena salvaguarda. Caminan sobre un puente sólido que no puede ceder y previamente han colocado una mullida colchoneta al final del barranco para no fracturarse. Ellos consideran más prudente un “por si acaso” que un “yo pensaba”.
 Pues bien, así es como nos podrá ayudar la magia o los guías a los que hemos invocado a través de la misma. Nos ayudarán a trabajar nuestra cabecita para que seamos capaces de explotar todos nuestros recursos y nos inspirarán para que obremos de la manera recta y justa. Con la prudencia y la rectitud no habrá manera de equivocarse. Nos orientarán sobre el mejor momento y lugar para montar nuestro negocio y sobre cómo comportarnos con los clientes o los que van a serlo.
 Segundo caso: quiero hacerme rico. Para ello hagamos un ritual con don Juan del Dinero.
 Este don Juan del Dinero es el guía que nos va a inspirar. Y digo “inspirar” no dejarnos un fajo de billetes en la puerta de casa con solo ofrecerle su velón amarillo. Cuando el dinero llega suele hacerlo al cabo de un tiempo y por medios naturales; una deuda que cobramos, un premio en metálico que nos toca(caso de tener una vital necesidad de ese dinero) o unos méritos que hacemos en nuestro habitual trabajo para ascender de categoría y en consecuencia ver aumentado nuestro sueldo.
 La persona que desea hacerse rica pero no confía en la magia porque nadie le ha demostrado que la magia existe sabe que, lo mismo que la gente de negocios, dispone de dos claves que pueden ser una total garantía: escoger una profesión bien remunerada y trabajar en la misma con ahínco o bien, asesorarse de un buen plan de ahorro o inversión. Si está muy puesto en el mundo de los negocios y sabe qué empresas o comercios tienen salida realizará una inversión en bolsa en las empresas que le resulten de fiar, pues entiende que un buen método de ganar la apuesta y obtener los correspondientes beneficios es apostar sobre seguro y estar bien asesorado.
 Este es el cometido de nuestro guía caso de haber recurrido a la magia: encaminarnos hacia una profesión bien remunerada siempre que seamos capaces de desempeñarla y de responder o bien hacia un asesor experto que nos aconseje sobre un buen plan de ahorro.
 Y hablando del ahorro tropezamos aquí con otros problemas que deberemos tratar de solucionar por otras vías o con la entidad más apta para el caso: el manirrotismo, la ludopatía o el síndrome del comprador compulsivo. 
 Estos problemas ya no son económicos o al menos no lo son en su pura esencia, si no más bien de salud. De salud mental, pues la mente ha enfermado de tal manera que no concede valor al dinero. Ahí será preciso pues valorar la conducta de la propia persona y en lugar de un ritual para obtener dinero darle otro ritual para combatir su propio problema psicológico que puede degenerar en una patología más grave de no ser trabajado a tiempo. No tendrá la menor utilidad ayudarle a conseguir más dinero si después lo tira por la ventana.
 Partiendo de estas premisas tocamos ya el tercer caso: hagamos un ritual de salud con San Gregorio Hernández. Para ello necesitaremos un velón de color azul la mitad inferior y de color blanco la mitad superior, además de los correspondientes inciensos, jabones y baños de descarga.
 ¿Y quiere decir usted que con esto yo me curaré o mi hijo se curará? nos pregunta la señora que acude a consultarnos. La respuesta es que el ritual no reemplazará bajo ningún concepto las recomendaciones de su médico que es quien mejor le conoce y mejor sabe lo que le conviene a través de su historial. Esto son ayudas, y digo bien “ayudas” no sustitutos. No es más que una contribución a la mejoría del paciente. Nuestro guía nos aconsejará interiormente o nos orientará para que sepamos cuidar mejor nuestro cuerpo. Durante un ritual de limpieza y abrecaminos en el que pedimos salud entre otras cosas, un exú me aconsejó a través de uno de los incorporados que cuidara mis riñones. Gracias, amigo, por tu mensaje, lo voy a hacer a partir de hoy. Si más tarde presento la queja al exú de lo mal que me encuentro por haber ignorado dicho mensaje me podrá responder con toda la razón “pues ahora te jodes y te aguantas porque yo ya te lo advertí”. Evidentemente no vamos a dejar todo el trabajo a nuestros guías. Tengamos un poquito de responsabilidad.

 Otro tema por el que las personas que tienen fe en la magia recurren fácilmente a los denominados trabajos de unión amorosa son sus problemas de pareja o sus problemas de relación en general. Resulta demasiado fácil culpar a otro de nuestro mal funcionamiento de una relación(sea de trabajo, sea de pareja, sea de amistad, sea de sociedad) en lugar de hacer un viaje a nuestro propio interior y mirar dentro de nosotros mismos. Muy rara vez una persona que se cree afectada por un mal trabajo está en lo cierto. Insistimos en que no es tan fácil realizar un trabajo de magia negra dado que ni todo el mundo está preparado de igual manera ni cualquiera está dispuesto a realizar los pasos que este tipo de trabajos requiere[1]. De manera que lo más razonable antes de recurrir a la magia-que debería ser el último recurso cuando nos han fallado todos los demás-sería dialogar razonablemente y buscar los puntos en los que fallamos. Un hombre o una mujer que se ha separado cincuenta veces y vuelto a casar cincuenta y una y siempre ha dado con un cónyuge borrachín, maltratador, desconsiderado, etc. no necesita achacar su situación a su “mala suerte con los hombres o las mujeres”. Puede ocurrir que nos hallemos en una baja frecuencia vibratoria que nos conecta de algún modo con las personas negativas o desde un punto de vista más racional que no sepamos elegir a nuestros compañeros con los que compartir nuestra vida. El problema estaría pues en nuestra propia falta de atención o en el poco provecho que sacamos de las experiencias vividas. Una persona confundida en ese sentido y con un miedo manifiesto a quedarse sola atrae a estos inescrupulosos individuos como la luz a los insectos. De modo que lo que nos puede traicionar en este campo es nuestra propia falta de madurez.
 Otro problema que origina las dificultades de convivencia en un matrimonio o una pareja es la falta de comunicación. Cuando la pareja es reacia a comunicarnos ciertas cosas que de haber confianza mutua podría compartir con nosotros es que el uno, el otro o ambos a la vez no han transmitido la confianza suficiente, es decir, que de alguna manera no han estado a la altura de las circunstancias. Si, por ejemplo, uno de los cónyuges se opone a tener animales en casa y el otro contra toda petición y a pesar de todo insiste en traerlos no escuchando más que a sus propios intereses es que algo falla en esa comunicación.
 Así pues, es antes la falta de comunicación que cualquier sospecha de malas influencias externas o malos trabajos mágicos lo que se debería intentar trabajar. Y no nos cansaremos de repetir que la mejor magia está en nosotros mismos. No daremos ninguna fórmula para lograr el regreso de nuestra pareja una vez que su serenidad haya estallado y se haya ido, pero sí este sencillo ejercicio que ambos podéis realizar con solamente un lápiz y un papel para trabajar la comunicación. Iniciaremos un diálogo abierto y razonable con nuestra pareja y tomaremos nota haciendo así una lista de todo lo negativo que dice observar en nuestra persona para hacer a continuación otra lista de las conductas contrarias(si por ejemplo nos dice que somos “chinchorros” deberíamos tratar de escuchar un poco más a los demás). El mismo ejercicio hará nuestra pareja a petición nuestra. Puesto que nosotros le hemos escuchado si hay comunicación debería corresponder de la misma manera. Si no lo hace así ahí es precisamente donde debería empezar a trabajar su comunicación.

 Cuando hablamos de abrecaminos no solamente nos referimos a la suerte y a los negocios sino a abrirnos en la vida caminos en general. Pedimos prosperidad, pedimos éxito profesional, pedimos encontrar trabajo...pero muy rara vez nos hacemos estas preguntas:
-¿Qué estoy haciendo para no tener suerte?¿Qué no estoy haciendo para tenerla?
-¿Por qué no encuentro trabajo?
-¿Por qué mi relación con la pareja no me funciona?
-¿Qué es lo que no sé?¿Por qué no sé hacer esto?¿Me cuesta hacerlo realmente o es que no lo quiero aprender porque no me gusta y trato de evitarlo?
 Vamos a hacernos un pequeño examen de cómo aprovechamos no solo la magia si no los propios recursos internos con los que la naturaleza nos ha dotado. Lamentablemente no siempre le sacamos el mayor provecho posible. Einstein solía decir que solamente aprovechamos el 10% de nuestra potencia mental dejando el noventa restante como agazapado dejando pasar todas las oportunidades que nos ofrece a vida. Y parte de culpa si además pretendiéramos echar la culpa a alguien o a algo la tienen la primera información y los primeros conceptos que recibimos durante nuestros primeros años educacionales de vida. La mayoría de nosotros nos anclamos sin atrevernos a meter un pie en el agua. La tanteamos una y otra vez a la espera de que se nos caliente por sí sola en lugar de habituar nuestro propio cuerpo a su temperatura que siempre se mantendrá igual dejando pasar la oportunidad de conquistar aquello que realmente nos satisfaría. Y total porque nos machacaron centenares de veces con que hacer esto y aquello era difícil, imposible, caro, tonto, o todas estas cosas a la vez. Y con que nosotros como "burros" perderíamos el tiempo, no nos lo íbamos a sacar o "déjame que me ría de tu absurda pretensión" la frase más hiriente que se puede decir a una persona que quiere superarse. Tanto poder tienen sobre nosotros los críticos que nos quitan las ganas de hacer lo que queremos hacer, lo cual hace que a menudo nos preguntemos si el crítico manifiesta una especie de envidia cochina bajo la capa de querer un bien para nosotros y nosotros mismos por nuestra parte en el fondo queremos dispensarnos de todo esfuerzo y sacrificio y buscamos en la simple-y tonta-crítica el resorte que nos lo impida, lo cual significa que en realidad no teníamos tantas ganas como interpretábamos llamándonos al autoengaño hipócrita y hemos aprovechado la circunstancia de que nos descalificaban, nos regañaban o nos criticaban para evitárnoslo y volver a la comodidad y la seguridad de nuestros habituales entretenimientos.
 Las influencias de la sociedad, los conceptos absorbidos durante nuestros primeros años de vida y las necesidades apremiantes de las circunstancias es lo que mantienen a nuestro verdadero yo bloqueado impidiéndole manifestarse, entre otras cosas por lo fácil que ha resultado confundir el "hacer" con el "ser", por ejemplo, explicando que Juan es carpintero cuando en realidad hace de carpintero. Y no solamente nosotros mismos deberíamos hacernos una lista comparativa con lo que queremos y no queremos, con lo que nos vemos obligados a hacer y lo que nos gustaría hacer en realidad, si no también un profesional en el momento de nuestra búsqueda de empleo debería realizar un test psicotécnico más profundo al objeto de dar a la persona lo que realmente quiere. Pero eso, aducirán, es tan difícil como buscar una aguja en un pajar, dada la actual precariedad del mercado laboral que provoca que nos tengamos que agarrar a un clavo ardiendo, he aquí otro condicionante más: la presión de las necesidades y de las circunstancias. Vamos a elaborar tres apartados de una de estas listas comparativas. Nos referimos a la búsqueda de empleo.
 Sigmund Freud, el padre del psicoanálisis, dividió la mente humana en tres aspectos bien diferenciados: ello, ego y superego. El ego es la parte consciente, el ello, la parte inconsciente también instintiva y el superego, la conciencia también conocida a menudo como nuestro censor interno.

 PRIMERA COLUMNA. EL EGO. Dice: no me gusta este trabajo.

 SEGUNDA COLUMNA. EL ELLO. Dice: no quiero hacerlo.

 TERCERA COLUMNA. EL SUPEREGO. Dice: es mejor que cojas este trabajo porque ni en tu situación ni en los tiempos que corren puedes decir “esto me gusta” o “esto no me gusta”. Tienes que pasar por el tubo so pena de sufrir necesidad.

 Si todos nos hiciéramos una lista de tres columnas con lo que percibimos a nivel consciente, lo que el inconsciente nos dicta instintivamente y lo que la superconciencia nos recrimina-nuestro peor juez ya que no solo nos juzga, si no que nos hace sentir culpables y nos impone la pena de aceptar a pesar de no querer cierta cosa-podríamos entonces sí salir de ese laberinto, el que nosotros mismos hemos creado siguiendo los patrones que desde que nacemos hasta que morimos nos vienen impuestos. En una sociedad como la que nos ha tocado vivir invadida por las prisas, por el estrés y por la competitividad es difícil dar rienda suelta a nuestra verdadera naturaleza y ser realmente nosotros mismos.
 Ser nosotros mismos y aprovechar al máximo nuestros propios recursos, esta es la mejor magia. Si bien los guías invocados en la magia blanca nos inspiran para que nos movamos en la dirección correcta para nuestro bien, los guías invocados en la magia negra nos pueden inducir a error, pues las entidades negativas que no quieren evolucionar son la pura esencia del odio y odian incluso a aquellos que les veneran y de la misma manera que nos ayudan a lograr nuestro ególatra objetivo nos pueden empujar a nuestra propia destrucción. Sin embargo, se dice que no necesitamos de estas para hacer el mal ya que para ello nos bastamos solos. Es realmente asombroso: no somos capaces de explotar nuestros recursos para crecer y edificarnos y sin embargo estamos las veinticuatro horas del día autoculpándonos, subestimándonos, menospreciándonos, insultándonos e insultando a los demás...y en esta vertiente no nos quedamos con dos si podemos hacer ocho. ¿Por qué entonces no aprovechamos este potencial en objetivos constructivos y edificantes? Peor que carecer es no valorar ni sacar partido de lo que se tiene.



Kiriel.









 










VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 5

 Cuando enseñé al Maestre Juan el anterior documento de este tema que llevo un tiempo desarrollando y me preguntó si la magia existía-pregunta que viniendo de él yo personalmente valoro como una pregunta trampa que nos hace para pillarnos-le respondí que en el documento que tenía para mostrarle estaba la contestación a tal pregunta. Y para ampliar estas respuestas o estos conocimientos vamos a profundizar en los poderes de la magia, los verdaderos poderes de la magia, es decir, de la magia que reside en nosotros mismos, bastante alejada de los “poderes mágicos” de los que alardean estos personajes de fábula bien conocidos por el público infantil. Porque tales pseudo-poderes de estos pseudo-dioses no es más que una fábula, un mito o una leyenda. Y, como cabrá deducir, quien pretenda hallarse en posesión de tales “superpoderes” no hará otra cosa que fabular(cosa que la psiquiatría considera un síntoma inequívoco de que algo falla en nuestra psiquis distorsionando nuestra propia percepción de la realidad) y en el menos grave de los casos mentir. Pero no estará engañando a nadie porque se le verá en seguida el plumero. Al único que mentirá o engañará será a sí mismo.
 Según palabras del Maestre Juan, la palabra magia viene del vocablo magíster que quiere decir “maestro”. La verdadera magia es una maestría, aunque aquí nos referimos a la Alta Magia reservada a los iniciados que no a la baja magia o magia natural que puede ser ejecutada por cualquiera(véase magia vudú o trabajos de kimbanda alejados respectivamente de la verdadera fe vodún y la verdadera fe kimbadista o, si se quiere, kimbanderina). Pero si la magia existe está en nosotros mismos. El ser vivo es la magia.
Y he aquí sus verdaderos poderes: el verbo, la mirada, el gesto, el pensamiento y los sentimientos. Expongo los que por ahora recuerdo, aunque seguramente empezarán a surgir algunos más.

El poder de la palabra

 He aquí el poder del verbo, las verdaderas palabras mágicas. No hemos de buscarlas en ningún rarefacto manual de “conjuros” ni se trata de un críptico y mareante lenguaje antiguo que sólo lo conoce quien escribió dicho libro. Es nada más y nada menos que las mismas palabras con las que nos expresamos y de cuyo poder pocas veces somos conscientes. Si nuestra magia interna es poderosa y la de nuestro interlocutor esta poco o nada cultivada le afectarán para bien o para mal dependiendo de que mostremos-de forma suficientemente clara para que le llegue la información al subconsciente-benevolencia o desprecio.
 -Nunca llames a nadie “perro judío”-me ha advertido en reiteradas ocasiones la sanadora que me proporciona personas necesitadas para que yo les ayude con mis conocimientos.-Queda flotando en el aire y sus efectos pueden recaer sobre ti mismo en cualquier momento.
 Y lo cierto es que muy pocas veces escuchamos este consejo. Lo oímos, sí, cuando una persona a la que valoramos como tal nos lo da, pero no lo escuchamos que es diferente de oírlo. Lo memorizamos, pero hasta que no lo hemos experimentado realmente no sabemos extraerle su verdadera sustancia. Y nunca mejor lección sobre lo dañino que puede llegar a ser algo concreto que experimentarlo por nosotros mismos.
 Y mucho menos pensamos en lo que el poder del verbo utilizado incorrectamente nos traicionará. Ni tampoco en cómo nos beneficiará si lo aplicamos de la manera correcta. Cuantas veces hundimos a una persona descalificándole y faltándole al respeto. Y qué pocas veces le estimulamos dándole ánimos y apoyo moral.
 Ejemplo: si regañamos a un niño que ha estado a punto de hacer o ya ha hecho una trastada sin otro objetivo que invitarle a que otra vez se lo piense antes de actuar, no pensará que hemos querido salvarle de una situación comprometedora; sólo tendrá en su pensamiento que le hemos pegado bronca. Un niño es por definición un ser inseguro que lleva escasos años en el mundo y no conoce muchas cosas, siendo el peligro o las malas consecuencias precisamente una de las cosas que desconoce. Y al no comprenderlo del todo bien verá en la persona que le ha advertido una especie de ogro o un policía que mete las narices en todo lo que le ve hacer y que le está siempre corrigiendo. En dicha situación no es tanto el poder de la palabra como la forma en que el receptor las asimila. Para un adulto maduro sería de agradecer semejante aviso, cosa que valorará como constructiva o preventiva. Pero ningún niño acepta que le riñan, de forma que la información que en ese momento ha penetrado en su psiquis-no hay que olvidar que la psiquis de un niño es como una esponja que absorbe todo lo que halla en su frecuencia-no le resultará precisamente cómoda. Y según su carácter más o menos díscolo y rebelde bastará una advertencia para que lo siga haciendo. Y esta es una reacción natural común a todos los seres humanos; basta que algo esté prohibido para que queramos experimentarlo.
 Otra muestra de valor del poder de la palabra es la ofensa consciente o inconsciente. Aunque no nos cansaremos de repetir que no ofende la palabra si no la persona. Claro está, dependiendo del valor que yo te dé a ti como persona. Y es ciertamente curioso que mientras en algunas latitudes del sur puedas saludar con un “qué tal, cabrón, qué tal, hijo de puta”, etc. sin ofender, en el resto de las zonas sea tomado como una falta grave o muy grave(por más que lo digas sin pensar en la madre de tu enemigo si no en la faena que este te ha hecho). Aunque después quieras aducir que no habías querido ofender a nadie, pues solo saludabas al estilo de aquellas otras tierras.
 Y muchas veces las personas que toman una palabra que tú luego ni siquiera recuerdas haber dicho o que para ti no reviste la menor importancia como una ofensa en el fondo denotan una parte insegura de su personalidad o un infundado complejo que padece y que no quiere que le recuerden. Aquí debemos distinguir cuando el poder del verbo aplicado incorrectamente puede hacer daño y cuando el receptor filtra la información transformándola en energía negativa perniciosa para su bienestar interior y exterior. La información que le hemos facilitado ha pasado por el filtro de su inseguridad, de sus complejos no vencidos y de sus conflictos internos sin resolver. En este caso se trata de algo similar a los casos de autoenvenenamiento(cuando una falsa noticia de que alguien nos está haciendo un trabajo de magia negra es convertido por nosotros en algo real sugestionándonos y experimentando todos los síntomas y efectos de un auténtico daño mágico). Sin embargo, así y todo conviene andarnos con mucha cautela con lo que decimos.
¡Sobre todo no se te ocurra decirle a una persona que no entiende una cosa! Según su reacción y sus respuestas te puedes encontrar en una situación verdaderamente desagradable, incluso te dolería la conciencia sin comerlo ni beberlo y sin que el Universo hubiera determinado que has obrado mal.
 Tampoco le digas “no, que al igual el problema lo tengo yo que no me expreso bien” porque te estarás minusvalorando. Si aduces que no eres perfecto o que no te expresas bien es difícil que la persona con la que te comunicas pueda confiar en ti y en tus facultades. Y si sigue enfadada por lo otro que antes le dijiste te puede atacar todavía más(“pues claro que no sabes ni hablar”) señalando que utilizas el no ser perfecto como una disculpa para cometer siempre las mismas incorrecciones.
 Es mucho mejor decir en estos casos “no es eso lo que quiero decir” o “no es eso” simplemente de modo que ninguna de las dos partes salga ganando ni perdiendo. De esta forma será un hecho que estará en el aire y sobre el que se estará trabajando hasta que la información llegue como y donde ha de llegar.

La magia del perdón

 Voy a hablaros de la mejor magia que podemos hacer para vencer un pleito o un problema con una persona. Por supuesto, no hablaremos de cómo llevar a cabo ninguna magia vengativa ni de cómo utilizar la hechicería para desnaturalizar la personalidad de nadie haciéndole cambiar sus respuestas emocionales hacia nosotros.
 Un conflicto con una persona puede nacer de un mal uso del poder del verbo o de una errónea interpretación que nuestro interlocutor ha hecho de nuestras palabras. Su consecuente reacción puede también hacerle utilizar mal a esta persona el poder del verbo. En este caso somos nosotros quienes nos llevamos todo el “humo negro” que esta persona ha descargado. También puede ser debido a que nuestro ser tiene magnetismo o imán para extraer las energías negativas del interior de la persona transformándolas en positivas. Si es este el caso se sentirá aliviado y volverá a sonreírnos tras haber soltado lo que le reconcomía. Pero nosotros nos habremos quedado con una cierta incomodidad interna. El poder del verbo es el poder del verbo sea lo que sea aquello que lo motive.
 Aquí hablo de mi propia experiencia ya que me ocurrió con un señor al que me une cierta amistad. Cometí la grave torpeza de haberle dicho “no me entiendes” debido a un tema de conversación en el que no nos acabábamos de poner de acuerdo y su reacción fue tan inesperada y tan fuerte que hasta me marché de su casa temblando y con un sentimiento de culpa. Me sentí culpable en el camino por haber ofendido a una persona a la que tanto debo por lo mucho que me ha ayudado y temí no haberle sabido corresponder y que nuestra relación se hubiera disuelto por un desgraciado uso erróneo del poder de la palabra.
 Confundido y sin poder desterrar el gusanillo de la conciencia decidí telefonearle al siguiente día aprovechando la circunstancia de que antes de aquel incidente me había comentado que le costaba conciliar el sueño para interesarme por su bienestar. Me recibió muy bien y me agradeció la llamada comentándome que primero se había enfadado y luego se había arrepentido, pues no le gustaba enfadarse. Siguiendo con el tema de sus problemas para dormir le informé de que le llamaría constantemente para hacerle un pequeño seguimiento, cosa que naturalmente agradeció, incluso me llegó a decir que se iba sintiendo cada día mejor gracias a los efluvios positivos que yo le enviaba. Se referiría sin duda alguna a las peticiones que hice al Universo para que todo volviera a ser como antes de aquella grave torpeza por parte mía y para que volviera a reinar la paz y la armonía entre nosotros. Hoy las aguas han vuelto a su cauce y la situación está mucho más clara. Todo se quedó en un susto.
 Desde mi propia experiencia voy a enseñaros qué podéis hacer vosotros cuando os encontréis en una situación como esta. Por supuesto, no perderemos jamás los papeles ni incurriremos en un afán de venganza. Ante todo, procuraremos mantener la calma y ser razonables. Y sobre todo ser sinceros con nosotros mismos y reconocer nuestro estado de ánimo.
 No te empecines en tomar la situación a risa. Hemos suscitado la ira de una persona y por graciosas que nos parezcan las palabras precipitadas que ha soltado, no es cosa de reírse. Recapacitemos, pues, en qué estado se encontraba en ese momento. Lo mismo que dijo algo gracioso podía habernos dicho algo triste, e incluso tocarnos nuestra fibra moral. También tú puedes tener un día malo y decir cosas que en el fondo no sientes.  
 Mucho menos te engañes a ti mismo insistiendo en considerarte imperturbable. Si te encuentras con un malestar es señal de que algo no anda bien. Tratar de negarlo o reírte sin venir a cuento de ti mismo no hará si no contribuir a hacer ese malestar más patente. Reconócelo pues y procura buscar un remedio o una solución al respecto. Si las palabras de la persona ofendida te han dejado confuso y necesitas desfogarte, hazlo. Pero no con resentimientos hacia esa persona, ni mucho menos tratando de hacerle un trabajo mágico vengativo, pues por la ley kármica y el efecto boomerang no harás más que ejecutarte a ti mismo. Hay muchas maneras de desfogarse como gritar en la cima de una montaña, golpear un saco de arena o dar patadas a unas cajas de cartón, entre otras.
 Si sientes que tu relación con esa persona se está deteriorando a raíz de esa desagradable situación, tómate tu tiempo y recapacita. No en el castigo que tú o él/ ella vais a recibir del Cielo-que eso es otra tontería-si no en cómo puedes tú solucionar ese conflicto lo antes posible. Para ello te propongo los siguientes ejercicios(yo los he llevado a cabo y me han dado resultado, por eso os los puedo recomendar).
 En primer lugar ponte en contacto con tus guías espirituales o con el santo de tu devoción y háblales del problema. Si no puedes inspirarte para orar o no encuentras palabras para explicar lo sucedido, simplemente retrocede a la escena mientras invocas a tus guías y preséntasela como si les estuvieras mostrando una película. Mantente en este estado de meditación durante los instantes que creas necesarios y después descansa. Deja tranquilamente que te llegue la inspiración. Después actúa según te vayan indicando.
 Ante todo procuraremos diariamente pedir al Universo que se reestablezca la paz, el equilibrio y el amor entre nosotros y la persona con la que nos hemos discutido. Si la persona ha estallado, pero tú has guardado silencio ya tienes medio camino andado, pues dos no chillan si uno no quiere. Y, naturalmente, no nos dejaremos llevar por nuestras debilidades ni nos dejaremos arrebatar por el orgullo malsano. Muchas personas llevadas de estos impulsos afirman: “Yo no iría ya ni a visitarle. Me dan ganas de mandarle a la mierda y dejarle que se pudra con su remordimiento de conciencia por lo que me ha hecho, si es que tiene conciencia”. Esta reacción, aunque natural, es uno de los móviles de los trabajos mágicos negativos. Con ello estamos envenenando nuestra propia mente y estamos creando un mundo de negatividades castigando así a la persona. De modo que deberíamos tratar de erradicar este destructivo sentimiento de nuestro propio ser.
 Premisas básicas para obtener un buen resultado. Los beneficios que podemos obtener con estas tres reglas de oro son tan óptimos como inesperados. En vuestras manos está seguirlas o rechazarlas. Estas son:

 En primer lugar NO SE MANDA A NADIE “A LA MIERDA”. A menos que se trate de una persona que te absorba, invada tu intimidad descaradamente y con la que te resulte difícil la relación o la convivencia, esto sería un equivalente de abandono en un lugar mísero, pútrido y corrupto a una persona que sabemos positivamente que necesita nuestra ayuda. Un instructivo pasaje nos muestra la rebeldía y el engreimiento de Iblis creado de fuego que se niega a adorar a Adán que ha sido creado del barro al considerarlo de naturaleza inferior, a lo que el Supremo Creador responde: “¿Qué es lo que te impide adorarle cuando yo te lo mando?”

 En segundo lugar NO SE DEJA A NADIE QUE SE PUDRA. Sea con su remordimiento de conciencia, sea con su risa interior porque te haya dejado a la altura del betún. Nadie con corazón y buenos sentimientos abandona a un ser querido en la podredumbre, volvemos a lo mismo del anterior apartado. Si siempre habéis tenido una estrecha relación y os queréis, seguro que se arrepiente sin que para ello precises orar al Universo. Si ha sido una reacción solamente ocasional por su propio peso caerá.

 Y en tercer lugar NO SE DESCALIFICA A NADIE PONIENDO EN TELA DE JUICIO SU CONCIENCIA. Y déjate de repetir tanto esta exasperante y victimista  frase: “me ha hecho”. También hemos de valorar, recordadlo, si nos hemos portado bien nosotros o si hemos sido cautos con nuestras expresiones. Solamente podremos tranquilizar nuestra propia conciencia obrando de manera recta y justa. Y si en última instancia tuviéramos de verdad mejor conciencia que esa persona para nosotros será. No vale la pena alardear de ello.
 Y tras la petición de paz y amor al Universo entramos en juego nosotros mismos, nuestra propia magia y nuestros propios recursos. Si somos estudiosos de temas como la sanación y la meditación, enseñaremos a esta persona a relajarse y le daremos algún remedio que pueda calmar sus males internos. Si no es nuestro caso, simplemente podremos hacerle reír por alguna anécdota divertida o por un inofensivo juego de palabras con doble sentido. Si somos diestros con el dibujo, podremos dibujarle unas viñetas cómicas con personajes y situaciones creados por nosotros mismos para hacerle pasar un buen rato. El abanico de posibilidades es, como vemos, infinito. Ahí ya os dejo trabajar vuestra intuición...
 Para que vuestra magia tenga más fuerza os puedo recomendar esta petición de paz y amor: “pido al Universo que vuelva a reinar la paz, la armonía, el amor, la estabilidad y el equilibrio entre (tu nombre) y (nombre de la persona con la que te quieres reconciliar). Que esta petición de paz y amor se multiplique por tres y se eleve a la enésima potencia en el Infinito llevando la paz a todo el Universo. Gracias, Divina Providencia”. Si sientes que has obrado correctamente al respecto los resultados y los beneficios no tardarán en darse a conocer. Cuando los percibas no olvides dar gracias al Universo por haberte indicado el camino correcto.
 Recordad, ante las heridas espirituales...echemos mano del botiquín de urgencia espiritual. Si nuestro ordenador se estropea no puede estar estropeado toda la vida; hay que llamar al técnico. Si una relación se halla en zozobra en nuestras manos está el sujetarla con cuerdas resistentes antes de que se hunda del todo; para ello invocaremos a nuestros guías y confiaremos en ellos plenamente.

 El poder de la mirada.

“NO ME MIRES DE REOJO QUE ES MIRADA DE TRAIDOR...”

¿Cuántas veces habremos oído frases de este estilo?¿Es un poema, una canción, un dicho popular...?
 Sea lo que sea no podemos dejar de estar de acuerdo. Existen miradas dulces y bienhechoras igual que existen miradas frías y traicioneras. Los griegos interpretan las miradas frías de reojo como presagios o avisos de muerte. Y una mirada de refilón que se pueda adivinar cargada de desprecio o de malas intenciones no produce precisamente un efecto balsámico en la persona a la que va dirigida.
 En otras ocasiones hemos hablado bastante del famoso y temido “mal de ojo”. A menudo se habla del poder de la mirada, incluso sabemos que muchos animales poseen la capacidad de inmovilizar a sus presas con la mirada. Aunque la mirada precisa ser acompañada de la expresión del rostro para dar a entender mejor el mensaje que quiere transmitir, a menudo se basta por sí sola, pues una mirada malévola no solo puede prescindir de una boca retorcida que supuestamente le hará cobrar más fuerza si no que puede borrar todo significado de dulzura de la más amplia de las sonrisas. Resumiendo: LA MIRADA PUEDE TRANSFORMAR UNA SONRISA DULCE EN UNA SONRISA VENENOSA. Así como según las escrituras Jesús podía convertir el agua en vino, la mirada puede convertir lo dulce en amargo. Tan poderosa es como este gran Maestro Ascendido.
 Testigos de ello somos en el vivir cada día. No hay que acudir a círculos donde se practique la magia malintencionada(calificativo que prefiero usar antes que “blanca” o “negra” para tener más claro cuándo estamos obrando rectamente y cuándo no); nos basta pasar ante la puerta de un restaurante que en esos momentos se halle en plan promocional. Los recepcionistas que nos invitan a visitar su local con una sonrisa tienen su trasfondo de interés. Si observamos detenidamente no nos será difícil diferenciar una sonrisa dulce de una sonrisa forzada. Si con solo el ofrecimiento entramos ahí y les hacemos gasto nos estarán “amigos”, si les decimos “gracias, ya vendremos un día...” pues tampoco pasa nada, “tan amigos”. Nos despedirán con una sonrisa de gratitud, pero detrás de esa sonrisa deduciremos más o menos lo que estarán pensando: “por culpa de estos ratas no nos vamos a hacer millonarios”.
 Y es que aunque no lo parezca, resulta bastante fácil captar mensajes mentales con solo mirar a una persona de frente. Cuando una persona te escucha, pero baja la cabeza o pone cara de fastidio significa que te atiende y te contesta afirmativamente-con monosílabos-cuando lo cree oportuno únicamente por educación; en realidad no le interesa ni le importa lo que le estás explicando. Tu interlocutor solo ve una boca que se mueve, pero no está extrayendo la sustancia; no quiere estar informado del tema que quieres tratar con él. Asimismo cruzar las piernas-a menos que por problemas óseos o articulares, o sencillamente por costumbre, sea tu postura cómoda-expresa “no quiero recibir, me cierro en banda”. Lo mismo puede revelar una mirada baja o unos ojos semicerrados, exactamente igual que cuando nos baja el fósforo y nos empiezan a pesar los párpados de sueño. Nuestra mente ya no puede asimilar nada más por ese día aunque quiera.
 Y una mirada desconfiada generará eso mismo que transmite: desconfianza. Este tipo de miradas son generalmente las que nos quitan las ganas de hacer lo que queremos hacer. Nos hace dudar de nosotros mismos, de nuestro propio potencial, en suma nos resta autoestima y confianza en nosotros mismos. La persona que así nos mira ve absurdo o utópico nuestro proyecto y de alguna manera hace que nosotros también lo veamos así. Por más que nos digan “eres tú, eso es cosa tuya, tú mismo” parece que sea el otro quien va a beneficiarse si el proyecto se lleva a cabo o a perjudicarse en caso contrario. Por más que nos esforcemos, la mirada de desconfianza siempre estará presente en nuestra mente y si no intentamos hacernos superiores a nosotros mismos en ese sentido, tanto nos dominará y tanto miedo nos generará que acabaremos tirando la toalla dejando escapar así la oportunidad de introducir cambios importantes para nosotros en nuestra vida. Ahí es cuando bastan para arruinar una vida dos palabras irritantemente sencillas: “lo dudo”.
 Y no hablemos ya de las miradas tristes capaces de conmover al más pintado y de la que se valen los vampiros psíquicos y parásitos sociales-otro exasperante tema del que tendríamos que hablar-para sacar el máximo provecho de nosotros. Si el poseedor de los ojos tristes trata de sonsacarnos  el dinero o cualquier cosa que necesitemos y ello ocurre es porque ha tenido o tiene poder sobre nosotros. ¿Otra forma de mal de ojo? En absoluto. Yo lo calificaría más bien como un caso de autoenvenenamiento. No hemos sido capaces de pronunciar una palabra tan sencilla como “no”. El poder de la mirada lastimera, la magia de la voz plañidera, las palabras mágicas de la película sobre su vida que nos acaba de contar y su relación con nosotros han sido más efectivas que el altar, las velas, la espada, la vara, el incienso, el cáliz o la copa y las túnicas sobre las que pende el talismán consagrado, todo ello encaminado a obtener la realización de un deseo. El parásito social no necesita pensar ni organizar tanto y ese es el mérito y el misterio del verdadero mago: con su sola presencia consigue todo lo que quiere. El parásito social o si se quiere el vampiro psíquico es un mago en potencia solo que lo que obtiene a través de su magia-de sus recursos internos-es para sí más que para los demás. Posee verdadera magia, pero no puede ayudar con ella a nadie puesto que no ha aprendido a pensar en otra persona que no sea él mismo o ella misma.
 Y nuestra propia magia, nuestros propios recursos, no han estado muy fortalecidos frente a ese mago ególatra y absorbente. ¿Qué tiene su magia que no tenga la nuestra que ha podido apagárnosla de esa manera? No hay ninguna diferencia entre ambas, la magia es la magia y recursos internos poseemos todos. La única diferencia es que el parásito ha sabido sacar partido de estos, ha jugado con una carta marcada y nos ha ganado.
 ¡Pues esto no puede ser! Humanos somos, buen corazón tenemos, pero de ahí a ser tontos del bote va una milla. La mirada que este mago-vampiro nos dirigirá una vez le hayamos hecho su favor, aunque pretenda expresar gratitud será un mal disimulado “jódete que me he salido con la mía”. El poder de su mirada nos hará sentirnos torpes y dormidos en la inopia cuando lo que queremos es mejorar, ser más listos, más inteligentes y estar más despiertos. “Vampiros que tomamos por amigos” los llama una gran figura del Ocultismo. El filósofo Nietzsche despotrica contra ellos en su “El caminante y su sombra” manifestándose en contra de querer inspirar pena en lugar de explotar las propias capacidades y ser capaz de salir adelante.
 Hablando con un amigo mío sobre los vampiros me hizo estas observaciones:
-Para que un vampiro se infiltre en tu casa y en tu vida íntima le tienes que invitar. Pero es muy hábil y sabe cómo hacer que le invites.
 Y tanto. Con sólo el poder de la mirada. Un poder que nos tendrá castigados de por vida, un poder que nos hará sufrir, un poder que no nos concederá un momento de respiro. Y todo eso sin necesidad, sin utilidad y, lo que es peor, sin habérnoslo merecido. Aunque no podremos decir que ha sido sin haberlo buscado, porque lo hemos ido a buscar de alguna manera. La mirada también posee el poder de hacernos sentir culpables; si no cedemos a los deseos del parásito social nos sentiremos culpables por no ayudar a un supuesto necesitado. Si lo ayudamos para evitar sentirnos culpables-otra de sus artimañas-el complejo de culpa vendrá después por otro lado cuando descubramos todo el pastel: nos sentiremos estúpidos por habernos dejado engañar.
 Para evitar esto construyamos en nuestro interior una verdadera torre de fortaleza. Un sencillo ejercicio que podemos llevar a cabo en cualquier momento y lugar-pero que solo dará el resultado apetecido si se es consecuente con lo que se afirma; no funcionará  decir “mañana habré dejado de ser fumador” si pasado fumo como una chimenea-es la presencia del “Yo Soy”. Con tranquilidad y seguridad decid mentalmente:
“Yo Soy la integridad. Yo Soy la personalidad. Yo Soy la entereza. Yo Soy la resistencia. Nadie tiene poder sobre mí. Nadie me puede hacer dudar de mi calidad humana. Nadie ni nada me preocupa. Nadie puede ni tiene derecho a organizar mi vida, pues esta solo depende de mí y de las decisiones que YO tomo, pues Yo Soy el tomador de mis propias decisiones, Yo Soy el organizador de mi propia vida, Yo Soy quien sabe valorar lo que le beneficia y lo que no, Yo Soy mi propio beneficio, Ser el que Soy, ser cómo Soy, Ser quien Soy es mi gran beneficio. Yo Soy una persona íntegra que está satisfecha de sí misma, de sus metas y de sus logros. Yo decido, organizo, valoro, cuestiono y Yo Soy quien sale beneficiado de ello”.
 Visualiza al parásito social fundiéndose como la cera derretida ante estas palabras pronunciadas por ti. Tras esta meditación afirma : “No existen parásitos sociales en el mundo y si existen a mí no se me acercan, pues saben la batalla perdida de antemano”. Si se trata de una persona concreta di su nombre y a continuación: “lo tiene muy crudo conmigo”. Repítelo tantas veces como creas necesario hasta que sientas que se ha hecho realidad. Descansa y ten la certeza de que nadie se te acercará con intención de robarte tus energías.

La magia del pensamiento.

 Radiónica, psicotrónica...y un largo etcétera de términos para esta maravillosa magia de la que todos disfrutamos: la magia del pensamiento.
 ¡Qué magno poder el del pensamiento! Cuántas maravillas podríamos hacer con él...caso de saber usarlo debidamente. Cuánta paz en el mundo habría, cuantos problemas seríamos capaces de solucionar, cuantos deseos lograríamos...
 ¡Ojalá, y eso fuera tan fácil! Pero la cruda realidad es otra; ningún poder mental detendrá ninguna guerra, ningún subdesarrollo, ninguna calamidad, a menos que los poderosos de la tierra lo decidan.
 Y por otra parte muy difícilmente seremos nosotros capaces de generar pensamientos de luz, paz y amor con los que podríamos beneficiar la salud de los seres vivos, alcanzar nuestras metas y ser felices. Nos quemaremos por el trabajo, rabiaremos por un dolor, discutiremos con la pareja o con los amigos, tendremos algún problema familiar...inevitablemente nuestra psiquis siempre estará contaminada o infectada por algo. Dicen los profesionales de coaching que ese trabajo que tenemos que hacer que no nos gusta nos arrebatará mucha energía en el sentido de que si nosotros mismos no estamos satisfechos difícilmente nuestro prójimo se sentirá satisfecho, pues no seremos capaces de brindarle lo mejor de nosotros mismos. Las metas que nos impone la sociedad o las que nosotros mismos nos imponemos ansiosamente en lugar de saborear cada etapa y cada oportunidad, las trampas consumistas en las que caemos seducidos por la publicidad agresiva y un sinfín de manipuladoras agresiones sociales nos resta energía positiva ya que nuestro pensamiento es siempre más potente en los miedos y en las frustraciones. Los poseedores de la mirada desconfiada capaz de transmitir desconfianza encuentran en su prójimo agredido por el condicionamiento social un perfecto terreno fértil para sembrar sus insidiosas semillas que inexorablemente terminarán germinando y dando sus pérfidos frutos.
 Para liberarte de esa contaminación mental y estos virus condicionantes, busca un espacio y un tiempo donde no se te pueda molestar. Busca un lugar en el campo donde no haya gente y túmbate a la sombra de un árbol. Si se trata de un árbol frutal y puedes ir comiendo alguna fruta, tanto mejor. Para transmitir dulzura es preciso sentirla, es preciso saber lo que es.
 Cierra los ojos y despójate de toda preocupación. Los hechos son los hechos y tú eres tú. Tú mismo eres la luz, tú mismo eres energía, una energía que regenera y revitaliza todo el planeta. Visualízate en forma de ángel, vestido de blanco, con una tez aniñada y con unos abundantes cabellos rubios. Imagínate flotar en el aire y ser mecido por las olas del mar. Mientras mascas la fruta-si es el caso-ese dulzor que tu paladar siente es transmitido a todas las personas que lo necesitan, es enviado a los lugares donde es necesario. Tu corazón es de color rosa brillante y despide destellos de luz blanca, destellos de luz blanca que inundan a las personas que acuden a tu mente. Ahora visualiza aquellos deseos que te gustaría ver cumplidos. Visualízalos durante largo rato hasta que sientas que se han hecho realidad. Repite este ejercicio diariamente o siempre que puedas de forma que tus deseos cristalicen. Da gracias al Universo por obtener esos deseos o por encontrar en tu camino otro tipo de sorpresas con las que no contabas y que te resultan tanto o más gratas que aquello que en principio formulaste.

La magia del gesto

 La magia del gesto o el mudra. Así son denominados los gestos que pueden originar algo. Los gestos que forman parte de un ritual son una forma de mudra.
 Este tipo de gesto lo realizamos casi a diario siendo o no conscientes de ello. Dos ejemplos bien famosos de mudra son el “que te den”(alzando el dedo medio manteniendo el resto cerrados) y el “cornu”(signo de los cuernos extendiendo el índice y el meñique manteniendo ocultos el resto). Sin embargo el verdadero significado de estos gestos varía mucho según cada cultura quiera interpretarlos. Mientras que para algunos son signos ofensivos y maldicientes(el “cornu” es utilizado en la famosa “misa negra” y en ciertos rituales de evocación de poderes tenebrosos) en otros lugares como Italia son tenidos como una protección o una defensa muy antigua contra el mal de ojo.
 Sin embargo, este gesto forma parte del llamado lenguaje secreto del cuerpo. Lo queramos o no nuestra postura y nuestros gestos nos delatan. Como decíamos al hablar del poder de la mirada no solo una mirada cansada nos revela que a la persona no le apetece conversar ni escuchar. Ya observamos que cruzar las piernas-a menos que sea esa nuestra habitual postura en estado de reposo-o cruzar los brazos-exceptuando que tengamos frío-expresa “no quiero recibir”. Se dice que tocarse la cara durante un diálogo revela tensión e inseguridad por parte de la persona que se explica. Un gesto cansino ante una orden revela que a pesar de estar la persona mandada dispuesta a ejecutar dicha orden no está muy de acuerdo con ella o se le antoja una misión difícil o arriesgada. En hipnosis y en acupuntura no deben cruzarse las piernas si se espera que la terapia de resultados. Durante un ritual o una consulta de adivinación no deben cruzarse brazos ni piernas a fin de permitir que el magnetismo pueda fluir libremente.
 Sin embargo, en la superstición el cruce de dedos(acompañado con la expresión “lagarto, lagarto” que puede ser considerado también como un mantram o palabra de poder para reafirmar la magia del gesto) está considerado como una efectiva protección contra las malas influencias, la mala suerte y el mal de ojo.

Nuestras peticiones al mundo espiritual.

 Y para concluir con este escrito he seleccionado para vosotros dos cuentos que nos narraban en la escuela-o que solíamos leer en los libros de texto-que querían ser un ejemplo de cómo una petición nos ayuda en realidad.

 Érase  una vez un hombre que le huía mucho al trabajo. Pasose el verano holgando y cuando llegó el crudo y frío invierno se encontró sin polainas. Desesperado, este hombre decidió pedir ayuda y consejo a un compadre suyo, el cual le recomendó que acudiera a la parroquia del pueblo y allá rogase al Señor del Gran Poder para que le ayudase a salir de su situación.
 Esta fue la plegaria que este señor pronunció arrodillado con toda su poética inspiración y con todo su fervor:
-¡Oh, Señor del Gran Poder
 que todo el mundo gobiernas
 dame, dame unas polainas
 para cubrirme las piernas!




A lo que una voz pronunció también en verso:

-Soy Señor del Gran Poder
  yo todo el mundo gobierno.
 Polainas compra en verano
 Y las tendrás en invierno.


  Y no solamente es así como nos puede ayudar una petición a las fuerzas cósmicas(guiándonos para que busquemos la solución adecuada). Se dice que debemos ser selectivos con lo que decimos, pues puede convertirse en realidad. La misma magia de la palabra es un mensaje enviado al cielo. Tanto si decimos “esto es” como si decimos “Dios quiera que sea”. Es una plegaria que estamos elevando al cielo, solo que en el primer caso es una afirmación y en el segundo una oración.
 La cuestión es que en el cuento que ahora os narraré tres mendigos pasaron frente a un terrateniente pidiéndole un poco de trigo.
-¿Trigo?-les preguntó.-¿De qué trigo habláis? Eso que veis ahí es un montón de tierra.
-Dios quiera que se te vuelva tierra por tu avaricia...-le respondió serenamente uno de ellos.
 Molesto, el terrateniente los expulsó amenazándoles con soltarles sus perros y con ser molidos a palos por sus criados. No bien hubieron pasado unos minutos cuando el trigo comenzó a tomar un color extraño y grisáceo. El terrateniente se acercó para tocarlo y...
-¡Tierra!-exclamó tan lloroso como sorprendido.-¡Es tierra!
 En efecto. Su afirmación había cristalizado y la plegaria inconsciente de los ofendidos mendigos había tenido su respuesta. El trigo se había convertido en tierra. Su pajar no albergaba paja si no tierra. Y sus instrumentos de cultivo se habían convertido también en tierra por no haber querido compartir sus riquezas con los más necesitados.

 La conclusión de este cuento en lo referente a nuestra magia y nuestras peticiones es que deberíamos ser más selectos con lo que afirmamos y con lo que pedimos, pues de alguna manera podríamos hacerlo real. Desde un punto de vista simbólico y arquetípico la moraleja podría ser que cuando no compartimos o no damos salida a nuestras riquezas interiores aquellas acaban muriendo o deteriorándose. Cada vez que transmitimos energía a los demás aquella se regenera y a la vez que damos recibimos por la ley de retorno.
 Si crees que ganarás un premio de literatura, por citar un ejemplo, y lo afirmas con total confianza en ti mismo, ten la seguridad de que así será, pues ayudado por tus guías-para no desfallecer que no para encontrártelo todo hecho-habrás trabajado duro y habrás obtenido tus frutos. Lo mismo sucederá si no creyendo ganar ese premio afirmas “se pueda o no se pueda, por lo menos lo intentamos”. Porque todo lo que se hace con amor termina aportando algún beneficio, a veces, por el lado que uno menos se imagina. En cualquier caso ten presente que nada se nos quita de las manos, si no que esta nos es abierta para depositar en ella algo mejor que nos merecemos tener.
 Yo depositaré en vuestras manos amor, luz y energías positivas.



Kiriel.

VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 6

 De cómo los mensajes llegan distorsionados.
 En un fragmento de un artículo sobre un determinado tema:
 “a pesar de que muchos quimbandeiros y batuqueiros argumentan estar practicando la umbanda, personalmente considero que son una modalidad del satanismo”

o sencillamente en una conversación normal:
 “tú estás buscando en la revista el candomblé para hacerme brujería”.

 En el primer caso es un trabajo de investigación antropológica y en el segundo es una broma. Pero tanto en un caso como en el otro el mensaje puede llegar con interpretaciones no deseadas dependiendo de lo que recoja en su frecuencia.
 El referido trabajo tiene que ver con la umbanda y su historia. Su autor narra haber asistido a una sesión de batuque-una de las subdivisiones del umbanda-y como introducción al tema para que el público lector pudiera comprender qué era aquello de lo que se estaba hablando consideró oportuno dar una pequeña lección de historia acerca de estos cultos.
 Como cabe esperar siempre que se habla de estos temas, iniciados y sacerdotes de estos cultos habrán puesto el grito en el cielo a la lectura de dicho artículo por algunas afirmaciones encontradas en el mismo. “Dentro del umbanda existen otras tendencias-candomblé por ejemplo-dos de las cuales-la quimbanda y el batuque-difieren ostensiblemente de la primera”.
 Pero no es mi objetivo que nos peleemos por-a mi parecer-una nimiedad como esta. Es preciso señalar no solo las diferencias entre estas líneas o creencias, si no entre un iniciado en las mismas y un antropólogo.
 Umbanda, oiremos de boca de los mismos iniciados y sacerdotes de estas creencias, no tiene nada que ver con candomblé. En efecto. Como hemos señalado alguna vez, Umbanda, procedente de los pueblos africanos del Congo, se ocupa del culto a las divinidades mas los antepasados, mientras que Candomblé, procedente de Nigeria, se centra casi exclusivamente en el culto a las divinidades.
 Sin embargo también debemos tener en cuenta que un periodista o un antropólogo no son necesariamente unos iniciados. El iniciado nos enseñará o nos transmitirá lo que sabe siempre que las normas y los valores de la línea a la que pertenece se lo permitan, mientras que el periodista o el antropólogo nos transmitirán o nos mostrarán la información tal cual la han encontrado o la han recibido, generalmente de boca del propio iniciado. El periodista aducirá haber recabado la información de boca de los mismos iniciados o haber estado presente en ese tipo de ceremonias como una garantía de que es la pura verdad lo que está diciendo. De manera que yo recomendaría a quienes estuvieran interesados en conocer estas religiones leer  tanto libros escritos por los mismos iniciados como libros escritos por antropólogos y artículos escritos por periodistas. También sería bueno elegir, comparar y contrastar diversos puntos de vista.
 Bien, ahora a lo que íbamos. Volviendo a la extracción que hicimos antes del mencionado artículo veremos de qué manera se distorsiona un mensaje:

“a pesar de que muchos quimbandeiros y batuqueiros argumentan estar practicando la umbanda, personalmente considero que son una modalidad del satanismo”.
 Si este artículo-o cualquier otro que así se exprese, entiéndaseme que no estoy queriendo acusar a nadie ni descalificar nada-cae en manos de una persona que no conoce del todo ciertos conceptos ni diferencia entre unos y otros interpreta lo siguiente:
“ la quimbanda y el batuque son dos formas de satanismo”.
 Un tercero reinterpreta esta frase:
 “la quimbanda y el batuque son satánicos”.
 Y todavía un cuarto sin querer o queriendo hunde y critica:
 “la quimbanda y el batuque son magia negra, sacrifican animales en sus ritos y solo sirven para dañar y hacer el mal”.
 Y es así como queda en entredicho la magia blanca y lo positivo que hubiéramos querido encontrar en estas líneas.
 Y otro tanto sucede con los cultos candomblé y brujería.
 Candomblé son los ritos yorubas de Brasil y brujería es el culto a la madre naturaleza.
 Los diccionarios definen el candomblé como una danza fetichista o un baile grosero y la brujería como el arte de privar de la vida, del juicio y de la salud a una persona elegida como víctima mediante una operación de carácter mágico. En la mentalidad popular la brujería es un mal que le hacen a la gente.
 En cuanto a la palabra fetichismo la mentalidad popular suele reducirla demasiado fácil y rápidamente-de modo diríamos casi instintivo-al término del sexo. Por lo cual suponen que una danza fetichista equivaldrá a un baile exhibicionista o por lo menos muy poco escrupuloso. Y si la definición del término candomblé es danza fetichista no cabrá a los simplistas la menor duda de que el candomblé es pervertido, más todavía si según aquella conversación “buscar el candomblé para hacerme brujería” podemos servirnos de él-o de las técnicas de magia blanca o de magia negra que dentro de esa línea sea costumbre llevar a cabo-para fines diversos.
 Fetichismo tiene dos significados: el culto a los fetiches-equivalente al gentilismo o paganismo que son los cultos creados por un pueblo o grupo en cuyas ceremonias se utilizan imágenes talladas-y la necesidad de la presencia de un objeto-normalmente una prenda-para estimular la sexualidad adormecida en la propia naturaleza.
 Si tenemos en cuenta que el cristianismo luchó contra los cultos paganos también en este caso el candomblé cuyo calificativo de fetichista es definido como culto pagano o creado por un grupo-que se sirve también de imágenes y símbolos-sale perdiendo. Ni está bien visto el fetichismo sexual ni lo está el culto a imágenes talladas.
 Lo que recibe la adoración cúltica no son en realidad esas imágenes si no las entidades o divinidades en ellas representadas. La imagen solo serviría como un soporte o como un hilo conductor de la energía del devoto que la envía hacia el alma de la divinidad. Unos meros medios físicos sin más objetivo que potenciar las energías mentales conjuntas de la congregación religiosa.
 Todos estos argumentos son propios de “abogados del diablo” a la vista de los críticos y los más acérrimos enemigos del candomblé, la brujería y los cultos paganos. Tropezamos aquí, pues, con dos problemas: la malinterpretación de un mensaje o el afán por el desprestigio de lo que no interesa.
 A menudo ocurre que una visión particular-el autor de tan interesante como ilustrativo reportaje dice “personalmente considero”, no “yo sé” o “yo veo” que es distinta afirmación-se mezcla con una verdad absoluta(que no existe)y esto es mayormente lo que da lugar a malentendidos. El reportero tiene su visión como el iniciado o el fiel de estas creencias tienen la suya. Escribamos por encargo un artículo o un libro sobre un tema tan controvertido como el Satanismo. Dada la gran oleada de crímenes ritualísticos que tan grande huella dejó en su época disponemos aparentemente de buen material para escribir un libro bastante extenso y si se tercia una enciclopedia de cinco tomos. Auxiliándonos con los libros ya editados sobre la historia de la inquisición, la brujería desde Mesopotamia hasta nuestros días pasando por la Edad Media, las sectas religiosas ya existentes-recopiladas una tras otra en libros escritos por periodistas especializados-algunos grimorios fáciles de conseguir hoy día en el mercado, cualquier libro de psicología-para estudiar los problemas psicológicos derivados de la adicción al Ocultismo-y unos cuantos recortes de periódicos, lograremos confeccionar una buena enciclopedia de Satanismo que quizá titulemos-posiblemente muy a la ligera-“El Satanismo y los peligros del Ocultismo”. Pero ¿Nos habremos detenido antes a estudiar qué son realmente una y otra cosa? Posiblemente no. Es el título que nos ha gustado para nuestro trabajo y no vamos ahora con la prisa que tenemos a hacer correcciones, aparte de que ningún otro título le pega.
 Esta postura cómoda, a menudo típica del escritor o el reportero sensacionalista, suele ser si no la fuente principal si una de ellas causante de los frecuentes malentendidos. Cuando el escritor recibe de la casa editora el encargo de escribir un libro sobre este tema, aunque no lo parezca, interiormente ya ha terminado su trabajo. Ya tiene una idea hecha, ya sabe lo que va a poner y ya le interesa por algo escribir ciertas cosas. ¿Qué vamos a enseñar-piensa él-que no sepan a un público que ha sido ya testigo de asesinatos rituales que con tanta frecuencia saltan a la prensa, víctimas de adivinos fraudulentos que les han sacado el dinero o que han perdido a un ser querido en el cráter de una secta peligrosa? Aunque entiende que alguno que otro puede tildarle de simplista, sostiene que no es su misión contentar a esos puristas como él los puede llamar y se limita a dar una información porque cree que puede ser útil y vital estando el mundo como está en alerta roja.
¿Qué son Satanismo y Ocultismo?
 Satanismo es culto a Satán-vocablo hebreo que significa “opuesto”, podría ser simplemente el principio opuesto o la parte opuesta del principio-y Ocultismo es el estudio de las fuerzas ocultas de la naturaleza y los poderes ocultos del ser vivo(no digo “del hombre” porque también los animales poseen si no facultades ESP[1] sí un sexto sentido, como un perro o un delfín que captan ultrasonidos que no llega a captar el oído humano, o aquellos animales que hablan por signos y saben encontrar el camino de su casa cuando se extravían).
 El Satanismo por ser un culto o una línea y el Ocultismo por ser un tema de estudio no son de por sí positivos ni negativos, depende de las manos en las que caigan y con qué finalidad se utilicen. El peligro no está en estos de por sí ni por lo que son sino en los errores de aprendizaje obtenidos y en la estabilidad o la inestabilidad de la mente de las personas que eligen este camino. No es que los caminos sean fáciles ni difíciles, inocuos ni peligrosos, somos nosotros mismos los que estamos acostumbrados o desacostumbrados a recorrerlos y somos nosotros mismos los que estamos o no estamos preparados.
 Cosa harto sabida es que un animal por peligroso que nos parezca difícilmente ataca al ser humano cuando está saciado o cuando este no le molesta para nada, lo mismo que una droga o un fármaco no causarán graves daños al cuerpo si solo ingiere la cantidad necesaria(prescrita por nuestro médico especialista). ¿Drogas peligrosas? Todo lo que conlleva una composición o un proceso químico lo es. ¿Animales peligrosos? Si la respuesta es afirmativa, cabe pensar que la naturaleza es peligrosa. Pero el peligro no es más que una señal de advertencia. Los verdaderos agentes destructores son la inconsciencia y la imprudencia temeraria. No me cabe la menor duda de que no seréis tan tontos de meter una mano en la boca de un tigre ni de comeros una ortiga en crudo ni de tocar el fuego sabiendo las consecuencias de todo ello, por citar unos ejemplos.
 Los corredores de afirmaciones gratuitas difícilmente se detienen a considerar estos puntos y a meditar sobre estos, siendo el afán de sensacionalismo lo que puede en la mayoría de los casos. Y muchos conceptos cuyas definiciones van cambiando a lo largo de la historia pueden inducir también muy fácilmente a errores de interpretación.
 “El libro supremo de todas las magias” de Alberto el Grande del cual se han hecho varias ediciones y varias adaptaciones libres-de ahí que los grimorios, salvo los de edición facsímil, que hoy día podemos adquirir en cualquier comercio no sean del todo fieles a la versión original de los mismos-se encuentra dividido en cuatro apartados: la magia blanca(secreta y adivinatoria), la magia roja(el verdadero arte para iniciarse con provecho en los secretos de las Ciencias Ocultas), la magia amorosa o verde(que recoge pactos demoníacos, secretos mágicos, fórmulas para amar y ser amado, recetas para apresurar casamientos, mensajes de los sueños, etc.)y la magia negra(que contiene el arte adivinatorio, cartomancia, quiromancia, cafeomancia, amuletos y talismanes). Ignoramos completamente por qué al autor de dicho libro ha coloreado de esa manera estas cuatro partes del mismo.
 Por otra parte este voluminoso libro suele publicarse a veces ya sea por razones técnicas, ya sea por motivos comerciales, dividido en cuatro libritos sueltos. Así encontramos en cualquier comercio uno de estos libritos titulado “magia blanca” esperando encontrar en él rituales para atraer la suerte, recobrar la salud, abrir caminos, etc. y quien desconozca esta singular obra puede decepcionarse al encontrar en ese libro un ritual nigromántico, operación que según los más expertos ocultistas pertenece al campo de la magia negra o Goecia. Es lógico pues que esta persona se pregunte cómo se puede catalogar como blanca una operación que requiere la evocación de fuerzas mortuorias y negativas.
 Por otro lado el que desee aprender cómo hacer magia negra se llevará un chasco al adquirir el librito “magia negra” cuando encuentre que la mayor parte de este está dedicado a la adivinación, a los talismanes benéficos y a unas cuantas recetas para mejorar la salud o para acelerar la dentición en los lactantes, y solamente se dará una pincelada sobre la nomenclatura de los jerifaltes del infierno y de cómo pactar con ellos. Son sorpresas que solemos llevarnos por falta de información o por ausencia de especificación, como por ejemplo que estos libros son extractos de otro libro más grande y más antiguo que los modernos manuales de cómo hacer trabajos que hoy día embotan las estanterías de los bazares ocultistas.
 Por lo que respecta a los otros dos libros restantes “la magia roja” y “la magia amorosa o verde” el primero contiene secretos de la búsqueda de la piedra filosofal-de ahí probablemente que muchos hayan concebido el término “magia roja” como sinónimo de alquimia-y el segundo parece ser el que más se aproxima a la verdad...o teniendo en cuenta que no existen verdades absolutas si no la propia verdad que cada cual tiene, el que más se ajusta a lo que esperamos. Se trata, efectivamente, de un verdadero manual de fórmulas para lograr el amor...aunque los pactos demoníacos en él contenidos cabrían perfectamente en el librito “magia negra”. Lo más curioso-a mi parecer-es que en todos ellos hay un apartado dedicado a la cartomancia. Lo más incautos y los menos avezados en según qué materia pueden interpretar muy fácilmente que están “haciendo magia” al echar las cartas según los patrones ahí expuestos cuando lo que en realidad hacen es adivinación. De ahí que la sociedad y la mentalidad popular denominen “mago” o “brujo” a un tarotista, quiromántico o cualquiera que utilice las artes adivinatorias.
 Otro tanto sucede con afirmaciones encontradas en manuales de adivinación: “el médium debe concentrarse lo más posible al echar las cartas”, “echar a menudo las cartas contribuye al desarrollo de la clarividencia”. La interpretación y la inmediata reacción del lector ignorante es “soy un médium dado que echo las cartas” o “soy clarividente por echar las cartas o gracias a echarlas muy a menudo”. Y debido o bien a que el libro no especifique que la baraja adivinatoria es solamente un soporte para la concentración del médium o del vidente, o bien a que en realidad sí que lo especifique, pero en nuestra ansiedad por adquirir estas facultades-o que nos hayan venido ya regaladas-no queramos escuchar lo que no nos convenga, es fácil autotitularse médium o vidente con solo exhibir la baraja que utilizamos y mirar al objetivo de la cámara que nos va a retratar para nuestro anuncio con ojos como platos.
 ¿Y por qué se da el fraude en la adivinación y la magia como en ninguna otra profesión? Simplemente por los mensajes distorsionados y la desinformación que nos llega. Una amiga mía-digamos mejor una especie de amiga puesto que no le aprecio demasiado-se compró una baraja de tarot por capricho, aprendió a usarla junto con una baraja española corriente y con solo unos cuantos libros que se había leído de cómo hacer hechizos ya se creía la bruja maestra...cuando solo era una lectora asidua de estos temas y, por cierto, andaba bastante confundida con el concepto que tenía de su propia persona y de cómo ir por la vida y por el mundo. Más que ofrecer consejos sensatos a las personas que acudían a consultarle parecía disfrutar siendo la mensajera de noticias desagradables y “echando un cenizo” a aquellas.
 En contrapartida tengo otra amiga lectora habitual de estos temas que esta sí que es una buena maestra. Posee los tres grados de Reiki mas la maestría(ella ha sido quien me ha iniciado a mí en los dos primeros)y no obstante quiere seguir aprendiendo. A cambio de haberme dado estas iniciaciones me pide unas clases de tarot que yo le imparto encantado de la vida porque enseñando a los demás aprendo y me adiestro yo también. Y esto dice mucho en su favor, pues saber que no se sabe nada o por lo menos tener la humildad de reconocer que no se sabe todo ya es saber mucho. Como dice una moraleja de los famosos cuentos del Conde Lucanor, “el que sabe sabe que no sabe y el que no sabe se ciega con que sabe”. Y no hay peor ciego que el que no quiere ver. La malinterpretación de un mensaje siempre se puede rectificar y encarrilar por el camino correcto sencillamente deshaciendo el camino hecho y retomándolo desde su origen para que la información llegue como se espera o tenga el efecto deseado. Pero la ceguera voluntaria y testaruda no puede rectificar nada, ni tan siquiera lo quiere así.
Y a punto de cerrar el presente documento somos testigos una vez más de la malinterpretación de las enseñanzas del esoterismo, el ocultismo y la magia(empezando por el hecho de meter estos términos en un mismo saco siendo sus respectivos significados muy diferentes). Esta mañana he acompañado a un amigo interesado en estas temáticas. Tiene fe en el poder de los amuletos y talismanes que adquiere siempre que puede. Según me ha comentado esta interesado en aprender magia. Le he recomendado varios libros sobre la misma que a mí me han parecido tan elementales como interesantes, sobre todo uno muy concreto que se considera que no debería faltar en la biblioteca del ocultista o estudioso del ocultismo que de tal se precie, pues contiene las leyes del ocultismo, ejercicios prácticos preparatorios, definición del perfil del ocultista y su jornada, es decir, comportamiento mental y reglas alimentarias. Enseguida me ha interrumpido esta exposición con que ni le gustaba ni le interesaba el ocultismo.
-¿Pues...?-le he preguntado con una mezcla de extrañeza y desconcierto.
-Lo que yo quiero aprender es “magia encantada”-palabras textuales. Esa es la contestación que me ha dado.
-¿Magia encantada?-he querido saber encogiéndome de hombros.-¿Qué es eso...?
-Tú piensa-encima me invita a que piense yo. Conozco la magia de las velas, la magia del perfume, la magia Teurgia, la magia Goecia, la magia mental, la magia natural, pero la “magia encantada” como dice él...es la primera noticia que tengo. A mí más bien me suena a verdad de Perogrullo. Como decir “fuego quemado” o “lavadora centrifugada”.
-¿Y qué quieres que yo te responda?
-Telequinesia-ha sido la primera palabra que me ha soltado.-El poder psicotrónico. Magia para hacer telequinesia.
-Bueno, si lo que realmente quieres es producir estos fenómenos lo que te interesa es más bien un manual de experimentos parapsíquicos-le he respondido.-La magia es otra historia.
-Me refiero a la magia para hacer telequinesia-¡y dale!-para conseguir el amor, para la prosperidad, para que me llegue el dinero rápidamente, una magia rápida...como la que hace Harry Potter.
 ¿Cómo hacerle entender que es pura leyenda lo que nos muestra el cine y más teniendo en cuenta que la creadora de este personaje no es ni tan siquiera ocultista al menos que se sepa oficialmente? Quiere hacer una magia instantánea y rápida, quiere hacer volar objetos, mantener a la gente flotando en el aire, tener a las chicas rendidas a sus pies...le he recomendado los libros del Maestre Juan que nos exponen ciertas claves que ningún estudioso de la magia debiera pasar por alto y nos ayudan a comprender que un ritual no necesariamente ha de dar respuestas inmediatas si no que todo tiene un proceso y sigue su curso, además de que hemos de tener en cuenta que solamente cristalizará nuestro deseo si le dedicamos un tiempo de trabajo diario y si las leyes kármicas lo ven adecuado para nuestra formación en esta escuela de la vida o dictaminan que lo merecemos.
 Y a pesar de lo que se suele insistir en que debemos recorrer este camino de la mano si no de la mano de un maestro que nos inicie sí por lo menos bajo el asesoramiento y la supervisión de una persona experimentada, él pretende ser un autodidacta y a partir de lo que aprende en los libros convertirse en su propio maestro. ¿Hay cosas que podemos aprender por nosotros mismos? Sí. ¿Podemos descubrir al maestro que anida en nuestro interior? También. Pero no confundamos con esto interpretar determinados conceptos de forma acomodatoria y luego ponerlos en práctica como nos da el viento.
 Ciertas experiencias que queramos realizar solos en casa pueden ser peligrosas para nuestra naturaleza, véase incorporación de entidades y sesiones de experimentación con la tabla ouija. Cualquiera puede aprender por sí mismo a tirar las cartas, a leer las manos, a analizar una firma, a levantar una carta astral, e incluso si lo desea, a realizar un sencillo ritual de magia blanca de tipo casero y sin complicaciones peligrosas. Sin embargo, para aprender y poner en práctica otras disciplinas como la hipnosis, la hipnoterapia, el control mental, la bioenergética, la mediumnidad y todo cuanto se relacione con el mundo espiritual o implique tratar a otras personas, deberemos contar con la ayuda de profesionales y personas experimentadas. Y ahí no sirve la excusa de que “no siempre el profesional está disponible”-pues solo es cuestión de buscar otro momento en que pueda estarlo-como aduce este chico que quiere hacerlo todo “de motu propio” y con resultados inmediatos. Si ya nos peleamos con el más simple ejercicio de matemáticas cuando intentamos hacerlo solos sin nadie que nos lo explique...¿en qué cabeza cabe que pongamos en práctica otros ejercicios de parapsicología no solo complicados si no hasta peligrosos cuando se juguetea con ellos de modo irresponsable sin un asesor adecuado a nuestro lado?
 Y no solo son la malinterpretación ni la ceguera mental quienes distorsionan los mensajes. También la ortografía toma cartas en el asunto. Parece increíble, pero la sola falta de una sílaba, de un punto o una coma pueden cambiar por completo el sentido de una frase.
 Cerramos esta exposición con un pequeño chiste a modo de ejemplo:

-¡Camarero! Este plátano está blando.
-Pues dígale que se calle...


 Kiriel




[1] De “Extra sensory perception”, percepción extrasensorial.

















El poder de la mirada.

“NO ME MIRES DE REOJO QUE ES MIRADA DE TRAIDOR...”

¿Cuántas veces habremos oído frases de este estilo?¿Es un poema, una canción, un dicho popular...?
 Sea lo que sea no podemos dejar de estar de acuerdo. Existen miradas dulces y bienhechoras igual que existen miradas frías y traicioneras. Los griegos interpretan las miradas frías de reojo como presagios o avisos de muerte. Y una mirada de refilón que se pueda adivinar cargada de desprecio o de malas intenciones no produce precisamente un efecto balsámico en la persona a la que va dirigida.
 En otras ocasiones hemos hablado bastante del famoso y temido “mal de ojo”. A menudo se habla del poder de la mirada, incluso sabemos que muchos animales poseen la capacidad de inmovilizar a sus presas con la mirada. Aunque la mirada precisa ser acompañada de la expresión del rostro para dar a entender mejor el mensaje que quiere transmitir, a menudo se basta por sí sola, pues una mirada malévola no solo puede prescindir de una boca retorcida que supuestamente le hará cobrar más fuerza si no que puede borrar todo significado de dulzura de la más amplia de las sonrisas. Resumiendo: LA MIRADA PUEDE TRANSFORMAR UNA SONRISA DULCE EN UNA SONRISA VENENOSA. Así como según las escrituras Jesús podía convertir el agua en vino, la mirada puede convertir lo dulce en amargo. Tan poderosa es como este gran Maestro Ascendido.
 Testigos de ello somos en el vivir cada día. No hay que acudir a círculos donde se practique la magia malintencionada(calificativo que prefiero usar antes que “blanca” o “negra” para tener más claro cuándo estamos obrando rectamente y cuándo no); nos basta pasar ante la puerta de un restaurante que en esos momentos se halle en plan promocional. Los recepcionistas que nos invitan a visitar su local con una sonrisa tienen su trasfondo de interés. Si observamos detenidamente no nos será difícil diferenciar una sonrisa dulce de una sonrisa forzada. Si con solo el ofrecimiento entramos ahí y les hacemos gasto nos estarán “amigos”, si les decimos “gracias, ya vendremos un día...” pues tampoco pasa nada, “tan amigos”. Nos despedirán con una sonrisa de gratitud, pero detrás de esa sonrisa deduciremos más o menos lo que estarán pensando: “por culpa de estos ratas no nos vamos a hacer millonarios”.
 Y es que aunque no lo parezca, resulta bastante fácil captar mensajes mentales con solo mirar a una persona de frente. Cuando una persona te escucha, pero baja la cabeza o pone cara de fastidio significa que te atiende y te contesta afirmativamente-con monosílabos-cuando lo cree oportuno únicamente por educación; en realidad no le interesa ni le importa lo que le estás explicando. Tu interlocutor solo ve una boca que se mueve, pero no está extrayendo la sustancia; no quiere estar informado del tema que quieres tratar con él. Asimismo cruzar las piernas-a menos que por problemas óseos o articulares, o sencillamente por costumbre, sea tu postura cómoda-expresa “no quiero recibir, me cierro en banda”. Lo mismo puede revelar una mirada baja o unos ojos semicerrados, exactamente igual que cuando nos baja el fósforo y nos empiezan a pesar los párpados de sueño. Nuestra mente ya no puede asimilar nada más por ese día aunque quiera.
 Y una mirada desconfiada generará eso mismo que transmite: desconfianza. Este tipo de miradas son generalmente las que nos quitan las ganas de hacer lo que queremos hacer. Nos hace dudar de nosotros mismos, de nuestro propio potencial, en suma nos resta autoestima y confianza en nosotros mismos. La persona que así nos mira ve absurdo o utópico nuestro proyecto y de alguna manera hace que nosotros también lo veamos así. Por más que nos digan “eres tú, eso es cosa tuya, tú mismo” parece que sea el otro quien va a beneficiarse si el proyecto se lleva a cabo o a perjudicarse en caso contrario. Por más que nos esforcemos, la mirada de desconfianza siempre estará presente en nuestra mente y si no intentamos hacernos superiores a nosotros mismos en ese sentido, tanto nos dominará y tanto miedo nos generará que acabaremos tirando la toalla dejando escapar así la oportunidad de introducir cambios importantes para nosotros en nuestra vida. Ahí es cuando bastan para arruinar una vida dos palabras irritantemente sencillas: “lo dudo”.
 Y no hablemos ya de las miradas tristes capaces de conmover al más pintado y de la que se valen los vampiros psíquicos y parásitos sociales-otro exasperante tema del que tendríamos que hablar-para sacar el máximo provecho de nosotros. Si el poseedor de los ojos tristes trata de sonsacarnos  el dinero o cualquier cosa que necesitemos y ello ocurre es porque ha tenido o tiene poder sobre nosotros. ¿Otra forma de mal de ojo? En absoluto. Yo lo calificaría más bien como un caso de autoenvenenamiento. No hemos sido capaces de pronunciar una palabra tan sencilla como “no”. El poder de la mirada lastimera, la magia de la voz plañidera, las palabras mágicas de la película sobre su vida que nos acaba de contar y su relación con nosotros han sido más efectivas que el altar, las velas, la espada, la vara, el incienso, el cáliz o la copa y las túnicas sobre las que pende el talismán consagrado, todo ello encaminado a obtener la realización de un deseo. El parásito social no necesita pensar ni organizar tanto y ese es el mérito y el misterio del verdadero mago: con su sola presencia consigue todo lo que quiere. El parásito social o si se quiere el vampiro psíquico es un mago en potencia solo que lo que obtiene a través de su magia-de sus recursos internos-es para sí más que para los demás. Posee verdadera magia, pero no puede ayudar con ella a nadie puesto que no ha aprendido a pensar en otra persona que no sea él mismo o ella misma.
 Y nuestra propia magia, nuestros propios recursos, no han estado muy fortalecidos frente a ese mago ególatra y absorbente. ¿Qué tiene su magia que no tenga la nuestra que ha podido apagárnosla de esa manera? No hay ninguna diferencia entre ambas, la magia es la magia y recursos internos poseemos todos. La única diferencia es que el parásito ha sabido sacar partido de estos, ha jugado con una carta marcada y nos ha ganado.
 ¡Pues esto no puede ser! Humanos somos, buen corazón tenemos, pero de ahí a ser tontos del bote va una milla. La mirada que este mago-vampiro nos dirigirá una vez le hayamos hecho su favor, aunque pretenda expresar gratitud será un mal disimulado “jódete que me he salido con la mía”. El poder de su mirada nos hará sentirnos torpes y dormidos en la inopia cuando lo que queremos es mejorar, ser más listos, más inteligentes y estar más despiertos. “Vampiros que tomamos por amigos” los llama una gran figura del Ocultismo. El filósofo Nietzsche despotrica contra ellos en su “El caminante y su sombra” manifestándose en contra de querer inspirar pena en lugar de explotar las propias capacidades y ser capaz de salir adelante.
 Hablando con un amigo mío sobre los vampiros me hizo estas observaciones:
-Para que un vampiro se infiltre en tu casa y en tu vida íntima le tienes que invitar. Pero es muy hábil y sabe cómo hacer que le invites.
 Y tanto. Con sólo el poder de la mirada. Un poder que nos tendrá castigados de por vida, un poder que nos hará sufrir, un poder que no nos concederá un momento de respiro. Y todo eso sin necesidad, sin utilidad y, lo que es peor, sin habérnoslo merecido. Aunque no podremos decir que ha sido sin haberlo buscado, porque lo hemos ido a buscar de alguna manera. La mirada también posee el poder de hacernos sentir culpables; si no cedemos a los deseos del parásito social nos sentiremos culpables por no ayudar a un supuesto necesitado. Si lo ayudamos para evitar sentirnos culpables-otra de sus artimañas-el complejo de culpa vendrá después por otro lado cuando descubramos todo el pastel: nos sentiremos estúpidos por habernos dejado engañar.
 Para evitar esto construyamos en nuestro interior una verdadera torre de fortaleza. Un sencillo ejercicio que podemos llevar a cabo en cualquier momento y lugar-pero que solo dará el resultado apetecido si se es consecuente con lo que se afirma; no funcionará  decir “mañana habré dejado de ser fumador” si pasado fumo como una chimenea-es la presencia del “Yo Soy”. Con tranquilidad y seguridad decid mentalmente:
“Yo Soy la integridad. Yo Soy la personalidad. Yo Soy la entereza. Yo Soy la resistencia. Nadie tiene poder sobre mí. Nadie me puede hacer dudar de mi calidad humana. Nadie ni nada me preocupa. Nadie puede ni tiene derecho a organizar mi vida, pues esta solo depende de mí y de las decisiones que YO tomo, pues Yo Soy el tomador de mis propias decisiones, Yo Soy el organizador de mi propia vida, Yo Soy quien sabe valorar lo que le beneficia y lo que no, Yo Soy mi propio beneficio, Ser el que Soy, ser cómo Soy, Ser quien Soy es mi gran beneficio. Yo Soy una persona íntegra que está satisfecha de sí misma, de sus metas y de sus logros. Yo decido, organizo, valoro, cuestiono y Yo Soy quien sale beneficiado de ello”.
 Visualiza al parásito social fundiéndose como la cera derretida ante estas palabras pronunciadas por ti. Tras esta meditación afirma : “No existen parásitos sociales en el mundo y si existen a mí no se me acercan, pues saben la batalla perdida de antemano”. Si se trata de una persona concreta di su nombre y a continuación: “lo tiene muy crudo conmigo”. Repítelo tantas veces como creas necesario hasta que sientas que se ha hecho realidad. Descansa y ten la certeza de que nadie se te acercará con intención de robarte tus energías.

La magia del pensamiento.

 Radiónica, psicotrónica...y un largo etcétera de términos para esta maravillosa magia de la que todos disfrutamos: la magia del pensamiento.
 ¡Qué magno poder el del pensamiento! Cuántas maravillas podríamos hacer con él...caso de saber usarlo debidamente. Cuánta paz en el mundo habría, cuantos problemas seríamos capaces de solucionar, cuantos deseos lograríamos...
 ¡Ojalá, y eso fuera tan fácil! Pero la cruda realidad es otra; ningún poder mental detendrá ninguna guerra, ningún subdesarrollo, ninguna calamidad, a menos que los poderosos de la tierra lo decidan.
 Y por otra parte muy difícilmente seremos nosotros capaces de generar pensamientos de luz, paz y amor con los que podríamos beneficiar la salud de los seres vivos, alcanzar nuestras metas y ser felices. Nos quemaremos por el trabajo, rabiaremos por un dolor, discutiremos con la pareja o con los amigos, tendremos algún problema familiar...inevitablemente nuestra psiquis siempre estará contaminada o infectada por algo. Dicen los profesionales de coaching que ese trabajo que tenemos que hacer que no nos gusta nos arrebatará mucha energía en el sentido de que si nosotros mismos no estamos satisfechos difícilmente nuestro prójimo se sentirá satisfecho, pues no seremos capaces de brindarle lo mejor de nosotros mismos. Las metas que nos impone la sociedad o las que nosotros mismos nos imponemos ansiosamente en lugar de saborear cada etapa y cada oportunidad, las trampas consumistas en las que caemos seducidos por la publicidad agresiva y un sinfín de manipuladoras agresiones sociales nos resta energía positiva ya que nuestro pensamiento es siempre más potente en los miedos y en las frustraciones. Los poseedores de la mirada desconfiada capaz de transmitir desconfianza encuentran en su prójimo agredido por el condicionamiento social un perfecto terreno fértil para sembrar sus insidiosas semillas que inexorablemente terminarán germinando y dando sus pérfidos frutos.
 Para liberarte de esa contaminación mental y estos virus condicionantes, busca un espacio y un tiempo donde no se te pueda molestar. Busca un lugar en el campo donde no haya gente y túmbate a la sombra de un árbol. Si se trata de un árbol frutal y puedes ir comiendo alguna fruta, tanto mejor. Para transmitir dulzura es preciso sentirla, es preciso saber lo que es.
 Cierra los ojos y despójate de toda preocupación. Los hechos son los hechos y tú eres tú. Tú mismo eres la luz, tú mismo eres energía, una energía que regenera y revitaliza todo el planeta. Visualízate en forma de ángel, vestido de blanco, con una tez aniñada y con unos abundantes cabellos rubios. Imagínate flotar en el aire y ser mecido por las olas del mar. Mientras mascas la fruta-si es el caso-ese dulzor que tu paladar siente es transmitido a todas las personas que lo necesitan, es enviado a los lugares donde es necesario. Tu corazón es de color rosa brillante y despide destellos de luz blanca, destellos de luz blanca que inundan a las personas que acuden a tu mente. Ahora visualiza aquellos deseos que te gustaría ver cumplidos. Visualízalos durante largo rato hasta que sientas que se han hecho realidad. Repite este ejercicio diariamente o siempre que puedas de forma que tus deseos cristalicen. Da gracias al Universo por obtener esos deseos o por encontrar en tu camino otro tipo de sorpresas con las que no contabas y que te resultan tanto o más gratas que aquello que en principio formulaste.

La magia del gesto

 La magia del gesto o el mudra. Así son denominados los gestos que pueden originar algo. Los gestos que forman parte de un ritual son una forma de mudra.
 Este tipo de gesto lo realizamos casi a diario siendo o no conscientes de ello. Dos ejemplos bien famosos de mudra son el “que te den”(alzando el dedo medio manteniendo el resto cerrados) y el “cornu”(signo de los cuernos extendiendo el índice y el meñique manteniendo ocultos el resto). Sin embargo el verdadero significado de estos gestos varía mucho según cada cultura quiera interpretarlos. Mientras que para algunos son signos ofensivos y maldicientes(el “cornu” es utilizado en la famosa “misa negra” y en ciertos rituales de evocación de poderes tenebrosos) en otros lugares como Italia son tenidos como una protección o una defensa muy antigua contra el mal de ojo.
 Sin embargo, este gesto forma parte del llamado lenguaje secreto del cuerpo. Lo queramos o no nuestra postura y nuestros gestos nos delatan. Como decíamos al hablar del poder de la mirada no solo una mirada cansada nos revela que a la persona no le apetece conversar ni escuchar. Ya observamos que cruzar las piernas-a menos que sea esa nuestra habitual postura en estado de reposo-o cruzar los brazos-exceptuando que tengamos frío-expresa “no quiero recibir”. Se dice que tocarse la cara durante un diálogo revela tensión e inseguridad por parte de la persona que se explica. Un gesto cansino ante una orden revela que a pesar de estar la persona mandada dispuesta a ejecutar dicha orden no está muy de acuerdo con ella o se le antoja una misión difícil o arriesgada. En hipnosis y en acupuntura no deben cruzarse las piernas si se espera que la terapia de resultados. Durante un ritual o una consulta de adivinación no deben cruzarse brazos ni piernas a fin de permitir que el magnetismo pueda fluir libremente.
 Sin embargo, en la superstición el cruce de dedos(acompañado con la expresión “lagarto, lagarto” que puede ser considerado también como un mantram o palabra de poder para reafirmar la magia del gesto) está considerado como una efectiva protección contra las malas influencias, la mala suerte y el mal de ojo.

Nuestras peticiones al mundo espiritual.

 Y para concluir con este escrito he seleccionado para vosotros dos cuentos que nos narraban en la escuela-o que solíamos leer en los libros de texto-que querían ser un ejemplo de cómo una petición nos ayuda en realidad.

 Érase  una vez un hombre que le huía mucho al trabajo. Pasose el verano holgando y cuando llegó el crudo y frío invierno se encontró sin polainas. Desesperado, este hombre decidió pedir ayuda y consejo a un compadre suyo, el cual le recomendó que acudiera a la parroquia del pueblo y allá rogase al Señor del Gran Poder para que le ayudase a salir de su situación.
 Esta fue la plegaria que este señor pronunció arrodillado con toda su poética inspiración y con todo su fervor:
-¡Oh, Señor del Gran Poder
 que todo el mundo gobiernas
 dame, dame unas polainas
 para cubrirme las piernas!




A lo que una voz pronunció también en verso:

-Soy Señor del Gran Poder
  yo todo el mundo gobierno.
 Polainas compra en verano
 Y las tendrás en invierno.


  Y no solamente es así como nos puede ayudar una petición a las fuerzas cósmicas(guiándonos para que busquemos la solución adecuada). Se dice que debemos ser selectivos con lo que decimos, pues puede convertirse en realidad. La misma magia de la palabra es un mensaje enviado al cielo. Tanto si decimos “esto es” como si decimos “Dios quiera que sea”. Es una plegaria que estamos elevando al cielo, solo que en el primer caso es una afirmación y en el segundo una oración.
 La cuestión es que en el cuento que ahora os narraré tres mendigos pasaron frente a un terrateniente pidiéndole un poco de trigo.
-¿Trigo?-les preguntó.-¿De qué trigo habláis? Eso que veis ahí es un montón de tierra.
-Dios quiera que se te vuelva tierra por tu avaricia...-le respondió serenamente uno de ellos.
 Molesto, el terrateniente los expulsó amenazándoles con soltarles sus perros y con ser molidos a palos por sus criados. No bien hubieron pasado unos minutos cuando el trigo comenzó a tomar un color extraño y grisáceo. El terrateniente se acercó para tocarlo y...
-¡Tierra!-exclamó tan lloroso como sorprendido.-¡Es tierra!
 En efecto. Su afirmación había cristalizado y la plegaria inconsciente de los ofendidos mendigos había tenido su respuesta. El trigo se había convertido en tierra. Su pajar no albergaba paja si no tierra. Y sus instrumentos de cultivo se habían convertido también en tierra por no haber querido compartir sus riquezas con los más necesitados.

 La conclusión de este cuento en lo referente a nuestra magia y nuestras peticiones es que deberíamos ser más selectos con lo que afirmamos y con lo que pedimos, pues de alguna manera podríamos hacerlo real. Desde un punto de vista simbólico y arquetípico la moraleja podría ser que cuando no compartimos o no damos salida a nuestras riquezas interiores aquellas acaban muriendo o deteriorándose. Cada vez que transmitimos energía a los demás aquella se regenera y a la vez que damos recibimos por la ley de retorno.
 Si crees que ganarás un premio de literatura, por citar un ejemplo, y lo afirmas con total confianza en ti mismo, ten la seguridad de que así será, pues ayudado por tus guías-para no desfallecer que no para encontrártelo todo hecho-habrás trabajado duro y habrás obtenido tus frutos. Lo mismo sucederá si no creyendo ganar ese premio afirmas “se pueda o no se pueda, por lo menos lo intentamos”. Porque todo lo que se hace con amor termina aportando algún beneficio, a veces, por el lado que uno menos se imagina. En cualquier caso ten presente que nada se nos quita de las manos, si no que esta nos es abierta para depositar en ella algo mejor que nos merecemos tener.
 Yo depositaré en vuestras manos amor, luz y energías positivas.



Kiriel.


VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 6

 De cómo los mensajes llegan distorsionados.
 En un fragmento de un artículo sobre un determinado tema:
 “a pesar de que muchos quimbandeiros y batuqueiros argumentan estar practicando la umbanda, personalmente considero que son una modalidad del satanismo”
o sencillamente en una conversación normal:
 “tú estás buscando en la revista el candomblé para hacerme brujería”.

 En el primer caso es un trabajo de investigación antropológica y en el segundo es una broma. Pero tanto en un caso como en el otro el mensaje puede llegar con interpretaciones no deseadas dependiendo de lo que recoja en su frecuencia.
 El referido trabajo tiene que ver con la umbanda y su historia. Su autor narra haber asistido a una sesión de batuque-una de las subdivisiones del umbanda-y como introducción al tema para que el público lector pudiera comprender qué era aquello de lo que se estaba hablando consideró oportuno dar una pequeña lección de historia acerca de estos cultos.
 Como cabe esperar siempre que se habla de estos temas, iniciados y sacerdotes de estos cultos habrán puesto el grito en el cielo a la lectura de dicho artículo por algunas afirmaciones encontradas en el mismo. “Dentro del umbanda existen otras tendencias-candomblé por ejemplo-dos de las cuales-la quimbanda y el batuque-difieren ostensiblemente de la primera”.
 Pero no es mi objetivo que nos peleemos por-a mi parecer-una nimiedad como esta. Es preciso señalar no solo las diferencias entre estas líneas o creencias, si no entre un iniciado en las mismas y un antropólogo.
 Umbanda, oiremos de boca de los mismos iniciados y sacerdotes de estas creencias, no tiene nada que ver con candomblé. En efecto. Como hemos señalado alguna vez, Umbanda, procedente de los pueblos africanos del Congo, se ocupa del culto a las divinidades mas los antepasados, mientras que Candomblé, procedente de Nigeria, se centra casi exclusivamente en el culto a las divinidades.
 Sin embargo también debemos tener en cuenta que un periodista o un antropólogo no son necesariamente unos iniciados. El iniciado nos enseñará o nos transmitirá lo que sabe siempre que las normas y los valores de la línea a la que pertenece se lo permitan, mientras que el periodista o el antropólogo nos transmitirán o nos mostrarán la información tal cual la han encontrado o la han recibido, generalmente de boca del propio iniciado. El periodista aducirá haber recabado la información de boca de los mismos iniciados o haber estado presente en ese tipo de ceremonias como una garantía de que es la pura verdad lo que está diciendo. De manera que yo recomendaría a quienes estuvieran interesados en conocer estas religiones leer  tanto libros escritos por los mismos iniciados como libros escritos por antropólogos y artículos escritos por periodistas. También sería bueno elegir, comparar y contrastar diversos puntos de vista.
 Bien, ahora a lo que íbamos. Volviendo a la extracción que hicimos antes del mencionado artículo veremos de qué manera se distorsiona un mensaje:

“a pesar de que muchos quimbandeiros y batuqueiros argumentan estar practicando la umbanda, personalmente considero que son una modalidad del satanismo”.
 Si este artículo-o cualquier otro que así se exprese, entiéndaseme que no estoy queriendo acusar a nadie ni descalificar nada-cae en manos de una persona que no conoce del todo ciertos conceptos ni diferencia entre unos y otros interpreta lo siguiente:
“ la quimbanda y el batuque son dos formas de satanismo”.
 Un tercero reinterpreta esta frase:
 “la quimbanda y el batuque son satánicos”.
 Y todavía un cuarto sin querer o queriendo hunde y critica:
 “la quimbanda y el batuque son magia negra, sacrifican animales en sus ritos y solo sirven para dañar y hacer el mal”.
 Y es así como queda en entredicho la magia blanca y lo positivo que hubiéramos querido encontrar en estas líneas.
 Y otro tanto sucede con los cultos candomblé y brujería.
 Candomblé son los ritos yorubas de Brasil y brujería es el culto a la madre naturaleza.
 Los diccionarios definen el candomblé como una danza fetichista o un baile grosero y la brujería como el arte de privar de la vida, del juicio y de la salud a una persona elegida como víctima mediante una operación de carácter mágico. En la mentalidad popular la brujería es un mal que le hacen a la gente.
 En cuanto a la palabra fetichismo la mentalidad popular suele reducirla demasiado fácil y rápidamente-de modo diríamos casi instintivo-al término del sexo. Por lo cual suponen que una danza fetichista equivaldrá a un baile exhibicionista o por lo menos muy poco escrupuloso. Y si la definición del término candomblé es danza fetichista no cabrá a los simplistas la menor duda de que el candomblé es pervertido, más todavía si según aquella conversación “buscar el candomblé para hacerme brujería” podemos servirnos de él-o de las técnicas de magia blanca o de magia negra que dentro de esa línea sea costumbre llevar a cabo-para fines diversos.
 Fetichismo tiene dos significados: el culto a los fetiches-equivalente al gentilismo o paganismo que son los cultos creados por un pueblo o grupo en cuyas ceremonias se utilizan imágenes talladas-y la necesidad de la presencia de un objeto-normalmente una prenda-para estimular la sexualidad adormecida en la propia naturaleza.
 Si tenemos en cuenta que el cristianismo luchó contra los cultos paganos también en este caso el candomblé cuyo calificativo de fetichista es definido como culto pagano o creado por un grupo-que se sirve también de imágenes y símbolos-sale perdiendo. Ni está bien visto el fetichismo sexual ni lo está el culto a imágenes talladas.
 Lo que recibe la adoración cúltica no son en realidad esas imágenes si no las entidades o divinidades en ellas representadas. La imagen solo serviría como un soporte o como un hilo conductor de la energía del devoto que la envía hacia el alma de la divinidad. Unos meros medios físicos sin más objetivo que potenciar las energías mentales conjuntas de la congregación religiosa.
 Todos estos argumentos son propios de “abogados del diablo” a la vista de los críticos y los más acérrimos enemigos del candomblé, la brujería y los cultos paganos. Tropezamos aquí, pues, con dos problemas: la malinterpretación de un mensaje o el afán por el desprestigio de lo que no interesa.
 A menudo ocurre que una visión particular-el autor de tan interesante como ilustrativo reportaje dice “personalmente considero”, no “yo sé” o “yo veo” que es distinta afirmación-se mezcla con una verdad absoluta(que no existe)y esto es mayormente lo que da lugar a malentendidos. El reportero tiene su visión como el iniciado o el fiel de estas creencias tienen la suya. Escribamos por encargo un artículo o un libro sobre un tema tan controvertido como el Satanismo. Dada la gran oleada de crímenes ritualísticos que tan grande huella dejó en su época disponemos aparentemente de buen material para escribir un libro bastante extenso y si se tercia una enciclopedia de cinco tomos. Auxiliándonos con los libros ya editados sobre la historia de la inquisición, la brujería desde Mesopotamia hasta nuestros días pasando por la Edad Media, las sectas religiosas ya existentes-recopiladas una tras otra en libros escritos por periodistas especializados-algunos grimorios fáciles de conseguir hoy día en el mercado, cualquier libro de psicología-para estudiar los problemas psicológicos derivados de la adicción al Ocultismo-y unos cuantos recortes de periódicos, lograremos confeccionar una buena enciclopedia de Satanismo que quizá titulemos-posiblemente muy a la ligera-“El Satanismo y los peligros del Ocultismo”. Pero ¿Nos habremos detenido antes a estudiar qué son realmente una y otra cosa? Posiblemente no. Es el título que nos ha gustado para nuestro trabajo y no vamos ahora con la prisa que tenemos a hacer correcciones, aparte de que ningún otro título le pega.
 Esta postura cómoda, a menudo típica del escritor o el reportero sensacionalista, suele ser si no la fuente principal si una de ellas causante de los frecuentes malentendidos. Cuando el escritor recibe de la casa editora el encargo de escribir un libro sobre este tema, aunque no lo parezca, interiormente ya ha terminado su trabajo. Ya tiene una idea hecha, ya sabe lo que va a poner y ya le interesa por algo escribir ciertas cosas. ¿Qué vamos a enseñar-piensa él-que no sepan a un público que ha sido ya testigo de asesinatos rituales que con tanta frecuencia saltan a la prensa, víctimas de adivinos fraudulentos que les han sacado el dinero o que han perdido a un ser querido en el cráter de una secta peligrosa? Aunque entiende que alguno que otro puede tildarle de simplista, sostiene que no es su misión contentar a esos puristas como él los puede llamar y se limita a dar una información porque cree que puede ser útil y vital estando el mundo como está en alerta roja.
¿Qué son Satanismo y Ocultismo?
 Satanismo es culto a Satán-vocablo hebreo que significa “opuesto”, podría ser simplemente el principio opuesto o la parte opuesta del principio-y Ocultismo es el estudio de las fuerzas ocultas de la naturaleza y los poderes ocultos del ser vivo(no digo “del hombre” porque también los animales poseen si no facultades ESP[1] sí un sexto sentido, como un perro o un delfín que captan ultrasonidos que no llega a captar el oído humano, o aquellos animales que hablan por signos y saben encontrar el camino de su casa cuando se extravían).
 El Satanismo por ser un culto o una línea y el Ocultismo por ser un tema de estudio no son de por sí positivos ni negativos, depende de las manos en las que caigan y con qué finalidad se utilicen. El peligro no está en estos de por sí ni por lo que son sino en los errores de aprendizaje obtenidos y en la estabilidad o la inestabilidad de la mente de las personas que eligen este camino. No es que los caminos sean fáciles ni difíciles, inocuos ni peligrosos, somos nosotros mismos los que estamos acostumbrados o desacostumbrados a recorrerlos y somos nosotros mismos los que estamos o no estamos preparados.
 Cosa harto sabida es que un animal por peligroso que nos parezca difícilmente ataca al ser humano cuando está saciado o cuando este no le molesta para nada, lo mismo que una droga o un fármaco no causarán graves daños al cuerpo si solo ingiere la cantidad necesaria(prescrita por nuestro médico especialista). ¿Drogas peligrosas? Todo lo que conlleva una composición o un proceso químico lo es. ¿Animales peligrosos? Si la respuesta es afirmativa, cabe pensar que la naturaleza es peligrosa. Pero el peligro no es más que una señal de advertencia. Los verdaderos agentes destructores son la inconsciencia y la imprudencia temeraria. No me cabe la menor duda de que no seréis tan tontos de meter una mano en la boca de un tigre ni de comeros una ortiga en crudo ni de tocar el fuego sabiendo las consecuencias de todo ello, por citar unos ejemplos.
 Los corredores de afirmaciones gratuitas difícilmente se detienen a considerar estos puntos y a meditar sobre estos, siendo el afán de sensacionalismo lo que puede en la mayoría de los casos. Y muchos conceptos cuyas definiciones van cambiando a lo largo de la historia pueden inducir también muy fácilmente a errores de interpretación.
 “El libro supremo de todas las magias” de Alberto el Grande del cual se han hecho varias ediciones y varias adaptaciones libres-de ahí que los grimorios, salvo los de edición facsímil, que hoy día podemos adquirir en cualquier comercio no sean del todo fieles a la versión original de los mismos-se encuentra dividido en cuatro apartados: la magia blanca(secreta y adivinatoria), la magia roja(el verdadero arte para iniciarse con provecho en los secretos de las Ciencias Ocultas), la magia amorosa o verde(que recoge pactos demoníacos, secretos mágicos, fórmulas para amar y ser amado, recetas para apresurar casamientos, mensajes de los sueños, etc.)y la magia negra(que contiene el arte adivinatorio, cartomancia, quiromancia, cafeomancia, amuletos y talismanes). Ignoramos completamente por qué al autor de dicho libro ha coloreado de esa manera estas cuatro partes del mismo.
 Por otra parte este voluminoso libro suele publicarse a veces ya sea por razones técnicas, ya sea por motivos comerciales, dividido en cuatro libritos sueltos. Así encontramos en cualquier comercio uno de estos libritos titulado “magia blanca” esperando encontrar en él rituales para atraer la suerte, recobrar la salud, abrir caminos, etc. y quien desconozca esta singular obra puede decepcionarse al encontrar en ese libro un ritual nigromántico, operación que según los más expertos ocultistas pertenece al campo de la magia negra o Goecia. Es lógico pues que esta persona se pregunte cómo se puede catalogar como blanca una operación que requiere la evocación de fuerzas mortuorias y negativas.
 Por otro lado el que desee aprender cómo hacer magia negra se llevará un chasco al adquirir el librito “magia negra” cuando encuentre que la mayor parte de este está dedicado a la adivinación, a los talismanes benéficos y a unas cuantas recetas para mejorar la salud o para acelerar la dentición en los lactantes, y solamente se dará una pincelada sobre la nomenclatura de los jerifaltes del infierno y de cómo pactar con ellos. Son sorpresas que solemos llevarnos por falta de información o por ausencia de especificación, como por ejemplo que estos libros son extractos de otro libro más grande y más antiguo que los modernos manuales de cómo hacer trabajos que hoy día embotan las estanterías de los bazares ocultistas.
 Por lo que respecta a los otros dos libros restantes “la magia roja” y “la magia amorosa o verde” el primero contiene secretos de la búsqueda de la piedra filosofal-de ahí probablemente que muchos hayan concebido el término “magia roja” como sinónimo de alquimia-y el segundo parece ser el que más se aproxima a la verdad...o teniendo en cuenta que no existen verdades absolutas si no la propia verdad que cada cual tiene, el que más se ajusta a lo que esperamos. Se trata, efectivamente, de un verdadero manual de fórmulas para lograr el amor...aunque los pactos demoníacos en él contenidos cabrían perfectamente en el librito “magia negra”. Lo más curioso-a mi parecer-es que en todos ellos hay un apartado dedicado a la cartomancia. Lo más incautos y los menos avezados en según qué materia pueden interpretar muy fácilmente que están “haciendo magia” al echar las cartas según los patrones ahí expuestos cuando lo que en realidad hacen es adivinación. De ahí que la sociedad y la mentalidad popular denominen “mago” o “brujo” a un tarotista, quiromántico o cualquiera que utilice las artes adivinatorias.
 Otro tanto sucede con afirmaciones encontradas en manuales de adivinación: “el médium debe concentrarse lo más posible al echar las cartas”, “echar a menudo las cartas contribuye al desarrollo de la clarividencia”. La interpretación y la inmediata reacción del lector ignorante es “soy un médium dado que echo las cartas” o “soy clarividente por echar las cartas o gracias a echarlas muy a menudo”. Y debido o bien a que el libro no especifique que la baraja adivinatoria es solamente un soporte para la concentración del médium o del vidente, o bien a que en realidad sí que lo especifique, pero en nuestra ansiedad por adquirir estas facultades-o que nos hayan venido ya regaladas-no queramos escuchar lo que no nos convenga, es fácil autotitularse médium o vidente con solo exhibir la baraja que utilizamos y mirar al objetivo de la cámara que nos va a retratar para nuestro anuncio con ojos como platos.
 ¿Y por qué se da el fraude en la adivinación y la magia como en ninguna otra profesión? Simplemente por los mensajes distorsionados y la desinformación que nos llega. Una amiga mía-digamos mejor una especie de amiga puesto que no le aprecio demasiado-se compró una baraja de tarot por capricho, aprendió a usarla junto con una baraja española corriente y con solo unos cuantos libros que se había leído de cómo hacer hechizos ya se creía la bruja maestra...cuando solo era una lectora asidua de estos temas y, por cierto, andaba bastante confundida con el concepto que tenía de su propia persona y de cómo ir por la vida y por el mundo. Más que ofrecer consejos sensatos a las personas que acudían a consultarle parecía disfrutar siendo la mensajera de noticias desagradables y “echando un cenizo” a aquellas.
 En contrapartida tengo otra amiga lectora habitual de estos temas que esta sí que es una buena maestra. Posee los tres grados de Reiki mas la maestría(ella ha sido quien me ha iniciado a mí en los dos primeros)y no obstante quiere seguir aprendiendo. A cambio de haberme dado estas iniciaciones me pide unas clases de tarot que yo le imparto encantado de la vida porque enseñando a los demás aprendo y me adiestro yo también. Y esto dice mucho en su favor, pues saber que no se sabe nada o por lo menos tener la humildad de reconocer que no se sabe todo ya es saber mucho. Como dice una moraleja de los famosos cuentos del Conde Lucanor, “el que sabe sabe que no sabe y el que no sabe se ciega con que sabe”. Y no hay peor ciego que el que no quiere ver. La malinterpretación de un mensaje siempre se puede rectificar y encarrilar por el camino correcto sencillamente deshaciendo el camino hecho y retomándolo desde su origen para que la información llegue como se espera o tenga el efecto deseado. Pero la ceguera voluntaria y testaruda no puede rectificar nada, ni tan siquiera lo quiere así.
Y a punto de cerrar el presente documento somos testigos una vez más de la malinterpretación de las enseñanzas del esoterismo, el ocultismo y la magia(empezando por el hecho de meter estos términos en un mismo saco siendo sus respectivos significados muy diferentes). Esta mañana he acompañado a un amigo interesado en estas temáticas. Tiene fe en el poder de los amuletos y talismanes que adquiere siempre que puede. Según me ha comentado esta interesado en aprender magia. Le he recomendado varios libros sobre la misma que a mí me han parecido tan elementales como interesantes, sobre todo uno muy concreto que se considera que no debería faltar en la biblioteca del ocultista o estudioso del ocultismo que de tal se precie, pues contiene las leyes del ocultismo, ejercicios prácticos preparatorios, definición del perfil del ocultista y su jornada, es decir, comportamiento mental y reglas alimentarias. Enseguida me ha interrumpido esta exposición con que ni le gustaba ni le interesaba el ocultismo.
-¿Pues...?-le he preguntado con una mezcla de extrañeza y desconcierto.
-Lo que yo quiero aprender es “magia encantada”-palabras textuales. Esa es la contestación que me ha dado.
-¿Magia encantada?-he querido saber encogiéndome de hombros.-¿Qué es eso...?
-Tú piensa-encima me invita a que piense yo. Conozco la magia de las velas, la magia del perfume, la magia Teurgia, la magia Goecia, la magia mental, la magia natural, pero la “magia encantada” como dice él...es la primera noticia que tengo. A mí más bien me suena a verdad de Perogrullo. Como decir “fuego quemado” o “lavadora centrifugada”.
-¿Y qué quieres que yo te responda?
-Telequinesia-ha sido la primera palabra que me ha soltado.-El poder psicotrónico. Magia para hacer telequinesia.
-Bueno, si lo que realmente quieres es producir estos fenómenos lo que te interesa es más bien un manual de experimentos parapsíquicos-le he respondido.-La magia es otra historia.
-Me refiero a la magia para hacer telequinesia-¡y dale!-para conseguir el amor, para la prosperidad, para que me llegue el dinero rápidamente, una magia rápida...como la que hace Harry Potter.
 ¿Cómo hacerle entender que es pura leyenda lo que nos muestra el cine y más teniendo en cuenta que la creadora de este personaje no es ni tan siquiera ocultista al menos que se sepa oficialmente? Quiere hacer una magia instantánea y rápida, quiere hacer volar objetos, mantener a la gente flotando en el aire, tener a las chicas rendidas a sus pies...le he recomendado los libros del Maestre Juan que nos exponen ciertas claves que ningún estudioso de la magia debiera pasar por alto y nos ayudan a comprender que un ritual no necesariamente ha de dar respuestas inmediatas si no que todo tiene un proceso y sigue su curso, además de que hemos de tener en cuenta que solamente cristalizará nuestro deseo si le dedicamos un tiempo de trabajo diario y si las leyes kármicas lo ven adecuado para nuestra formación en esta escuela de la vida o dictaminan que lo merecemos.
 Y a pesar de lo que se suele insistir en que debemos recorrer este camino de la mano si no de la mano de un maestro que nos inicie sí por lo menos bajo el asesoramiento y la supervisión de una persona experimentada, él pretende ser un autodidacta y a partir de lo que aprende en los libros convertirse en su propio maestro. ¿Hay cosas que podemos aprender por nosotros mismos? Sí. ¿Podemos descubrir al maestro que anida en nuestro interior? También. Pero no confundamos con esto interpretar determinados conceptos de forma acomodatoria y luego ponerlos en práctica como nos da el viento.
 Ciertas experiencias que queramos realizar solos en casa pueden ser peligrosas para nuestra naturaleza, véase incorporación de entidades y sesiones de experimentación con la tabla ouija. Cualquiera puede aprender por sí mismo a tirar las cartas, a leer las manos, a analizar una firma, a levantar una carta astral, e incluso si lo desea, a realizar un sencillo ritual de magia blanca de tipo casero y sin complicaciones peligrosas. Sin embargo, para aprender y poner en práctica otras disciplinas como la hipnosis, la hipnoterapia, el control mental, la bioenergética, la mediumnidad y todo cuanto se relacione con el mundo espiritual o implique tratar a otras personas, deberemos contar con la ayuda de profesionales y personas experimentadas. Y ahí no sirve la excusa de que “no siempre el profesional está disponible”-pues solo es cuestión de buscar otro momento en que pueda estarlo-como aduce este chico que quiere hacerlo todo “de motu propio” y con resultados inmediatos. Si ya nos peleamos con el más simple ejercicio de matemáticas cuando intentamos hacerlo solos sin nadie que nos lo explique...¿en qué cabeza cabe que pongamos en práctica otros ejercicios de parapsicología no solo complicados si no hasta peligrosos cuando se juguetea con ellos de modo irresponsable sin un asesor adecuado a nuestro lado?
 Y no solo son la malinterpretación ni la ceguera mental quienes distorsionan los mensajes. También la ortografía toma cartas en el asunto. Parece increíble, pero la sola falta de una sílaba, de un punto o una coma pueden cambiar por completo el sentido de una frase.
 Cerramos esta exposición con un pequeño chiste a modo de ejemplo:

-¡Camarero! Este plátano está blando.
-Pues dígale que se calle...


 Kiriel






VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 7

 Amigos y amigas, llegamos ya a la séptima parte de la verdad y la mentira de la magia. Omito a propósito los calificativos blanca y negra porque la magia es la magia y los colores no son más que lo que acabo de decir, calificativos. Son dos estados opuestos de un mismo poder que así se utiliza, así es.
 No nos cansaremos de repetir que somos nosotros mismos los que teñimos la magia de uno u otro color. Y habremos de tener en cuenta también que ni el blanco y el negro son colores, si no respectivamente la presencia o la ausencia de luz, además de que los colores básicos no son cinco si no tres: el amarillo, el azul y el magenta que no pueden obtenerse mezclando otros colores. Son colores naturales.
 Así y todo los artículos o capítulos de libros sobre magia que rezan “los colores de la magia” dividen esta en roja, amarilla, verde, azul, marrón, violeta y gris incluyendo la magia blanca y la magia negra. Insistimos una vez más en que solamente hay operaciones mágicas constructivas y destructivas siendo todo lo demás intereses personales o favores a terceros que pueden ser constructivos y gratos a la Divinidad o destructivos y no autorizados por las leyes divinas y los límites kármicos. El área o aspecto de la vida a los que se aplique(dinero, sexo, salud, etc.) no reviste tanta importancia como si es o no adecuado llevarlo a cabo.
 Otro tanto ocurre con los nombres que se da a la magia y al tipo de trabajo llevado a cabo. Despacho, ebó de candomblé, wanga, grigri, juju, yu-yu, coup l’ aire, etc. Más fuertes por la dificultad de su preparación y por los elementos que han intervenido(sacrificios sangrientos de animales y en los casos que saltan a la prensa, de seres humanos) o más débiles por haber sido más sencillos de preparar(una caja conteniendo monigotes de papel atravesados por un alfiler de latón y quemada a la puesta de sol), todo reside y radica en una misma cosa: un trabajo o una operación mágica bienintencionada o malintencionada.
-La gente que da estos nombres tan rimbombantes necesita el dinero más que nosotros-dice un experto en la materia.-En realidad los trabajos se dividen en dos tipos: trabajos blancos y trabajos negros. Tampoco hay que meter la cabeza en un agujero.
 En esta ocasión hablaremos de los diferentes nombres de la magia explicándolo en clave de humor para ayudar mejor a su comprensión. Porque ciertamente se han dado casos tan escandalosos bajo unos aspectos como irrisorios bajo otras facetas. Los magos de plástico que lían y los clientes inseguros o caprichosos que se dejan liar. Aquellos que consultan a un tarotista detrás de otro hasta que dan con uno que les dice lo que quieren oír-sea verdad o mentira-son presa fácil para estos pescadores de dinero fácil.

DEMASIADOS NOMBRES PARA UNA MISMA COSA, DEMASIADO ARROZ PARA TAN POCO POLLO...

 Tan rebuscada como irrisoria resulta alguna publicidad-confusa a nuestro entender-que de vez en cuando encontramos en cualquier diario, en cualquier revista local, o simplemente que nos tiran en el buzón. Veamos algunas de ellas:

MAESTRO KIMBARA SOUMBA BÁMBARA LE RESUELVE SUS PROBLEMAS LE CURA TODAS SUS ENFERMEDADES CON PRODUCTOS NATURALES SIN DAÑO ALGUNO ALEJA SUS ENEMIGOS ATRAE SU PAREJA MAL DE OJO PROTECCIÓN DE ENEMIGOS MAGIA NEGRA MÉDIUM VIDENTE DON HEREDADO DE SUS ANTEPASADOS RESUELBO TODO EN SIETE DIAS LLAMAME Y TE ATENDERE VISITO DE OCHO MAÑANA DOCE LA NOCHE.
 Mas algún dibujo o algún fondo curioso que no tiene otro objetivo que adornar este anuncio o hacerlo más llamativo. ¿Podría ser para desviar la atención del lector de este anuncio que entiende y sabe un rato, no ya de todos estos temas, si no de ortografía, mucho más básica, más esencial y más importante? Porque si, como dijo aquel experto en materias esotéricas y ocultistas, necesitan el dinero más que nosotros, es que deben pasar tanta hambre que se comen hasta los puntos y las comas. Un anuncio más presto a confusión que este es difícil de encontrar.
 Expongamos algunos de los anuncios que suelen aparecer en los periódicos. Me refiero a los que muestran una apariencia más razonable independientemente de quien se anuncia sea honrado o un simple charlatán.

PAI DE SANTO FEDERICO DE OXALÁ

Consultas de tarot y caracolas-Médium- Limpiezas- Protección y cerrazón del cuerpo contra magias negativas y malas influencias.

MARIA ANTONIA

Sanadora-Vidente- Parapsicóloga.

ENRIQUE CORREA

Magia vudú para ayudarte a resolver tus problemas-Cartas astrales- Consultas de tarot.

Doctor MIRÓ BLANCO

Medicina natural-Iridología

PAU FERNÁNDEZ

Kábala- Tarot- Numerología.

 Por lo menos no son o no sienten necesidad de ser tan rebuscados como lo que vamos a exponer ahora acto seguido.

SUMO SACERDOTE DE CANDOMBLÉ

 Zeprino dos Santos Cosme e Damiao e de Oxossi e Ogum Ode Kayode Azevedo das Matas.

Nago Gegé Oio Batuque- Candomblé de Umbanda no Catimbó da Pagelença. Trabajos de macumba y kimbanda, resuelvo todo, destrancamento de Ebos do Candembré. Trabajos de Candombé e Makumba para el amor. Consultas de tarot egipcio y griego.

 Bonito y decorativo nombre, pero...¿cómo lo llaman cuando la casa se está quemando?
 Señor Zeprino dos Santos...no se cuántos. Muy interesantes las actividades que usted realiza, pero...¿Cómo se dice, candomblé, candembré, candombé o candobé? Tres o cuatro veces le ha cambiado el nombre a este tipo de magia...que no sabemos si es una magia o un plato nuevo que ha salido ahora. ¿Y cómo se escribe, macumba, makumba, macunba o macunva? Porque ha cambiado la letra un par de veces y no hay quien se ponga de acuerdo. En cuanto a los demás términos utilizados esta persona está demostrando no estar iniciada en nada de cuanto expresa en su anuncio(Y yo me pregunto ¿qué importancia le da a todo esto una persona que necesita ayuda para que tenga que fardar tanto quien la ofrece abiertamente?). Ha leído unos cuantos libros sobre estas culturas(da lo mismo que sean los mejores que pasan a la historia que sean lo más mierda que hay, con perdón)escritos por antropólogos y han extraído de ellos una serie de palabras que encierran misterio y que sorprenden por el mero hecho de haberlas escuchado muy poca gente, pero que desconocen totalmente. Aunque los practicantes del catimbó-variedad de rito macumba-no necesitan iniciarse para acceder al mismo, no se puede pretender saberlo todo con solo una o dos páginas que el libro le dedica por muy completo y extenso que nos parezca. Y si realmente estuvieran iniciados en candomblé o umbanda y realmente realizaran trabajos en la linea quimbanda sabrían que-esto los iniciados y consagrados en estos cultos bien lo saben-que el candomblé no permite la umbanda, de ahí que nos parezca un total contrasentido decir “candomblé de umbanda”. Sería lo mismo que decir “budismo de cristianismo” o “cristianismo budista”. Claro que si estas personas hacen cócteles y revoltijos con todo lo que encuentran son capaces de hacer un poco de sincretismo...hasta el punto de fundar un cristianismo que permitiera la poligamia o un adventismo que permitiera el consumo de carne y las prácticas espiritistas y ocultistas.
 Y junto a estas personas desinformadas que confunden la gimnasia con la magnesia existen otros tanto o más rebuscados que ellos que sin estar iniciados en ninguna línea se autodeclaran pais de santo, babalorixás, babalochás, paleros y un largo etcétera de las corrientes que están de moda durante el año en curso. Por eso no nos extrañe que el que decía ser sacerdote de Ifá sea maestro masón el año que viene si lo que vende y triunfa es la masonería como ocurre en política con aquel militante de un determinado partido que echa pestes de los socialistas y al cabo de tres meses se va con ellos.
 Y por si fuera poco adorno y poca presunción autodeclararse una cosa que no se es(no es el caso del buen señor del anuncio que hace magia vudú en pro de los necesitados, ya que es una magia sencilla y popular accesible a todo aquel que desee practicarla ya que no presume de ser sacerdote vodún o houngan que es muy distinto de ser usuario de la magia vudú para sí o para los demás) acostumbran a decorarlo todo lo que pueden y más. Están tan confusos que se les va la pinza fantaseando y como los que leemos todavía creemos que Christopher Reeve volaba de verdad y no solo cuando interpretaba a su personaje Superman aceptamos todo lo que se nos da mascado. A continuación veremos algunos de estos anuncios. Pretenden impresionar haciéndonos ver que practican una magia un tanto exótica, aunque yo diría más que exótica excéntrica. Además de eso: por si no bastara acostumbran a expresar sus actividades en un dialecto que consideran típico de la zona de donde es originario ese tipo de magia:

LOUIN DE EXÚ-MALÉ-OMULU DE MACUMBA KIMBANDA


Trabalhos a na linha do spiritismo brasileiro


(Esto es “trabajos en la línea del espiritismo brasileño”. Cabe suponer que se referirá a lo que ha puesto al lado de su nombre)

 

 

 

 

 

EVELYN LE CARRIERÉ

Mágie Voduá


(Esto es “magia vudú”. No se molesta ni en averiguar si magia vudú realmente se llama así en francés o si se escribe en realidad voudou. Sencillamente lo que va oyendo lo va escribiendo. Contundentemente claro. Y además me suena a tongo; utiliza un nombre francés o afrancesado y lo mismo el tío o la tía es nascut a la Barceloneta).
 Como si una “mágie” nos fuera a ayudar a resolver un problema mejor y mucho más rápido que una magia dicho así simplemente. Y “voduá” encima por si fuera poco disfrazada...y por si vudú en español ya estuviera tan visto que no resultaría tan llamativo.
(Según quién y cómo pronunciara tales nombres ese anuncio de la mágie voduá sonaría un tanto maricón, lejos de fascinar a posibles interesados y de impresionar. Más que impactante resulta irrisorio).

-“Evelyn le Caggrrriegggrrré”-leemos el anuncio en voz alta en una tertulia.-“Magggsssshie Voduáaaa...”
-¡Ja, ja, ja, ja, ja, jaaaaaaaa....!

¿Teméis a la bruja, al vudú y al demonio después de lo que acabáis de leer?

¿A quién quieren impresionar si en los tiempos que corren está todo inventado y todo descubierto? En lo que a artimañas y deseos de aparentar se refiere, por supuesto

 Y como ese un sinfín de nombres que como dice el chiste sobre los médicos cuando emiten un diagnóstico “se inventan para cobrar más caro”. Aunque suena a chiste, por desgracia es verídico; se inventan un nombre, mejor dicho, un neologismo para impresionar. Del libro “Insultos, cortes e impertinencias” de Ediciones Temas de Hoy, extractamos esta representación de un juicio por injuria:
-Acuso a este hombre de haberme insultado públicamente-anuncia el demandante.
-¿Qué le llamó?-pregunta el juez.
-Pichelingue.
-¿Y qué quiere decir esto?
-No lo sé. ¡Pero insultar, insulta cantidad!
 Algo paralelo a lo que sucede con un autoenvenenamiento al aceptar la realidad, la supuesta realidad de un supuesto maleficio o trabajo de magia que lo más probable es que ni siquiera se haya hecho. Vamos a mostrar un ejemplo: nos encontramos en la consulta de un mago de cartón-piedra dispuesto a explotar la credulidad de la gente y a sacarles cuanto dinero pueda y más. Una señora aquejada de unas molestias para las que no haya ninguna explicación razonable, de una interminable racha de mala suerte, de graves problemas económicos y sentimentales acude a dicha consulta. Y como cabe esperar el “diagnóstico” es un trabajo de magia negra.
-¿Qué me han podido hacer, una macumba, un vudú, un ritual satánico, una misa negra...?-le pregunta la desesperada clienta hablándole así en un para su situación-o su estado de ánimo-inexplicable afán de ganarle en sapiencia a ese mago que tiene ante sus narices, el cual habiendo corrido más que ella y en otro afán de superación le explica:
-Pues no; lo que tiene usted es algo peor. Es más fuerte y mucho más peligroso que todo lo que ha dicho.
-¿Qué es?-gime la señora.-¡Por favor, dígame usted qué es lo que me han hecho!
-Un “tantarantán”-le responde él con cierto aire de misterio.-Le han hecho un tantarantán. Se trata de un nuevo y desconocido tipo de magia que no se tumba como cualquiera de aquellos otros. Este es mucho mas complicado y puede ser hasta mortal.
-¿Qué he de hacer?
-Hay que conseguir un cerdo viudo, rociarlo con gasolina robada en una gasolinera cercana a dos cruces de carreteras exactamente a las veintitrés cincuenta y nueve horas de la noche sin que le vea el encargado-no le servirá si le descubre o si roba la gasolina a las cero horas en punto-y quemarlo en la hoguera de San Juan sobre la que usted tendrá que saltar con los ojos vendados y con una mochila bien cargada. Son trescientos sesenta euros la consulta y ochocientos noventa el trabajo a realizar. No se lo piense más, dentro de cinco minutos puede ser demasiado tarde...
 Evidentemente esto es un chiste sobre prácticas mágicas y ocultistas. Si embargo estas prácticas no son precisamente un asunto con el que se pueda bromear. No ya porque montemos una comedia para lucirnos si no porque no sabemos hasta que punto la persona que se dirige a nosotros para pedirnos ayuda es emocionable, sugestionable e insegura. Y nuestra conducta así como nuestro lenguaje puede influirle para bien o para mal.
 Recuerden: existen el Bien y el Mal que son dos principios opuestos o dos partes opuestas de un mismo principio. Lo demás son meras pinceladas.

Kiriel.



VERDAD Y MENTIRA DE LA MAGIA BLANCA Y LA MAGIA NEGRA 8

 En este documento intentaremos descifrar algunos vocablos que parecen dar origen a interpretaciones no del todo exactas.
 Retomamos el tema del sincretismo religioso latinoamericano en el que queremos aclarar ciertos conceptos a menudo malinterpretados mayormente por escritores que dan por sentadas ciertas afirmaciones.
 En efecto, en algunos libros sobre santería en los cuales se da un repaso conjuntamente con ella a otras culturas de carácter muy similar(candomblé, umbanda, etc.) suele asociarse la santería lucumí o yoruba con el bien mientras que se relaciona con el Mal más puro a los ritos del Palo Mayombe.
 Este culto, ya lo hemos señalado otras veces, no es otra cosa que, como suelen denominarlo algunos seguidores, “El tributo al dueño del monte”, o lo que es lo mismo el culto a los antepasados y a las fuerzas de la naturaleza. Es básica y esencialmente el pacto con los difuntos y con las fuerzas naturales con el fin de ponerlas a nuestro servicio a cambio de una retribución real o simbólica. En su esencia, en lo que a sus típicos trabajos mágicos se refiere, es similar a la magia ocultista que practicaron en sus tiempos Cipriano, Cornelius Agrippa, Salomón y otros grandes magos, aunque sus ceremonias sean física y tangiblemente muy distintas. Se trata de una especie de gobierno o mando sobre las fuerzas naturales y sobre los entes desencarnados-que previamente han aceptado el pacto propuesto por el palero o sacerdote del Palo Mayombe, lo cual se descifra al lanzar unas caracolas denominadas por ellos chamalongos-cuyo fin puede ser constructivo o destructivo(no me gusta usar los términos positivo y negativo ya que se identifican automáticamente con justo y erróneo que no tienen necesariamente nada que ver).
 Los estudiosos del tema y los iniciados-que sabrán mucho más que no les está permitido dar a conocer-saben que existen dos tipos de Palo Mayombe o para ser exactos dos tipos de caldero de guerra-recipiente de hierro utilizado en esta clase de trabajos-inherente a este tipo de ritual: prenda judía y prenda cristiana. Son prácticamente lo mismo con la salvedad de que la primera es utilizada tanto para ayudar como para perjudicar y no está bautizada(es decir no se ha agregado agua bendita a los ingredientes ahí contenidos) mientras que la segunda es utilizada exclusivamente con fines constructivos y como una garantía o una confirmación de ello sí que está bautizada, es decir, contiene agua bendita agregada a los ingredientes.
 El culto kimbanda es muy discutido y da lugar a diversas interpretaciones. Unos lo definen como una magia negra que se practica en Brasil, otros como una vertiente un tanto exótica del satanismo o de la magia negra. Los mismos diccionarios esotéricos y ocultistas suelen definirla como los maleficios originados en el fetichismo afrobrasileño.
 La definición genérica que se le puede dar es ni más ni menos que el culto a los exús y a las pomba giras, unos entes en estado de evolución cuya forma en la que son gráficamente representados nos recuerda a la representación gráfica de los demonios del cristianismo.
 Si ahondamos un poco en el significado profundo de estos vocablos podemos encontrar un significado mucho más sencillo.
 En principio, como señalamos en anteriores documentos el término kimbanda derivaría de la unión de los vocablos ki y nganga, los cuales hacen referencia al que es al mismo tiempo sacerdote, médico, profeta y hechicero. Sin embargo, en otras lenguas el ki o el chi es la energía vital y nganga significaría de manera relativa “caldero de guerra” y de manera absoluta el fundamento o la ley cósmica. Visto así traduciríamos kimbanda como energía cósmica sin más ni más.
 En cuanto al significado de la palabra “Umbanda”, deriva de la unión de los dos términos aum que significa Dios y “banda” que significa grupo. AUM es también la sílaba sagrada que se pronuncia OM(una o seca seguida de una m prolongada como el zumbido de una mosca) y que representa el Todo y la obediencia a los preceptos superiores divinos. Tendríamos pues, el grupo divino o cercano a lo divino o el grupo que rinde obediencia al Supremo y acata sus decretos divinos.
 Conviene aclarar de paso que lo mismo que en la regla del Palo Mayombe, existen dos tipos de kimbanda o dos vertientes distintas de la misma línea: rituales benéficos y rituales maléficos. Como es fácil de comprender los primeros están destinados a abrir caminos, a ganar pleitos en justicia, a disolver trabajos negativos producidos del mismo modo, (estos son los trabajos para los que son invocados los exús), a resolver problemas de amor(trabajos destinados a las pomba giras), y los segundos a causar enfermedades, perjudicar y destruir.
 Se dice a menudo demasiado a la ligera que los exús se hallan sincretizados con los demonios del cristianismo. No nos cansaremos de insistir en que el culto a los exús es mucho más antiguo que el cristianismo y solamente desde la aparición y el triunfo de este es conocido el concepto del Diablo y los demonios como ángeles caídos y rebeldes a la Orden Suprema.
 Existen dos entes que mejor denominaríamos dos fuerzas llamadas Lucifer y Satán que son las principales aparentemente nocivas. Los demás nombres “diabólicos” son derivados de ídolos de antiguos cultos paganos: Belcebú(señor de las moscas) Baalfegor(del culto a Baal y Fecor, el monte donde se le adoraba), Mefistófeles(desconocemos si fue concebido por la teología o es solamente un personaje de la famosa pieza teatral de Goethe: fue, se dice, el demonio que firmó el pacto con el doctor Fausto). Pero también deriva de vocablos, más que de vocablos de frases que aluden a hechos o fenómenos: Mefisto es “el que rehuye la luz”, Diabolus es “el que fluye hacia abajo”, Drácula es el nombre que los rumanos dan al Diablo...y un largo etcétera de nombres así que por si solos bastarían para llenar un grueso volumen, de ahí que se hallan escrito y publicado varios diccionarios demonológicos. Pero los significados que podamos hallar en ellos son solo definiciones, a nuestro parecer, muy poco profundas.
 Veamos pues el significado que el Ocultismo atribuye a Lucifer y Satán.
 Lucifer es una fuerza que intentó proyectarse hacia lo alto(simbolizado por el ataque o abordaje al trono de Dios) y al no lograrlo retrocedió hacia abajo(simbolizada por la expulsión que propició su caída) quedando en los planos o esferas inferiores del mundo astral. Desde entonces su función o sus características son un a modo de monitor de nuestra existencia. Esta fuerza es la que nos muestra la parte negativa de nuestro ciclo de vida recién vivido en el plano físico o diríamos mejor aquella parte de nuestro ser que merece ser trabajada en pro de su evolución espiritual. De ahí que en teología se conoce a Lucifer como el fiscal de Dios o el Acusador.
 Satán sería por otro lado el principio opuesto. Lucifer es la disolución y Satán la coagulación. Son dos partes opuestas de un mismo principio: Lucifer representa el fluido, el ser espiritual, mientras que Satán representa la materia, el plano físico y el cuerpo físico sin los cuales no podríamos purificarnos. Lucifer es el motor ígneo que nos impulsa hacia lo alto, el motor que nos empuja y Satán es el replano sobre el que nos detenemos a descansar y recuperar fuerzas para proseguir la marcha o la subida por los peldaños de la evolución. Quizá basaríamos en este concepto la afirmación de que Satán tienta por la pereza o por la fatiga.
 Y no obstante en angelología Lucifer y Satán junto con otros nombres que se da a los entes poco evolucionados siempre son negativos; sin embargo, la angelología reconoce el papel tan importante que desempeñan en nuestra vida. Y a pesar de que su nombre alude a entidades oscuras y perversas no son más que arquetipos. Lucifer representa el orgullo insano por la apariencia y por el concepto que uno tiene de sí mismo y Satán representa el apego a lo material, la importancia de lo material y la falta de consideración o atención a lo espiritual o a nuestros deberes para con nuestro prójimo más necesitado de nosotros. También es el arquetipo de las experiencias terrenales y, en los diferentes aspectos de la vida que nos toca vivir, de ese trabajo que tenemos que hacer que no nos gusta entre otros, de vivir como un castigo todo aquello que requiere esfuerzo, concentración y sacrificio, aunque constituya el eje de nuestra existencia. Por lo que respecta a las otras fuerzas oscuras no son más que partes negativas o poco evolucionadas de nosotros mismos; nos advierten de que algo no está totalmente encasillado y es conveniente ajustarlo o de que nos estamos dejando apoderar por la egolatría y miramos siempre hacia dentro en lugar de mirar hacia fuera. Son fuerzas junto a las que podemos crecer o por las que podemos dejarnos arrastrar hacia la involución. Como agentes al servicio de la divinidad nos prueban continuamente de diversas maneras.
 Y volviendo al culto kimbanda hacemos referencia a las diferentes entidades que nos presenta. El exú es un ser intermediario entre el ser humano y el ser divino, entre el microcosmos y el macrocosmos. Desempeña su función también en el plano kármico y es quien se ocupa de regular las pruebas por las que hemos de pasar necesariamente para nuestro aprendizaje y nuestra evolución. Cuando el espíritu está a punto de reencarnarse elige las pruebas de las que quiere aprender y a menudo ocurre que dado que visto desde fuera y a vista de pájaro todo se ve demasiado fácil escoge pasar una serie de pruebas en una sola vida con lo cual el ego lejos de evolucionar y madurar acaba más bien asfixiado y al desencarnar decide tomarlo con más calma: por ejemplo, en lugar de quemar su karma en una sola vida elegirá quemarlo en tres vidas sucesivas. Y con este fin se realizan trabajos mágicos con Exú para abrir caminos, pues es Exú quien envía esa dura prueba a la siguiente existencia o la diluye en varias existencias para que sea menos dura. Si venimos a superar una serie de pruebas, Exú es quien se ocupa de que esas pruebas no sean desmedidas.
 Tenemos pues dos clases de Exús: los evolucionados y los no evolucionados llamados kiumbas, más atrasados, más anclados al plano terrenal y por tanto mucho más peligrosos. Junto a la línea kimbanda cuyo vocablo de origen es ki-nganga o energía cósmica, existe la otra línea denominada kiumbanda que rinde culto a los kiumbas y se dedica exclusivamente a trabajos negativos. También la macumba ha sido englobada bajo el término “magia negra”, aunque debemos aclarar que se divide en dos: macumba cuyas fuerzas adoradas son de origen bantú y cuyos ritos pueden utilizarse con finalidades terapéuticas y makiumba que alude a los trabajos realizados con los kiumbas o por mediación de estos.
 Volviendo al sincretismo entre los exús y los demonios del cristianismo conviene aclarar que estos últimos se encuentran en un gráfico aparecido en todos o la gran mayoría de los grimorios o tratados de magia evocativa. Veamos cómo nos lo muestran a título de curiosidad:








LUCIFER
emperador
BELCEBÚ
príncipe
ASTAROTH
Gran duque


Sigue una lista de demonios sometidos a este trío directivo o aristocrático:

LUCÍFUGO
Primer ministro
SATANACHIA
Gran General
AGALIARETH
Segundo General
FLEURETTY
Teniente General
SARGUIANAS
Brigadier
NEBIROS
Mariscal de campo



Y por debajo de ellos encontramos esta lista de dieciocho demonios sin categoría(otros tratados se la otorgan como por ejemplo al demonio Bael de quien se dice que es el primer rey del Infierno al que obedecen 66 legiones, aunque ello no está especificado en los tratados en los que aparece esta lista. ¿En qué cabeza cabría que un general tuviera mando sobre un rey?)supeditados estos y a los anteriores:

1. Bael                 7. Buer             13. Loray
2. Agares             8. Gusatán             14. Valefar
3. Marbas            9. Botis             15. Foran
4. Pruslas           10. Bathym        16. Ayperos
5. Arimón          11. Pursan          17. Naberus
6. Barbatos.       12. Abigor          18. Glasyabolas.





 Este es el sincretismo entre los exús y estos nombres demoníacos:

PUT SATANAKIA- EXÚ MARABÓ
AGALIERAPS- EXÚ MANGUEIRA
LUCIFER- EXÚ REY MAYORAL
BELZEBUTH- EXÚ MOR
ASTAROTH- EXÚ REI DAS SETE ENCRUZILHADAS
TARCHIMACHE- EXÚ TRANCARRUA
FLEURETY- EXÚ TIRIRÍ
NESBIROS- EXÚ DOS RÍOS

 Y el mero hecho de haber intentado sincretizar a estas fuerzas con los “demonios” encontrados en diversos tratados de magia evocativa-deliciosos para los amantes de hacer conjuros por el mero gusto de hacerlos, pero en realidad poco útiles a los buscadores de la verdad que desean conocimientos y estudios más serios-ha motivado que la línea Kimbanda se “sincretice” con la magia negra de la misma manera que se le ha encontrado a la línea Umbanda un cierto paralelismo con la liturgia católica y con el espiritismo fundado por Allán Kardek. Aunque esta última es ciertamente un sincretismo entre la antigua religión de los pueblos africanos del Congo, la doctrina católica, el espiritismo kardecista y la religión indígena tupí-guaraní, kimbanda no es-al menos no obligatoriamente-magia negra ni es esta su finalidad. Podemos etiquetar-que este es otro error que da lugar a confusiones y malinterpretaciones-bajo el epígrafe de línea blanca o magia blanca(benéfica) a la umbanda y bajo el epígrafe de línea blanca, roja y negra o magia blanca(benéfica) magia roja(sexual)y magia negra(maléfica) a la kimbanda. En una acepción más simple y más vulgar diríamos que la Umbanda es blanca y la Kimbanda es tricolor: blanca, roja y negra.
 Por lo que respecta al “Diablo”(procedente del vocablo “duplo” que significa “doble”, en este caso sería el “doble” o el reflejo de la divinidad) es un motor de empuje cósmico mientras que los “demonios”(o daimones que significa “espíritus”) no son más que energías que se aprovechan. Se hallan en estado de evolución y a través de los trabajos para los que son requeridos pueden evolucionar o retrogradar según el trabajo sea constructivo o destructivo. Hemos englobado la magia roja o sexual dentro de la kimbanda por ser las pomba giras-entidades protagonistas junto con los exús o “demonios” de este culto-las fuerzas requeridas para los trabajos de amor y unión, muy utilizados dentro de esta línea que es mucho más apta para ello. Ya señalamos en anteriores documentos que la umbanda participa de la concepción abstracta del Universo y la kimbanda se centra más en lo terrenal(como el amor sexual).
 La kimbanda es además de un culto un instrumento o para simplificarlo más una placa de resortes. Mediante nuestro libre albedrío accionamos unos u otros. Si abrimos la llave del bien produciremos un bien, lo contrario sucederá si abrimos una espita liberadora del mal. Y por supuesto nosotros asumiremos bajo nuestra responsabilidad las consecuencias de una u otra decisión. No hay prohibiciones, decimos simplemente “esto es blanco, esto es negro”. Si bebes el caldo recién sacado del fuego te quemarás, si lo dejas enfriar te lo podrás beber sin peligro. Las energías ni nos traen suerte ni nos molestan, somos nosotros con el uso que les damos quienes nos lo hacemos todo. Ni la kimbanda, ni el palo mayombe ni el vudú, ni ninguna línea es asesina o sectaria, es más bien nuestra propia actitud al respecto lo que hace de ellas un programa educativo y edificante o una válvula de escape de lo peor de nosotros mismos.
 Llegados a este punto nos preguntamos: en resumidas cuentas ¿Lucifer es bueno o malo?
 En angelología se insiste en que Lucifer es el arquetipo del alto concepto del propio valer llevado hasta el paroxismo, de la soberbia y de las ayudas rechazadas, Satán es el odio, la frialdad y la maldad sin más, Arhiman-nombre persa del Diablo-es la manipulación y la creación de sentimientos negativos como la envidia, la culpa, la inferioridad y los complejos, y los ángeles oscuros son entes del bajo astral atraídos por la negatividad generada por nuestros propios miedos. Sin embargo, dejando todos estos nombres en lo que son: nombres, lo que nos queda realmente es la soberbia, el odio, la  manipulación social o mental y los miedos. Todo ello nacido de la propia mente independientemente de si intervienen o no entidades en ello.
 El cristianismo cataloga a Lucifer y Satán como dos ángeles caídos y rebeldes. Satán, en palabras de Eugenio Siracusa-contactado italiano-, tienta en la materia mientras que Lucifer lo hace en el espíritu. Y si volvemos a dejar de lado estos dos nombres o vocablos nos quedan únicamente la materia y el espíritu.
 Y por último según las enseñanzas herméticas el espíritu precisa de la materia a la que desciende para crecer y purificarse.
 Estudiemos ahora la procedencia de ambos vocablos.     
Satán procede del vocablo hebreo “opuesto”. Ahí no hablamos de oposición como rechazo, desacuerdo o desacato. En astrología se dice que dos planetas se hallan en oposición cuando se sitúan uno frente a otro. Y ya que tocamos el tema astrológico, podríamos agregar que un ángel “caído”-o una fuerza caída ya que Lucifer era una fuerza cósmica- podría ser paralelo a un planeta “en caída”, aspecto en el que pierde parte de su fuerza. Y llegando un poco más lejos el retroceso de esta fuerza llamada Lucifer sería análogo a un planeta retrógrado(nombre que da la astrología a los planetas que invierten su recorrido). Cuando Lucifer-como fuerza, no como ángel en teología-retrocedió al no lograr proyectarse hacia lo alto experimentó una “caída” igual que la de los planetas. Esa fuerza se hallaba en detrimento o en caída ya que conforme retrocedía perdía parte de su poder, igual que en física un imán gana o pierde electrones.
 Y Lucifer procede de la unión de los vocablos “Lux” y “Ferre” que significan respectivamente “Luz “ y “Hacer”, es decir el que hace la luz, pero también según palabras textuales de Eliphas Levi(Dogma y ritual de la Alta Magia) el que esparce las tinieblas. Es el motor de nuestro ciclo de existencias, el que nos muestra las partes de nuestro ser que hemos de esforzarnos en desarrollar. De esta manera nos da la luz, es decir, arroja claridad sobre el asunto. Por eso se le denomina “el que hace o da la luz”. Pero se dice que es también quien esparce la oscuridad, quien oscurece. Retomemos el tema de las vidas cíclicas.
 Una vieja leyenda sobre el Infierno que solemos encontrar en la famosa obra “El humanismo” de Bernat Metge nos ilustra sobre el olvido que sobre su recién vivida existencia sufren las almas en pena al beber irremediablemente y acuciados por la necesidad de las aguas del río Leteo, un mítico río del Infierno, la cual cosa podría representar el olvido que en la teoría de la reencarnación experimenta el espíritu al descender al vehículo carnal hacia su evolución, es decir, al reencarnarse en el recién nacido. Ahí Lucifer como monitor de nuestro ciclo de existencias ha esparcido una oscuridad ante nuestro ego, es decir, nos ha corrido una metafórica cortina negra ante nuestros ojos memorísticos para que no nos afecten los recuerdos de la vida anterior a los que hemos seguido apegados tras haberla vivido, igual que el cirujano una vez nos ha anestesiado de cintura para abajo nos corre ante nuestra vista una cortina verde en sentido literal para que no veamos la “carnicería” que hacen con nuestro órgano a intervenir y evitarnos así todo nerviosismo y todo sentimiento de repulsión. Se trata de una protección que nos crea para que podamos sobrevivir y podamos desempeñar la misión que nos ha sido asignada por seres superiores.
 Para los de tendencia más simplista podríamos resumir que hay dos tipos de Lucifer: el Lucifer positivo que es el monitor de nuestro ciclo de existencias y el Lucifer negativo que es un ente involucionado enmascarado como nuestro guía espiritual que preside nuestro propio engreimiento siempre y cuando encuentra un buen terreno abonado y un adecuado caldo de cultivo para aposentarse en nuestro ego. Y estos suelen ser nuestra propia inseguridad, nuestra propia tendencia a querer lo del vecino por el mero hecho de aparentar y la sobrevaloración transitoria de algo sin importancia. La diferencia entre ambos “luciferes” es la misma que se establece en el culto kimbanda entre los exús y los kiumbas a los que ya nos hemos referido anteriormente.
 Lucifer y los luciferianos del mundo astral son los monitores de nuestras vidas sucesivas, el Lucifer evocado en los ritos de magia negra-nombre dado por los evocadores a una entidad nada evolucionada y abocada al Mal más puro que adopta ese nombre como podía haber adoptado cualquier otro[1]-y otras entidades que le acompañan son entidades poco evolucionadas que se nutren de las energías negativas creadas por la soberbia y la presunción. Satán es la materia, la tierra, la cristalización y la congelación que conserva. El espíritu que desciende a los Infiernos-de infernus, interior-es nuestro ego que realiza un trabajo interior, un viaje a los estados inferiores del ser-katabasis-destinado a reconocer su parte negativa, los monstruos de su inconsciente, con el fin de transmutar esa energía interior negativa en positiva. Es la bella y la bestia que todos llevamos dentro, la bestia que puede embellecer gracias a este trabajo interior. El mismo psicoanálisis y la misma regresión hipnótica podrían en estos términos ser considerados como un viaje el Infierno.
 Por lo que respecta a los nombres dados a las entidades negativas ya sean tomados del simbolismo arquetípico, ya sean tomados de vocablos o de ídolos paganos-ni buenos ni malos, son meras creaciones del pueblo-podríamos aclarar que por ejemplo Arhimán o Angramainyú no existe como entidad aislada o concreta sino como un nombre que designa todo un grupo de entidades poco o nada evolucionadas. Mi nombre es legión, dice a Jesús el demonio que intenta desterrar del cuerpo de aquel muchacho, puesto que somos muchos. Satán o Lucifer en su cara oscura y negativa serían los nombres que designan a un conjunto de entidades como la División Azul designa a todo un ejército. Pero insistimos en que se trata de nombres que nosotros mismos les hemos dado guiados por las enseñanzas de la creencia en boga o la religión oficial.
 Quien narra haber viajado al Infierno y haber pactado con el Diablo ni se ha movido físicamente de donde estaba ni ha negociado nada con nadie. Y con todos los respetos hacia las personas quien de ello presume es más fantasma que las apariciones de los desencarnados. Como señalábamos respecto al trabajo interior, ha entrado en contacto con lo más profundo de sí mismo y ha establecido un diálogo, que mejor habría que catalogar como un monólogo absurdo, con su parte negativa y corrupta. Si dice haber pactado con Lucifer para obtener dinero, ha monologado con su parte altiva y ensoberbecida para lucrarse con malos medios, si dice haber pactado con Satanás para conseguir un ejército de bellas mujeres-o de bellos hombres- y enriquecerse sin trabajar ha conectado con su parte lujuriosa, materialista y perezosa. Si el pacto, según asegura, ha sido hecho con Drácula, no nos quepa duda de que estamos ante un auténtico parásito social dado que ha conectado con su parte vampírica que sustrae las energías a las personas que se le acercan. Nos referimos al tiempo y a la intimidad que les roban y a los esfuerzos que les hacen invertir para tenerles satisfechos sin lograr satisfacerles nunca. Aludimos aquí a las personas puntillosas y exigentes a las que cuanto más les damos más quieren. En resumidas cuentas: dime con qué ente has pactado-o qué nombre has elegido para formalizar ese presunto pacto-y te diré cómo eres. Si analizamos la procedencia de cada nombre o simplemente qué características se atribuye a cada demonio-consúltese cualquier diccionario demonológico incluido en algunos libros sobre magia y brujería-podemos deducir el motivo de dicho pacto o con qué finalidad. Belial, asociado al vicio, equivale a un yo vicioso, Asmodeo, según el famoso “Diccionario Infernal” de Collin de Plancy(Taber, 1868), superintendente de las casas de juego(¿Qué pintan un bingo o un casino en un lugar de sufrimiento como se supone que es el Infierno?), revela un yo ludópata que vendería a su padre para continuar con sus malos vicios. Quien posea un diccionario demonológico en su biblioteca personal y alguien le diga que pacta con uno de esos demonios que él sabe y tiene leídos...que busque el significado del nombre que le dicen y sabrá cómo es la persona en cuestión. Siempre tocamos a las máquinas expendedoras el código y el botón de aquello que más le gusta a nuestro paladar.
 Durante mis paseos reflexivos y meditativos se me ocurrió un juego gramatical con las palabras macumba, umbanda y quimbanda, unas combinaciones que para unos explicarían bastantes cosas, para otros no pasaría de ser un mero autodefinido y para los que quisieran acusar o juzgar una justificación bastante sólida.
 ¿Quién quiere jugar conmigo?
¿Tú? Pues presta atención a las palabras que ahora te escribiré en mayúsculas:

MACUMBA
UMBANDA
QUIMBANDA

 Y ahora vamos a hacer una pequeña combinación. Observa y saca tus propias conclusiones:

         M
UMBANDA
         C
         U
         M
         B
         A


Otro cruce de palabras:


                 M
                 A
                 C
                 U
                 M
       QUIMBANDA
                 A

 Si encerramos en un recuadro estas dos combinaciones que acabamos de ver nos quedarán dos cruces. Evidentemente, cuando la palabra macumba esté cruzada por la palabra umbanda aparecerá la forma de un crucifijo cristiano, cuando sea quimbanda la palabra que cruce a macumba aparecerá el mismo crucifijo cristiano invertido.
 Con este planteamiento los buscadores obsesivos de mensajes subliminales disponen de un argumento sólido para criticar el culto quimbanda. Como ya estudiamos en otros apartados macumba es un nombre genérico que hoy día reciben todas estas prácticas divididas en umbanda y quimbanda. Deducción de los analistas de turno: la macumba es magia blanca cuando se cruza con la umbanda y es magia negra cuando es cruzada por la quimbanda dado que la situación de las palabras en cada caso conforman una cruz derecha o invertida, símbolos respectivamente del bien y del mal.
 Siendo así vamos a cruzarla con ambas a ver qué nos dicen cuando la examinen de nuevo:

                 M
        UMBANDA
                 C
                 U
                 M
       QUIMBANDA
                 A


 ¿Alternancia de los ciclos bien y mal, señores analistas según lo que entienden ustedes por bien y mal? “No señor”, responderán categóricamente“dado que el vocablo quimbanda tiene más letras que el vocablo umbanda y en él queda centrada perfectamente la b inferior mientras que el vocablo umbanda se compone de menos letras centrándose en él la a superior, se sobrentiende que, aunque se hallan cruzadas las dos cruces, derecha e invertida, la cruz invertida posee mayor envergadura y es por tanto mucho más poderosa. Resolución: la quimbanda es una inmoralidad y una liturgia demoníaca originada en los ritos africanos y la umbanda que aparentemente es similar a la liturgia católica no nos es tampoco muy buena ni muy viable puesto que permite que la cruz invertida le eclipse. En cuanto a la macumba que se halla atravesada por las otras dos, la buena y la mala, pero más la buena que la mala...regulín, regulón...”.

¡Ya estamos otra vez atacando y enjuiciando!

Tantos análisis quieren hacer de tres o cuatro palabras que se pierden por los cerros de Úbeda.
 Lo que yo he planteado no es más que un juego gramatical sin más.
 Voy a daros mi opinión acerca de estos símbolos:
 En toda enseñanza hermética todo son parábolas y símbolos.
 En el plano material Jesús fue condenado a la crucifixión.
 En el plano espiritual crucifixión es alcance de conocimiento, lo mismo que suicidio o sacrificio(interrupción voluntaria de la vida terrenal o renuncia voluntaria a algo en el plano físico)significan identificación o fusión con lo sacro o sagrado. Sacrificio viene de la unión de las palabras “hacer” y “sacro”. Mediante el sacrificio hemos convertido lo profano en sagrado, es decir, lo hemos hecho sacro.
 De otra banda una cruz no tiene porque ser un instrumento de ejecución, puede representar pura y simplemente el cruce de cuatro caminos.
 Para mí un crucifijo derecho y otro invertido son lo mismo que esto:
“Hoy es miércoles” “¿Es miércoles hoy?”
 Con la única diferencia de que la primera es afirmación y la segunda es pregunta.
 Es decir lo que está invertido es lo que tenemos pendiente y lo que está derecho es lo que tenemos ya resuelto o liquidado. La umbanda representada en la cruz derecha es la evolución alcanzada, la quimbanda representada en la cruz invertida es la evolución que se está buscando. La primera ya alcanzó la luz, la segunda está de camino a ella, unos están al llegar, otros han partido del principio hace poco. De todos modos sabemos que el premio no es para quien llega primero si no sencillamente para quien llega.
 Y si la palabra macumba puede ser cruzada por las otras dos-umbanda y quimbanda-es sencillamente porque las contiene y porque la macumba es la madre de ambas. La macumba bien utilizada es también el camino para alcanzar la luz.
 Hablemos ahora del pentagrama o estrella flamígera de cinco puntas. Resulta demasiado sencillo atribuir este símbolo a la magia cuando en principio representa los estados del ser. El concepto popular del pentagrama es que derecho representa el bien y la magia blanca mientras que invertido representa el mal y la magia negra.
 Mucho más simple que esto: el pentagrama derecho acomoda el cuerpo humano con los brazos abiertos y las piernas separadas y representa la conciencia, en términos psicoanalistas el ego mas el superego. El pentagrama invertido acomoda la cabeza del macho cabrío y representa el instinto, es decir, el ego no consciente mas el ello. Similar al nahual, la bestia que todos llevamos dentro, según las enseñanzas de Carlos Castaneda.
 El porqué de que se utilice el pentagrama en los ritos responde a lo que queremos expresar a través del mismo. Los rituales de magia blanca operan sobre la concienciación y la atención al prójimo y los rituales de magia negra sobre la satisfacción de los instintos primarios más que porque a través de la posición del pentagrama se entre en sintonía con fuerzas benéficas o maléficas. No obstante en algunos rituales como los de los grupos Wicca el pentagrama invertido no tiene ninguna connotación negativa.

BLANCO-CIELO-HUMANO-LUZ-MAGIA BLANCA-TEURGIA-CONCIENCIA
NEGRO-TIERRA-ANIMAL-OSCURIDAD-MAGIA NEGRA-GOECIA-INSTINTO

 Sin embargo la conciencia puede utilizarse igualmente de manera considerada o de manera perversa. El instinto puede ser destructivo o constructivo.
 Mediante una conciencia demasiado despierta que está en todo y que está demasiado pendiente de la información que le llega se puede hacer mucho daño, por ejemplo, utilizando en perjuicio de la persona la información que sobre la misma hemos recibido.
 Mediante un instinto de conservación podemos salvar a un ser que se halla en peligro no reparando en los medios utilizados, aunque en nuestra precipitada carrera por salvarle nos podamos herir nosotros, por ejemplo atravesando unas zarzas para sacar del río a una persona que no sabe nadar y se está ahogando.
 La oscuridad oculta muchos peligros, pero en un recinto seguro y salvaguardado es reconfortante. La luz alumbra el camino que hemos de recorrer y nos evita tropiezos y accidentes, pero siendo demasiado potente nos puede dañar la vista.
 ¿Orgullo? No ensoberbecerse, pero sí tener autoestima.
¿Pereza? Descansar de vez en cuando, pero sin perder el trabajo de vista.
¿Avaricia? Compartir, pero no quedarse uno mismo sin nada.
¿Gula? Come hasta que te hartes, pero lo que te corresponda si sois más de uno a la mesa y cuando realmente tengas hambre. No des a tu estómago más de lo que necesita.
¿Ira? Muestra entereza de carácter para que no te tomen por el pito del sereno y sé enérgico si ves que tus derechos están a punto de ser vulnerados, pero no chilles, ni grites ni te pongas de morros por sistema. Estar a la defensiva no resolverá el problema en cuestión.
¿Envidia? La envidia sana es un motor de empuje igual que el Lucifer positivo. Siente envidia de los demás si ello te estimula para superarte a ti mismo mas no te dejes dominar por la envidia destructiva que te lleve a pisarle el cuello al de enfrente.
¿Lujuria? Sexo sí, salud y seguridad física también. No realices nunca un acto sexual que no te apetezca y mucho menos fuerces a ello a tu compañero o compañera. El sexo como el amor debe ser evolución, libertad y progreso.
 Y un apunte más sobre la magia antes de cerrar: los grimorios, en contra de lo que los sibaritas de la magia conjuratoria creen, no bastarán para convertir a nadie en el gran mago sobre todos los magos. El verdadero aspirante a mago desea estudios y conocimientos mucho más serios que todo eso. No es adivinando un número de lotería, divisando a los difuntos en un espejo, transformándose en un animal como se alcanza la evolución. El que dice de todos estos haber adivinado un número de lotería suele ser porque el administrativo que estaba compinchado con él se lo “sopló” y los que afirman haberse transformado en un animal o haber divisado la imagen de un difunto en un espejo mágico-el primer espejo de su abuela encontrado en el cuarto de los trastos viejos-ingirieron antes del ritual indicado para ello un preparado a base de alucinógenos y plantas tóxicas que les describía el grimorio. Este es el truco.
 Escuchemos la opinión sobre los grimorios del verdadero mago, ya sea iniciado, ya sea que haya alcanzado una posición dentro de la orden a la que pertenece:

“Los amantes de los grimorios publicados deben dejar de lado estas literaturas tergiversantes ya que lo único que conseguirán es dudas, tiempo y dinero perdido”.

 Y por último si alguien os amenaza con una maldición o con haceros un trabajo o un conjuro de magia negra(seguramente un aficionado a los grimorios), lo mejor es sonreír, encogerse de hombros y preguntarle en un tono pícaramente sereno:
-Entonces ya sabes lo que te pasará ¿no?
 Porque si es tan buen mago o tan buen brujo como presume no podrá ignorar el efecto de retorno y menos las leyes kármicas que estas sí que no ignoran a nadie se esconda donde se esconda y presuma de lo que presuma.



Kiriel.





[1] Los espíritus malignos llamados Lucifer, Satán, Belzebuth, Astaroth, etc. por los tratados de magia negra no existen como tales a los ojos del Ocultismo. Se trata de entes poco evolucionados en fase precaria y primaria que revisten forma y toman nombre por efecto de los pensamientos dirigidos hacia ellos. No son esos sus verdaderos nombres-ya que al ser espíritus carecen de identidad tangible-si no los que el pueblo o la creencia en boga de la época les atribuyen.


 

 

 

                                    Pai de Santo o Babalorixá, sacerdote de Umbanda. 

                                            Ofrenda a las divinidades del Umbanda.




EL ESPIRITISMO Y LOS FENÓMENOS PARANORMALES


  Me atrevería a poner la mano en el fuego sin temor a quemármela si dijera que al leer la palabra “espiritismo” la primera imagen que ha acudido a tu mente ha sido la de unas manos unidas sobre una mesa formando una cadena:










Y al leer las palabras “fenómenos paranormales o parapsicológicos” esta otra: un huracán de objetos saltando, muebles desplazándose solos y fantasmas danzarines. Y si tienes unas nociones elementales de esta temática unos ojos penetrantes leyendo e interceptando tus pensamientos.
  Incluso si has profundizado en los orígenes y en la historia de estas disciplinas.
 Y desde luego quien ha profundizado y ha realizado un estudio riguroso sabe diferenciar el morbo de la pura investigación. Parapsicología, espiritismo, fenómenos parapsíquicos, parapsicológicos...demasiados nombres y demasiadas definiciones para temas de los que en realidad poco o nada sabemos ya que todo son conjeturas, hipótesis, teorías y opiniones que se expresan de diferente manera de unos a otros entre quienes  las formulan.
 Hoy por hoy podemos decir que toda explicación que se pueda hallar o se desee aplicar a hechos que la ciencia oficial no acierta a explicarse-sobre todo si ello le va a suponer asimilar unos valores o unos patrones que no son los suyos-no pasarán de ser meras opiniones, simples juicios, conclusiones personales y conjeturas y se equivocaría quien las tomase como un dogma inamovible. Si se formularon leyendas sobre duendes, brujas, demonios, fantasmas o casas encantadas fue meramente porque desde que el ser humano se ha descubierto a sí mismo se ha visto abrumado por fenómenos que no podía comprender. El fuego, por ejemplo, era para ellos, un fenómeno extraño hasta que descubrieron que podían producirlo por sí mismos con solamente frotar dos palos secos hasta que brotara la primera chispa.
 Otro tanto sucede con otros fenómenos no comprendidos por la razón humana. Si el ser humano siempre ha creído en otro nivel de existencia más allá del que conoce y percibe con sus cinco sentidos, el movimiento de un objeto inerte sin contacto aparente le parecerá obra de algún fantasma residente en la casa donde esto ocurre. Después si descubre que este fenómeno puede ser producido por él mismo mediante el poder de su propia mente, lejos de asustarse, se alegrará por poseer una especie de don que la naturaleza o un factor equilibrador del universo-Dios o cualquier otro nombre que cada religión le otorga-le ha concedido. No habrá fantasmas en la casa y él se habrá dado cuenta de que es una peculiar especie de súper-hombre. El miedo a lo externo ajeno se transforma así en orgullo personal interno. Y no obstante pocos tienen miedo de sí mismos por aquellas fuerzas latentes en su naturaleza interna que no sean capaces de controlar si se exaltan en grado notable produciéndose algún comportamiento inesperado.
 La investigación esotérica, ocultista o paracientífica-el “ocultismo” o las “ciencias ocultas” como se suele definir popular y a menudo precipitadamente a esta inmensa gama de caminos inexplorados o no explorados en su totalidad-ha añadido los prefijos “para”, “meta”, “bio”, etcétera a un gran número de cosas. Los diccionarios así como los glosarios de términos parapsicológicos contenidos en muchos libros dedicados al tema definen la parapsicología como aquella parte de la psicología que se ocupa de investigar las facultades desconocidas residentes en la mente humana y aquellos fenómenos no explicables en los principios o leyes aceptados por la ciencia. Sin embargo, a pesar de que la definición expuesta es bastante justa no siempre los diccionarios generales son las mejores fuentes en las que buscar ciertas cosas, pues a menudo nos encontramos con que el mismo diccionario que tan bien ha definido el término “parapsicología” define el término “espiritismo” como “arte de evocar a los muertos”y para remachar más el clavo y confundir aún más a la persona ignorante o novata agrega entre paréntesis “véase NECROMANCIA”, la cual cosa volverá a definirse como arte de evocar a los muertos para obtener informaciones sobre el futuro y devolverá a la definición de “espiritismo” añadiendo entre paréntesis “véase ESPIRITISMO”. Así es como el lector que se adentra por primera vez en este mundo relaciona ambas cosas entre sí cuando en sentido moral y filosófico son en realidad diametralmente opuestas.
 Sin embargo, yo personalmente no puedo dejar de estar de acuerdo con el profesor Manuel Seral Coca, autor de varios libros de ocultismo y magia y diversos trabajos sobre magia sexual y tarot alquímico, cuando afirma que se dice muy a la ligera que los magos invocan a los espíritus en sus rituales. También tengo oído hasta la saciedad que durante una sesión de “espiritismo” con tabla oui-ja, médium o escritura automática se invoca a los difuntos. Y así como Manuel Seral nos aclara que lo que realmente se invoca o se evoca en un ritual son fuerzas, yo sostengo la hipótesis de que lo que se “invoca” en una sesión que cabría denominar más justamente de experimentación son energías ya sea circulantes en el espacio o latentes en los propios participantes. La comunicación con los desencarnados sería una posibilidad más, pero no el fin de estas reuniones.
 La tabla oui-ja, instrumento o accesorio más utilizado frecuentemente para estos menesteres, no es un objeto moderno de atracción comercial ni un extraño juego sacado de las películas de terror relacionadas con estos fenómenos. Parece ser que Pitágoras y su escuela ya solían hacer uso del mismo. Aunque está considerado como un instrumento de comunicación con el plano espiritual, es en principio un aparato de experimentación igual que lo son las varillas, el péndulo o las cartas Zener(del nombre de quien las creó llamado Karl Zener, estudioso americano de parapsicología). Sería una versión del telégrafo en la que intervienen los pensamientos en lugar de las palabras. En realidad este aparato está en el mercado para lo que cada uno lo quiera utilizar, siempre y cuando se haga con conocimiento y prudencia. Pueden llevarse a cabo experiencias de telepatía, clarividencia, precognición o investigación de los misterios del subconsciente o experiencias de comunicación con el plano espiritual.
 Se advierte que es posible que tras la sesión de experimentación se produzca un comportamiento fuera de lo corriente. Las hipótesis y las explicaciones que se pueden formular son muchas y quien esté dispuesto a aceptar de buenas a primeras la posibilidad de que ha sido un espíritu burlón o duende quien se ha adueñado del espacio en el que se estaba experimentando no siempre será capaz de barajar otras posibilidades.

¿CON QUIÉN CONECTAMOS?

 Esta es la pregunta que a menudo y sin vacilaciones nos formularemos. Pero pocas veces nos haremos la siguiente reflexión. “¿Y por qué ha de ser alguien?”
 Lo que nos conecta o mejor dicho lo que se produce tras la sesión pueden ser muchas cosas y no todas tienen que ver con el mundo de los espíritus. Como hemos dicho pueden ser fuerzas ocultas latentes en nuestra propia mente-que quizás poseemos desde nuestro nacimiento, pero nadie nos ha enseñado a reconocerlas de manera que no les hacemos caso-o impulsos inconscientes de nuestro propio sistema neuromuscular.

Mieloquinesis.

 O mieloquinesia o mielocinesia. Se trata de un movimiento muscular inconsciente o inadvertido de las manos que reposan sobre la copa o pieza utilizada junto a la tabla oui-ja para deletrear mensajes o directamente sobre la mesa cuando se opta por la comunicación mediante golpes o señales(tiptología o sematología). Los movimientos musculares inconscientes de las manos o los dedos dan mensajes a menudo sepultados en lo más profundo del inconsciente. La tabla oui-ja o las sesiones de experimentación pueden ser una técnica entre tantas para remover el inconsciente de manera verificable.

Egrégore o forma-pensamiento colectiva.

 Es la forma concreta del propio pensamiento que suele crearse en cualquier tipo de reunión sea esta de negocios, de debate político, de trabajo, de proyectos o de experimentación. las escuelas iniciáticas por ejemplo durante las clases  teóricas y los ceremoniales están creando un “egrégore”. En el primer caso, lo crean teniendo en mente un objetivo que es ampliar sus conocimientos, mientras que en el segundo lo crean mediante la concentración en el ritual y sus propias peticiones con la fe en que su pensamiento hacia su propio deseo o hacia la persona a la que se desea ayudar se concretará en el plano físico tras haberse formulado en el plano del pensamiento. De la congregación de varias mentes trabajando al unísono por un objetivo común y constructivo nacerá el denominado “egrégore positivo”.
 Sin embargo en un área donde se grita, se insulta, se arremete física o psicológicamente contra el personal, se derrama sangre sin necesidad, se infravalora, se minusvalora, en resumen, allá donde se trabaja francamente el mal por el mal mismo, se crea un “egrégore” negativo que con el tiempo puede volverse peligroso y difícil de controlar. Si se trata de un grupo agresivo y violento cuyo objetivo es hundir a una única víctima indefensa, ambas energías negativas fabricadas respectivamente por el odio y la rabia(agresores)y por el miedo y la angustia(víctima) se unificarán y crearán una monstruosa forma-pensamiento colectiva. Un “egrégore” negativo que alimentándose con las energías latentes en este tenso ambiente y en la sangre derramada si ha sido el caso se transformará en una especie de “fantasma” capaz de causar estragos en su frecuencia dado que su poder se extiende a millares de kilómetros o incluso hasta el infinito.
 El “egrégore” al ser una creación colectiva o una especie de exhalación mágica de las colectividades se presenta mucho más difícil de eliminar que una forma-pensamiento individual que suele desaparecer con solo desbloquear la mente de la persona que la ha alimentado con las energías creadas por el poder de su propia mente. Todo ello es debido a que el pensamiento es creativo. Todo pensamiento de soledad, abandono, baja moral, etc. no son causantes de la enfermedad, pero nos hacen más vulnerables a ella. Si ves tu futuro “muy negro”, si crees que estás o estarás abandonado por todos los que te rodean, si sientes que perecerás en medio de la miseria, ten la seguridad de que será así, pues ya estás condicionando tu ser a considerar que la lucha por las metas carece de importancia. Si por el contrario piensas que disfrutarás de una vida larga y próspera y lo afirmas con total seguridad estarás motivando tu ser para que luche y tras lograr una meta se proponga otra y más adelante, otra más.
 De la misma manera, los pensamientos que se adhieren e impregnan el lugar donde nos encontramos acaban tomando forma hasta tal punto que incluso pueden ser captados por los médium y los videntes. Si se trata de pensamientos constructivos habremos alimentado una forma-pensamiento positiva que producirá paz y bienestar. Si por el contrario hemos generado una forma-pensamiento negativa se advertirá el malestar, la ansiedad y el nerviosismo. Las formas-pensamiento toman energía de las personas que las han creado durante una sesión de experimentación, ahí es cuando lo que creamos nos vampiriza y escapa a nuestro control. Cuanta más energía tome de nosotros más fuerza tendrá para actuar.

Interferencias.

 No queda descartado que durante una sesión captemos accidentalmente un mensaje telepático de otro grupo distante que exactamente en el mismo momento se encuentre reunido alrededor de un tablero parecido al nuestro o simplemente haciendo lo mismo con otros métodos de comunicación extrasensorial( la mesita, la escritura automática, etc.).

Fenómenos físicos


 Variaciones de temperatura: científicamente puede tener una explicación. ¡No es nada extraño que tan pronto te congeles como rompas a sudar!. Meteorológicamente el tiempo puede ser bastante variable, de manera que el enfriamiento de la estancia podría deberse a un cambio de tiempo repentino sin más.
 Sin embargo, cabe la posibilidad que durante una sesión se produzca un cambio de temperatura. De hecho muchas personas que meditan y trabajan con ángeles-angelología-suelen pedir durante una meditación que el ángel o la fuerza con la que deseen comunicarse les haga saber que se ha establecido el contacto mediante un pequeño escalofrío. Un pequeño rito de meditación individual puede producir un enfriamiento o acaloramiento de la estancia en la que se lleva a cabo.
 Movimiento de objetos: pueden obedecer a las vibraciones provocadas por pequeños movimientos sísmicos o por el ruido del tráfico urbano si se experimenta en viviendas o locales próximos a vías de tren, carreteras o autopistas. De ahí la recomendación de experimentar en lugares tranquilos, si puede ser en la proximidad de un campo o una pradera mejor para descartar posibles movimientos físicos naturales.


Fraudes.

 Llegamos aquí a la parte más odiosa, más embustera y más descarada de todo el asunto: el fraude o la prestidigitación más o menos preparada; resortes camuflados, grabaciones ocultas, proyecciones sobre cortinas de humo, tintas invisibles(compuestas de agua y sulfato de cobre), muebles de doble fondo, hilos finísimos, imanes y un largo etcétera. Lo cierto es que para llevar a cabo estos montajes además de tener habilidad de prestidigitador tiene uno que cultivar su afición por la química, la ingeniería y el diseño, pues demasiado bien montado está para ser obras de simples comediantes-estos han de ser además un poco ventrílocuos, sobre todo si actúan o pretenden actuar de médium-. Lo más triste de ello es que esa conducta se ha podido observar en figuras que en el momento de su promoción se consideraban dignas de respeto-tal fue el caso de Eusapia Palladino, los hermanos Davenport y, el más escandaloso y vergonzoso de todos, Enrique Bastian que terminó haciendo el ridículo más espantoso-. El médium-o eso hace creer a todos-no quiere quedar mal con su público y tiene ansias de éxito. Entonces entre el no tener éxito y el fraude, escoge el fraude.

EL MIEDO A LAS REUNIONES ESPIRITISTAS

 Instintivamente se suele sentir un cierto miedo o una cierta aprensión ante la propuesta de una reunión espiritista. Por supuesto lo de “espiritista” es un calificativo que popularmente solemos dar a estas experiencias. El espiritismo-al margen de las variadas técnicas utilizadas para contactar con otros planos-no es otra cosa que la doctrina que confirma la existencia de los espíritus. Estas reuniones que llamaremos-o que ya hemos llamado más atrás-de experimentación no tienen más peligro que el que uno mismo les busca. Más que estas reuniones debería hacernos reflexionar los errores que habitualmente cometemos en ellas o ante ellas. Vienen a ser más o menos los siguientes:

-Participación de personas con desequilibrios mentales o psiquis inestable: son sujetos bastante prestos a sugestionarse y a impresionarse. Aunque se requiere un ambiente relajado y tranquilo la situación se torna muy tensa para ellos ya que no saben bien lo que se van a encontrar. La simple tensión puede acabar provocando un fallo cardíaco, un problema respiratorio o hacer aflorar alguna psicopatía oculta(lo que común y a menudo dejadamente se atribuye a asesinatos cometidos por algún “fantasma” o a posesiones “diabólicas”).

-Asustarse durante la manifestación de un fenómeno. Es preciso llevar a cabo la experiencia cual si se tratara de una experiencia de laboratorio con productos y reacciones químicas en la que se está simplemente probando e investigando y no exigir de entrada un resultado tangible y a ser posible espectacular. Al inicio de la experiencia hay que tener en mente este pensamiento “deseo medir mis facultades extrasensoriales o averiguar si las poseo” si lo que queremos es estudiar los poderes y fuerzas ocultas de la mente o “deseo saber si hay otro nivel de existencia más allá del que conocemos” si lo que realmente queremos es averiguar si el ser pensante continúa tras la muerte del cuerpo físico. El pensamiento “quiero hablar con mi abuelito muerto” que la mayoría de las veces desemboca en un deseo febril y obsesivo no suele traer consecuencias muy agradables. A menudo ocurre que una simple información almacenada en el subconsciente-y de la que ya hemos hablado a propósito de la mieloquinesia o movimiento neuromuscular inadvertido-sobre dicha persona se confunde con un mensaje que nos quiere transmitir esta supuestamente desde el más allá. Y un fenómeno físico como un apagón repentino-que puede ser perfectamente una restricción local de corriente eléctrica-podría confundirse fácilmente con fantasmas que nos apagan las luces para darnos un susto.

-Interrumpir bruscamente la experiencia y separarse de inmediato. Cuando el grupo reunido en torno a la mesa se halla concentrado en el desarrollo de la sesión va creando energía. Si este círculo se rompe bruscamente también se rompe bruscamente la energía acumulada pudiendo resultar peligrosa. Igual que si extrajéramos goma 2 de las limaduras de hierro y tuviéramos la insana ocurrencia de agitarla. Sobra decir lo que sucedería si lo hiciéramos.

-Participación de niños o menores en dichas sesiones. Por más que algunos manuales de uso práctico aseguren que la presencia de un niño es garantía de éxito seguro por su especial sensibilidad también es cierto que las naturalezas tiernas se excitan demasiado. Un niño suele estar mejor comunicado con el plano espiritual que un adulto, pero su psiquis aún no formada del todo puede impresionarse y alterarse con mucha facilidad. Nunca hay que olvidar que la psiquis infantil es como una esponja que lo absorbe todo. Y que se muestra según el color de aquello que ha absorbido. De ahí que los expertos desaconsejen totalmente esta práctica a niños y adolescentes. Unos y otros suelen tener una imaginación demasiado vívida y sus mentes todavía se hayan en una fase primaria y en un estado muy maleable de manera que se les puede manipular muy fácilmente.

-Jugar con la tabla oui-ja o la mesita parlante bajo cualquier circunstancia. Pese a que muchos manuales de uso práctico promulgan que la oui-ja es un juego y nada más que un juego también existen juegos muy peligrosos. Y la oui-ja manejada sin ningún asesoramiento, sin ninguna dirección responsable y sin precaución lo es sin duda alguna. La gente joven siempre deseosa de experimentar sensaciones nuevas se embarcan en esta aventura sin preparación y sin la humildad de reconocer sus limitaciones pudiendo verse envueltos en un remolino muy violento del que es difícil salir. Pero el verdadero problema reside en ellos, no en la tabla oui-ja. Nadie que piense con la cabeza culpa a un cuchillo de un asesinato.

 Esto último es lo que mayormente suele originar fenómenos y hechos desagradables. Como señalábamos al principio, durante estas sesiones pueden producirse variaciones de temperatura entre otras cosas y esto suele ser frecuentemente lo que convierte estas experiencias en verdaderas aventuras terroríficas. Vamos a plantear una sesión de experimentación llevada a cabo por un grupo de adolescentes. Uno de ellos tiene entre sus diversos juegos de habilidad o de rol una tabla oui-ja que le ha venido de regalo con los dos primeros fascículos de una enciclopedia de satanismo y brujería por citar un ejemplo. Y es suficiente con que se aburran, no sepan de qué hablar, no sepan con qué o a qué jugar o no sepan que película ver para que propongan sacar la oui-ja. El total desconocimiento del tema y la falta de asesoramiento unido a la continua visión de películas de terror y la continua lectura de novelas y cómics de este género les impulsa a crear una decoración macabra y una atmósfera fantasmagórica con la idea de que todo ello hará la sesión más efectiva. El ambiente creado ya es de por sí tenso y cargante. Las mentes de estos jóvenes ya está empezando a divagar y a errar por mundos desconocidos(sus monstruosos mundos interiores, se entiende). El éxito de la sesión es seguro en el sentido de que si buscan el rostro de la maldad lo encontrarán sin tardar demasiado.
 Y he aquí una de las tantas cosas que pueden suceder: el cuarto en el que se hallan experimentando puede encontrarse de repente casi helado. ¿Qué harán? Como cabe esperar de ellos, asustarse y dar por finalizada la sesión.
 Y a partir de ahí pueden sufrir pesadillas, insomnio, torbellinos de hebefrenia, trastornos mentales, enuresis nocturnas...¿Qué ha pasado ahí? Nada del otro mundo(porque todo cuanto les está sucediendo pertenece a este: su propia mente es la que les está destruyendo). Si tocamos unos cables pelados de alta tensión sin saber ni flores de electricidad y no llevando unos guantes de goma ¿Qué nos puede ocurrir? Ni el tonto entre los tontos se hace tal pregunta...
 En el plano psicológico se han encontrado en tal estado de tensión continua que ha llegado un momento en que la psiquis ha estallado. Se han liberado conflictos psicológicos internos no resueltos que ahora se han manifestado de forma brusca y descomunal, problemas psicológicos que han sido liberados y agravados por la simple experimentación con la oui-ja. Estos muchachos se han encontrado atrapados en un tétrico mundo interno donde los únicos que actúan son ellos mismos.
  Desde el punto de vista parapsicológico al impresionarse por la imprevista variación de temperatura han roto el círculo bruscamente y a la vez han roto bruscamente la energía que estaban creando y acumulando(un “egrégore” negativo generado por el miedo), la cual se ha vuelto agresiva y peligrosa en forma de un “fantasma” que quiere sus energías vitales y que les acosa. Si estas energías pueden mover una mesa durante una sesión, nada puede impedir a estas energías manifestarse con violencia cuando se encuentran en un ambiente festivo y bromista lleno de desafíos absurdos, preguntas estúpidas, risas nerviosas y chillidos asustados. Las famosas “bofetadas” que algunos participantes afirman haber recibido durante una sesión efectuada de esta forma tan imprudente no son otra cosa que explosiones psíquicas debidas a la existencia de intereses desordenados y opuestos, de deseos, de comportamientos de personas inexpertas e inmaduras, aunque los creyentes a ciegas las suelan atribuir demasiado fácilmente a la existencia de espíritus justicieros.
 Desde la hipótesis espiritualista han evocado a una entidad poco evolucionada. Una entidad de este calibre acude allí donde es evocada mediante una sesión de experimentación ignorante e imprudente para succionar las energías vitales de los participantes y tal vez allí se quede esperando nuevas energías. Si estas no se le dan puede convertirse en un “vampiro astral” y volverse peligrosa. Este suele ser el origen de los fenómenos de poltergeist(en los casos que merecen tal nombre). Mientras la entidad que provoca alborotos en una casa(poltergeist deriva de un vocablo alemán que significa “fantasma ruidoso o aparatoso) va tomando energías vitales aumenta su fuerza para seguir actuando y molestando a los habitantes de la casa en cuestión. Normalmente el causante de estos fenómenos en un niño o un adolescente debido a que le va dando sus energías a la entidad parásita y alborotadora. Con ello no es suficiente una limpieza energética de la vivienda, si no que hay que cerrar el canal del niño o adolescente protagonista de los hechos para que dicha entidad no pueda seguir manteniéndose activa con las energías que absorbe.





FENÓMENOS DE POLTERGEIST Y FENÓMENOS DE INFESTACIÓN

 Llegamos aquí al aspecto de todo este mundo que ha inspirado tantas películas de terror: los fenómenos de poltergeist, los espíritus burlones, los ataques de telequinesia, los fantasmas y las casas encantadas.
 Aunque la traducción real de la palabra poltergeist es “fantasma ruidoso o aparatoso” muchos parapsicólogos y estudiosos lo definen como desbordamiento inconsciente y/ o involuntario de energía PSI(vigésima tercera letra del alfabeto griego correspondiente a la PS latina con la que se designan los fenómenos de esta índole dividiéndolos en psi-gamma y psi-kappa), energía independiente del sistema nervioso de origen extrafísico.
 Dentro de los fenómenos psi-kappa(acción de la mente sobre la materia)es más conocido y renombrado el fenómeno PK o psicoquinesia(desplazamiento o modificación de la materia por la acción mental) del cual deriva la telequinesia o telecinesis (desplazamiento de objetos a distancia). No hay que confundir la psicoquinesia con la telecinesia, dado que el primero se limita a demostrar que la mente puede incidir sobre la materia(todos recordamos las famosas experiencias de Uri Geller con las cucharillas, al margen de que fuera realidad o truco, puede servir como ejemplo ilustrativo) y la segunda se refiere al movimiento de los objetos a distancia sin contacto aparente, solamente mediante el poder mental. Sin embargo, este mismo poder puede llegar a desbordarse o a descontrolarse dando lugar a lo que se suele llamar “fenómenos de poltergeist” que cabría llamar más exactamente “ataques de psicoquinesia descontrolada” ya que, insistimos “poltergeist” es un vocablo alemán utilizado para denominar a los fantasmas que desplazan muebles y objetos, producen ruidos y hacen estallar bombillas entre otras conductas violentas dentro de una casa o local. Ahí tocaríamos ya la parte espiritual (quien atribuye estos hechos a un fantasma que no ha aceptado la muerte, su nuevo estado, especialmente cuando esta se ha producido de forma inesperada o violenta, es porque cree en el mundo espiritual o en otros niveles de existencia) y los investigadores de dichos fenómenos procuran estudiarlos con el máximo rigor científico. La intervención del mago que realiza la limpieza de la llamada “casa encantada” suele ser un último recurso, pues en estos casos se precisa la intervención de un psicólogo(para estudiar la psiquis de la persona que aparentemente produce estos fenómenos), de un parapsicólogo(para estudiar las facultades que quizás de modo inconsciente esté desarrollando dicha persona y que no sea por el momento capaz de controlar), de un físico, un químico y un ingeniero(para la parte tecnológica y química de la investigación)y de un arquitecto, a ser posible, el mismo que mandó construir la casa si se le puede localizar, para descartar posibles problemas de las infraestructuras que hallan podido ocasionar estos hechos aparentemente inexplicables.
 Sin embargo, a veces, suelen ser suficientes una limpieza realizada por un santero o una persona cualquiera, o un exorcismo pronunciado por un sacerdote ordenado, pues las sugestiones producidas por estos actúan sobre la psiquis de la persona que inconscientemente produce los fenómenos mismos.
 A menudo se han metido en un mismo saco los términos “poltergeist” y “casa encantada”. A la pregunta de si ambos son lo mismo yo respondería: sí y no. Una casa encantada recibe este nombre cuando los “poltergeist” o “fantasmas ruidosos o aparatosos” se vinculan a una casa o local mediante un encantamiento o cuando ese mismo encantamiento produce fenómenos telecinéticos dentro de dichos lugares. Los ataques psíquicos suelen producir junto a malos olores, huellas de pisadas y pesadillas frecuentes de los habitantes de la casa, estos fenómenos con objetos que se mueven o vuelan por la misma. Sin embargo conviene diferenciar un fantasma alborotador de un sujeto que inconscientemente produce estos fenómenos. En el primer caso una limpieza o un exorcismo de la casa suele bastar para hacer comprender a la entidad alborotadora que se encuentra en un plano que no le corresponde y que debe intentar encontrar el camino de su evolución. Sin embargo cuando no hay tal entidad alborotadora y es el poder mental inconsciente el único causante de estos fenómenos se acusa muy fácilmente, dado que en ocasiones estos fenómenos siguen al productor, es decir, ocurren allá donde haya ido. Un individuo cualquiera preso de crisis histéricas está en condiciones de completar sus facultades paranormales. Y si la energía psi se desborda pudiendo incidir físicamente sobre la materia no quepa la menor duda de que dentro de la vivienda podrá producirse una auténtica barahúnda de danza de mesas, rotura de cristales, guerra de enseres de cocina y traslado de muebles y objetos sin contacto físico aparente. Ello dependerá de la cantidad de materia corrosiva(la frustración por el trabajo perdido, la crisis de la pareja, un engaño o una traición de un amigo, un amor que ha acabado mal, un fracaso escolar permanente, celos hacia un hermano menor, etc.) que la persona afectada e involuntariamente responsable esté liberando.
 Lo menos aconsejable para las personas asustadizas que tengan tales facultades “PK” demasiado acusadas es leer novelas de fantasmas por la noche, pues por ejemplo, una cortina movida por la acción del viento podría parecer obra de algún fantasma y haría que el sueño no fuese de los más tranquilos. El miedo puede también liberar esta energía( o crear una forma-pensamiento negativa que con el tiempo puede convertirse en un “fantasma”) y provocar un ataque de psicoquinesis descontrolada que se puede confundir fácilmente con la acción de un espíritu poco evolucionado que en lenguaje espiritista recibe el nombre de “barunte” en contraposición a “anonte” que es el espíritu que aspira a la perfección, a “entelé” que se encuentra ya en el punto máximo de la misma y a los “espíritus guías” cuya misión es tutelar a las personas durante su paso por el mundo de la materia en busca de su purificación y su consecuente evolución espiritual.

Kiriel





MÁS SOBRE EL CIELO Y EL INFIERNO                                                                                         

 De todos es conocido el significado de la palabra "Infierno" como "lugar" de sufrimiento, tanto entre creyentes como entre no creyentes. Asímismo se da a conocer como un lugar situado a varios metros de profundidad del suelo al que van a parar las almas de los fallecidos en pecado mortal.                                                                                                                                                       
 Volviendo al significado de la palabra Infierno que ya hemos tocado con anterioridad hace referencia a los estados inferiores del ser. ¿Cuales son estos estados?                                               
 Uno de ellos es el instinto carnal, es decir, las reacciones instintivas del ser vivo ante cualquier estímulo. Otro es el instinto de supervivencia que nos empuja a la lucha por la vida, llamado también instinto de conservación.                                                                                                            
 Estos mencionados instintos son nuestra parte material o la carne y tienen lugar a nivel consciente.                                                                                                                                                 
 En su parte positiva nos asegura la existencia en el plano material en el que debemos desempeñar nuestra misión de progreso o evolución espiritual.                                                                                 
En su parte negativa es la fuente de la agresión, la Maldad y el Odio, y es el origen del principio de destrucción mal aplicado.                                                                                                                    
Les siguen los estados inferiores que son la inconsciencia y la ignorancia que por otra parte pueden ser buenas o malas según los efectos o según a qué área se apliquen.                                    
Ignorar es básicamente desconocer o no saber. Inconsciencia es básicamente ausencia de consciencia.                                                                                                                                                
  Vayan por delante estos ejemplos: ignoro que tocar este cable conlleva el riesgo de una grave electrocución. Por medio de mi libre albedrío puedo tomar la decisión que me parezca más idónea. O abstenerme ante la duda o decidir libremente tocar ese cable con sus funestas consecuencias. Si fallezco carbonizado por haber tocado ese cable nadie más que yo mismo puede responsabilizarse de mi decisión  de hacerlo .                                                                                                                      
 Con respecto  a la inconsciencia, en el momento que dormimos no somos conscientes de haber sacado las mantas dando vueltas durante el sueño y si nos resfriamos no podremos culpar a nadie del golpe de aire recibido. Lo sepamos o no nos hemos expuesto a una corriente de aire y por más que nos reafirmemos en que no hemos querido recibir dicha corriente el hecho es que nos ha alcanzado y el consecuente resfriado está ahí. 
 Tanto la ignorancia como la inconsciencia únicamente pueden volverse peligrosas cuando habitan la mente de una persona que cree saber y cree que su mente puede abarcarlo todo, pues ignora su ignorancia y no hablamos aquí ya de un "menos por menos más" si no de algo más fácil y más peligroso: lluvia sobre terreno húmedo.
 En su ignorancia que ni se reconoce ni admite puede llegar a cometer las más graves imprudencias temerarias. Y si como consecuencia de estas acciones incurre en algún delito la Ley no aceptará bajo ningún concepto la ignorancia como excusa, pues promulga que desconocer las leyes no exime de su cumplimiento.
 "Yo no sabía que estaba dando pasos en falso". ¿La ignorancia es también tan ególatra que en su ambición por acrecentar su economía no es capaz de percibir que algo no funciona debidamente?¿No sospecha, por ejemplo, que tras esa considerable suma de dinero que se le ofrece puede hallarse un negocio turbio? Dice el refrán"no quieras duros a cuatro pesetas porque nadie los da", hecho que no se plantean ni la inconsciencia, ni la ignorancia ni la egolatría y como consecuencia de esta falta de atención pueden hallarse en una emboscada.
Estos son los estados inferiores del ser y las consecuencias de su erróneo obrar.
 Este es el significado de la palabra infierno, los estados inferiores del ser. Además del ser interno y profundo del que ya hemos hablado anteriormente(sus pasiones, sus miedos y todo aquello que almacena el inconsciente), el ser exterior y manifiesto. Con razón se dice a menudo que el Infierno es la tierra y que el Diablo es el hombre.
 El Infierno no sería otra cosa que el plano material, pues es el cuerpo físico el que experimenta el sufrimiento físico: la fatiga, las inclemencias del tiempo, el dolor, las enfermedades...
 Y la mente o el alma es la que experimenta el sufrimiento moral o anímico: frustración por aquella relación que ha terminado mal, dolor y pena ante la pérdida de un ser querido, etc.
 Visto así la tierra o el plano material es un lugar de sufrimiento, y lo sigue siendo mientras el ser se deja llevar por sus estados inferiores y no trata de elevarse espiritualmente por encima de lo material.
 El cuerpo físico necesita su alimento porque gracias a él continuará con vida física en el plano material y podrá desempeñar su misión evolutiva. Pero no necesita el confort, el lujo y el alto prestigio social que únicamente contribuirán a su sufrimiento anímico cuando por cualquier circunstancia mayor se extingan dejándole tan vacío como se sintió antes de experimentarlos.
 Y si analizamos el sentido de la palabra "Cielo" podríamos decir que deriva del vocablo "celso", "excelso" o "excelente" que alude a los estados superiores de la conciencia o la transmutación de lo humano en lo divino. El ser se ha elevado por encima del apego a lo material y del culto a la imagen externa y concede más importancia al mundo espiritual sin por ello perder de vista lo elemental y lo básico de lo terrenal. No cobija sentimientos de odio, ni de venganza ni de afán de posesión, pues sabe que nada de cuanto de valor material atesore le será útil en el plano espiritual ni mucho menos para la siguiente vida que ya será otra historia distinta que nada tendrá que ver con la vida presente. Este ser se halla más centrado en su propia evolución espiritual que en la acumulación de bienes materiales.
 Por lo que respecta al tema purgatorial podría representar sencillamente la alquimia interior o la renovación de nuestras propias energías. Hacer un pequeño examen de conciencia no siempre nos resulta una tarea grata y raro es aquel que no se avergüenza de ver sus propios trapos sucios cuando los hay. Este trabajo resulta bochornoso, sobre todo cuando es otra persona quien nos lo muestra y, por si fuera poco, delante de otros.
 El calor del rubor ante el público sería el fuego interior. El fuego del infierno y el fuego del purgatorio es el fuego de los alquimistas, el trabajo con la Llama Violeta bajo la protección del Maestro Saint Germain que nos limpia interiormente y nos purifica.

KIRIEL